La Organización

Resulta en la instancia conforme a la cual las personas que la integran, procuran satisfacer, en condiciones de relacionamiento y ordenación, sus propias necesidades y las necesidades de las sociedades de las que forman parte.
De ahí se desprende que ellas, las organizaciones, según su contexto político, histórico, social y cultural, establecen relaciones con su entorno, la sociedad, quien al mismo tiempo valida y justifica su existencia. Precisamente ese contexto en el que la sociedad contiene a la organización, lo que impacta a través de sus creencias, valores y principios, además de sus necesidades.
Así las organizaciones, sistema social y a la vez subsistema de la sociedad, se muestra como un objeto concreto, surgen de un cuerpo de ideas a la luz de paradigmas o cuerpo de conocimiento y experiencias de sus proponentes de manera intencionada. Bunge (Ob. cit.) al referirse a las organizaciones destaca que: “[...] es un sistema social que, lejos de crecer espontáneamente o por agregación, se establece y gobierna de acuerdo a un diseño o plan explícito; se organiza o se forma deliberadamente con una meta definida en mente.” (p. 40).
La organización como sistema social, concreto o material, se encuentra unido por elementos no conceptuales como relaciones físicas, químicas, biológicas, sociales, políticas o culturales, de manera que se establece como un sistema social humano integrado por las personas y sus artefactos. Las personas se ensamblan o fraccionan por sentimientos, creencias, normas morales y jurídicas, además de compartir, cooperar, intercambiar, discutir, ordenar, construir y hasta se revelarse. Siendo por tanto, tales relaciones, dinámicas, como ya fuera destacado
Entre los elementos determinantes de las relaciones sociales, por medio del cual se consolida, resulta en la comunicación y el lenguaje, consigo mismo y con otros, como acción transformadora que permite la creación de realidades e identidades, así como de compromisos y nuevas posibilidades, por lo que resulta crucial, el qué y cómo se habla y escucha. De ahí que la riqueza de la comunicación y el lenguaje que se emplea, marca la forma de relacionamiento y transformación que Luhmann (Ob. cit.) puntualiza como trascendentes, además de haber caracterizado el final del siglo XX e inicio del XXI.
Por otra parte, las organizaciones, al momento de su creación, tienen en cuenta los recursos de que disponen y/o existen en el entorno, así como los medios, técnicas y capacidades para el logro de su meta, todo lo cual les permite retornar a la sociedad, productos o servicios convertidos en bienes.
Las organizaciones al mantener límites y relaciones con el entorno, se ven impactadas por él, pudiendo ser ese entorno mundial, regional o local. De manera que las organizaciones, como la sociedad y según su realidad circundante, evolucionan, evolución que puede ser lenta o rápida, por si misma, o por sus circunstancias. En este sentido, Davis y Newstrom (Ob. cit.) describen a la organización como un sistema, lo que implica
[...] la existencia de muchas variables en la organización y la influencia de cada una de ellas en todas las demás por intermedio de una relación compleja. Es probable que un hecho que aparentemente sólo afecta a un individuo o departamento ejerza en realidad influencias significativas en muchas otras partes de la organización. (p. 19).

Es así como la institución universitaria, en tanto organización, resulta en un sistema abierto que necesariamente debe interactuar con su medio ambiente que la contiene como lo destaca Murillo (Ob. cit.)
La universidad contemporánea puede ser vista como una organización abierta, y en tal sentido, comparte elementos comunes con las otras organizaciones sociales que conforman el mapa de la sociedad actual, ello se debe a que en su proceso de desarrollo incorpora recursos del entorno, procesa tales recursos y los devuelve convertidos en un determinado producto. Reincorpora nuevos recursos lo que le permite la adquisición de nuevas energías y de esa forma garantizar su permanencia en el tiempo. (p. 43)

En su dirección o modo de gerencia, lo mismo que para su creación, resulta instituida de manera intencional, pues procura alcanzar las metas para la cual fue diseñada. El estilo gerencial igualmente atiende al cuerpo de conocimientos de que se dispone, y en muchos casos se encuentra en boga, con base al cual se establece el orden, las funciones y los modos de relacionamiento, es decir; la estructura.
De lo anterior, se definen tacita y/o implícitamente los modos de relacionamiento, además de tener en cuenta la valoración que en ella, por intermedio de la gerencia, se tenga de las personas que la integran, quienes procuran por medio del trabajo, según sus requerimientos, satisfacer múltiples aspiraciones. Empero, las necesidades y motivaciones de las personas, tampoco resultan estáticas, de manera que conforme transcurre el tiempo y según la situación circundante, ellas se plantean y se plantearán por siempre, nuevas exigencias. De manera que se debe insistir en el dinamismo de las relaciones sociales, siendo el enigma e interés permanente de las ciencias sociales, precisar quién determina a quién, la organización a los individuos, o éstos a la organización, por lo que es clave las vinculaciones entre individuos, grupos y la estructura, de donde se desprende siguiendo a (LUCENA, 2007) la necesidad de análisis, investigación y estudio que permita interpretar y explicar los modos y formas de relacionamiento, entendiendo que no existe un modelo único. En cuanto al contexto refiere, (PÉREZ C. , 1998) que: “La creación de un contexto moderno y propicio es una tarea impostergable que compete a todos. Su construcción apenas ha comenzado” (p. 12)
Conforme a lo antes descrito, las organizaciones socialmente hablando, cumplen dos funciones básicas. Por una parte, desde la perspectiva técnica, transforman una materia prima mediante la aplicación del conocimiento y la tecnología, y desde el punto de vista social, procuran la coordinación entre y con las personas, brinda a la sociedad, bienes, servicios y/o productos por ella requeridos. Lo destacado puede ser simplificado mediante la siguiente figura 1. Entorno organizacional, donde se destaca lo atinente al entorno organizacional.