La estructura organizacional académico-científica también posee una diferenciación vertical por niveles administrativos jerárquicos, que organizan el trabajo académico mediante un principio de secuenciación, es decir, que las actividades se organizan de acuerdo con una escala definida de dificultad. Hay actividades introductorias, medias y avanzadas, por lo que los planes de estudio contienen niveles básicos, medios y avanzados. Haciendo uso de esta base organizativa, los sistemas nacionales definen sus propios niveles de educación, en México por ejemplo existe la educación básica, educación media superior y educación superior.
Ahora bien, cada nivel puede subdividirse, pongamos por ejemplo el caso del nivel superior en México, que comprende los niveles de licenciatura y posgrado, este último se divide a su vez en nivel de maestría, nivel doctoral y nivel posdoctoral.
Cada nivel proporciona una certificación escrita de la competencia disciplinaria o profesional obtenida, en forma de títulos y otros documentos oficiales. Estos diplomas constituyen el primer paso y a menudo el fundamento de una serie de requisitos, extremadamente rigurosos, que deberán cumplirse antes de ingresar o pasar de uno a otro nivel de forma ascendente, o bien, para ingresar a las profesiones o al servicio civil (ejercer una carrera profesional, u obtener un puesto en el mercado laboral).
La estructura por niveles, posee enormes consecuencias en distintos rubros operacionales. En este sentido se puede decir que es un mecanismo que regula el acceso, ya que el porcentaje de ingreso va disminuyendo conforme se asciende en los niveles, operando selectivamente hacia arriba y permitiendo combinar la selectividad (ejercida mediante los certificados de competencia inmediata inferior y los requisitos de ingreso como exámenes, promedios mínimos, institución de procedencia, entre otros) con el acceso irrestricto (en cuanto a que todos pueden aspirar al ingreso) [Clark,1983:83].
También, se erige como un mecanismo de vínculo entre niveles y mercado ocupacional, esto es, cada nivel prepara un conjunto de competencias asociadas con un cierto orden de actividades sociales y profesiones. De aquí que se considere al nivel superior, como el nivel de preparación para las profesiones y por ello se le vincula con el mercado laboral profesional y con las actividades de élite como la investigación.
Precisamente en relación con este último punto, los niveles son un mecanismo de diferenciación vertical en relación con el apoyo para funciones de élite, así, cuando las universidades obstaculizan la realización de actividades como la investigación científica, ya porque priorizan la enseñanza y no dejan tiempo para la investigación, los investigadores como gremio, suelen presionar para su separación y reubicación, lo que da pie, a otro tipo de establecimientos dedicados sólo a la investigación: los llamados centros de investigación [Clark,1983:88].
Pero también, las universidades han creado mecanismos por iniciativa propia para proteger estas actividades y crean establecimientos dedicados al posgrado, mismos en los que ubican a los investigadores; algunas veces, creando plazas de investigación y otras, combinando la docencia con la investigación en la forma de plazas de profesor-investigador. Otra variante en el tipo de establecimientos para la investigación son los institutos de investigación, que pueden depender o no de las universidades o al sector educativo, pero por el tipo de actividad que realizan, quedan posicionados como parte del nivel superior, dentro de la estructura académico-científica.
Los niveles establecen jerarquías al existir una patente diferenciación vertical basada en la escala educacional. En cada sitio se realizan actividades típicas: capacitación especializada e investigación en el nivel superior y la educación general en los inferiores. Así, el estatus y el prestigio son asociados con los niveles, creando una jerarquía institucional, consistente en una escala de estatus asignada a las instituciones y a los sectores, en base a la gradación del valor socialmente asignado en el mismo sentido ascendente de los niveles de la estructura [Clark, 1983:102].
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