VENEZUELA, CAPITALISMO DE ESTADO, REFORMA Y
REVOLUCIÓN
Edgardo González Medina
Esta página muestra parte del texto pero sin formato,
gráficos, tablas ni notas.
Puede bajarse el libro
completo en PDF comprimido ZIP (320 páginas, 1809 Kb) pulsando aquí
Como producto del reparto de las potencias aliadas al término de la I Guerra
Mundial, y la imposición del Rey Faisal en la antigua Mesopotamia convertida en
el país independiente Irak, para 1931 la explotación de las reservas de petróleo
fueron transferidas a una compañía mixta, por acuerdo entre el gobierno y la
Iraq Petroleum Company, con un consorcio internacional en el que participaban la
Royal-Dutch Shell, la Anglo-Persian Oil Company, otras empresas petroleras
francesas, y la Standard Oil Company de Nueva York y California. Se convino al
consorcio el derecho exclusivo de explotación de los campos petroleros de la
región de Mosul, a cambio de regalías anuales de 400.000 libras esterlinas para
la Iraq Petroleum Company. En 1934 se puso en funcionamiento el oleoducto entre
Mosul y Trípoli (Líbano), extendido hasta Haifa (Palestina) en 1936. La
revolución de 1916 a cuya cabeza figuró Faysal-al Husein dio por terminado el
compromiso de la Mesopotamia con aquella estrecha relación que con Alemania
venia sosteniendo Turquia, en rol de líder del mundo árabe. Para 1918 los
británicos habian ocupado toto el país. Se rompía de esta forma, asi mismo, el
proyecto de un sol Estado-Nación árabe. Para 1939, tras la muerte del hijo de
Faisal I, el rey Ghazi I, debe ascender al trono el hijo de éste, Faisal II,
pero debido a su minorìa de edad (tres años), se establece una regencia militar,
dirigida por el General Nuri As-Said, quien rompió relaciones con Alemania, pero
en 1940 fue reemplazado por un nacionalista radical, Rashid Alí-Gailani, que
manifestó una polìtica antibritánica. En breve tiempo, las conspiraciones se
sucedieron hasta que se dio un nuevo cambio, pasando Gailani al poder pero ahora
a favor de Alemania, provocando la invasión de tropas británicas en Basora y la
declaratoria de guerra entre ambos paises, en 1941. Derrotadas las tropas de
Irak, Gailani fue sustituido de nuevo por As-Said, y un mayor control británico
se cernió sobrer Irak. Para 1943, Irak se declaró en guerre con Alemania. En
1950 Irak acuerda con las transnacionales un beneficio del 50-50 del beneficio
de la explotación petrolera. En enero de 1953 se hicieron elecciones,
ascendiendo al trono el nieto de Faisal I, que ya cumplía diceciocho años, con
el nombre de Faisal II. Como en casi todo el mundo, los EE.UU, potencia
triunfante en la guerra, aumentó su polìtica de intervención en Irak, aunque en
medio de una oposición creciente de sectores revolcucionarios y nacionalistas,
principalmente las del partido izquierdista Unión Nacional Democrática, que fue
ilegalizado en 1954. Con un dominio sobre la situaciòn, en 1958 el régimen de
Irak convino en una unión federativa con Jordania. Esta Unión Arabe fue
presidida por el general Nuri as-Said, con marcada tendencia de colaboración con
Occidente. Ya estaba creada ese mismo año la República Arabe Unida, entre Egipto
y Siria, más emblemática del viejo ideal panarábico. A los pocos meses, un
alzamiento militar dirigido por el General Karim Kassem dio al traste con la
monarquía y estableció la República de Irak, que disolvió la Unión Arabe y se
acercó a la República Arabe Unida, sin tocar los intereses de las
transnacionales petroleras, aunque retirando a Irak del llamado circuito de la
libra esterlina. El Imperialismo continuó moviendo o apoyando las conspiraciones
internas, y en 1963 se produjo un Golpe de Estado promovido por el Partido Baaz,
de tendencia socialista, encabezado por Abdul Salam Arif, y con el liderazgo de
jóvenes militares. Las relaciones con Occidente continuaron sin cambios bruscos,
y cuando en 1968 muere accidentalmente Salam Arif, asciende a poder su hermano
Abdul Rahman Arif. La dinastía sin embargo habia intervenido en la guerra de los
seis días contra Israel, y el Imperialismo apoyó el golpe de Estado contra
