EL DESARROLLO DE LAS HABILIDADES DE INVESTIGACIÓN EN LA FORMACIÓN INICIAL DEL PROFESORADO DE QUÍMICA
Lutgarda López Balboa
El desarrollo de una universidad más científica que permita preparar profesionales competentes, capaces de acometer con eficiencia y eficacia las tareas que la profesión requiere y a la vez contribuya al desarrollo científico-técnico de la humanidad, constituye un reclamo global de la sociedad actual. Cada vez más gobiernos, instituciones y organizaciones de diversos países comprenden que para lograr su objetivo de desarrollo, se hace necesario fomentar el principal recurso de cualquier país, los recursos humanos (1).
En el proceso de formación de profesores se exige cada día más la preparación de los estudiantes en la actividad científico-investigativa, como un requerimiento imprescindible para la formación de profesionales, lo cual se evidencia global y ampliamente en los documentos de la V Conferencia Iberoamericana de Educación, así como en la V Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno.
En el Documento Base de la Declaración de Buenos Aires titulado “La educación como factor del desarrollo” (2), se señalan, entre las once prioridades educativas del mundo actual las siguientes:
• Favorecer la movilidad de graduados y profesores universitarios para la realización de actividades académicas y de investigación.
• Mejorar la enseñanza de las materias más directamente relacionadas con la actividad científico-investigativa.
Al respecto en la Declaración de Bariloche, documento de la V Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, se plantean entre los aspectos fundamentales que deben contemplar las políticas educativas en los países iberoamericanos: “El estímulo desde la más temprana edad, de la curiosidad y la capacidad inquisitiva, que constituye punto de partida para el desarrollo de la investigación científica y tecnológica” (3).
En Cuba desde el siglo XIX, destacados intelectuales y pedagogos como José Martí, Félix Varela, Enrique José Varona, José de la Luz y Caballero, entre otros, vislumbraron y argumentaron la necesidad de una enseñanza científica en la que el niño fuera capaz de aprender en su libre interacción con la naturaleza y la sociedad, mediante la experimentación, de la búsqueda independiente. Al respecto, nuestro Héroe Nacional José Martí expresó: “Que la enseñanza científica vaya como la savia en los árboles, de la raíz al tope de la educación pública” (4).
Lo anteriormente expuesto evidencia la necesidad de que los maestros tengan una preparación científica.
A partir del triunfo de la Revolución en 1959, se han realizado ingentes esfuerzos por desarrollar una educación científica, gratuita y asequible al pueblo en todos los rincones del país. En la Tesis sobre Política Educacional se reconoce el papel que juega la investigación en el modelo educativo deseado donde se plantea: “No hay verdadera enseñanza superior sin actividad de investigación. Ella forma parte del proceso enseñanza-aprendizaje y tiene gran valor en la formación profesional.
La investigación debe además, contribuir al plan de desarrollo socioeconómico y posibilita la participación activa del personal docente y de los estudiantes en la solución de los problemas de la ciencia y la técnica” (5).
Lo anteriormente expuesto ha estado presente en la formación del profesorado en Cuba. A partir de los años 70, la formación pedagógica ha sufrido cambios sustanciales en función de la necesidad de elevar cada vez más la calidad de la formación del personal docente y de incorporar a esta los logros de la revolución científico-técnica. En el año 1976, se integraron en un solo subsistema todos los centros pedagógicos del país: El Subsistema de Formación y Perfeccionamiento del Personal Pedagógico y se continuó con mayor fuerza la política de elaboración y unificación de los planes de estudio. (6).
Así en el año 1977 se diseñó el plan de estudio "A" para dar respuesta a la creación de la Licenciatura en Educación, referida a las diferentes especialidades. En este se exigió el nivel de duodécimo grado en el ingreso. El contenido de este plan de estudio proporcionó una información científica de mayor nivel; se incorporaron nuevas disciplinas y se inició el trabajo científico de los estudiantes.
Las investigaciones realizadas por el Ministerio de Educación (MINED) y los Institutos Superiores Pedagógicos (ISP) en el período comprendido entre los años 1977-1979 para validar la efectividad del plan de estudio “A” determinaron una serie de insuficiencias relacionadas principalmente con la centralización de la concepción del proceso docente-educativo y la falta de precisión en las tareas que debía enfrentar el profesional para resolver los problemas más generales y frecuentes de su profesión. Todo lo anteriormente expuesto determinó la necesidad de elaborar un nuevo plan de estudio "B".
