Juvencio Jaramillo Garza
Cuando se presentan las oportunidades de inversiones algunos gerentes optan por tomar decisiones basadas en la teoría del tradeoff, algunos otros por la teoría de M&M, pero en ambas predomina el objetivo de que la empresa tenga las oportunidades de crecimiento que faciliten generar una rentabilidad financiera aceptable para la empresa.
La deuda según Jensen (1986) obliga a los administradores de las empresas con fuertes flujos de efectivo y oportunidades de crecimiento para liberar flujos de efectivo. Siguiendo con esta lógica las empresas conservadoras deben tener fuertes oportunidades de crecimiento. Si sus oportunidades de crecimiento son débiles y permite flujos de efectivo, éstos deben optimizar un alto apalancamiento. Siguiendo a otros tales como Minton y Wruck (2001) señalan que usan la razón de valor de mercado a valor en libros como un proxy para oportunidades de inversiones (Smith y Watts, 1992; Jung, Kim y Stulz, 1996).
2.3.3 Determinantes del conservadurismo financiero: evidencia de bajo apalancamiento y de alto efectivo en empresas.
El conservadurismo financiero se define como la estrategia financiera de una empresa que tendrá bajos niveles de endeudamiento y a su vez altos flujos de efectivo con los cuales financiará su crecimiento con recursos propios, disminuyendo de este modo el endeudamiento empresarial. Además, esa restricción de recursos financieros puede provocar que la empresa tenga que declinar a efectuar inversiones rentables, planteando un problema de infrainversión.
Las PYMES generalmente operan con bajos niveles de endeudamiento, esto por las dificultades que tienen para accesar a las fuentes de financiamiento ocasionadas por el racionamiento de crédito que existe y al mismo tiempo por los altos flujos de efectivo. De acuerdo con Iona, Leonida y Ozkan (2004) son factores determinantes de la probabilidad de que las empresas adopten una política financiera de conservadurismo, y ello depende de:
A) La forma en como se administre la propiedad: los dueños tienen mayor grado de control sobre la administración cuando hay altos flujos de efectivo en la empresa.
B) El board composition: a mayor participación de directores respecto a los dueños de la empresa se implementan políticas conservadoras financieras de efectivo.
C) La concentración de la propiedad: a mayor participación por directores no ejecutivos se implementan políticas conservadoras financieras de efectivo en la empresa.
Existen empresas que por varios años siguen una política financiera conservadora en cuanto a su estructura financiera o lo que es igual a una política constante de bajo endeudamiento y efectivo alto. Una de las causas que hace que las PYMES tengan como política bajos niveles de endeudamiento es el racionamiento del crédito por parte de los acreedores, quienes son los que facilitan los recursos financieros. Una gran cantidad de empresas tienen, de una forma constante, un nivel de endeudamiento excesivamente bajo (Graham, 2000; Minton y Wruck, 2001 y Lemmon y Zender, 2002).
Cuando las empresas son capaces con sus recursos propios de financiar su crecimiento son clasificadas como empresas conservadoras y por lo tanto disminuyen sus razones financieras de endeudamiento. Las PYMES en los mercados no anglosajones, un problema que enfrentan es que asumen un “finance gap” o brecha financiera, ya que poseen mayor problema para accesar a los mercados de capitales (Holmes y Kent, 1991).
Tiene dos elementos la brecha financiera: uno es que la disponibilidad de fondos es más limitada para las PYMES, o su costo es mayor la cual representa a la brecha de la oferta, y el otro elemento es el uso exclusivo de la deuda, como consecuencia de un limitado conocimiento de la oferta de fondos y pasivos financieros disponibles y del desconocimiento de las ventajas e inconvenientes de la deuda la cual representa a la brecha de conocimiento. A raíz de estos dos elementos del “finance gap”, la fuente más importante de financiamiento a largo plazo para las PYMES es el autofinanciamiento y en caso que ésta no cubra todas las necesidades se recurriría a la intermediación bancaria.
Señalan Minton y Wruck (2001) que la teoría de la jerarquía financiera explica los determinantes de las políticas financieras conservadoras. Los beneficios derivados de la deducción fiscal de los intereses de la deuda de numerosas empresas se encuentran infraendeudadas, ello es consistente con una política conservadora de endeudamiento (Graham, 2000).
Algunos autores sugieren que las empresas desean la flexibilidad financiera en las inversiones para evitar costos excesivos y así no aumentar los fondos externos. La flexibilidad financiera puede lograrse a través de políticas financieras conservadoras (Myers, 1984; Myers y Majluf, 1984).
2.3.4 Clasificación de empresas financieramente conservadoras
Iona, Leonida y Ozkan (2004) exponen que la teoría del pecking order, expone que las empresas deben primero agotar los fondos internos disponibles y entonces luego agotar los recursos financieros externos más caros que es la deuda. Las empresas son conservadoras de efectivo, empresas conservadoras de apalancamiento y empresas financieramente conservadoras (que es la mezcla de las dos anteriores), éstas son las tres categorías en que clasifican a las empresas.
El operar con una política de bajos niveles de endeudamiento se presenta algunas veces por la probabilidad de que las empresas tengan problemas de restricciones financieras, esto expresado por el racionamiento del crédito por parte de los acreedores, a su vez estas restricciones pueden generar que la empresa se vea en la necesidad de renunciar a ejecutar inversiones rentables para la empresa. El conservadurismo financiero permite la posibilidad de mejorar la rentabilidad de la empresa a través de altas reservas de flujos de efectivo y altas inversiones y/o bajos niveles de endeudamiento.