¿QUÉ HAY DETRÁS DE LA DECISIÓN DE COOPERAR TECNOLÓGICAMENTE?
Eunice Leticia Taboada Ibarra
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1. Pertinencia de la Temática
Aunque es cierto que la cooperación entre empresas no es un fenómeno nuevo (Narula, 1999; Punklet, Voisin y Bellon, 2001; Hagedoorn y Van Kranenburg, 2003), las formas que han predominado (joint ventures) datan de finales de los años setenta y las prácticas actuales (distintas formas contractuales y de redes) son más cercanas (de inicios de los noventa). Esto explica porque es también con esta temporalidad (los años noventa) que se ha intensificado su estudio (para ejemplos, véase las referencias de las páginas siguientes).
Como se adelantó en la introducción, las empresas han recurrido progresivamente a los acuerdos de cooperación para enfrentar los crecientes retos que el entorno competitivo les demanda. Las razones por las que lo hacen son tanto internas como externas a las mismas. Faulkner y Mark de Rond (2000) apuntan entre las internas: la necesidad de hacerse de activos específicos o capacidades no poseídas; minimizar costos; entrar rápidamente a un mercado (por no tener posibilidad de hacerlo por otros medios), y diversificar o compartir riesgos financieros. Como motivos externos señalan los relacionados con la globalización; con la turbulencia e incertidumbre en el mercado internacional, y con la necesidad de recursos financieros y tecnológicos para enfrentar los rápidos cambios tecnológicos y la reducción de vida de los productos.
Hagerdoorn, desde 1990, señaló respecto a la colaboración inter firma que, “de ser un fenómeno temporal, se ha vuelto una forma organizacional estándar. [...] Los acuerdos no son todos tecnológicos; este aspecto se mantiene como un elemento clave en la mayoría de ellos. Entre las principales razones para el crecimiento de esta forma de organización desde los setentas, se encuentra la globalización de los mercados, el incremento en los costos de I+D; la necesidad de las firmas de crecientemente abordar el espectrum de diferentes tecnologías, acceder a nuevos mercados y competencias en varios regímenes industriales” (Hagedoorn, 1990:19-20).
Esta tendencia creciente a la cooperación inter firma a nivel mundial puede ejemplificarse con el caso específico de las asociaciones para realizar investigación y desarrollo (I+D). El gráfico 1 muestra la evolución del surgimiento de asociaciones de I+D entre 1960 y 1998 y permite observar los principales resultados que arrojó el análisis de 9,069 asociaciones de I+D a nivel mundial (Hagedoorn J. y Lundan, 2001).
Entre los hechos a destacar se tienen: su tendencia creciente (de una década a la otra el surgimiento de asociaciones de I+D fue aumentando de tal manera que en el período 1990 -1998, se generaron 52.3% de las mismas); su predominio en sectores de alta tecnología; su concentración en países de la OCDE; su mayor presencia en bloques de comercio, y la preponderancia, aunque decreciente, de la realización conjunta de I+D mediante joint ventures . A partir de los años noventa, son distintas formas contractuales los que han ganado terreno .
La mayor tendencia a la colaboración inter firma muestra, por un lado, que el comportamiento cooperativo se ha convertido en un factor importante para determinar quien gana en el mercado (Okada, 2000), y por otro, que la competencia progresivamente ocurre entre conjuntos de empresas aliadas, más que entre firmas individuales (Ireland, et al, 2002).
Las empresas gradualmente se están moviendo hacia las alianzas estratégicas porque se dan cuenta del valor estratégico de las relaciones de cooperación inter firma para enfrentar mercados cambiantes, competencia globalizada, organizaciones en redes y tecnologías dinámicas, complejas y caras (Tallman, 2000). Esto explica que se considere que en la complejidad del medioambiente competitivo del siglo XXI, el desarrollo del conocimiento en las organizaciones a través de relaciones recíprocas, mutuamente benéficas, sea uno de los pocos recursos que pueden ser fuente duradera de ventaja competitiva (Ireland, et al, 2002). Así mismo, explica porque, no obstante que la tasa de falla de las alianzas estratégicas es grande, éstas seguirán creciendo por tener el potencial de crear valor (Tallman, 2000).