Rahman Arif a mediados de 1968, encabezado por el General Ahmed Hassan al-Bakr,
antiguo primer ministro, quien formó un gobierno que poco a poco se fue
pronunciando por ua revolución mas intensa, y en 1972 nacionalizó las compañías
petroleras, en un proceso que terminó en 1975, mediante indemnIzación a sus
propietarios, quedando las transnacionales ligadas mediante vínculos de comercio
y tecnología. La revolución avanzaría relativamente por un período aproximado de
diez años, Se puso en marcha una reforma agraria que terminó con resultados
decepcionantes, al grado que las granjas colectivas y cooperativas fueron
abandonas en pocos años. Las nacionalizaciones de empresas, hechas en la década
de los setenta, serían reveridas, asi como prvatizadas empresas agrícolas, de
alimentos, textiles, lacteos, construcciòn, servicios, transporte, etc., a
finales de la década de los ochenta. Para 1974 el gobierno debió enfrentar sublevaciones kurdas al norte del país,
impulsadas por factores del imperialismo desde Turquia y el suministro de armas
desde Irán, aliada en ese momento al Occidente por la dinastìa Palevi. En julio
de 1979 un grupo de oficiales encabezado por Sadam Hussein (sobrino del
Presidente derrocado), habia ascendido al poder, e instaló un régimen de signo
personalista cuya tarea inicial resultó ser la confrontación en una larga guerra
con Irán, donde ya habian tomado el poder los Ayatolas, cuyo régimen habia
nacionalizado la Anglo Iranian. Con sobradas razones los EE.UU juzgaron aliado a
Hussein contra la hostilidad del gobierno Ayatola, y de la misma forma que antes
habia proporcionado armas y pertrechos de guerra al Sha de Irán, ahora los
proporcionaría a Irak para su enfrentamiento con Irán. El fenómeno, por
supuesto, estaba impulsado por los altos intereses económicos del complejo
militar industrial de los EE.UU y los llamados perros de la guerra, que
comerciaban las armas. Hussein hizo una polìtica de veleta entre EE.UU y la
URSS, obteniendo también de esta última, ayuda y aprovisionamiento militar, y
ataca a Irán a finales de 1980. Durante los años de guerra, Hussein disolvió los
sindicatos y los partidos de oposición interna. Irak cargaba con una deuda cercana a los 60.000 millones dólares con Arabia y
Kuwait, a quienes habia pedido la condonación. Esas monarquias habian alentado
la guerra contra Irán por el temor de que el radicalismo islámico chiíta se
expandiera en el mundo árabe, con sus consecuencias sobre el control del
petróleo del medio oriente. En 1990, Hussein enseñoreado en el poder, invadaría
a Kuwait el 2 de agosto de 1990, invocando su viejo derecho a reividicar
territorios perdidos en el reparto de la primera postguerra, y el dia 5 de
agosto el Consejo de Seguridad decretó un embargo comercial-financiero y
militar. Se inició asi una guerra de muy largo plazo que aún no concluye, con
dos sucesivas derrotas para Irak, una en 1990 y otra en el 2.003, cuando fue
derrocado Hussein, capturado luego y encontrándose en este momento bajo juicio
por delitos de lesa humanidad. Irak y sobre todo Hussein, sigue siendo una especie de enigma ideológico. En
artículo publicado en el semanario Brecha de Uruguay, en agosto del 2.003,
titulado ¿Perdió Sadam Hussein?, el autor Immanuel M. Wallerstein158 dice:
En ese tiempo Sadam Husein era un joven y ascendente líder del partido Baas,
sobrino del nuevo presidente, inteligente y cruel. En 1979 lideró un golpe
sangriento contra su tío y se convirtió en el gobernante de Irak. Comenzó su
incesante purga de opositores. ¿Qué es lo que Sadam quería, aparte del mero
hecho de estar en el poder? Quería fortalecer el peso árabe en la política
mundial. Estaba a favor de una mayor unidad árabe y probablemente se vio a sí
mismo como el líder natural del mundo árabe, el nuevo Saladino. Sin duda
existían otros aspirantes para ese papel pero, con Nasser fuera de escena,
ninguno era tan fuerte. Además, Bagdad ha sido siempre, junto con El Cairo,
quien demandaba un estatus central en el mundo árabe musulmán.
