Para Wilhelm Dilthey (2000) y Ernst Cassirer (1976), el patrimonio se refiere a formas simbólicas por lo que se privilegia su carácter figurativo de un legado cultural. Kart Mainnheim (1987), Ideología y utopía, sostiene la dicotomía entre dominantes y dominados. Desde esta perspectiva se enmarcó el análisis del discurso de Simón Rodríguez quien asumió la racionalidad de la Ilustración sintetizada, en 1791, en la Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano. En, Sociedades Americanas (1828), se refiere a estos Derechos:
Hace tiempo que se disputa sobre Libertad, Igualdad, Derechos &c. i
[…] para todo hai Escuelas en Europa, i
para muchas cosas en América;
en ninguna parte se oye hablar de ESCUELA SOCIAL.
[…] Es verdad que, los Derechos de Hombre, en cuanto a rejir la Sociedad, no son los de su persona, sido los de sus APTITUDES; pero.. NATURALES,, que consisten en sus FACULTADES .. MENTALES. (T. I. 341)
De las maneras de analizar el concepto de racionalidad se destacan: racionalidad ilustrada, instrumental, tecnológica, comunicativa, crítica, práctica, estética y hermenéutica. Estas tres últimas, se consideraron apropiadas para fundamentar la Teoría. Adam Smith (2002), La Riqueza de las Naciones, derivó con anterioridad a Kant, la razón práctica como utilidad. Siglos después, el neoliberalismo económico revivió y fundamentó su doctrina en el utilitarismo. Simón Rodríguez asumió dos posiciones respecto al utilitarismo: al compararlo con los efectos de la pobreza, y al contraponer el utilitarismo como egoísmo a la sociabilidad. [Se destacan conceptos]
Smith, en Escocia, trató de dar reglas a la industria, demostrando en qué consiste la riqueza de las naciones. […] Smith, que cada uno debe aprender a gobernar con arte sus negocios para no quejarse de la fortuna cuando le salen mal y el Gobierno a ocuparse en el mecanismo de la industria y en dirigirla para no atribuir a los pueblos su ignorancia y sus yerros. Y los publicistas nos hacen ver, que nada de lo que hasta ahora se ha puesto en práctica, para arreglar la sociedad, ha producido el efecto que se esperaba — que todavía no conocen los pueblos sus verdaderos intereses.(T. II. 339-340)
Racionalidad práctica es, la capacidad propia de los sujetos en su condición de una existencia moral liberadora, que el utilitarismo y el pragmatismo anglosajón convirtió en lucro personal. Simón Rodríguez:
“ver en los intereses del Prójimo los Suyos propios”, se constituye la máxima más perversa que puede haber inventado el egoísmo―
Cada uno para Si, y Dios para Todos.
En este estado de contradicción ¿qué cabida tendrán los deberes sociales?
El deseo de enriquecerse ha hecho todos los medios legítimos, i todos los procedimientos legales: no hay cálculo ni término en la Industria el egoísmo es el espíritu de los negocios,, (sic) i los negocios la causa de un desorden, que todos creen natural, i de que todos se quejan. (T. I. 405)
Los efectos del egoísmo y la pobreza «en este estado de contradicción», es un razonamiento dialéctico. Es significativo el sentido de la expresión: «el egoísmo es el espíritu de los negocios». Para Hobbes (1995) es «la guerra de todos contra todos». El mercado es el epicentro de la sociedad capitalista y el éxito la garantía de moralidad. Simón Rodríguez sostuvo lo contrario:
El objeto de la INSTRUCCIÓN es la SOCIABILIDAD
i el … de la Sociabilidad es hacer menos penosa la vida. (T. II. 13)
OBJETO ------ de la Instrucción = la Sociabilidad
FIN---- de la Sociabilidad = hacer menos penosa la vida (T. II. 103).
Blanca Muñoz (2005), cita el pensamiento de Adam Smiht: «El patrimonio de un hombre pobre estriba en la fuerza y destreza de sus manos; […] El juicio sobre si este hombre está en condiciones de ser empleado debe ciertamente ser dejado a la discreción de los empleadores, a cuyo interés concierne mucho».
