IV. 3 Análisis Estadístico de 1992 a 1994

Partiendo de la base de datos general el resultado de la regresión fue el que se muestra en el siguiente cuadro:

En primer lugar la asociación negativa de la alternancia con el ingreso, nos indica que entre menos ingreso per cápita tenga la población, habrá mayores probabilidades de cambios en el partido que gobierna es municipio, es decir habrá mayor probabilidad de alternancia. Si la población no observa y refleja una mejora en su calidad de vida como en el desarrollo de la propia comunidad en general, existe una mayor propensión a cambiar de partido político en las elecciones siguientes, presentándose entonces el triunfo de un partido con gobierno alternativo.

Aunque es importante mencionar que se ha dado el caso de seis municipios de los analizados (San Pablo Apetatilán, Calpulalpan, Coaxumulco, Mazatecochco de José María Morelos, Contla de Juan Cuamatzi y Xaloztoc), donde se ratifica este supuesto, el menor ingreso per cápita en la población provocó que para las siguientes elecciones la gente votara por otra opción política, seguramente en busca de un incremento mayor en la calidad de vida o tal vez creyendo las promesas de campaña que suelen ofrecer los candidatos con el fin de obtener el mayor número de votos para ganar la elección. De estos seis municipios cuatro tuvieron alternancia emergente y dos alternancia consolidad, el resto de los municipios opto por la continuidad otorgándole su confianza al mismo partido político en las siguientes elecciones.

La asociación positiva entre Alternancia y Obra pública indica que, aunque haya mayor obra pública en la comunidad esto no garantiza la permanencia del partido político gobernante en la siguiente elección, es decir, de igual manera puede presentarse la alternancia, y esto sin lugar a duda tiene una explicación lógica en la medida en que los pobladores buscan siempre las mejores ofertas de campaña, que puedan aportar mejoras importantes en la infraestructura municipal y en la satisfacción de sus demandas en general. Pareciera ser que la población considera que el partido saliente ha hecho su esfuerzo de gestión de recursos sin embargo, optan por otro partido y su candidato buscando un esfuerzo extra en la gestión de recursos lo que se vería directamente reflejado en el municipio y en beneficio de sus habitantes. En este caso también los mismos seis municipios citados para la variable anterior, optaron por la alternancia y el resto de los municipios de la entidad, confiaron en la continuidad de la gestión de recursos públicos al mismo partido político.

En este periodo, la asociación negativa entre alternancia en los ayuntamientos y coincidencia política con el partido gobernante a nivel estatal indica, que si el partido o coalición que gobierna a nivel estatal no es el mismo partido que gobierna en los ayuntamientos en ese momento, existen mayores probabilidades de que en la elección siguiente persista esta diferencia. Esto nos reafirma que el partido que gobierna el Estado, tendrá mayores posibilidades de nuevamente ganar aquellos municipios donde gobierna un presidente municipal que comparte su filiación política, en la medida en pueda ser que existen una mejor comunicación entre estos niveles de autoridad garantizando el apoyo para el triunfo de ese partido en las siguientes elecciones. Sin embargo, se dio el caso de seis municipios que presentaron alternancia y no coincidencia política con el gobierno estatal, 4 fueron de alternancia emergente y dos con alternancia consolidada, el resto de los municipios analizados presentaban efectivamente coincidencia política en ese momento con el partido que gobernaba la entidad.

Esta asociación negativa, reafirma el supuesto de que aunque un partido gobierne a nivel estatal e invierta por decirlo así, en el triunfo de su partido en las siguientes elecciones a nivel ayuntamientos, no necesariamente esto garantiza que sea así, incluso, habiendo hecho uso hipotéticamente del aparato del estado, es posible que se presente la alternancia.

En relación al dato de marginación y su asociación negativa con la alternancia, resulta casi de manera natural que entre mayores sean los índices de marginación que se presenten en la comunidad, será también mayor la propensión que tendrán los pobladores a buscar alternativas políticas en las elecciones, es decir, opciones de gobiernos diferentes que les permitan acceder a mejorar su nivel de vida en general. Si bien el supuesto anterior es lógico, también es posible afirmar que el hecho de que se cambie de partido en el gobierno no necesariamente garantiza el desarrollo, lo cierto es que en muchos casos, la marginación de las comunidades se da independientemente de la alternancia en el gobierno. Aunque el dato de gasto de inversión en obra para este periodo indica una mejora en la infraestructura municipal, esto no necesariamente indica a su vez, que haya una mejora en la calidad de vida de los habitantes. Esto debido a que los indicadores que se utilizan para calcular el índice de marginación (CONAPO:2000) no sólo hacen referencia a aspectos de infraestructura urbana y vivienda, si no también a aspectos de carácter sociodemográfico.

Los seis municipios que en este periodo presentaron gobiernos de alternancia, no necesariamente por ello tuvieron menos marginación, se hizo obra pero esto no satisfizo la demandas de la comunidad, por lo tanto no podemos afirmar que haya habido desarrollo probablemente crecimiento si, pero no desarrollo como tal.