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Los equipos multiculturales en la empresa multinacional

Mª del Pino Medina Brito

 

La concepción del tiempo

Esta dimensión, que se refiere a la orientación que se le da a la vida en el tiempo -largo o corto plazo-, es decir, si se vive para el futuro o de cara al pasado y al presente, surge del análisis de los resultados de una encuesta de valores orientales. La investigación llevada a cabo por Michael Bond en la Universidad China de Hong Kong parte del hecho ya apuntado por Hofstede en su trabajo de que las investigaciones cross-cultural probablemente reflejen una posición de valores universales occidentales. Así pues, el etnocentrismo, que se encuentra no sólo en el diseño de la investigación, sino también en la recogida de datos, en el análisis de los datos y en la divulgación de los mismos, es un sesgo con el “[...] que tenemos que vivir” (Hofstede, 1984:26).

De esta manera, partiendo de este hecho se diseñó la encuesta que captaba los distintos valores desde la perspectiva oriental y que permitió identificar esta nueva dimensión que Bond, en un primer momento, denomina “Dinamismo de Confucio”, al englobar muchas de las enseñanzas promulgadas por este intelectual chino. En el diseño de esta encuesta de valores orientales participaron muchos investigadores orientales y occidentales y contaron al mismo tiempo con el asesoramiento de prestigiosos investigadores tales como Hofstede, Leung y Triandis (The Chinese Culture Connection, 1987).

Actualmente se reconoce la existencia de esta dimensión, fundamentalmente, por la orientación que se le da a la vida en el tiempo, y en esta línea Hofstede (2001) nos la define como sigue:

La orientación a largo plazo se posiciona para reforzar las virtudes orientadas hacia las recompensas futuras, en particular, perseverancia y economía. Su polo opuesto, orientación a corto plazo, se posiciona para reforzar las virtudes relacionadas con el pasado y el presente, en particular, respeto por la tradición, preservar la “cara” y cumplir con las obligaciones sociales.

Ahora bien, aunque esta dimensión se pudo identificar a partir de la encuesta de valores chinos, tal y como se ha dicho anteriormente, es una variable analizada en el nivel ecológico y reconocible en cualquier entorno cultural (The Chinese Culture Connection, 1987). Consecuentemente, la posición que adopten las sociedades respecto a esta dimensión determinará la orientación que los individuos desarrollen respecto a la vida y, por supuesto, tendrá su reflejo en las relaciones sociales, familiares y organizativas.

Por lo tanto, al igual que con las dimensiones anteriores, en el entorno organizativo se reproducen las características culturales relacionadas con la orientación a largo plazo estudiada en este epígrafe y, en términos generales, nos encontramos en el extremo inferior del continuo corto/largo plazo a empresas dirigidas hacia la búsqueda de resultados en el corto plazo, en las que la coordinación es horizontal y se ordenan los negocios según las habilidades. Sin embargo, cuando la orientación a largo plazo es alta, se trabaja para la construcción de posiciones fuertes en los mercados futuros; así pues, no se esperan resultados inmediatos, la coordinación que se establece es vertical y las relaciones vienen marcadas por el status, reconocido y aceptado por todos.

Con respecto a los sistemas de control, habría que indicar que si la orientación al largo plazo es baja, se encuentran formalizados y centrados en la línea baja de la organización, mientras que cuando toma valores altos, estamos ante un sentido de vergüenza generalizado que hace que se estrese la consecución de los compromisos adquiridos así como la “decencia” de los negocios emprendidos.

Asimismo, el fuerte respeto por las tradiciones impide la generación y el desarrollo de innovaciones en sociedades con una baja orientación al largo plazo y, por otro lado, cuando la orientación al largo plazo es alta, las tradiciones son capaces de adaptarse a las nuevas circunstancias.

Siguiendo con esta breve descripción, destacar que cuando la orientación es hacia el pasado o el presente -baja orientación al largo plazo-, los directivos asumen la responsabilidad absoluta sobre las decisiones que toman a corto plazo (Mamman y Saffu, 1998) y, de hecho, son constantemente juzgados por sus subordinados, contrariamente a lo que ocurre con los directivos en organizaciones marcadas por una alta orientación al largo plazo, que disponen de tiempo y recursos para realizar sus propias contribuciones al tiempo que no se encuentran fiscalizados por sus subordinados.

