CAMBIO INSTITUCIONAL EN LA REPÚBLICA POPULAR DE CHINA
SU INFLUENCIA EN EL SECTOR INDUSTRIAL
José Salvador Meza Lora
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El desempeño de las empresas de propiedad colectiva ha sido altamente significativo desde la reforma. El hecho de que la propiedad de estas empresas radique de facto en los gobiernos locales, les había proporcionado privilegios no factibles para las empresas que no eran de carácter público, al mismo tiempo, el estar sujetas a los dictámenes del mercado y operar con fuertes restricciones presupuestarias hacía que su supervivencia dependiera mas de su eficiencia y competitividad que del soporte estatal. Ambos aspectos, combinados con un medio ambiente económico e institucional favorable que se expresaba en una mayor descentralización, autonomía administrativa y financiera en las provincias y en las empresas, en la aplicación parcial de arreglos de mercado, en la apertura de zonas económicas especiales, etc., dieron como resultado la emergencia de este sector como uno de los más importantes y dinámicos con una importancia creciente para el desarrollo industrial y el crecimiento económico. Entre 1980 y 1995 la producción total de las empresas de poblados y villas creció a una tasa anual del 30%. Para 1995 participaban con poco menos del 40% del valor de la producción industrial total y empleaban cerca de 130 millones de personas. Sus exportaciones habían tenido un crecimiento sobresaliente al crecer su contribución del 16.9% en 1988 al 43.3% para el año de 1995. Desde el punto de vista institucional, hasta antes de 1994, estas empresas eran las que mejor expresaban la transición y la coexistencia de mecanismos de planificación y de mercado. Al convergir en estas empresas el Estado (en su nivel local) y el mercado (aunque fragmentado) se establecieron “reglas del juego” de tipo institucional, algunas de ellas informales, que buscaban enmarcar las nuevas relaciones entre los diversos actores económicos y políticos a fin de aprovechar las oportunidades que ofrecía el nuevo contexto. Por su naturaleza las empresas colectivas se van a caracterizar por el establecimiento de mecanismos corporativistas, es decir, por la aplicación de fuertes vínculos con los gobiernos locales. Con fundadas razones, algunos estudiosos le conceden una gran relevancia al apoyo brindado por los gobiernos locales a estas empresas en cuanto a su financiamiento, apoyos fiscales, provisión de insumos, protección contra empresas de otras provincias y del exterior, etc. La situación de privilegio que disfrutaban estas empresas durante este periodo, gracias a este apoyo, contrastaba con el tratamiento dado a las empresas de propiedad privada muchas de las cuales, para evitar las restricciones y discriminación a que eran sujetas y ganar acceso a los beneficios, establecieron alianzas con los gobiernos locales a fin de aprovechar las ventajas de aquellas. A partir de la segunda mitad de la década de 1990 se visualizaban tiempos difíciles para las empresas colectivas. A diferencia del periodo anterior en que se habían beneficiado del carácter “transitorio” de la economía y de la “coexistencia” de los viejos y nuevos arreglos, durante esta nueva fase, al definirse el establecimiento de una “economía de mercado socialista” y la preeminencia del mercado en la asignación de recursos las empresas privadas y aquellas que son propiedad de extranjeros que juegan con las reglas que establece el mercado se vieron mayormente estimuladas, contrariamente, hubo fuertes presiones para que se reconvirtieran las empresas de carácter público. Al ir madurando el mercado y homogenizarse las reglas del juego entre las diversas empresas se incrementa la competencia entre ellas, por lo tanto, las empresas colectivas que gozaban de los privilegios de la transición fueron perdiendo paulatinamente sus ventajas iniciales, mientras tanto, las empresas de propiedad privada y extranjera fueron ganando una mayor presencia.
El análisis de algunos indicadores económicos de fines de la década de 1990 vienen a confirmar lo anterior:
- Sin dejar de considerar la importancia de su participación en el Valor de la Producción Industrial Total (VPIT) se expresa una disminución relativa de las ECPV en dicha participación. Si bien habían tenido una participación creciente durante la primera mitad de la década, su decrecimiento posterior fue significativo. Para el año de 1996 las empresas de propiedad colectivas participaban con el 39.4% de la producción industrial total, sin embargo, para el año de 1998 su participación había decrecido a un 38.4% y para 1999 al 35.37% en el VPIT.
- Se presenta una disminución en las tasas de crecimiento del número de empresas colectivas. Después de haber mantenido tasas crecientes en el número de empresas colectivas de 2.9, 19.5 y 23.9% para los años 1991, 1992 y 1993 respectivamente. A partir de 1994 se acelerará un decrecimiento en el establecimiento de este tipo de empresas como se observa en la gráfica anexa.
