CAPÍTULO 2. La formación y evolución de la concepción del desarrollo de Julio Le Riverend Brusone.

La concepción de Julio Le Riverend Brusone sobre el desarrollo, forma parte de la tradición de pensamiento que se produce desde los países subdesarrollados, y se construye alrededor del análisis sobre los problemas estructurales que caracterizan este proceso en los mismos.

Esta concepción no se encuentra sistematizada en textos sobre el tema sino dispersa en sus libros y artículos. Es el resultado de los estudios e investigaciones realizadas sobre los procesos históricos, sociales y económicos, en tanto parte importante del objeto de la Historia Económica que por muchos años investigó Le Riverend. Precisamente el objetivo de este capítulo es exponer el proceso de formación y maduración del pensamiento económico sobre el desarrollo del autor, en el contexto de su obra, en el marco de la evolución del pensamiento económico cubano y universal, así como en el entorno práctico que refleja el mismo.

Para dar cumplimiento a este objetivo hemos señalado en nuestro estudio la presencia de tres etapas en las que se puede apreciar lógicamente el proceso de formación y desarrollo de tal concepción. La primera etapa, que denominamos periodo formativo, se despliega desde sus primeros años de vida hasta la década del cuarenta en que culminan básicamente sus estudios universitarios. En la misma tienen lugar las primeras motivaciones que lo impulsan a ocuparse de los problemas políticos, económicos y sociales de Cuba, así como la apropiación de los primeros elementos teórico-metodológicos para sus análisis. A partir de sus inquietudes políticas, su participación en la lucha revolucionaria estudiantil cubana, su exilio en Francia y sus estudios universitarios, es en esta etapa que se produce necesariamente el acercamiento a éstos problemas y comienza a formarse su concepción económica. Dos parecen haber sido sus grandes inspiradores intelectuales en este tiempo, Marc Leopold Benjamín Blosch y José Martí. Las ideas fundamentales del periodo se revelan en trabajos que realiza en la universidad como La Utopía de Tomás Moro en América y Ensayo sobre Historia del Derecho Cubano, este último, donde desde la jurisprudencia se vincula al estudio de los problemas económicos.

La segunda etapa, es ubicada desde la década de los años cuarenta hasta finales de la década del cincuenta del siglo XX, cuando directamente relacionado con la labor de investigación histórica que desempeña Le Riverend al graduarse, comienza el despliegue de su concepción sobre las estructuras económicas y sociales, así como sobre su dinámica en Cuba, como parte del análisis sobre los procesos históricos de desarrollo de la nación cubana. Es en esta etapa que Le Riverend transita de estos temas al estudio de los problemas económicos como objeto específico a través de su incursión en la Historia Económica de Cuba. Estudia el problema de la crisis estructural como obstáculo al desarrollo; identificando su causa, bajo la influencia martiana y del pensamiento revolucionario cubano en general, en las relaciones de dependencia respecto a los Estados Unidos, pero no llega todavía a descubrir en toda su hondura la dialéctica que origina tales problemas, ni a plantear, por tanto, soluciones radicales al mismo. Esta interpretación estuvo condicionada por los supuestos teóricos y metodológicos desde los que comenzó a realizar sus estudios sobre el tema. En este sentido se destacan las influencias de las concepciones teórico-metodológicas reflejadas en la revista de los Annales, particularmente dentro de ellas las de la obra de Marc Blosch, las del estructuralismo histórico cepalino, así como la positivista de la escuela histórica y sociológica cubana. Influencias que recibe a partir del influjo de las concepciones de interpretación de la historia como la historia global, propia de los annales y la de la totalidad marxista que lo llevan a acercarse al pensamiento económico, como fuente auxiliar de la dinámica interpretativa. Los orígenes de la economía cubana, la Historia Económica de Cuba que escribe como parte de la Historia de la Nación Cubana dirigida por Ramiro Guerra y Reseña de la economía cubana y sus problemas, entre otras, constituyen obras representativas de este período.

En la tercera etapa, desde el triunfo de la Revolución Cubana hasta finales de los años ochenta, se produce la maduración de su concepción sobre el desarrollo. El estudio de este problema se realiza a partir de la asunción progresiva y creativa de los postulados de la teoría marxista-leninista, particularmente de su Economía Política y de posiciones cercanas a la misma, presentes en la producción teórica nacional e internacional. A partir de ello desde 1959 hasta mediados de los años setenta, se produce la maduración de su entendimiento del proceso de desarrollo en Cuba en estrecha relación con su activa labor en el proceso de la Revolución cubana, desde cuya praxis transformadora se enriquece su concepción sobre las posibles salidas al subdesarrollo. Las obras que fundamentalmente muestran las peculiaridades de este entendimiento son Historia Económica de Cuba, Conclusiones sobre la Reforma Agraria en Cuba, A manera de Prólogo al libro Monopolios norteamericanos en Cuba, Problemas de la formación agraria de Cuba. Siglos XVI y XVII, entre otras.

Desde los años setenta hasta finales de los ochenta, los estudios sobre América Latina alcanzan mayor protagonismo en sus valoraciones sobre el desarrollo y el subdesarrollo, sobre todo a partir de los fundamentos teóricos que desde diferentes perspectivas se ofrecían sobre el particular en toda la región. Ello se aprecia en las investigaciones que realiza sobre los problemas estructurales que causan las crisis permanentes de las economías y las sociedades latinoamericanas y que refleja en sus obras: Acerca de la América Latina en la correlación de fuerzas a escala internacional, La idea del desarrollo social en la obra de José Martí y Neoesclavismo en el siglo XX.