Sadam vio su situación como la de quien tiene muchos enemigos. En el mundo árabe
los dos principales eran los comunistas y los islamistas, y ambos odiaban a
Sadam . En el resto del mundo los dos más importantes eran Irán e Israel, que
odiaban a Sadam; también Estados Unidos y Rusia, cada uno de los cuales esperaba
que Sadam odiara más al otro. Sadam no podía pelear con todos sus enemigos a la
vez. Sin cortar lazos con la Unión Soviética, entabló un acuerdo tácito con
Estados Unidos en los días de Ronald Reagan. Nada menos que Ronald Rumsfeld fue
a Irak a sellar el trato. ¿Cuál fue el acuerdo? Que Irak atacara Irán. Eso fue
en parte para ganar territorio, en parte para debilitar a los opositores de los
chiitas dentro de Irak, en parte para lograr el prestigio panárabe y en parte
para fortalecer su propio ejército. Estados Unidos, que en ese momento
consideraba a Irán como la principal amenaza contra sus intereses en Oriente
Medio, pensó que ésa era una gran idea y suministró directamente (y a través de
sus aliados, como Arabia Saudita) armamento, armas biológicas y químicas y apoyo
de inteligencia a Sadam Husein (para ser honesto, fueron los franceses en un
primer momento quienes le habían dado a Irak el primer empujón en su carrera por
conseguir armas nucleares, pero luego los israelíes bombardearon esas
instalaciones.) La guerra Irak-Irán fue un fracaso desde el punto de vista de Sadam. Luego de
ocho años de lucha, todos retrocedieron al punto de partida, habiendo sufrido
pérdidas masivas de vidas y recursos. Aun así, la guerra mantuvo a los iraníes
ocupados y eso fue un plus para Estados Unidos. Sadam exigió recompensa. Tanto
Estados Unidos como Arabia Saudita demoraron en responder. Justo en ese momento
la Unión Soviética colapsó. La Guerra Fría había terminado. Sadam Husein vio
esto como una bonanza, no como algo negativo. La Unión Soviética era un continuo
proveedor de armas para Irak, pero el precio era que Irak no podía hacer nada
que tensionara las relaciones entre estadounidenses y soviéticos. Sadam estaba
ahora libre de esta constricción, por fin.
¿Pero quien vendió el petróleo de Irak durante todo este tiempo?. Entre 1980 y
1990, Irak e Irán sentaron juntos sus odios en las mesas de la OPEP, mientras
las transnacionales vendìan su petróleo en el mercado mundial. La guerra produjo
disturbios transitorios en las exportaciones de ambos, obviamente, como muestra
el siguiente cuadro:
Para 1970 Irán aportaba el 16,4% del crudo de la OPEP, medido como exportación
diaria en barriles, mientras que Irak exportada el 7.4%. Tras el ataque de Irak
a Irán, las exportaciones de éste descienden a 3.5% del crudo diario OPEP
mientras que Irak aumenta a 11% de las exportaciones, descendiendo a 4,8% para
1981. Pero si observamos con cuidado, para el año 2.005 tendremos que la
participaciòn de Irak en las exportaciones de la OPEP es, curiosamente,
equivalente al promedio de la participación alcanzado entre 1970 y el 2.005,
estimado en términos de barriles diarios de crudo. Se observa que las
exportaciones de Irak resultan afectadas sensiblemente como consecuencia de la
primera Guerra del Golfo, pero no asi en la segunda, debido a las previsiones
hechas por los potencias imperialistas. De esa manera, mientras la primera
guerra hace descender la exportación diaria desde 1,5 millones de b/d en 1990 a
39 mil b/d en 1991; la segunda guerra induce una baja mas moderada desde 1,4
millones de b/d en el año 2.002 a 388 mil b/d en el año 2.003, para
reestablecerse rápidamente en el año 2.005 a los niveles previos del 2.002. Si a
ello se agrega que casi todos los miembros de la OPEP presentan en el 2.005 una
cifra de exportación diaria bastante equivalente con el promedio histórico de su
participación desde 1970, debemos sospechar la existencia de una clase de
planificado concierto de los monopolios petroleros en la conducción de la
demanda del crudo OPEP, dándonos la impresión de que el control del Imperialismo
sobre el petróleo es mas fuerte y fundamental de lo que podría suponerse si nos
guiáramos solamente por las contradicciones cotidianas de los agentes económicos
o las perturbaciones retóricas domésticas de los nacionalistas en algunos
países. A los efectos de un análisis mas detallado, anexamos el siguiente cuadro
donde constan los volumenes de exportación diaria desde 1970:
Para respondernos si se puede desmontar el modelo Petroimperio, debemos tener
siempre en cuenta que lo que se ventila no es solamente la posesión de las
fuentes de energía y la garantía de una distribución determinada. Subyacente se
encuentra la necesaria expansión del capital, el destino de la reproducción
ampliada del capital. En los últimos años el modelo ha demandado la captura de
zonas donde, o bien no se habian desarrollado las fuerzas productivas o bien se
encontraban bajo un régimen no capitalista de captura del excedente económico.
