7.5.2 Las empresas no estatales en el contexto de las nuevas políticas

Fuera de los planteamientos generales de política industrial y a pesar de los pronunciamientos y acciones a favor de una economía de mercado y de anunciarse de manera explícita un tratamiento no discriminado a los diversos tipos de empresas, durante los primeros años de este periodo, no se implementó una política que de manera particular se dirigiera a favorecer a los sectores no estatales y privados fuera de los que ya existía con anterioridad a 1993, incluso, aunque en un grado menor, se continuaron aplicando una serie de regulaciones y políticas discriminatorias en contra de estas empresas, particularmente, en las empresas de propiedad privada. Entre estas medidas destacan, por ejemplo, las trabas burocráticas para el establecimiento de empresas privadas, la persistente acción depredatoria de los gobiernos locales en contra de estas empresas, la restricción a los créditos para empresas que no son de propiedad estatal, entre otras. En el mismo sentido no se favoreció el establecimiento de un sistema jurídico- legal que enmarcara sus acciones y definiera los derechos de propiedad de estas empresas, situación que resultaba, a todas luces necesaria para su buen funcionamiento dado que al enmarcarse en un contexto de una economía de mercado se requería que los derechos de propiedad quedasen claramente estipulados y se soportara en un marco jurídico inequívoco.

A pesar que durante casi toda la década de 1990 se continuó con un estatus de propiedad poco claro para la industria de Poblados y Villas (ECPV) y se carecía de una clara definición jurídica para las empresas de propiedad privada, el sector de la industria no estatal, fue el más dinámico durante toda esta década, lográndose los mayores niveles de participación en términos de producción, empleo y exportaciones, entre otros rubros económicos, tal y como se muestra en el apartado siguiente.