En el año 1979 se creó en el Ministerio de Educación (MINED), una comisión nacional de perfeccionamiento con el objetivo de elaborar un nuevo plan de estudios para Licenciados en Educación en los cursos regulares diurnos, que se denominó Plan "B". En este se incorporaron nuevas asignaturas, se amplió aún más el contenido científico informativo y tuvo una duración de cinco años lectivos. Se continuó con la realización del trabajo científico-estudiantil a través de los trabajos de curso y de diploma.
Los resultados alcanzados en las investigaciones controladas y masivas realizadas por el Ministerio de Educación (MINED) y los Institutos Superiores Pedagógicos (ISP) para validar la efectividad del plan “B” en el período comprendido entre los años 1981-1988 permitieron determinar científicamente la falta de equilibrio existente entre la formación académica, la laboral y la científico-investigativa de los estudiantes, lo que de hecho no garantizaba la formación de las habilidades profesionales del egresado, que como docente, debía responder a las necesidades económicas y sociales del país.
Los resultados de las investigaciones, en especial las del perfeccionamiento de planes y programas B, permitieron diagnosticar y pronosticar, unido al trabajo científico-metodológico, un nuevo plan de estudio y programa "C".
En el curso 1987-1988 se dio inicio al trabajo de las comisiones de carrera encargadas de la elaboración de un nuevo plan “C”, sobre la base de perfeccionar la integración armónica de lo académico, lo laboral y lo investigativo, surgiendo así, en el año 1990 un nuevo plan de estudio denominado "C". En este aparece por vez primera una concepción sistémica del componente investigativo, el cual parte de que el profesional de la educación sea capaz de enfrentarse a los problemas educacionales que se presentan en la escuela y la comunidad, para contribuir con su acción a la transformación positiva de la realidad circundante. Se instrumenta su desarrollo por todas las disciplinas mediante diferentes actividades investigativas. Se continúa el trabajo científico-estudiantil a través de los trabajos extracurriculares, de curso y de diploma.
Sin embargo, todavía resultaba insuficiente la integración entre los componentes académico, laboral e investigativo, la relación interdisciplinar y las orientaciones metodológicas para la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en los diferentes niveles estructurales del proceso docente-educativo, por lo que fue necesario elaborar nuevos planes de estudio a partir del año 1992.
Desde esta perspectiva los nuevos planes de estudio se diseñaron teniendo como columna vertebral la vinculación con la escuela desde los primeros años de la carrera. En esencia: “En todo el proceso de formación, tanto el centro pedagógico como la escuela, asumen la responsabilidad compartida de planificar, orientar y controlar la actividad práctica de los estudiantes, la cual se desarrolla en estrecha relación con las actividades académicas de cada disciplina y con las tareas investigativas que ejecutan en todos los años de la carrera” (7).
En esta dirección el componente investigativo se enriquece en su concepción a partir del desarrollo, desde los primeros años, de habilidades para la solución de tareas y problemas de carácter psicopedagógico, sociológico, instructivo y educativo que se les presentarán a los futuros profesores en su preparación académica o durante su práctica laboral. El logro de estas habilidades implica la preparación de los estudiantes para enfrentar el trabajo independiente, la capacidad de enfocar sus ideas y actuar con iniciativa creadora (8).
En los planes de formación de profesores de la carrera Licenciatura en Educación, Especialidad Química se inicia el trabajo científico-estudiantil a través del componente investigativo, además, se especifican las habilidades de investigación a desarrollar por los egresados, que aparecen plasmadas en el modelo del profesional del plan de estudios C. Sin embargo, no aparece reflejado cómo propiciar la formación y el desarrollo de estas habilidades en la integración de los tres componentes.
El análisis de los planes de estudio de formación de profesores de nivel medio en Cuba desde 1959 hasta la actualidad nos evidencia la importancia que tienen la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en los estudiantes de la Licenciatura en Educación.
Más recientemente con el aumento de las necesidades de profesores en algunos territorios, a partir del curso escolar 1998-99, el estudiante desde los primeros años comienza a vincularse desde muy temprano con la escuela, aumentando el tiempo para la práctica laboral responsable, por lo que el componente investigativo adquiere una connotación especial en los nuevos planes, al propiciar que los estudiantes desde los primeros años, desarrollen habilidades para el trabajo científico durante su práctica docente, vinculándose a la solución de los problemas reales existentes en el medio donde actúan, es decir, la escuela, la familia y la comunidad (9).
