Tesis doctorales de Ciencias Sociales

APROXIMACIÓN A LA MEDICIÓN DE LA CALIDAD DE VIDA SOCIAL E INDIVIDUAL EN LA EUROPA COMUNITARIA

Mª Noelia Somarriba Arechavala



 


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10.2. El concepto de calidad de vida social versus individual

Nuestro modelo conceptual de calidad de vida, tal y como lo habíamos definido en capítulos anteriores, englobaba tanto aspectos relacionados con el bienestar del individuo como aspectos relacionados con el bienestar social.

La calidad de vida desde la perspectiva del individuo incluía dos dimensiones:

i) Un conjunto de indicadores que reflejaban las condiciones bajo las cuales el individuo desarrolla su vida, de tipo objetivo, a esta dimensión la habíamos denominado como “condiciones objetivas”.

ii) Y una segunda colección de indicadores que intentaban captar lo que conocemos como “bienestar subjetivo”, que recogía las actitudes, valores y percepciones que el individuo tiene sobre las diferentes parcelas que integran su vida. Dentro de este conjunto de indicadores también se recogía información sobre la valoración que el individuo tiene de la labor desarrollada por los gobiernos y políticos y como ésta incidía en su calidad de vida.

Mientras la calidad de vida desde el punto de vista de la sociedad como “ente integrado por un conjunto de individuos”, estaba compuesta por dos dimensiones que intentaban captar la calidad social:

i) Una dimensión dedicada a captar las disparidades y desigualdades dentro de la sociedad y aspectos como la exclusión y la cohesión social, a la que denominamos con el nombre de “desigualdades, exclusión y descohesión social”.

ii) Y una segunda parcela, que recogía las acciones llevadas a cabo por los gobiernos con el fin de incrementar y garantizar la calidad de vida de sus ciudadanos, medida por medio de indicadores tipo gasto, instalaciones, recursos... a la que habíamos nombrado como “medios y recursos”.

Sobre este marco conceptual se trabajaba por medio de un conjunto de 11 “áreas de vida”, que abarcan todos los ámbitos de la vida humana que previamente han sido clasificadas inspirándonos en el enfoque escandinavo [Allardt (1976,1993)] en las “áreas conceptuales”: amar, tener y ser.

Hasta este momento se ha procedido a medir y analizar la calidad de vida en Europa por medio de indicadores sintéticos que si bien englobaban indicadores de todas las dimensiones de nuestro concepto de calidad de vida, tanto a nivel individual como social, estaban más próximos al concepto de calidad de vida desde la óptica del individuo que desde la de la sociedad en su conjunto.

Por ello, con el objetivo de ofrecer una medición lo más adecuada posible del concepto de calidad social proponemos hacer una serie de matizaciones, tanto a nuestro concepto de calidad de vida como a la batería de indicadores inicialmente seleccionada:

En el caso de las dimensiones de medios y recursos y de desigualdades, cohesión y exclusión social, se propone una pequeña batería adicional de indicadores.

Estos indicadores podrían agruparse en dos grupos. Un primer grupo de indicadores dotados de un carácter eminentemente político, y que por ello se han suprimido del análisis hasta este momento. Y un segundo grupo de indicadores que recoge las percepciones que los individuos tienen sobre la calidad de los servicios públicos, de labor desarrollada por los gobiernos y políticos, el grado de confianza en el Gobierno y en las instituciones…

Creación de una dimensión adicional que recoja aspectos esenciales del concepto de calidad social. A esta nueva dimensión las denominaremos calidad social percibida. Estará integrada por una serie de indicadores relacionados con las tensiones y conflictos dentro de la sociedad.

Ciertos de estos indicadores a nivel social guardan un alto grado de correlación con los indicadores recogidos en la dimensión de bienestar subjetivo, a nivel individual, por lo que existirá cierto solapamiento conceptual entre componentes. Esto en cierta manera viene ocasionado porque los conceptos de calidad de vida individual y social están claramente interrelacionados y a pesar de que los distintos enfoques en esta área de investigación tratan de aislar y diferenciar estos conceptos, ambos comparten una filosofía común, pudiendo tan sólo el investigador marcar las diferencias entre ellos en función del objetivo o fin que se le dé a cada uno.

