Lucrecia Soledad Wagner
La defensa de la actividad agrícola y el agua, vinculados a la historia mendocina, y la crítica a la falta de proyectos alternativos a la minería impulsados por el gobierno, también se reflejan en los relatos de los vecinos de Punta del Agua: “…No podemos hablar de trabajar la minería como única salida laboral para la provincia, y menos con lo que nos va a pasar en el futuro con el tema de las reservas de agua, el tema de conservar glaciares, la importancia de nuestra provincia, de que nuestros antepasados, los aborígenes, lograron hacer un oasis de este desierto, usando el agua de los deshielos de los glaciares, y no podemos, con la minería, darnos el lujo de destruir los glaciares para destruir todo lo que se ha logrado a través de los años...”. Otro testimonio da cuenta de la misma percepción en torno al pasado y presente mendocinos: “…Es una realidad de nuestra provincia, somos la provincia de las acequias, de los canales, somos una provincia que se superó haciendo un uso racional del agua…”.
El modo de vida de Punta del Agua, que, como ya fue mencionado, hace cinco años atrás no contaba con energía eléctrica, influyó también en el conflicto, entre quienes querían mantener esta forma de vida y quienes querían acceder a otras condiciones de bienestar, más asociadas al poder de consumo. En palabras de una pobladora de Punta del Agua: “…vivieron (sus hijas) sin luz y sin tecnología, pero con agua, teníamos que subir al cerro para tener señal de teléfono, crecieron bien, pero sin agua no hubiesen podido crecer, eso hay que valorar, para qué tanta tecnología…”, y añade: “…Zenobi dijo por radio Nihuil ¨todos esos que se quejan de la minería, bien que le gustan los celulares¨, yo llamé por teléfono y no me quisieron sacar al aire (…) pero le hubiese dicho ¨señor, yo tengo un celular, y lo uso una sola vez a la semana en Punta del Agua, y yo no quiero laminería, y si usted quiere mi celular, se lo regalo...”. En relación a ello, reflexiona: “…Por todo el consumismo, por toda la tecnología, estamos destruyendo el medio ambiente, y yo lo digo por mis hijos, por las generaciones futuras…uno no puede dejar de pensar en las generaciones futuras, yo no hice esto por ser fundamentalista…”.
Por otra parte, para las actividades de información y difusión, contaron también con la visita de Hugo González y Javier Rodríguez Pardo, que llegaron desde San Rafael a dar una charla. El delegado municipal avisó a la empresa “Portal del Oro” de dicho evento, al que concurrió un geólogo en representación de la empresa. “…Pasaron cosas importantes, como por ejemplo, que el sacerdote se levantó y le dijo al geólogo que ellos hablaban con el bolsillo y nosotros hablábamos con el corazón…” recuerda una autoconvocada. Asimismo, todas esas ocasiones eran aprovechadas por los vecinos para hacerles preguntas a los funcionarios, técnicos o representantes de las empresas: “…le preguntamos al geólogo si, con una mano en el corazón, él permitiría tener una mina cerca de su casa donde él vivía con su familia, y él dijo que ni a 70 Km. Esas fueron las últimas palabras del geólogo antes de irse, y nos dejó muy en claro lo que teníamos que hacer en Punta del Agua, y es una más de las contradicciones de todo esto…”, rememoran los vecinos.
Los hechos comentados, por un lado, acrecentaron la negativa a la explotación minera en la zona, el paralelo pedido de que se declare reserva hídrica, y de que se sancionara una ley que prohibiera la actividad. “…Todo lo que iba pasando iba acrecentando nuestra negativa a la explotación minera en la zona, cada vez más gente se iba sumando a nosotros y se sumó mucha gente de Punta del Agua en los cortes porque discutimos por radio con un Concejal y nos trató de delincuentes, y mucha gente se empezó a dar cuenta de la importancia de la ley…”, relatan los autoconvocados.
Las acciones masivas en contra de los proyectos en San Rafael, se hicieron en Gral. Alvear, como las marchas, que fueron tres, a finales del año 2006, y posteriormente, los cortes de ruta a los que se hace mención en el testimonio anterior, solicitando la sanción de una ley provincial que prohibiera la actividad, finalmente sancionada por la Legislatura en junio de 2007, la Nº 7.722.