La importancia que ha tenido en Cuba la formación de maestros capaces de desarrollar una práctica transformadora se demuestra en los trabajos realizados por diferentes autores.
Ignacio Ramírez (10) en su tesis doctoral, concluye como resultado esencial que la concepción del sistema de trabajo científico de los planes de estudio B no satisface plenamente las exigencias actuales para desarrollar en los estudiantes de los Institutos Superiores Pedagógicos hábitos y habilidades para el trabajo científico y que, para ello, se hace necesario la preparación de los profesores en formación.
Asimismo María Alfonso García (11) considera que la integración que deviene como meta formativa de la Educación Superior Cubana y se contextualiza en los límites que a la Universidad le corresponde desempeñar, requiere un tratamiento didáctico que implique modelar relaciones entre docencia-investigación-profesión en cualquier secuencia, espacio temporal de la carrera, bajo la tesis central de la necesidad del tratamiento de lo científico no solo como trabajo investigativo, sino como estilo de pensamiento que posibilite emprender las acciones para el enfrentamiento de las condiciones cambiantes del mundo actual.
En este ámbito Tania Villarejo Co et al. (12) propone un diseño del componente investigativo para la formación del profesor de Química que contempla las habilidades de investigación a formar y desarrollar: Explorar, detectar el problema científico, definir y formular un problema, objetivo e hipótesis, realizar búsqueda de información, procesar información, argumentar teorías y métodos, planificar-proyectar-organizar, organizar mentalmente toda la actividad científica (diseño), ejecutar lo planificado, aplicar, recopilar, sistematizar, comunicar los resultados, elaborar estrategias para introducir los resultados, evaluar la información y la crítica reflexiva.
De una manera integradora Lisett Ramos et al. (13) propone una serie de principios de procedimientos para la formación de las habilidades de investigación a nivel de colectivo de año, disciplina y asignatura, en los estudiantes de 1ero y 2do años de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química a través del componente investigativo.
María Victoria Chirino (14) propone un diseño del componente investigativo para la carrera Matemática-Computación del Instituto Superior Pedagógico “Enrique José Varona”, considerando que entre los componentes académico, laboral e investigativo existe una interrelación y una jerarquía dinámica en dependencia de la actividad que se desarrolle. En el diseño del componente investigativo para esta carrera contempla los siguientes aspectos: Las tareas, el diseño teórico, los métodos de investigación, las acciones investigativas, el informe final y la evaluación.
Valorando todos los fundamentos de las investigaciones analizados anteriormente la autora de este trabajo (15) propone un diseño del componente investigativo para la formación del profesor de Química que contempla las habilidades de investigación a desarrollar en cada uno de los años de la carrera.
En los trabajos señalados en el ámbito nacional con relación al componente investigativo en la formación inicial de profesores consideramos que en ellos no han estado presentes los fundamentos metodológicos para el desarrollo de las habilidades de investigación y una concepción sistémica de estas, por lo que no se plantean el sistema de acciones para la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en la formación de profesores, el cual debe trabajarse adecuadamente en los diferentes niveles estructurales del proceso docente-educativo: carrera, año, disciplina y asignatura.
En el marco de la formación de las habilidades de investigación en los estudiantes de nivel medio Nancy Mesa Carpio (16) concibe como resultado final un proyecto para incorporar a los alumnos de los Institutos Preuniversitarios de Ciencias Exactas a la actividad científica que contiene tres grandes grupos de habilidades de investigación: Habilidades para la búsqueda y procesamiento de la información científica, habilidades para el planeamiento de la actividad de investigación y habilidades propias de la ejecución y divulgación de la investigación.
Desde esta perspectiva Liudmila Alamo (17) comprueba la efectividad de la formación de determinadas habilidades de investigación en los estudiantes de secundaria básica a través de la elaboración de un programa complementario de Química que vincula la historia de la Química con la historia de la localidad señalando las siguientes: Realizar búsqueda bibliográfica, elaborar fichas de contenido, elaborar resúmenes, realizar actividades experimentales, manipular útiles de laboratorio, confeccionar, utilizar e interpretar tablas de datos, explicar y elaborar informe del trabajo experimental.
Asimismo, Antonio Fuentes (18) investiga en el preuniversitario, a través de la elaboración de una propuesta metodológica para el programa de Química correspondiente al nivel de 11no grado las habilidades de investigación y las habilidades intelectuales que guardan relación con las operaciones lógicas del pensamiento de los estudiantes, considerando las siguientes: Analizar y sintetizar, comparar, abstraer, generalizar y definir conceptos.