El argumento para esta captura, basado en la escasez o necesidad del petróleo,
tiende a encontrar una justificación moral en el hecho de que, en última
instancia, un recurso necesario para la sobrevivencia de la humanidad, debe
pertenecerle a ésta sin el azote especulativo de los poseedores naturales de esa
recurso, y por tanto se explicaría la captura forzosa de esa riqueza para
ponerla al servicio de la humanidad. Pero ese no es el problema. La mayor parte
del interes en el petróleo se origina fuera del área petrolera, y se refiere a
la inmensa cadena de ganancias capitalistas que se derivan de su valor de uso
como materia prima, no de su valor de cambio. Lo que el Petroimperio intenta
garantizarse es el altísimo excedente que el uso de la materia prima implica
para quienes lo obtienen y procesan. El modelo fue capaz de admitir el
incremento de los valores de cambio en los paises petroleros del Petroimperio
porque de esa forma es como reproducen las relaciones capitalistas de producción
dominante, lo cual incluyó formas nacionalistas de control de los yacimientos y
regímenes fiscales variados. Las transnacionales petroleras permitieron el
control polìtico de las principales variables del negocio petrolero, pero les ha
resultado intolerable abandonarse al libre juego de la oferta y la demanda. Las
transnacionales de hoy, además, no son aquellas dedicadas a taladrar la tierra y
sacar petróleo, que pugnaban con los Estados Petroleros por una cuota de
regalías mas pequeña, impuestos menores o exenciones arancelarias. Las
transnacionales de hoy desarrollaron en primer lugar, formas de asimilación de
los aumentos de costos provenientes de causas tradicionales de tipo fiscal o
polìtico, y en segundo lugar se han diversificado horizontal y verticalmente,
generando trust empresariales que ni siquiera podiamos imaginar hace tres
décadas. No se trata de la sola tendencia a la fusión de capitales o de
empresas, prevista por Lenin o Rosa Luxemburgo. Los trust de nuestra época están
integrados por empresas que compiten entre si por la ventaja en los valores de
cambio, que no financian unidades deficitarias con unidades superavitarias sino
que aquellas son liquidadas sin misericordia por éstas, y que están constituidas
con capitales no necesariamente fusionados cuya composición es dinámica y
cambiante. A medida que se expone a trasluz el entramado de los trust que
controlan la producción y el mercado mundial, el orígen del valor económico que
sostiene el sistema general se hace cada vez mas específico y nítido,
localizándose en los centros de explotación de los bienes naturales y la
extracciòn de materias primas fundamentales, como el petróleo, el gas, el agua,
los metales y minerales, etc. Son explotaciones con elevada aptitud de
transferencia de valor debido a que su explotación permite una altísima
productividad marginal del trabajo, que lógicamente no es remunerada, pasando a
otros factores de las cadenas económicas donde intervienen. En términos
marxistas podemos decir con mas propiedad, que en su orígen se arroja un alto
nivel de excedente que es transferido bajo la forma mercantil a otros circuitos
de valorización y aprovechamiento, que obran además para la reproducción
ampliada del capital. El hecho del excedente económico arrojado en la explotación de los bienes
naturales y la extraccìon de materias primas, coloca aparentemente el sistema
bajo una dependencia económica al gusto de un malthusiano, vinculada a la
cantidad o dotación de esos recursos, de manera que el valor está sujeto a la
abundancia o escasez. Sin embargo, esto tiene sentido práctico solamente en el
caso de los bienes escasos no renovables, no en los abundantes o renovables. Y
entre los primeros, el petróleo y el gas, que por ello son la base del
Petroimperio, no solo por su aptitud para generar excedente sino
principalmente- para ser transferido el valor bajo una forma mercantil no
anclada en mercados limitados, preferencias del consumidor, o segmentos de la
demanda. Petroimperio y mercado mundial capitalista es hoy una sola realidad económica
que admite formas políticas diversas. Se puede desmontar transitoriamente un
modelo específico de Estado-Petróleo por medios extraeconómicos, pero no se
puede desmontar el modelo Petroimperio al gusto de las variedades
antiimperialistas. Solo una continua y sostenida conquista de los trabajadores
de sus condiciones de producción en cada país o nación, pueden en el tiempo
alcanzar el cambio del modelo global por un modelo alternativo también global.
Irak
Volver al índice de VENEZUELA, CAPITALISMO DE ESTADO, REFORMA Y REVOLUCION
Volver a la BIBLIOTECA VIRTUAL de Derecho, Economía y Ciencias Sociales