José Ignacio Reyes González
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Este capítulo tiene en la tesis una función metodológica y su naturaleza es empírico-analítica. Se reflejan las vías que se siguieron para estructurar una experiencia curricular interpretando la concepción didáctica explicada en el capítulo anterior.
Sus objetivos son: la aplicación del modelo Historia Social Integral en dos unidades del programa de Historia de Cuba de secundaria básica, y la fundamentación de las transformaciones que se operan en los alumnos del grupo en que se llevó a efecto la experiencia, desde los puntos de vista del desarrollo del pensamiento y de la vinculación a su contexto social.
Como fase anterior a la aplicación de la experiencia, el investigador principal llevó a cabo una diagnóstico de 39 docentes de Historia de secundaria básica del municipio de Las Tunas, con el objetivo de conocer cómo piensan la historia y su enseñanza. Para obtener información sobre este tema se realizaron una encuesta (ver anexo 5) y una entrevista grupal cuyos resultados esenciales son los siguientes:
1- Desconocen las principales corrientes historiográficas que han influido en este siglo, así como las que se desarrollan actualmente incluyendo la historia social.
2- Identifican la diversidad de elementos que integran la historia, pero reconocen que centran su atención en lo político e insisten menos en lo social y cultural en sus clases.
3- Ninguno ve a la historia solo como pasado, pero algunos se quedan a nivel de la relación pasado-presente.
4- Un 35% refiere que la historia permite copiar en el presente lo hecho por el hombre ante sus problemas pasados, y un 31% la utilidad que le otorga está en lo informativo y cultural y no tanto para orientarse en la vida social.
5- La enseñanza la dirige más a lo conceptual que a lo procedimental y actitudinal.
6- No sistematizan en la enseñanza la utilización de métodos activos y participativos, dentro de ellos, el investigativo.
7- Utilizan poco las fuentes históricas sociales: museos, archivos, lugares históricos, bibliotecas, testimoniantes, personas de la comunidad y la propia familia del escolar.
Del diagnóstico se pudo inferir que los docentes tienen insuficiencias en su preparación epistemológica, que se hace más grave por la degradación que se va produciendo en el proceso de enseñanza –aprendizaje al transitar de cómo lo piensa el profesor a cómo se lo enseña a sus alumnos y cómo este lo aprende.
La aplicación del modelo didáctico Historia Social Integral estuvo a cargo del equipo de investigadores en todas sus fases, a saber: diagnóstico del programa y de los conocimientos previos de los alumnos, el diseño curricular y su organización, por los tres miembros del equipo; la fase de desarrollo por la docente, mientras los otros dos investigadores observaban de manera participativa; y la interpretación de los datos recogidos por los instrumentos, en un análisis reflexivo y crítico, en el que participó todo el equipo.
Para obtener la información necesaria sobre la transformación que se daba en los escolares durante la experiencia se utilizaron las siguientes técnicas de investigación: a) observación participante (de todas las actividades que realizaban los alumnos y la profesora), b) en cuesta (a docentes y alumnos), c) entrevista (a los alumnos, a los directivos de la escuela, a familiares y personas de la comunidad), d) diario de campo (que llevaban el investigador principal, la profesora del ISP y la docente), e) diario del investigador principal, f) análisis de textos,(documentos curriculares programáticos y normativos), g) análisis de la producción escrita de los alumnos, h) triangulación de datos para la interpretación cualitativa de la información que aporta cada instrumento, que posibilita el análisis reflexivo y crítico.
Resultados del diagnóstico del programa:
• El programa no incluye en sus explicaciones teórico metodológicas criterios para el tratamiento de la ciencia histórica, como lo hace por ejemplo en el plano psicológico.
• No hay un balance equilibrado de los aspectos económicos, políticos, sociales y culturales, predominando los elementos de orden político, militar, diplomático y la actividad de las personalidades revolucionarias en las diferentes etapas de lucha de nuestro pueblo, que se refleja en el tratamiento que recibe la historia local.
• Aunque el programa refleja en sus objetivos la intención de que el alumno aprenda a investigar no es completa la variedad de fuentes sociales que sugiere.
• Hay pocos elementos referidos a la historia social, en particular sobre la vida cotidiana de los diferentes sectores sociales, la vida familiar, así como sobre las normas y costumbres de cada período histórico que aportan a la conformación de la identidad nacional.
Diagnóstico de los conocimientos previos de los alumnos:
El diagnóstico de los alumnos del grupo buscaba información sobre el modo que se representan la historia, la motivación y la utilidad del aprendizaje histórico, cómo aprenden la historia y cómo este aprendizaje los vincula con el contexto social.
Las técnicas empleadas fueron la encuesta (ver los Anexos # 1, 2 y 3) que al realizar el análisis cualitativo de sus respuestas posibilitó utilizar la entrevista grupal. Ambas técnicas se complementaron para aportar los elementos caracterizadores del estado real de los alumnos.