Más recientemente José Zilberstein (19) señala que en estudios realizados acerca del desarrollo de habilidades en estudiantes del nivel medio superior se aprecian en estos pocas posibilidades para poder comparar, clasificar, ejemplificar, valorar, argumentar, definir, solucionar problemas y plantear hipótesis entre otras, resaltando que la didáctica debe profundizar en aquellos procedimientos didácticos que propicien el desarrollo de habilidades.
Considerando que los estudiantes sujetos de la investigación serán profesores de Química, entendemos oportuno analizar lo que se plantea en el ámbito de la didáctica de las ciencias experimentales.
Daniel Gil (20) analiza los resultados de las investigaciones realizadas por diferentes autores en el área de la Didáctica de las ciencias, en el ámbito internacional sobre las preconcepciones, las cuales han demostrado como resultados principales los siguientes: Ha cuestionado rotundamente la enseñanza por transmisión de conocimientos ya elaborados [Gil (21)], ha favorecido en particular el encuentro con planteamientos constructivistas que se han convertido en un consenso emergente en la enseñanza de las ciencias [Driver (22) y Novak (23)], las aportaciones de la historia y la filosofía de la ciencia [Matheus (24) e Izquierdo (25)], han provocado la génesis de nuevos modelos de enseñanza-aprendizaje de las ciencias que abarcan coherentemente todos los aspectos del proceso enseñanza-aprendizaje de las ciencias y que apuntan a concebir el aprendizaje como el resultado de la investigación dirigida a partir del tratamiento de problemas que puedan interesar a los alumnos. La investigación didáctica [Hodson (26)] ha mostrado que los estudiantes desarrollan mejor su comprensión conceptual y aprenden más acerca de la naturaleza de la ciencia cuando participan en investigaciones científicas, siempre que haya suficientes oportunidades y apoyo para la reflexión, es decir, apuntan hacia un APRENDIZAJE DE LAS CIENCIAS MEDIANTE LA INVESTIGACIÓN.
En el ámbito internacional algunos autores han abordado esta problemática entre los que podemos citar: Caballer Sebrane (27) señala que en el caso de las investigaciones sobre la Didáctica de la Física y la Química en la enseñanza secundaria es necesario abordar investigaciones sobre el desarrollo de aptitudes y actitudes científicas en los alumnos.
Sánchez Blanco (28) analiza que para la planificación de las unidades didácticas que conforman el currículo, dentro del contenido procedimental y específicamente en el marco metodológico de la Didáctica de las Ciencias, es necesario considerar el desarrollo de las habilidades de investigación en los estudiantes de secundaria las cuales incluyen procesos básicos y procesos integrados. Como procesos básicos consideran las siguientes: Observar, clasificar, medir, predecir y comunicar y como procesos integrados: Experimentar, interpretar datos, formular hipótesis e identificar y controlar variables.
Pro Bueno (29) ha realizado investigaciones sobre la introducción de los contenidos procedimentales en ciencias en la enseñanza secundaria, considerando dentro de la clasificación de los contenidos procedimentales las habilidades de investigación las que relacionamos a continuación: Observar de objetos y fenómenos, medir objetos y cambios, clasificar objetos y sistemas, reconocer problemas, formular hipótesis, identificar y controlar de variables, elaborar diseños experimentales, seleccionar técnicas de investigación, analizar datos y establecer conclusiones.
Autores como Cañal (30) y Porlán (31) han elaborado diferentes modelos didácticos donde la investigación se considera como el principio didáctico vertebrador en el currículo.
En esta dirección Gil (32), Driver (33) y Furió (34) han elaborado modelos de enseñanza-aprendizaje de las ciencias como investigación basados en programas de actividades.
Las investigaciones citadas en el área de la didáctica de las ciencias toman en consideración la propuesta de habilidades de investigación que se deben desarrollar en los estudiantes, lo que evidencia que los profesores de ciencias deben propiciar su aprendizaje en el estudiante.
En resumen todas las investigaciones analizadas con anterioridad nos permiten constatar la necesidad de la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación tanto en los estudiantes de la enseñanza media (secundaria y preuniversitario) como en los futuros profesores.
En nuestro país estas necesidades se tienen en cuenta y en los documentos sobre el Trabajo Metodológico del Ministerio de Educación (35), se establece la exigencia al personal docente de todas las enseñanzas de alcanzar resultados superiores en el trabajo metodológico y científico, en función de resolver los problemas principales de la escuela, así como la utilización de los resultados de la actividad científica y se indica para los Institutos Superiores Pedagógicos el perfeccionamiento de la actividad de investigación de los estudiantes desde el 1er año.
