APROXIMACIÓN A LA MEDICIÓN DE LA CALIDAD DE VIDA SOCIAL E INDIVIDUAL EN LA EUROPA COMUNITARIA
Mª Noelia Somarriba Arechavala
Esta página muestra parte del texto pero sin formato.
Puede bajarse la tesis completa en PDF comprimido ZIP
(448 páginas, 2.91 Mb) pulsando aquí
En la literatura sobre calidad de vida existen un gran número de trabajos que intentan desarrollar modelos conceptuales sobre nuestro objeto de investigación. Por ello, nos nutriremos del conocimiento de otras ciencias, psicología, medicina y sociología principalmente, que han profundizado más en el desarrollo de estos modelos y que nos permitirán reflejar los diferentes planteamientos que existen a la hora de abordar el estudio de la calidad de vida desde una perspectiva más amplia que la que puramente hace referencia a los indicadores de carácter económico.
En el trabajo de Felce y Perry (1995) se proponen cuatro modelos conceptuales diferentes para abordar el estudio de la calidad de vida, perteneciendo los tres primeros al trabajo elaborado por Borthwick-Duffy en 1992. Esta primera clasificación ofrece una panorámica de los posibles conceptos de calidad de vida que darán origen a toda una serie de planteamientos y teorías sobre el concepto.
En los trabajos citados anteriormente se plantea la calidad de vida en base a cuatro modelos:
I. La calidad de vida entendida como las condiciones de vida del individuo.
Ilustración 1 1. Modelo de calidad de vida I, tipo objetivo.
Ladesman (1986) sugiere que existen dos conceptos diferenciados, calidad de vida y satisfacción con la vida. Un posible modelo se recoge en la ilustración anterior, define la calidad de vida como la suma de las condiciones de vida objetivas experimentadas por los individuos, siendo simplemente la respuesta subjetiva a estas condiciones la satisfacción con la vida.
La calidad de vida de un individuo o de un grupo, podría ser medida comparando su situación con la distribución del total de la población. Este modelo se fundamenta en una óptica objetiva.
El segundo de los modelos, vendría caracterizado por:
II. La calidad de vida entendida como la satisfacción experimentada por la persona con dichas condiciones de vida.
Ilustración 1 2. Modelo de calidad de vida II, tipo subjetivo.
En este caso, la calidad de vida se define como sinónimo de satisfacción personal, adoptándose la satisfacción como medida de comparación [Edgerton (1990)]. En este modelo se trabajaría con información puramente subjetiva.
Sin embargo, esta modelización sufre una serie de críticas. Así Holland (1990) establece que una definición de calidad de vida que ignora las condiciones objetivas no provee de una adecuada garantía para los intereses de la gente con mayores desventajas o más vulnerables, por ello Brown et al. (1989) proponen un modelo alternativo en el que la calidad de vida debería analizarse como la combinación de componentes objetivos y subjetivos:
III. La calidad de vida entendida como la combinación de componentes objetivos y subjetivos.
En este modelo la calidad de vida viene definida por las condiciones de vida de una persona junto a la satisfacción que ésta experimenta.
Ilustración 1 3. Modelo de calidad de vida III, tipo objetivo y subjetivo.
En este planteamiento, se recurre tanto a las condiciones de vida de carácter objetivo, material, social... como a las apreciaciones subjetivas del individuo. Por ejemplo, Bigelow et al. (1991) ven la calidad de vida como una ecuación en la que están en equilibrio la satisfacción de las necesidades y que comprende las valoraciones de bienestar junto a los componentes objetivos, como una función de carácter social.
Sin embargo, otros autores sugieren que la calidad de vida debe de comprender las condiciones objetivas y subjetivas y la forma de combinarlos debería ser por medio de la importancia que los individuos dan a los aspectos considerados [Cummins (1992)]. Este planteamiento da origen al último de los modelos que aquí nos planteamos:
IV. Calidad de vida como la combinación de las condiciones de vida y la satisfacción personal ponderadas por la escala de valores, aspiraciones y expectativas personales.
Ilustración 1 4. Modelo de calidad de vida IV, tipo objetivo, satisfacción personal y valores personales.
En este modelo se crea una interacción entre las condiciones de vida objetivas, la satisfacción personal y los valores personales que interactúan a la hora de determinar la calidad de vida.
Por ejemplo, el componente renta no contribuye de la misma manera en la calidad de vida de una persona cuyos valores son no materialistas que en una que sí lo sea.
La capacidad de poner pesos individuales tanto a los componentes objetivos como subjetivos a través de los dominios de la vida, es lo característico de este modelo.