El testimonio anterior también se refiere a las declaraciones de un Concejal, el presidente del bloque justicialista de San Rafael, quien quedó varado en los cortes realizados en Gral. Alvear –en junio de 2007 - y manifestó su crítica a esta modalidad de protesta en una radio alvearense, en la que expresó: “…El cortar una ruta nacional es un delito. Y es delito en general Alvear, es delito en Gualeguaychú, en Buenos Aires o en cualquier parte del país, entonces quien corta una ruta nacional es un delincuente, acá, en Alvear o en Buenos Aires, si quieren protestar por una causa noble, por una causa justa, como es esta de la minería, y que yo los acompaño porque también coincido con ustedes busquemos una forma de protestar sin que esto implique violar derechos del resto de la ciudadanía…esta es la situación y esto es lo que estoy planteando, no estoy diciendo que estoy a favor de la minería, no estoy diciendo que el derecho a transitar sea más importante que el derecho a la vida…”.
El Concejal responde, en esta declaración, a las críticas que muchos vecinos de Alvear y Punta del Agua estaban realizando a sus declaraciones en las que criticaba el corte de ruta como modalidad de protesta. Los vecinos manifestaron que ellos habían realizados marchas y entrega de folletos informativos, pero que después de 11 meses, la paciencia se había agotado. En el mismo programa radial, un vecino manifestó: “…Usted está hablando de su derecho de tránsito y yo estoy hablando de mi derecho de vida, ambos incluidos en la constitución nacional...”. El Concejal respondió que se trataba de contraponer un derecho real -el derecho al libre tránsito- con un derecho potencial -ya que no estaba demostrado que la minera contaminara y pusiera en juego la vida-.
Los vecinos preguntaron al Concejal que otras metodologías podían haber aplicado, ya que la información mediante folletos y las marchas ya habían sido puestas en práctica. El Concejal mencionó que podían ir a la Legislatura Provincial, ante lo que los vecinos manifestaron: “…A Mendoza no se puede ir porque mandan patoteros…”.
En cuanto a los cortes, los vecinos manifestaron que se habían hecho con el permiso de Gendarmería, y que incluso no eran cortes totales, cada 30 minutos se dejaba continuar el viaje a quienes habían quedado varados en el corte.
Más allá de la cuestión puntual de los cortes de ruta y la potencial contaminación por las actividades mineras, se evidenció en este debate radial el conflicto latente entre San Rafael y General Alvear respecto a algunos distritos sanrafaelinos, y la crítica de los habitantes de estos distritos hacia la falta de atención por parte del gobierno sanrafaelino. Comentarios tales como: “…La lucha pacífica y de la palabra se ha hecho durante un año , incluso en movilizaciones organizadas por la Multisectorial del Sur , sin tener acompañamiento del gobierno de san Rafael, pónganse a estudiar y vean que sus distritos también van a ser afectados…”, evidenciaban la indignación de los pobladores de distritos sanrafaelinos como Villa Atuel, Jaime Prats, Real del Padre, Monte Comán y Malvinas, distritos que se manifestaron en apoyo a la protesta, y que algunos de los vecinos que llamaron al programa de radio manifestaron que eran “…distritos del departamento de San Rafael pero descuidados por las autoridades…”.
“…Es una pena que durante todo este año no se hayan informado de nuestra lucha…”, manifestaron algunos oyentes que llamaron al programa. “…Fíjense que ha hecho el delegado de Punta del Agua…”, reclamó un habitante de este distrito, al que se sumaron cuestionamientos de vecinos desde otros distritos sanrafaelinos: “…La negligencia de los políticos que nos representan nos ha obligado a tomar este tipo de medidas, sino, no hubiéramos tenido respuestas en el congreso de la provincia…”.
La declaración del Concejal desató la bronca de algunos habitantes de distritos sanrafaelinos que ellos mismos denominaron “distritos olvidados”. “…Es la intención de un pueblo, que se bancó el frío, el agua, por la falta de actitud para con el pueblo de los señores representantes, no se olviden que también son del sur de la provincia…”, manifestaron los vecinos ante las críticas a los cortes de ruta.
Los vecinos de Punta de Agua consideran un hecho histórico lo sucedido en Gral. Alvear, respecto a la unión de la gente y a la fortaleza que tuvo el pueblo para sostener la lucha. Uno de los aspectos que fue mencionado en todos los testimonios recabados, fue la heterogeneidad de los participantes de los cortes y la horizontalidad que existió en aquellos momentos que compartieron ante el frío y las lluvias. “…En los cortes de ruta estaba desde el empresario, el abogado y el intendente hasta el último peón y todos éramos uno…”, recuerda una autoconvocada de Punta del Agua, y añade: “…El penúltimo día almorzamos todos los que veníamos de Punta del Agua, y estaba el pastor evangélico, los sacerdotes, el dueño de negocio, varios puesteros, y todos éramos uno, no había diferencias y eso fue muy importante y todos festejaron…”.