Desde la perspectiva cubana en la concepción del componente investigativo se potencia la formación de habilidades básicas que le permitan al futuro egresado investigar y solucionar los problemas de la escuela que se encuentran en su práctica laboral, por tanto se hace necesario formar un profesional que trabaje con métodos científicos para resolver la problemática de la escuela por la vía de la investigación, donde sean capaces de diagnosticar problemas vinculados con la práctica profesional en el centro donde realizan el componente laboral y darle solución; para ello se hace necesario desarrollar habilidades de investigación durante toda su formación.
En este ámbito Luis Ignacio Gómez, Ministro de Educación de Cuba en el II Congreso Internacional de la Asociación de Pedagogos de Cuba resaltó que los estudiantes de los Institutos Superiores Pedagógicos, reclaman mucho conocer sobre la Metodología de la Investigación Pedagógica. En una asignatura no se le puede dar solución a la necesidad de los momentos actuales de elevar la calidad de la educación a través de la investigación.
Lo planteado con anterioridad ha estado presente en nuestra actividad y a partir del año 1995 y hasta el año 1997 se inició un proceso de investigación en la Licenciatura en Educación, Especialidad Química que contempló:
• El desarrollo de un diagnóstico inicial a los profesores de Química en el curso escolar 95-96 graduados de los planes de estudio A y B donde se pudo constatar que los profesores no investigaban porque no dominaban los fundamentos teóricos del proceso de investigación, aunque reconocen la necesidad de que la investigación debe ser una actividad cotidiana de su práctica profesional. En estos planes no se contemplaba en el currículo la asignatura Metodología de la Investigación.
• La aplicación de encuestas a un grupo de 20 estudiantes de 5to año de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química que culminaron sus estudios con el plan C en el curso escolar 95-96 cuyos resultados nos permitieron precisar el poco desarrollo de las habilidades de investigación, fundamentalmente las relacionadas con: Determinar y solucionar el problema, realizar búsqueda bibliográfica, realizar resúmenes y formular hipótesis así como se ha evidenciado la poca independencia cognoscitiva en cuanto a la realización del trabajo investigativo y del informe final de investigación.
• Encuestar a una muestra de cincuenta estudiantes de la Facultad de Educación de la Universidad de Cienfuegos en el curso escolar 96-97 nos permitió determinar un grupo de insuficiencias en relación con la formación de las habilidades de investigación de los estudiantes, sobre todo las relacionadas con: Detectar problemas científicos y confeccionar instrumentos de medición científica. Además existe poca participación de los alumnos en las Jornadas Científicas Estudiantiles y en las actividades extracurriculares. Resulta también insuficiente el trabajo con los estudiantes de alto aprovechamiento docente.
• La toma de criterios de expertos utilizando la Técnica Delphi, la cual fue aplicada en el curso 96-97 y demostró la necesidad de desarrollar las habilidades de investigación en la formación del Licenciado en Educación así como las acciones que propicien su formación y desarrollo a nivel de carrera, disciplina, colectivo de año y asignatura.
• La realización de 16 observaciones en el curso escolar 96-97 a los estudiantes de 1ero y 2do años de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química durante su estancia en el componente laboral, que nos permitieron precisar que no existe una total integración del componente investigativo a lo académico y laboral. Este solo es realizado por las asignaturas del ciclo pedagógico. Además no se toma en cuenta, en todos los casos el banco de problemas de la escuela para el desarrollo de las investigaciones científicas. Las habilidades de investigación trabajadas en el componente laboral fueron: Realizar búsqueda bibliográfica y aplicar diferentes instrumentos.
Todo lo anteriormente expuesto nos lleva a la necesidad de plantearnos como problema científico de investigación el siguiente: ¿Cómo formar y desarrollar las habilidades de investigación en los estudiantes de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química?
Para ello planteamos las siguientes preguntas de trabajo:
¿Cuáles son los criterios contemporáneos sobre la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en los diferentes enfoques curriculares para la formación de profesores?
¿Cómo se ha proyectado la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en la formación de profesores de nivel medio en Cuba?
¿Cuáles son los componentes esenciales a tener en cuenta para la concepción de una propuesta didáctica para el desarrollo de las habilidades de investigación en los estudiantes de la Licenciatura en Educación?
