2.6. Del gradualismo a una transformación rápida en los procesos de industrialización

2.6.1 El segundo Plan Quinquenal al Gran Salto hacia Adelante: (1958-1962)

A pesar de ciertos cuellos de botella en el crecimiento económico e industrial de China a mediados de la década de 1950, las propuestas para el Segundo Plan Quinquenal mostraban un cierto optimismo en virtud de los resultados económicos positivos alcanzados durante los periodos previos. Las nuevas propuestas no pretendían modificar el patrón de industrialización, sino profundizar en los avances previos y continuar con la construcción de una “industria pesada” como el corazón y promotor del desarrollo de la economía nacional. Mediante esta política se buscaba, no solo producir la maquinaria, equipo y materiales que respondiesen a las necesidades de la industria, sino además, alentar la producción de bienes de consumo e incrementar el nivel de vida de la población

No bien se había echado andar el Segundo Plan Quinquenal cuando por razones políticas y en la búsqueda de mejores y más rápidos resultados en lo económico, se propone, bajo el liderazgo de Mao Tsedong, la Estrategia del Gran Salto Adelante (GSA), con la que, sin abandonar las grandes líneas propuestas en el Plan, se abandona la mecánica de una transformación gradual hasta entonces vivida, se sustituye por una transformación acelerada hacia el socialismo, y se aplican una serie de políticas con una fuerte desviación hacia la izquierda. Políticas que van a impactar, de una manera decisiva, las instituciones hasta entonces vigentes. La nueva estrategia le va a asignar un rol prioritario a la industria pesada y se proponen objetivos muy ambiciosos para fomentarla a fin de que en un tiempo relativamente corto se de alcance a los países más industrializados de occidente y lograr la transformación del sistema socialista a una etapa superior de desarrollo. Para el logro de ese objetivo, bajo la conducción del liderazgo Maoísta, se propusieron las siguientes medidas:

- Movilizar recursos humanos y materiales a la industria pesada, sobre todo aquellos que eran subutilizados y/o estaban ociosos;

- Promover la flexibilización del sistema de planeación central y tornar menos rígido el excesivo control sobre la industria;

- Aplicar medidas a fin de eliminar totalmente la propiedad privada en la industria urbana e incrementar la concentración industrial del Estado;

- Reducir al máximo las diferencias entre el campo y la ciudad, entre campesinos y trabajadores industriales, por lo que se aplican medidas tendientes a proletarizar el trabajo intelectual y promover la participación de los trabajadores en la dirección industrial;

- Promover medidas descentralizadoras, y en ese contexto, impulsar una política de desarrollo rural basado en pequeñas industrias con un bajo desarrollo tecnológico, a la vez que se establecían empresas medianas y grandes más modernas en las ciudades (política que fue llamada: “caminando en dos piernas”);

- Promover cambios en el campo de un régimen de propiedad colectivo a uno “comunitario” con el objetivo de eliminar los vestigios potenciales de propiedad privada y reducir la diferenciación social (entre los trabajadores del campo y la ciudad, del trabajo intelectual y el manual, de los administradores y obreros, etc.) a través del trabajo conjunto y la unificación de las colectividades existentes;

- Como una continuidad de esta política en el área defensiva, y complementario al programa de industrialización, es posible considerar el programa del “tercer frente”, en el que, a pesar de sus altos costos, se consideraba la localización de las plantas industriales en lugares remotos a fin de evitar ser afectadas ante un inminente ataque nuclear por las potencias “imperialistas”.

Asimismo la búsqueda del fortalecimiento del sector de la industria pesada tuvo un impacto significativo en la organización rural y en las relaciones del centro con las zonas rurales. Por su importancia habremos hacer mención de dos de esas políticas cuya influencia fue determinante en el desempeño industrial e institucional durante este periodo: las “comunas populares” y las “medidas de descentralización” :

A. Desde el punto de vista político las “comunas populares” le permitían al gobierno avanzar hacia la erradicación de la propiedad privada en el campo y “avanzar” hacia una sociedad “sin propiedad”, es decir, al comunismo. En lo económico, le lleva a aprovechar al máximo la abundante mano de obra en el campo (incluyendo el trabajo de la mujer), dado que esta fuerza de trabajo ociosa no era lo suficientemente aprovechada para la producción industrial. El objetivo de la comuna no consistía en producir solo alimentos para la población urbana, sino también producir materias primas para abastecer a la industria; bajo el Slogan de: “tomar el acero como el vínculo clave” (“take steel as the key link”) se obliga a cada comuna de todo el país a establecer objetivos para la producción de acero y construir millones de pequeñas plantas y minas utilizando métodos atrasados de producción: “60 millones de personas fueron movilizados en la campaña de “abrir hornos en el traspatio”.

B. Congruente con la política de involucrar a la gran masa de la población al cumplimiento de objetivos políticos e industriales, se aplicaron medidas descentralizadoras. En lo político una decisión de esta naturaleza perseguía otorgarle un mayor poder de decisión a las provincias a fin de reducir el poder y el control de los líderes centrales (contra los cuales Mao se enfrentaba durante este periodo). En lo económico perseguía darle mayor agilidad al proceso de toma de decisiones y mejorar la aplicación de las políticas de industrialización. Estas medidas “descentralizadoras” se concretaron en que :

- Las empresas propiedad del Estado, bajo el control del ministerio industrial, fueron transferidas a la administración provincial y local. El número de empresas subordinadas al gobierno central se redujo a 1,200 en 1958 y su participación en la producción industrial como porcentaje del total nacional se redujo de un 40% al 14%.

- Se les concedió a las autoridades locales un poder mayor en el control y dirección de la inversión, así como, determinar los volúmenes de producción.

- Se les autorizó a los gobiernos locales la potestad de reducir o incrementar impuestos. Como resultado de esta política el gobierno central redujo su participación de un 75% a un 50% de la captación.

- Se autorizó la transferencia de las utilidades generadas por las empresas en una proporción del 20% para las autoridades locales y el 80% al gobierno central.