CARACTERIZACIÓN DEL DISCURSO DE SIMÓN RODRÍGUEZ Y SU INCIDENCIA EN LA CONCEPTUALIZACIÓN DEL PATRIMONIO CULTURAL

Guillermo Briceño Porras

3. Contenidos de los cursos

Antes de proponer el análisis de los cursos sobre patrimonio es importante clarificar algunos aspectos conceptuales. Ralph Dahrendorf (1962) expresa:«Las clases sociales y el conflicto de clases estánpresentes doquiera la autoridad se distribuye de manera desigual entre las distintasposiciones sociales» La consecuencia de su planteamiento es que no merece la pena cuestionar el capitalismo, pues éste no es ya sino un fantasma. Para Dahrendorf, la verdadera causa del conflicto es la desigual distribución de la autoridad. Por consiguiente, la crítica tradicional (marxista) de la sociedad capitalista no tiene ya ningún sentido. Es irrelevante si los propietarios de los medios de producción tienen o no el control de la economía (que piensa que no lo tienen), y afirma que la clase capitalista homogénea predicha por Marx no ha existido de hecho. El capital, y consiguientemente el capitalismo, se ha disuelto, y ha dado paso en la esfera económica a una pluralidad de grupos que en parte se ponen de acuerdo, en parte compiten entre si, y en parte son simplemente diferentes.
Pierre Bourdieu(1991), La distinción. Criterio y bases sociales del gusto, es el autor que relaciona más directamente las clases sociales con la interpretación dada en la investigación, al considerar a la «dominación cultural como la causa de la existencia de clases. La interiorización de la arbitrariedad cultural como dominación cultural es producto de la educación». Paulo Freire (1974) Concientización:
Para ser válida, toda educación, toda acción educativa, debe necesariamente estar precedida de una reflexión sobre el hombre y de un análisis del medio de vida concreta del hombre concreto a quien uno quiere educar ( o por decirlo mejor: a quien uno quiere ayudar a que se eduque). Si falta tal reflexión sobre el hombre, se corre el riesgo de adoptar métodos educativos y maneras de obrar que reducen al hombre a la condición de objeto.

     Tito Lacruz (2004), ¿Culturalmente pobres? Las formas de pensar frente a la riqueza y la pobreza:
Estas relaciones entre modernidad y bienestar sociomaterial se ven alteradas en Venezuela donde se ha dado un crecimiento sostenido de la pobreza en los últimos 25 años alcanzando al 68% de los hogares para el 2002. Esta pobreza sostenida y las relaciones clientelares sobre las cuales se han tejido las relaciones públicas, no sólo han afectado los aspectos sociomateriales de la vida social, afectan también los aspectos políticos-institucionales y los socioculturales.

Joseph Ballart y Jordi Juan i Tresserras sostienen: «la gestión del patrimonio está vinculada a estrategias multidisciplinarias». En la investigación se afirma que esta acción, es un proceso de planificación,que no puede estar al margen de las bases ideológicas que orientan las políticas culturales.
Se analizaron programas de cursos sobre patrimonio cultural y se tomó como referencia el «Curso de Gestión del Patrimonio Cultural en Latinoamérica: Proyectando la Investigación, Conservación, y Promoción del Patrimonio Andino». Su autor, Álvaro Higueras (2009), acertó al iniciar el programa del curso cuestionando el concepto de patrimonio cultural: « ¿Qué es patrimonio? Un concepto artificial» De la pregunta concluye que los asuntos de gestión patrimonial deben ubicarse en un contexto y éste debe ser el de un «pasado presente» Otras de las innovaciones de Álvaro Higueras, es distinguir entre gestión y manejo. La Estrategia de la Gestión del Patrimonio Cultural difiere cuando se asume como un proceso vinculado a valores que identifican una concepción ideológica–política no tradicionalista, o cuando el manejo tiende a una actividad con fines lucrativos. Al identificar las novedades de las estrategias de gestión en Latinoamérica se reconoce que se trata de una novedad histórica. Culturas que fueron novedad para los conquistadores españoles y que siguen siendo novedad para los investigadores del patrimonio cuando se asume la pobreza como variables. Este punto de vista reduce la ambigüedad en torno al concepto de lo patrimonial. Para Álvaro Higueras, los pilares de la gestión son: Investigación, Conservación y Promoción que dependen de la fortaleza de las instituciones. Difundir no es únicamente comunicar la información inherente a los bienes culturales es, en la línea de la Teoría formulada, reflexionar y comprometer la significación de los símbolos patrimoniales como representación de  los valores auténticos de un pasado, donde el pueblo redefine constantemente su identidad.
Aunado al llamado tiempo libre, en los cursos se establece el principio de identidad entre patrimonio–turismo–globalización, lo que supone el olvido de la existencia de relaciones de producción, conflictos sociales, existencia de clases y la pobreza, que niegan la pretendida neutralidad conceptual de la relación. Ninguno de los textos consultados mencionan los inconvenientes que acarrea el turismo ni se cuestionan sus ventajas: Juan i Tresserras (1990); López y Marchena (1997); Marchena (1998); López Palomeque (1995); Douglas, P. (1991) y Oruño, M. (1995), dan como hecho incuestionable que el turismo es una actividad favorable para el desarrollo del  patrimonio cultural. El problema radica en responder: ¿Turismo de quies y para quiénes? ¿Con qué fines? ¿Con cuál participación popular? Esta problemática ni se formula ni se dan respuestas porque pesa más el bien fiduciario y su relación con el concepto de mercado. Para Ballart–i Tresserras: «Ese conocimiento cuantitativo y cualitativo del patrimonio permitiría igualmente establecer las oportunas prioridades en materia de conservación y restauración».
La afirmación: «Venezuela vive una revolución», ha llegado a ser un tópico en el sentido de la quinta acepción del Diccionario de la Academia de la Lengua: «Lugar común que la retórica antigua convirtió en fórmulas o clichés fijos y admitidos en esquemas formales o conceptuales de que se sirvieron los escritores con frecuencia».

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