El objeto de la investigación es el proceso docente-educativo de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química y su campo de acción es la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en el currículo para los estudiantes de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química.
El objetivo es la elaboración de una propuesta didáctica para la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación en los estudiantes de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química.
La hipótesis de la investigación es la siguiente: Una propuesta didáctica basada en que la investigación como eje de articulación caracterice, organice y evalúe coherentemente el componente investigativo de los estudiantes de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química en su integración con los componentes laboral y académico, debe propiciar la formación y el desarrollo de las habilidades de investigación.
La investigación se ha desarrollado por medio de las siguientes tareas científicas:
1. Determinar las tendencias en el proceso de formación y desarrollo de las habilidades de investigación en la formación inicial del profesorado en Cuba.
2. Determinar los fundamentos teóricos relacionados con el proceso de formación y desarrollo de las habilidades de investigación que permita considerar la investigación como eje de articulación.
3. Elaborar una propuesta didáctica para el desarrollo de las habilidades de investigación.
4. Desarrollar un estudio constatativo-transformador de factibilidad práctica que permita evaluar la propuesta didáctica para el desarrollo de las habilidades de investigación en los estudiantes de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química.
La investigación se sustenta en un enfoque integral de los métodos de la investigación pedagógica, ya que posee un método general (dialéctico) y además se aplican los métodos teóricos y empíricos para la obtención, procesamiento y análisis de los resultados.
Dentro de los métodos teóricos empleamos los siguientes: Los métodos histórico y lógico, el método hipotético-deductivo, el método de la modelación, el método de investigación sistémica y como procedimientos el análisis y la síntesis, la abstracción y la inducción y la deducción (36).
En el caso de los métodos empíricos utilizamos el método experimental, específicamente el experimento constatador- transformador, el método de la observación, complementado con el uso de técnicas tales como el criterio de expertos aplicando la Técnica Delphi, la triangulación metodológica, de datos y de investigadores, la encuesta, la entrevista, el análisis de documentos y el diario el profesor, el método de la medición auxiliado por los procedimientos estadísticos descriptivos empleándose cuatro características numéricas: la determinación de cuartiles, la mediana y la moda así como la distribución de frecuencias procesados mediante el paquete estadístico SPSS para Windows 2000.
El aporte teórico de esta tesis consiste en: Una concepción didáctica para el proceso de formación y desarrollo de las habilidades de investigación basada en la consideración de que la investigación como eje de articulación caracteriza, organiza y evalúa coherentemente el componente investigativo de los estudiantes de la Licenciatura en Educación, Especialidad Química en su integración con los componentes laboral y académico; además se aporta la definición de habilidades de investigación y su clasificación en habilidades básicas de investigación, habilidades propias del área de la ciencia particular y las habilidades propias de la Metodología de la Investigación Pedagógica y una definición de currículo para el proceso de formación y desarrollo de las habilidades de investigación.
El aporte práctico y la novedad científica de esta tesis es la propuesta didáctica para la formación y el desarrollo de habilidades de investigación que puede ser introducida en la Licenciatura en Educación, Especialidad Química, a nivel de carrera, disciplina, año y asignatura. Esta propuesta didáctica también puede ser generalizada a otras carreras pedagógicas.
Seguidamente para garantizar un fácil acceso a todas las partes del trabajo se explicará de forma general cómo se ha estructurado el mismo.
En el capítulo I se realiza un análisis de la fundamentación teórica para el proceso de formación y desarrollo de las habilidades de investigación en la formación inicial del profesorado, donde se resaltan como aspectos esenciales los siguientes: La investigación y el currículo, la formación de profesores de nivel medio en Cuba, la fundamentación didáctica y psicológica de las habilidades de investigación.
En el capítulo II se fundamenta la propuesta didáctica para el desarrollo de las habilidades de investigación en la formación inicial del profesorado en Cuba sobre la base de la consideración de la investigación como eje de articulación, la cual se estructuró a partir de los siguientes presupuestos: Contextualización del encargo social en la formación inicial del profesorado, establecimiento de los fundamentos teóricos y metodológicos para su implementación práctica, premisas que posibilitan un nuevo modo de actuar y la adecuación de la propuesta en los diferentes niveles estructurales del proceso docente-educativo.
En el capítulo III se fundamenta la metodología de investigación empleada en el desarrollo del trabajo, los métodos y las técnicas empleadas para la recogida de los datos así como el análisis de los resultados.
Finalmente se ofrecen las conclusiones y recomendaciones de este trabajo.