PARTE V: PRIVATIZACIÓN DE IBERIA, LÍNEAS AÉREAS DE ESPAÑA, S. A.

CAPÍTULO DOCE. ORIGEN, PRIVATIZACIÓN Y GOBIERNO DE LA COMPAÑÍA.

12. 1.- ORIGEN Y EVOLUCIÓN DE LA COMPAÑÍA.

Con el Gobierno de Primo de Rivera, a partir de 1925, se produjo el proceso de implantación de líneas de pasajeros que se inicia con la aparición de la Unión Aérea Española y la que es, según Yusta (2003), la primera Iberia.

La creación de Iberia fue un encargo más dentro de la cartera de contratos firmados con el prestigioso hombre de negocios Horacio Echevarrieta y Maruri, empresario elegido por Alemania como el socio más conveniente por su acreditada solvencia y seriedad en el mercado de la construcción naval, todo ello en una relación que contó con la aprobación de Primo de Rivera, el Ministro de Marina Cornejo y el mismo Rey, Alfonso XIII. A primeros de octubre de 1926 Echevarrieta viajó a Berlín para concretar los términos de la colaboración y negociar, entre otros asuntos de carácter reservado, la creación de una compañía aérea que se llamaría Iberia1 con sede en Madrid y la apariencia de ser española bajo la presidencia de Echevarrieta.

La compañía realiza su primer vuelo comercial entre Madrid y Barcelona el 14 de diciembre de este mismo año con aviones Rohrbach-Rolland. Tras fusionarse con otras compañías aéreas españolas adopta, en años sucesivos, los nombres de Ceta, Classa o Lape. Será en 1937 cuando la empresa recupera de nuevo el nombre de Iberia e inicia su actividad con sede en Salamanca cubriendo destinos del centro peninsular, el norte de África y algunas de las principales ciudades europeas.

Con posterioridad en el año 1938, se firmó un nuevo contrato con DLH que especificaba claramente que ésta era la dueña de Iberia y que operaría para el Estado Español con material Junkers-52 y tripulaciones alemanas. Podemos considerarla una segunda Iberia.

En junio de 1940, el Ministro del Aire formalizó la constitución de una tercera Iberia, la Compañía Mercantil Anónima Iberia (con un 39% en poder de los alemanes), en una España deprimida tras la guerra civil.

Un Decreto de 17 de diciembre de 1943 estableció la adquisición de la totalidad de las acciones que poseía el capital privado, quedando la compañía completamente nacionalizada, traspasando posteriormente la acciones al INI que se convirtió en único propietario. Tras asegurarse nuevos suministros de combustible y adquirir varios aviones americanos, la empresa logró normalizar sus servicios y ampliar la red de cobertura de vuelos.

Con la incorporación de Iberia a las empresas del INI en 1944 nace la cuarta Iberia, que resultó decisiva para el desarrollo de la empresa. En 1946, con el inicio de los vuelos a Buenos Aires, se convierte en la primera compañía que vuela entre Europa y América del Sur. Su expansión americana siguió con la apertura de nuevas rutas en los años sucesivos: La Habana, Caracas, San Juan de Puerto Rico, Río de Janeiro,...

En la década de los sesenta se incorporan a la flota de Iberia los primeros reactores lo cual supone una mejora sustancial en la calidad del servicio. Durante los años setenta llegan nuevos aviones (B-747, B-727, DC-10) que renuevan la mayor parte de la flota turbohélice. También se inaugura en esta época el puente aéreo Madrid-Barcelona, operación pionera en Europa.

La década de los noventa trae la creación nuevas programas y servicios, crisis y ayudas del Estado (721 millones de €) y en 1993 la liberalización del mercado aéreo español, que conduce a la reducción de márgenes. En ésta década se va intensificando la competencia, en especial en las rutas principales. Se llevan a cabo planes de viabilidad y directores, hasta que en marzo del 2000 se hace efectiva la incorporación al capital de la compañía de los siete accionistas institucionales e industriales que constituyen el núcleo estable.

En esta década Iberia se embarca en la compra de aerolíneas sudamericanas que están privatizadas. Llega a controlar parte del capital y a gestionar Aerolíneas Argentinas y su filial Austral, y compra porciones significativas del capital de Ladeco y Viasa. En cierto sentido, la compra de estas participaciones estaba dirigida a hacer a la compañía más atractiva de cara a una posible privatización y a la firma de alianzas estratégicas con otras líneas aéreas del Norte de Europa y EEUU.

Actualmente, Iberia es la cabecera de un Grupo de empresas cuya actividad es el transporte de pasajeros, mercancías y actividades conexas; líder en el mercado nacional y en los destinos latinoamericanos. Según datos de la Asociación Española de Compañías Aéreas, en el año 2000 Iberia tenía una cuota en el mercado doméstico del 70,4% , un 34,5% en el tráfico regular entre España y Europa y un 44,5% del tráfico regular entre España y Latinoamérica.

Además, es una de las empresas más cualificadas del mundo en el área del mantenimiento aeronáutico, actividad que presta a su propia flota y a la de otras veinte empresas más, incluidas varias de las mejores de Europa. Es el primer operador de Handling en todos los aeropuertos españoles.