Marisol Isabel Martínez Iglesias
En esta segunda fase, se parte de los principios didácticos que se tratan en la enseñanza de lenguas extranjeras en Cuba Antich, López y Gandarias (1986) como conductores de la enseñanza. A continuación se explican los de mayor significación para la enseñanza de lenguas extranjeras.
1. Principio de cientificidad: el lenguaje es fenómeno social, una relación pensamiento - cultura, que se expresa por medio de la relación entre factores lingüísticos y extralingüísticos; el lenguaje es un medio de comunicación.
2. Principio del aprendizaje educativo: la selección de los contenidos incluye elementos relacionados con comportamientos, conductas, valores y normas de convivencia. El sentido del respeto y reconocimiento de lo propio y lo de otros, los contenidos relacionados con los elementos culturales, históricos y sociales. Además, las formas en que se analizan tales contenidos, la diferenciación de lo esencial y lo secundario; la sensibilidad hacia los fenómenos del lenguaje y sus valores estilísticos.
3. Principio de la percepción sensorial directa: se logra a través de la presentación de los contenidos lingüísticos y socioculturales y del uso de recursos visuales, además de los auditivos mediante el uso de los sentidos. Se apela a diversos medios audiovisuales y estratégicos que el profesor utiliza como herramientas de apoyo, en dependencia de la relación que exista entre estos y el contenido a tratar.
4. Principio de la sistematización: extracción de las estructuras por parte del profesor para verlas aisladamente y, luego, en las situaciones de comunicación real llevarlas a los alumnos y volver a ellas para sistematizarlas hasta lograr formar las habilidades que se planifican.
5. Principio de la accesibilidad: los conocimientos que poseen los alumnos sirven de base para introducir los nuevos.
6. Principio de la asequibilidad: cada etapa tiene sus objetivos de acuerdo con el nivel de desarrollo de los alumnos, para lo que la interrelación entre las actividades docentes, el nivel de conocimientos, de habilidades y el desarrollo intelectual de los alumnos constituyen la fuerza motriz del proceso de enseñanza.
7. Principio de la asimilación activa y consciente: las motivaciones e intereses de los estudiantes deciden la selección del tema objeto de estudio. La participación activa y consciente del alumno en la clase de lengua constituye el eje de su aprendizaje.
8. Principio de la consolidación o solidez en la asimilación de los conocimientos: el paso de percepción sensorial directa a la etapa de generalización y luego a la aplicación, lo que implica la consolidación de habilidades.
9. Principio del estudio independiente: el desarrollo de técnicas y recursos que faciliten al estudiante, como mínimo, la posibilidad de leer textos, desarrollo de los aspectos orales y la escritura en el idioma, etc.
Los componentes didácticos en su concepción sistémica establecen vínculos que determinan su estructura y su comportamiento. En el caso específico de esta investigación, el proceso de enseñanza-aprendizaje del español como lengua extranjera es el eje central, visto como actividad de comunicación, donde inciden en los alumnos tanto el medio social que los acoge, el contexto del aula y las necesidades propias para resolver problemas concretos.
Tanto el encargo social que tienen las universidades, como los intereses y necesidades de los alumnos, son nexos que están presentes desde el ingreso de los alumnos hasta su egreso satisfactorio. Es preciso, entonces, contribuir mediante la adaptación al medio y a la convivencia y la aceptación de sus valores más sensibles, aspectos que van más allá y abarcan otros momentos tanto explícito o implícito del proceso docente-educativo. Será necesario partir de qué implica para el alumno aprender y adquirir una lengua extranjera en contextos multiculturales.