En nuestro estudio, el concepto de calidad social al que hacemos referencia se dirige hacia el ámbito político, aunque enriquecido con un volumen de información de tipo subjetivo que lo mejora y lo complementa.

A continuación se recoge un breve esquema con las dimensiones de nuestro concepto de calidad vida. En ambos círculos se plasman los conceptos de calidad de vida individual y de calidad social a cuya medida nos intentaremos aproximar por medio de los indicadores sintéticos correspondientes.

Ilustración 10 1. Diferencia entre los conceptos de calidad de vida individual y social

Tal y como hemos comentado, con el objetivo de enriquecer y completar nuestro concepto de calidad social, a continuación, se recoge una batería suplementaria de indicadores. En la mayoría de las ocasiones son indicadores que intentan medir o captar el grado de descohesión y desigualdad de la sociedad, las acciones desarrolladas por los gobiernos para aumentar y garantizar la calidad de vida de sus ciudadanos, la valoración que los propios ciudadanos hacen de su calidad de vida o bien de la calidad social percibida que capta el grado de tensiones dentro de la sociedad. Procederemos a enumerar esta batería adicional de indicadores. En el Anexo 3 se recoge información sobre estos indicadores, definición, fuente estadística y referencia temporal.

• Riesgo de caer en la pobreza

• Riesgo de caer en la pobreza de la población mayor de 65

• Gasto en pensiones como porcentaje del PIB

• Gasto en protección social como porcentaje del PIB

• Gasto en política mercado laboral como porcentaje del PIB

• Ratio desempleo mayores

• Ratio desempleo jóvenes

• Ratio desempleo femenino

• Corrupción percibida

• Tasa de abandono escolar prematuro

• Beneficios sociales destinados a la vivienda y a la exclusión social como porcentaje del PIB

• Nº de viviendas sociales por cada 1000 habitantes

• Gasto en protección ambiental como porcentaje del PIB

• Beneficios sociales familia/niños como porcentaje del PIB

• Estabilidad política, puntuación media de los ciudadanos

• Control corrupción, puntuación media de los ciudadanos

• Cumplimiento Ley, puntuación media de los ciudadanos

• Efectividad del Gobierno, puntuación media de los ciudadanos

• Tensiones entre pobres y ricos

• Tensiones entre jóvenes y mayores

• Tensiones entre empleadores y trabajadores

• Tensiones entre hombres y mujeres

• Tensiones entre grupos raciales y étnicos

A la hora de abordar nuestro análisis social versus individual, hemos procedido a clasificar nuestros indicadores o bien como individuales o bien como sociales en las siguientes dimensiones:

A nivel individual:

• Condiciones objetivas

• Bienestar subjetivo

A nivel social:

• Desigualdades, exclusión y descohesión social

• Medios y recursos

• Calidad social percibida

A nivel de componentes la ausencia de indicadores en alguna o algunas de las dimensiones conduce a que sólo formen parte de uno de los dos indicadores sintéticos, del social o del individual. Por ello los indicadores sintéticos no sólo no comparten sus indicadores parciales sino que no tienen en común todas las componentes.

La distribución de componentes en función de si nos referimos al concepto de calidad de vida individual o social se recoge en el siguiente Cuadro:

A parte de los indicadores sintéticos a nivel social e individual, se procederá a estimar un indicador sintético a nivel global con todos los indicadores. Se hace referencia a las componentes del mismo en la última columna del cuadro anterior.

Se han señalado con un asterisco aquellas componentes que son específicas de cada indicador. y que no son comunes.

Recordemos que aunque puede sorprender que por ejemplo el ocio o la vida social no formen parte de nuestro indicador a nivel social, ello viene ocasionado porque en nuestro sistema de indicadores no se recogen indicadores encuadrados en “medios y recursos”, “desigualdades, exclusión y descohesión social” o en “calidad social percibida”. Insistimos que nuestro indicador sintético de calidad de vida a nivel social (ISCVSOCIAL) tiene una funcionalidad de tipo puramente político y no social en un sentido amplio.


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