1- Se representan la historia como pasado y los que la comprenden en su relación pasado-presente, solo lo hacen a través de la concreción de la vida de ciertas personalidades.
2- Le dan más predominio al contenido político de la historia, que al resto de los elementos que la integran; y le confieren más protagonismo a las personalidades que a las masas populares, aunque reconozcan el papel de estas últimas.
3- Un 25% no incluye a todas las personas como parte de la historia y un 38% se excluye de la misma.
4- Tienen una insuficiente representación de la naturaleza del conocimiento histórico al no saber identificar sus elementos fácticos y lógicos.
5- Poseen insuficiencias en las habilidades para localizar, procesar y exponer el material histórico.
6- Más del 80% expresa que ante todo les interesa la asignatura para aprobarla; reconocen la preparación cultural y política que les aporta, pero un 45% considera poca o ninguna su utilidad para la vida práctico-social.
7- Se declaran, de manera general, ignorantes sobre la historia de sus familias, con algunos conocimientos muy fragmentados sobre familiares cercanos y casi nulos de los más alejados en el tiempo.
8- Hay desconocimiento de personas destacadas en las esferas económica, social y cultural, y si conocen alguna no pueden precisar sus acciones más relevantes.
9- No participan en las actividades de las instituciones culturales de la comunidad, excepto cuando son parte de alguna tarea escolar.
10- Muestran disposición para aprender historia incluyendo elementos de la historia familiar y comunitaria y para participar protagónicamente en la reconstrucción de la misma.
Contextualización de la experiencia.
El grupo de 9no. grado seleccionado pertenece a la ESBU “Jesús Suárez Gayol”, que tiene características bastantes similares en los aspectos básicos al resto de los grupos del grado. Está compuesto por 35 alumnos: 19 muchachas y 16 varones, con edades entre 13 y 15 años, una asistencia a clases estable y puntual, con rendimiento promedio en las diferentes asignaturas incluyendo Historia, algunos con dificultades no graves en la disciplina escolar, con un dinamismo propio de la edad, aunque un poco morosos en la actividad de estudio, pero entusiastas en las actividades pioneriles.
La docente que sigue la experiencia no sólo es la profesora de Historia del grado sino la guía base de pioneros de la escuela y despliega un cierto liderazgo entre sus alumnos. El investigador principal y la docente del ISP no han trabajado con anterioridad a la experiencia directamente con el grupo de escolares, pero mantienen relaciones con la escuela a través de la práctica profesional de los estudiantes del pedagógico.
La escuela no cuenta con buenas condiciones materiales, las aulas son pequeñas y como es una construcción en parte de madera se ha deteriorado por el paso del tiempo, pero la mantienen pintada e higiénica. Se nutre en parte de alumnos de algunos barrios de la ciudad con limitaciones socio-económicas, lo que implica dedicación del profesorado para alcanzar sus objetivos educativos.
Se utilizó el programa de Historia de Cuba 9no. grado, que consta de 9 unidades que hacen un recorrido por la historia nacional desde la comunidad primitiva hasta la actualidad, cuyos objetivos se vieron reforzados con la experiencia.
Los investigadores discutimos en cuáles unidades sería factible la introducción del modelo, de modo que el alumno contara con algunos familiares vivos que pudieran servir de fuente de información para el aprendizaje de una historia que vincule lo familiar con lo comunitario y lo nacional, determinándose que las unidades 7 y 8, que abarcan el período histórico de 1935 a 1958 reunían esas condiciones.
La dirección de la escuela facilitó cambios en el horario, de modo que se pudieran utilizar, de acuerdo a las necesidades, turnos dobles, sesiones de 4 turnos, y turno sencillo. Los alumnos utilizaban horas de la sesión contraria a clases para ejecutar las actividades derivadas de las investigaciones, tales como: indagaciones, intercambio con los investigadores, organización de sus tareas individuales o colectivas, y otras, aunque hubo algunas que se hicieron en horario nocturno.
Criterios metodológicos generales sobre los que se sustentó el proceso de enseñanza aprendizaje de las unidades 7 y 8 motivo de la experiencia:
• El alumno investiga la historia familiar, comunitaria y nacional para formar un pensamiento histórico en la dialéctica pasado-presente-futuro.
• Se propicia el desarrollo de las habilidades en los escolares para la comprensión histórica, priorizando estrategias didácticas investigativas.
• Se vincula al alumno con el contexto social como vía para el desarrollo de una personalidad integral.
• Aunque los investigadores prediseñan las actividades docentes esto se ajusta con flexibilidad en el momento de su implementación, dándole participación a los escolares.
• La metodología fue construida paso a paso a partir del diagnóstico de los conocimientos previos, los objetivos trazados y los resultados que se alcanzaban, que suponían cambios en las diferentes etapas.
La experiencia tiene por objetivos analizar el proceso formativo durante el cual los alumnos aprenden historia nacional a partir de la relación con la historia familiar y comunitaria, mediante la comprensión pasado-presente-futuro, y su incorporación social a la comunidad.