Heraclio había vencido a los persas y recuperado las antiguas posesiones Bizantinas, entre ellas la zona de Israel, pero viejos problemas internos resurgieron en el imperio, la pugna religiosa de la naturaleza humana o divina del llamado Jesucristo, por lo que en el año 624, Heraclio proclamó una fórmula que creyó podían aceptar los dos bandos, a saber: que si en Jesucristo había dos naturalezas distintas, pero unidas, tenía una sola voluntad de la cual resultaba un solo efecto (Oncken, Hértzberg, & Géiger, 1918, pág. 38), esta idea pretendía conciliar a la iglesia ortodoxa1 y a los monofisistas 2, sin embargo fue duramente criticada y el patriarca Sofronio de Jerusalén, adversario de la reconciliación les inventó el apodo de Monotelista 3 a los seguidores del dogma pretendido por Heraclio, lo que reanudó las pugnas y las divisiones dentro de la iglesia ortodoxa, y en consecuencia debilitando al Imperio. La debilidad Bizantina dejó la mesa puesta para facilitar el camino y llegada de los árabes, la expansión del Islam fue impresionante, salidos de la península arábiga y con una combinación del deseo de apoderarse de territorios con la máscara de la difusión de la fe, misma que después usarían los cristianos, la tierra de Israel se convirtió en las primeras en ser dominadas, ya que ocurrió en el 636 a tan solo cuatro años de la muerte de Mohamed ocurrida el 7 de junio del 632 (Oncken, Hértzberg, & Géiger, 1918, pág. 39), y duraría hasta el 1099 (Israel Ministry of foreign affairs, 2008), aunque debo aclarar, que algunos autores consideran que la conquista árabe de Jerusalén no ocurrió en el 636, sino en el 638 (Meinhardt, Sep/Oct 2000) y otros estiman que fue en el 637 (Oncken, Hértzberg, & Géiger, 1918, pág. 40), pero de todas formas no fue raro que los árabes intentaran la conquista de Israel, ya que era la salida natural de su territorio, amén de la importancia religiosa que reviste Jerusalén, ya que los musulmanes consideran que Mohamed ascendió al cielo desde las ruinas del templo, razón por la que el Califa Omar ordenó la construcción de la mezquita de la roca, después de la toma de Jerusalén. Los árabes también conquistaron el reino persa, haciendo caer en el mes de marzo del año 637, al último rey Sasánida Yazdgard III o Isdegerdes III (632 – 651) y en el 639 ya se habían apoderado de toda Siria hasta las faldas del monte Tauro en Cilicia y las sierras escarpadas de la Armenia meridional (Oncken, Hértzberg, & Géiger, 1918, pág. 40). Con los árabes presentes y considerando que el movimiento que representaban era de carácter religioso, además de que entre musulmanes y judíos se mantiene la misma idea de la unicidad de Di-os, así como ciertas costumbres dietéticas y el mismo origen con el patriarca Abraham, al principio las cosas marcharon bien para los judíos, se les permitió reasentarse en Jerusalén, conservar sus propiedades y gozar de la libertad de culto a cambio del pago de impuestos, al principio los árabes ofrecieron a los pueblos conquistados tres opciones: a) abrazar el Islam y convertirse automáticamente en miembros de pleno derecho de la comunidad musulmana. b) concluir la paz (sulh) con los musulmanes, poniéndose bajo la protección de la comunidad musulmana mediante el pago de un tributo anual (guizia). C) Si no se aceptaba ninguna de estas opciones no quedaba más que la guerra (al-qitál) (Soirée, 1979, pág. 89), pero las cosas cambiarían cuando el movimiento musulmán se convirtió en fanatismo alrededor del año 717, ya que prohibieron la intervención en cargos públicos, igual ocurrió con la libertad religiosa, así como la pérdida de la condición de protegidos del Islam, además de que se impusieron elevados impuestos, iniciando un sistema de discriminación basado en la religión, por lo que la comunidad judía perdió parte de su cohesión.
1 Iglesia ortodoxa, denominación de una de las tres grandes comunidades o iglesias vinculadas al cristianismo (las otras dos son la Iglesia católica y las iglesias protestantes surgidas tras la Reforma). La Iglesia ortodoxa comparte una continuidad histórica con las comunidades cristianas del Mediterráneo oriental. Su gran expansión se debió a la labor de grupos misioneros que viajaron por toda la zona oriental de Europa. La palabra “ortodoxo” (del griego, 'creencia correcta') implica una seguridad en relación con la fe apostólica. La Iglesia ortodoxa también ha establecido comunidades en Europa occidental, América y, en épocas más recientes, en África y en Asia. Cuenta con más de 250 millones de fieles repartidos por todo el mundo. Fuente: Microsoft Encarta 2008.
2 Monofisismo, secta cristiana de los siglos V y VI (considerada herética) que mantenía que Cristo poseía una única naturaleza (divina), en oposición por lo tanto a la doctrina ortodoxa que proclamaba las dos, divina y humana. Los monofisitas quedaron confinados sobre todo a la Iglesia oriental aunque tuvieron alguna relevancia en Occidente. Fuente: Microsoft Encarta 2008.
3 Monotelismo, doctrina cristiana del siglo VII que mantenía, de conformidad con la interpretación tradicional, que Jesucristo tenía dos naturalezas distintas, la divina y la humana, pero que ambas se manifestaban en una sola voluntad y actividad. La doctrina monotelista fue enunciada por primera vez en el 624 por el emperador bizantino Heraclio I, en un intento de reconciliar el punto de vista ortodoxo, consistente en que Cristo tiene dos naturalezas, frente a la creencia herética de los seguidores del monofisismo de que tenía sólo una. Mediante esta reconciliación, Heraclio esperaba recuperar para la Iglesia a los miles de monofisitas que habían sido excomulgados por herejía. El resultado de la promulgación del monotelismo, sin embargo, no redundó en una mayor unidad entre la Iglesia y el Imperio, sino en una mayor división. Fuente: Microsoft Encarta 2008.