Gráfica VII. 3
Fuente: Zhang Houyi, “Reporte sobre el desarrollo de empresas privadas en China” citado por Guilles Guiheux, “The incomplete Crystallisation of the Private Sector”, China Perspectives, Num. 42, Julio- Agosto 2002, p.30
- Si bien la participación de las empresas colectivas (ECPV) en la creación de empleos había sido muy espectacular durante la primera mitad de la década de 1990, de generar 92.65 millones de empleos en 1990 se incrementó a 135 millones para el año de 1996, decreció en un 3.4% para 1997 y en un 3.9% para el año de 1998. Mientras tanto las empresas colectivas urbanas tuvieron un decrecimiento de 4.6% para 1997 y de un 32.6% para 1998.
Las presiones generadas sobre las empresas colectivas debido a una mayor maduración del mercado y la creciente competencia van a ir más allá de lo meramente económico, les va a exigir transformaciones institucionales a fin de permitirles una mejor adecuación al entorno. Las ventajas que le significaba su carácter público, dada la maduración del mercado, tenderán a verse frenadas; en el mismo sentido, lo que antaño le significaba un avance notorio con respecto a las empresas propiedad del Estado, dadas las nuevas circunstancias, se van a expresar como fuertes limitaciones si las consideramos desde la perspectiva de la propiedad privada. Es en este sentido que las fuerzas van a empujar hacia una nueva transformación institucional de las empresas colectivas y éstas tienen que ver con la reestructuración y/o privatización de las mismas. Entre las principales causas que las va a inducir a esta reestructuración y/o privatización son las siguientes:
- La creciente intervención de los gobiernos locales en la actividad de las empresas locales que hace que se desvíen los objetivos de maximización de utilidades por el cumplimiento de objetivos sociales.
- El hecho de que sea una propiedad colectiva limita la escala de operaciones de la empresa ya que si bien la empresa puede crecer por la vía una nueva inversión o reinversión de las utilidades resulta muy complicado atraer inversión del exterior dado que no se definen con precisión los derechos de dicho inversionista.
- Dado que la responsabilidad de la empresa recae en el gobierno y en éste la designación del administrador es factible que no sea electo quien es mas capaz para administrar la empresa sino el que posea los mayores contactos gubernamentales.
- La búsqueda de protección de los residentes originales dada la migración de fuerza de trabajo de provincias de mayor atraso había originado problemas en la expansión de las empresas.
- La conversión a empresas privadas de todas aquellas empresas que, habiendo sido privadas, habían buscado los beneficios que eran propios de las empresas colectivas.
Con la ley sobre Empresas de Poblados y Villas emitida en octubre de 1996 se va a legitimar este esfuerzo de privatización. En ella se estipula que los derechos de propiedad de las Empresas de Poblados y Villas privadas serán similares a las de las Empresas de Poblados y Villas colectivas con respecto a sus derechos de propiedad, administración y autonomía.
Cuadro VII. 3
Ventajas y desventajas de las empresas colectivas estatales
con relación a empresas privadas
Ventajas con relación a las empresas estatales
Desventajas con relación a las empresas privadas
Existe una relación más directa entre el gobierno (propietario de facto) y la administración de las empresas con relación a las que se presenta en las empresas estatales
Dado que los gobiernos locales no son solo actores económicos se presentan frecuentes conflictos con los administradores de las empresas colectivas.
Una comunidad pequeña tiene mayores posibilidades de monitorear el desempeño del gobierno y administradores de la empresa
La creciente burocratización y corrupción entre gobierno y administradores, así como, la carencia de información impide un monitoreo efectivo de las empresas.
El control de las utilidades por el gobierno permite reorganizar su utilización para beneficio de la comunidad o para enfrentar dificultades en las empresas
En virtud del papel de las burocracias locales la distribución de las utilidades no siempre obedece a criterios económicos ni en la búsqueda de su maximización
Deviene de facto como una pequeña corporación dado que se facilita la toma de decisiones sobre el quehacer de la empresa bajo presiones de competencia. Facilita el consenso entre los miembros (autoridades, administrativos y trabajadores) sea para maximizar utilidades o sacrificar alguna parte del ingreso. No existe una clara definición de los derechos de propiedad. A pesar de ser una pequeña comunidad la propietaria de los derechos de la empresa no se define los derechos para cada uno de sus miembros
Fuente: Elaboración propia con base en: Enrico C. Perotti, Laixiang Sun y Liang Zou, “State Owned versus Township and Village Enterprises in China”, Working Papers No. 150, The United Nations University (WIDER), Septiembre 1998.
Las principales alternativas que se presentan a estas empresas son las siguientes:
- La conversión a empresas privadas de todas aquellas empresas que, habiendo sido privadas, habían buscado los beneficios que eran propios de las empresas colectivas,
- La reorganización como empresas privadas de aquellas empresas colectivas que resultaban ser una carga para los gobiernos locales,
- La búsqueda de los empresarios de las empresas colectivas por reconvertir las empresas colectivas a privadas o de establecer sus propios negocios privados.
- La privatización de las empresas colectivas por la vía de empresas de “participación de acciones” o del establecimiento de empresas de “responsabilidad limitada”.
Si bien es cierto que la reestructuración de las empresas colectivas presenta una tendencia hacia la privatización a largo plazo, habría que puntualizar que esa transformación institucional solo podrá ser lenta y gradual, como lo fue en el pasado.