Roberto Jiménez Gómez
El análisis de la red de política pública llevó a la necesidad de establecer los diferentes ámbitos y alcances teórico, metodológico e instrumental de ese enfoque. Se ha podido apreciar que éste análisis es de utilidad para conocer los actores y la red, para desentrañar sus objetivos y explicar las formas de comportamiento e interacciones entre los diferentes actores sociales. Unido al valor que por sí mismo tiene lo anterior, siguiendo el enfoque de gobernanza de las redes de políticas se considera que hay rasgos sustantivos que explican el surgimiento y desarrollo de las redes de actores sociales, más allá de la fricción teórico metodológico.
Congruente con los desarrollos y enfoques recientes, se considera que la existencia cada vez más común de redes de política, y de forma específica redes de política para la reforma del sector eléctrico de Costa Rica, son el resultado de la disminución de los límites absolutos entre los sectores públicos y privados. Lo anterior es producto de la relativa problemática que sobre la gobernabilidad del sector eléctrico se ha tenido en el país desde hace dos décadas, en donde los sectores que han querido realizar las reformas han visto limitada su capacidad para conducir con éxito una reforma de carácter neoclásico.
Hay dentro de la dinámica actual una cierta ambigüedad de parte de los diferentes poderes del Estado costarricense. Por una parte, las redes de política son en su sentido más amplio nuevos estilos de gobierno, en donde la interacción, la cooperación y la divergencia se dan en una estructura participativa no jerárquica. Sin embargo, se ha podido apreciar que conforme la dinámica de la red establece diseños de reforma del sector eléctrico distinta a la que el Ministro de Ambiente desea, se tiende a modificar y convertir en una instancia regida por la jerarquía.
Las nuevas orientaciones del papel de la red de políticas públicas parten de nuevas relaciones entre los actores, en donde los intercambios, coordinación, control y adopción de decisiones tienden a ser democráticos. En el caso de la red de políticas públicas para la reforma del sector eléctrico en Costa Rica se tienen una serie de condiciones que no favorecen esos papeles de la red. Por una parte, se tiene una representación poco democrática y cerrada de los actores; en segundo lugar, la participación y discusión activa y propositiva de los actores es afectada cuando el ente rector considera que las propuestas no van ajustadas a sus orientaciones, lo que debilita la función de la red y descalifica las propuestas que puedan surgir posteriormente. Otro elemento adicional es que de una red que en teoría parte de ser no jerárquica, conforme se da la dinámica, el ente rector la tiende a modificar y a llevarla a un carácter jerárquico que hace que las formas de interacción y cooperación se vean afectadas, dejando las diferencias para ser subsanadas en otra arena política. Este hecho distorsiona el papel que en la nueva lógica de la relación entre lo público y lo privado se tiende a tener, posiblemente llevando a discrepancias que podrían poner en riesgo el apoyo de la reforma en la nueva arena política de la Asamblea Legislativa.
La existencia de una red de políticas para la reforma del sector eléctrico en donde actores públicos y privados participan, muestran que los recursos de los actores sociales expresados en conocimientos del sector, medios económicos, existencia de instancias de participación surgidas por las normas y las costumbres, así como la capacidad de gestión de las organizaciones, se encuentran distribuidos asimétricamente, creando de forma parcial la posibilidad para que éstos puedan interactuar, proponer, acordar o discrepar. Esto plantea todo un reto para el Poder Ejecutivo y Legislativo, pues las relaciones de poder ya no son monopolio del Estado, requiriendo de formas distintas conducir los procesos sociopolíticos para el logro de las propuestas de reforma del sector eléctrico y en general de otros sectores.
Unido a lo anterior, la visión y posiciones de los actores sociales están siendo influenciadas por las corrientes y por los intereses que diversas empresas internacionales tienen para posicionar sus intereses en el sector eléctrico del país. Lo anterior unido a las transformaciones socioeconómicas que ha tenido la sociedad costarricense lleva a plantear procesos más complejos de interacción social, se dan más pugnas por objetivos en conflicto y cambios importantes en los valores de ciertos actores sociales. Esto ha llevado a cuestionar parcialmente los supuestos de la presente investigación.
En Costa Rica por medio del análisis del caso de la RPRSE, se ha podido establecer que el uso de la red como herramienta metodológica es de utilidad. Adicionalmente, se concluye que la forma como los actores sociales tienden a interactuar, relacionarse y usar los recursos y capacidades a su disposición para el logro de sus objetivos, hace ver que se han ido estableciendo nuevas formas de interacción para la definición de políticas publicas, en donde los entes gubernamentales son un actor más que generalmente lidera, pero no define de forma antojadiza las políticas y en caso que lo pretenda, la viabilidad sociopolítica de dicha acción es baja.
Hay similitudes entre las propuestas de grupos de actores sociales a favor de la reforma neoclásica y las del gobierno. Por su parte, las divergencias significativas entre grupos y con el gobierno, hacen ver que las diferentes instancias de participación por medio de comisiones e instancias de deliberación creadas son espacios en donde se ejerce el poder para orientar y posicionar determinadas propuestas de reforma.
Por otra parte, ha existido la percepción de que las redes son instancias que disminuyen el poder del Estado y lo transfieren a los actores privados miembros de la red; esto no se da totalmente en el caso que nos ocupa. Esto por cuanto, el gobierno a través de las diferentes instancias responsables sigue ejerciendo su autoridad o influencia para convocar, incluir, excluir o replantear la dinámica de interacción e incluso el contenido de la propuesta de reforma cuando no es de su complacencia.
Pese a que en la red han tenido la posibilidad de participar actores sociales representativos del sector eléctrico, el direccionamiento del MINAE es totalmente alineado a las posiciones e intereses de las cámaras empresariales del país; esto se corrobora con la participación del ministro actual de forma activa en las propuestas de UCCAEP del 2005. Esta situación genera un desbalance en las relaciones de poder en la red, algo que expresa los fenómenos que de forma similar se están dando en la sociedad costarricense, en donde las diferentes instancias de participación y decisión han estado siendo tomadas por los sectores proclives a los procesos de reforma neoclásica.