Simón Rodríguez:
…que el hombre, en el trato con sus Semejantes, perfecciona sus sentimientos¾ reduce la Compasióni la predilección a un solo sentimiento que llama HUMANIDAD ¾ llama la unión con sus Semejantes = SOCIEDAD,.
los actos de humanidad = VIRTUDES SOCIALES,,
los puntos de reunión = CIUDADES
La visión opresor–oprimido, responde a racionalidades antagónicas; a concepciones diametralmente opuestas en lo cultural y patrimonial. La razón práctica es la capacidad propia de los sujetos para desarrollar una existencia moral que permita captar el medio como realidad. La razón práctica, como doctrina filosófica, estuvo vigente en la época de Bolívar y de Simón Rodríguez. La frase del Libertador: «la mayor suma de felicidad» era propia del lenguaje de John Stuart Mil (1984) para quien el utilitarismo, consistía en alcanzar la mayor suma de felicidad posible para el mayor número de seres vivos.
El patrimonio cultural supone una reflexión estética: la racionalidad de lo que una clase social entiende como apreciación de la belleza. Herbert Marcuse (1970), La sociedad opresora, en Notas sobre una definición de la cultura, interpreta lo estético como: la continuidad del deseo de utopía para evitar la toma de conciencia entre las clases sociales. Esta utopía entra en oposición con la realidad. Siguiendo el radical planteamiento de Marcuse: ¿En condiciones de pobreza, puede el pueblo comprender la razón estética? Simón Rodríguez planteó dos visiones antagónicas en la percepción de lo estético: la que deriva la clase opresora y la visión de la clase oprimida. Es la línea de pensamiento de Rousseau:
Mientras los hombres […] solo se aplicaron a realizar unos trabajos que un solo individuo podría hacer y unas artes que no necesitaban del concurso de varias manos, vivieron libres, buenos, sanos y felices en la medida en que podían serlo por su naturaleza. […] pero tan pronto como un hombre necesitó de la ayuda a otro, tan pronto como se dieron cuenta de que era ventajoso que uno solo tuviera provisiones para dos, la igualdad desapareció, se instauró la propiedad, el trabajo se volvió necesario…
La primera causa del mal es la desigualdad; de la desigualdad proceden las riquezas; pues los conceptos de pobre y de rico son relativos y donde quiera que los hombres sean iguales no habrá ni ricos ni pobres.
Simón Rodríguez: [Se destacan conceptos]
En el sistema antieconómico (llámese SISTEMA, si se quiere) de concurrencia o de oposición, el productor es victima del consumidor, y ambos lo vienen a ser del capitalista especulador.
Por máxima reguladora de la Economía
Los productores se han de consultar
Dígase antes de emprender {
Para no producir más de lo necesario
En la producción superflua (sic) está la desgracia del hombre: por ella pierde y se empobrece: la pobreza lo somete a condiciones duras, y, al fin, la miseria lo vende al capitalista. (T. I. 240)
Con la Independencia, la razón estética formó parte de la ideología de una clase despojada del linaje colonial, manteniendo los mismos privilegios. El gusto estético le es negado a las mayorías empobrecidas tal como lo confirma Ferry Egleton (2006), La estética como ideología. Egleton encontró en la categoría de lo estético los patrones hegemónicos. Militó en la izquierda católica y sus testimonios van en la línea gramsciana. Concibió lo estético como un proyecto contradictorio. De allí su teoría: «la práctica cultural tiende a ser una rama más de la producción general de mercancías pero al mismo tiempo deviene en una oportunidad para la generación de una hegemonía alternativa». Egleton afirma que el razonamiento estético neutraliza tanto la crítica social cuanto su denuncia.
Kant (2008), totalmente aislado de la realidad social, analizó la actividad estética del ser fundamentándola sobre los universales a priori. Lo expuso en Observaciones acerca del sentimiento de lo bello y de lo sublime:
La facultad de querer, considerada como facultad superior determinada por el concepto de la libertad, no admite otra legislación a priori que la de la razón (en la cual únicamente reside este concepto). Supuesto que el sentimiento tiene su sitio o se halla colocado entre la facultad de conocer y la de querer, […] se puede suponer, al menos provisionalmente, que el Juicio contiene en sí mismo un principio a priori…
Para Marx, según la doctrina del trabajo enajenado, el proletariado es una clase oprimida y explotada. Clase totalmente negativa, desposeída de propiedad, de su ser genérico y de dignidad humana.
Carlos Marx
[Proletariado] Una clase con cadenas radicales, una clase de la sociedad burguesa, que no es una clase de la sociedad burguesa, un estamento, que es la disolución de todos los estamentos, una esfera que posee un carácter universal por sus sufrimientos universales y que no pretende tener ningún derecho particular, porque con ella no se comete ninguna injusticia particular, sino la injusticia en sí.
