CONCEPTUALIZACIÓN DEL MODELO

 

Como señalamos en el capítulo II, Dunn (1994) considera el análisis de políticas públicas como una metodología para formular problemas con el objeto de buscar soluciones. Dicha metodología contempla cinco procedimientos: estructuración del problema, pronóstico, recomendación, monitoreo y evaluación.

La estructuración del problema es un elemento fundamental en el análisis de políticas públicas y consiste en generar información acerca de la naturaleza de un problema, descubrir sus elementos críticos, sus relaciones causales y encontrar potenciales soluciones. Cuando hablamos de problema nos referimos a un problema de política pública, entendido como un valor no realizado, una necesidad o una oportunidad de mejora que puede alcanzarse o satisfacerse mediante una política pública (Dunn 1994: 68).

Una mala estructuración del problema puede producir errores tales como no considerar algunos aspectos importantes del problema; escoger el marco teórico, visión o ideología equivocada para conceptuar el problema; o escoger el modelo formal equivocado. Cualquiera de estos errores podrían conducir al analista a resolver el problema equivocado, lo que recibe el nombre de error del tipo III.

Los problemas de políticas públicas han sido clasificados en: bien estructurados, donde un pequeño grupo de personas decide entre unas pocas alternativas, moderadamente estructurados y mal estructurados. Estos últimos involucran a un gran número de personas en la toma de decisiones, cuyos valores son desconocidos o difíciles de ordenar, por lo que se presentan objetivos que compiten unos con otros. Por este motivo es sumamente difícil, si no imposible, encontrar una alternativa de política que sea preferible a todas las demás.

La mayor parte de los problemas de políticas públicas son mal estructurados. Son problemas que obedecen a múltiples causas, intervienen muchos actores y para solucionarlos se pueden tomar diversos cursos de acción. Como refiere Dunn (1994), en estos casos el analista de políticas públicas se encuentra con un metaproblema, es decir, un problema de problemas mal estructurado. El analista debe pasar del metraproblema al problema sustantivo definiendo el problema en su forma más básica y general basado en un marco conceptual. Este paso se hace mediante la especificación del problema haciendo uso de un modelo de política formal.

Se entiende por modelo de política la representación simplificada de aspectos seleccionados de un problema con propósitos particulares. El modelo permite simplificar el metaproblema o sistema de problemas, identificando sus elementos esenciales. Además obliga al analista a hacer explícitos los supuestos asumidos.

Dunn (1994) menciona dos tipos de modelos de políticas públicas: modelos descriptivos y modelos normativos. Los modelos descriptivos pretenden explicar y/o predecir las causas y las consecuencias de las políticas públicas seleccionadas y se utilizan para monitorear los resultados de las políticas públicas. Por otro lado, los modelos normativos además de explicar y/o predecir proveen reglas y recomendaciones para optimizar el logro de algún valor. Ambos tipos de modelos se pueden expresar de manera verbal, simbólica o procedimental. Los modelos procedimentales representan relaciones dinámicas entre las variables que caracterizan el problema