Sin embargo, el perfil de los subordinados lo afrontamos desde las características de los individuos que, en última instancia, consideramos que van a revertir en su comportamiento en la organización así como en las tareas que son capaces de desarrollar.

Comenzando por aquellos que presentan características propias de culturas con una baja orientación al largo plazo, estaríamos ante individuos con pensamiento analítico, que no ejecutan muy bien tareas matemáticas básicas y que, en definitiva, resuelven los problemas de manera muy confusa; al mismo tiempo son personas centradas en el consumo inmediato de todo, pecuniario, tiempo, etc., ya que viven para el presente. Evidentemente, nada de esto ocurre cuando la orientación al largo plazo es alta, puesto que los subordinados se caracterizan por un pensamiento sintético, con habilidades para realizar muy bien tareas matemáticas básicas y que, por supuesto, resuelven los problemas de una manera estructurada. No se encuentran anclados en el pasado o en el presente, sino orientados hacia el futuro, por lo que se plantean muy seriamente la economía con vistas al ahorro y la disponibilidad futura de capitales.

En el cuadro 12 se resumen las características más significativas de esta dimensión clasificadas según los parámetros organizativos más representativos.


Cuadro 12. Orientación al largo plazo
Fuente: Elaboración propia a partir de Hofstede (2001, 1994a) y
The Chinese Culture Connection (1987)
PARÁMETRO
ORGANIZATIVO ORIENTACIÓN AL LARGO PLAZO
BAJO ALTO
DISEÑO
En los negocios se buscan resultados a corto plazo.


La vida social y los negocios se ordenan según las habilidades.

Coordinación horizontal.

Los empleados de la línea baja tienen mucha importancia: sistemas de control centrados en ellos.


Gobernados por la ley.
Se trabaja hacia la construcción de posiciones fuertes en los mercados: no se esperan resultados inmediatos.

Las relaciones se ordenan por el status.

Coordinación vertical.

Un sentido de vergüenza apoya la decencia en los negocios, los contactos sociales y el estrés en cumplir los compromisos.

Gobernados por los hombres.

INNOVACIONES
El fuerte respeto por las tradiciones impide las innovaciones.
Las tradiciones se adaptan a las nuevas circunstancias.
SUPERIOR-SUBORDINADO
Los directivos asumen el coste de las decisiones a corto plazo, estando constantemente juzgados por los empleados de la línea baja.

Los subordinados se caracterizan por un pensamiento analítico, un menor resultado en tareas matemáticas básicas y una confusa resolución de problemas.

Los subordinados se centran en el gasto y consumo inmediatos, y valoran el tiempo libre.




Reciprocidad de agradecimientos, favores y regalos como un ritual social.
Los directivos se permiten tiempo y recursos para hacer sus propias contribuciones.


Los subordinados se caracterizan por un pensamiento sintético, un mayor resultado en tareas matemáticas básicas y una estructurada resolución de problemas.

Los subordinados se centran en la economía, en el ahorro y, en definitiva, la disponibilidad de capitales para inversiones futuras, no considerando el tiempo libre tan importante.

Las consideraciones recíprocas son problemáticas.

La consecuencia inmediata del predominio de la orientación al largo plazo en los equipos vendría determinada por las características individuales de sus miembros, que se consideran apropiados para desempeñar actividades mecánicas y de resolución de problemas con soluciones únicas y comprobables, pues aplican un pensamiento sintético. Por el contrario, los equipos en donde sobresale la orientación al corto plazo se encontrarán conformados por individuos preparados para realizar tareas creativas, de resolución de problemas con múltiples respuestas, ya que aplican un razonamiento analítico. Asimismo, el sentido de vergüenza que embarga a los individuos de sociedades orientadas al largo plazo hará que en los equipos con esta distinción también se tienda hacia el cumplimiento de los compromisos adquiridos sin necesidad de una estrecha supervisión y control como en los equipos en los que predomina su orientación al corto plazo.
 

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