Simón Rodríguez: [Se subrayan los conceptos]
…y llaman PREPONDERANCIA al abuso del poder¾saben que en el equilibrio de las funciones consiste la salud pública…y llaman PROSPERIDAD una opulencia, fundada en el apocamiento de las clases que tienen oprimidas, [… Y piensan, al mismo tiempo, en prohibir el matrimonio a los POBRES, para que procreen (ni Proletarios, quieren que gocen de los bienes de la vida social.) (T. II.122)
Les dirán, que quieren hacerlos trabajar POR POCO, paraque no lleguen a RICOS, i tenerlos todo el año ocupados, paraque no tengan tiempo de aprender lo que no les toca saberque los tratan de PROLETARIOS, que quiere decir jente buena para hacer CRIA. (T. I. 319)
El concepto de proletariado, unido al de pobreza, se encuentra en el pensamiento socialista posterior a la revolución francesa, y se materializó con el llamado final del Manifiesto Comunista de 1848 de Marx y de Engel: «¡Proletarios de todo los países, únanse!» Gian Mario Bravo (1985), Diccionario de Política:
Acogiendo, aunque de manera actualizada, la evaluación marxengelsiana con la discusión posterior de Lenin, se hace coincidir el proletariado con la clase obrera y se le define, en consecuencia, como la única clase revolucionaria, capaz de llevar a cabo históricamente el trastocamiento total, que conducirá a la edificación del socialismo.
Simón Rodríguez fue el primero en identificar, en América, al proletariado como la clase social oprimida. Lo atestigua Arturo Andrés Roig (2000) al igual que Estela María Fernández Nadal, Carmen Bohórquez, Cecilia Sánchez, Salvador Morales Pérez y Hugo Biagini, coautores de, El pensamiento social y político iberoamericano del siglo XIX.Simón Rodríguez inventó para América un futuro inédito: «El dogma de la vida social es estar continuamente haciendo la sociedad sin esperanza de acabarla porque con cada hombre que nace hay que emprender el mismo trabajo» (T. II. 418)
Theodor W. Adorno (1995), Dialéctica negativa: [Se destacan conceptos]
El individuo se ve reducido a cero frente a las potencias económicas. Tales potencias llevan al mismo tiempo a un nivel, hasta ahora sin precedentes, el dominio de la sociedad sobre la naturaleza.
Mientras el individuo desaparece frente al aparato al que sirve, ese aparato lo provee como nunca lo ha hecho. En el estado injusto la impotencia y la dirigibilidad de la masa crece con la cantidad de bienes que le es asignada.
Adorno expresa la preocupación estética como punto de partida de una reflexión crítica que evidencia la irracionalidad de la sociedad.
Esta interpretación abre mayores posibilidades que la razón práctica o la razón estética, al permitir la identificación de la realidad a partir del horizonte cultural de la ínfima clase. En la Tesis se sostiene: la pobreza, en América Latina, es el sistema de significación de mayor fuerza inspiradora de los movimientos revolucionarios. El discurso de Simón Rodríguez, como teoría crítica de la sociedad, se constituyó desde los sin voz, desde la pobreza y la indigencia: «Todos huyen de los POBRES, los desprecian y los maltratan. Alguien ha de pedir la PALABRA por ellos.» (T. II. 142)Para Habermas, la estructura de racionalidad comprende una relación de comunicación:
De esta forma, el problema de la mediación de los momentos de la razón acaba confundiéndose con el de la separación de los aspectos de racionalidad bajo los que se diferenciaron entre si las cuestiones de verdad, las cuestiones de justicia y las cuestiones de gusto.
Por eso, una teoría que quiera asegurarse de las estructuras generales del mundo de la vida, no puede proceder en términos trascendentales; solo puede esperar estar a la altura de la ratio essendi de sus objetos cuando exista razón para suponer que el propio contexto de la vida social en que se encuentra «ya siempre» el teórico se encarga de que se le abra la ratio cognoscendi de esos objetos.
En eumed.net: |
1647 - Investigaciones socioambientales, educativas y humanísticas para el medio rural Por: Miguel Ángel Sámano Rentería y Ramón Rivera Espinosa. (Coordinadores) Este libro es producto del trabajo desarrollado por un grupo interdisciplinario de investigadores integrantes del Instituto de Investigaciones Socioambientales, Educativas y Humanísticas para el Medio Rural (IISEHMER). Libro gratis |
15 al 28 de febrero |
|
Desafíos de las empresas del siglo XXI | |
15 al 29 de marzo |
|
La Educación en el siglo XXI |