Un ejemplo del modelo anterior lo encontramos en el trabajo de Felce et al. (1995), el análisis de la calidad de vida se hace a partir de descriptores objetivos y de las evaluaciones subjetivas del bienestar físico, material, social y emocional junto a las ponderaciones en función de los valores personales por parte del individuo.
Ilustración 1 5. Modelo de calidad de vida, Felce et al. (1995).
Un modelo habitualmente utilizado en la literatura de calidad de vida es el que se recoge en el trabajo de Campbell et al. (1976), en la siguiente ilustración se reflejan los elementos básicos del modelo:
Ilustración 1 6. Modelo “CASIO”
A este modelo propuesto por Campbell en 1976 también se le conoce como modelo QOL o modelo “CASIO” y se caracteriza por ser lineal y aditivo. Este modelo ha sido empíricamente validado por muchos investigadores como Andrews y Withey (1976) y Michalos (1991). Los elementos que definen el modelo son: las características o circunstancias objetivas de un área, cómo una persona percibe e interpreta esa área, la evaluación personal del área en base a unos estándares y el valor o importancia en relación a su felicidad o bienestar.
A parte de la clasificación que acabamos de recoger, otros autores proponen clasificaciones alternativas a los conceptos de calidad de vida, por ejemplo Dennos et al. (1993), quienes plantean que los enfoques de investigación de este concepto son variados pero podrían englobarse en dos tipos:
1. Enfoques cuantitativos, cuyo propósito es hacer operativa la calidad de vida. Dentro de este enfoque los indicadores son:
- Sociales se refieren a condiciones externas relacionadas con el entorno: salud, bienestar social, amistad, ocio, vecindario y vivienda...
- Psicológicos miden las reacciones subjetivas del individuo a la presencia o ausencia de determinadas experiencias vitales
- Y por último ecológicos, miden el ajuste entre los recursos del sujeto y las demandas del ambiente.
2. Enfoques cualitativos que recoge las experiencias, desafíos y problemas de los individuos.
Otros muchos trabajos plantean teorías y modelos a la hora de abordar la investigación de la calidad de vida, algunos de ellos son:
Galtung y Wirak (1979) que concibieron la calidad de vida como un concepto íntimamente ligado con el desarrollo. Para ellos, el desarrollo debe de estar centrado en el hombre y no en el desarrollo cualitativo o cuantitativo de tipo material, se encuentra centrado en las necesidades humanas.
Maslow (1970) propone “La teoría de las necesidades de Maslow”, como un intento por conocer los elementos que motivan la conducta humana. Desarrolla un modelo en el cual las necesidades humanas son los elementos que motivan la acción y la orientación hacia unas metas.
Michalos (1985) desarrolla “La teoría de las discrepancias múltiples”, parte de una postura inicial: la evaluación personal de una situación está mediatizada por una serie de separaciones, diferencias o discrepancias percibidas al comparar la realidad presente con otras realidades sociales, personales o culturales. Se hipotetiza que tales elementos actúan en una relación de causa efecto entre personas y de diferencias subjetivamente percibidas. Unas diferencias y otras tienen efectos directos en la satisfacción y en las acciones.
Otro trabajo también muy interesante es el modelo conceptual que desarrolla Setién (1993) con el objetivo de derivar un sistema de indicadores sociales aplicado al País Vasco (1993). Esta autora enmarca el concepto y medida de la calidad de vida en un esquema de desarrollo, en el que la satisfacción de las necesidades de los seres humanos se plasma en valores que configuran las metas del desarrollo y definen el grado de calidad de vida.
Los aquí citados sólo suponen una pequeña muestra de la multitud de trabajos que han definido el concepto de calidad de vida y han desarrollado modelos conceptuales con el objetivo de delimitar este concepto.
A continuación planteamos un breve esbozo del que será nuestro modelo conceptual, y que será desarrollado y completado con mayor detalle en capítulos posteriores.
Nuestra investigación se basa en un concepto de calidad de vida que dependerá de: las condiciones objetivas en las que los individuos desarrollan su vida junto a sus propias apreciaciones, el bienestar subjetivo. Es decir, combinaremos información objetiva y subjetiva, sin embargo los marcadores de dichos tipos de información se agruparán en componentes que nos permitirán una aproximación a la medición del concepto de calidad de vida, siendo objeto e investigación en esta tesis la obtención de sistemas de ponderación adecuados para dichas componentes.
A continuación se recoge un breve esquema de nuestro planteamiento:
Ilustración 1 7. Modelo conceptual de calidad vida. Elaboración propia