Es en este contexto que se señala la pertinencia del presente estudio en la medida en que con el mismo se busca explicar teóricamente la cooperación tecnológica entre empresas. Fundamentalmente se pretende avanzar en el conocimiento respecto a por qué las empresas optan por esta estrategia de coordinación de recursos, cómo deciden al respecto y cuáles son las particularidades de la misma.
2. Teorías Incluidas y Excluidas en Esta Investigación
La cooperación tecnológica inter empresa, como cualquier otra actividad social, es un fenómeno complejo cuya comprensión involucra elementos de índole diversa, por lo que difícilmente puede ser explicada desde una teoría. Debido a su complejidad, una sola teoría resulta insuficiente para dar cuenta de su naturaleza (qué es y cuál es su especificidad), su forma (cómo se presenta), su función (qué efectos tiene), sus características principales y su evolución.
En este sentido, son varias razones por las que en este trabajo se seleccionaron los planteamientos de Williamson (teoría de los costos de transacción), Penrose (teoría del crecimiento de la empresa) y de Nelson y Winter (teoría evolucionista de empresa) para avanzar en la comprensión de este tipo de acuerdos tecnológicos y, en consecuencia, por las que se dejaron fuera otros.
Esas razones tienen que ver con (A) el nivel al que interesa analizar la CTIF; (B) los elementos que cada teoría puede aportar, dada la especificidad de este tipo de relación y, (C) la complementariedad y conexión que puede haber entre las teorías. A continuación se profundiza al respecto.
(A) Debido a que la decisión de la empresa para cooperar con otra es una resolución de carácter microeconómico, para explicarla se requieren razonamientos que contribuyan a dar cuenta de las decisiones a ese nivel. Sin embargo se reconoce que los acuerdos de cooperación pueden estudiarse a distintos niveles (véase Tabla 1).
En este marco, se excluyen los análisis a nivel macro y mesoeconómicos, así como los centrados en agrupaciones geográficas o que involucran la interrelación de más agentes económicos que las empresas. Tal es el caso de la teoría de la innovación a través de sus planteamientos de los sistemas de innovación (Lundval,1992; Freeman, 1995; Edquist 1997; Malerba y Orsenigo, 1997; Breschi,2000) ; los desarrollos relativos a la geografía económica (Scott, 1999; Storper, 1997; Cambridge Journal of Economics, 1999), los distritos industriales (Rabellotti, 1997; Schmitz, 1999) y los clusters (Porter, 1998; World Development, 1999; OCDE, 1999).
(B) En el plano de la microeconomía y considerando el tópico específico que interesa estudiar, fueron tres los elementos iniciales que llevaron a incluir los planteamientos de Williamson, Penrose y Nelson y Winter:
La cooperación involucra necesariamente la interacción entre las partes, para explicarla se requiere la consideración de los elementos y los costos que ésta implica (razón por la que se incluye la teoría de los costos de transacción).
El punto central de la cooperación tecnológica entre empresa es que involucra la tecnología, por lo tanto es necesario incorporar su naturaleza y evolución (motivo por el que se incorpora la teoría evolutiva).
Al igual que la mayoría de las decisiones de los agentes económicos, cuando la empresa decide cooperar es de esperarse que busque utilizar más y mejor sus recursos, por lo que se requiere que evalúe la potencialidad presente y futura de los mismos en el marco de las actividades fundamentales que realiza. Para tal efecto, resulta de utilidad incluir elementos teóricos que orienten la evaluación de tal potencialidad (causa por la que se agrega la teoría de recursos).
Es pertinente señalar que el estudio de las relaciones de colaboración ha coincidido con el resurgimiento de la teoría de la firma, lo que en buena medida explica que la mayoría de los estudios recientes de la cooperación entre empresas partan precisamente de las tres teorías aquí consideradas , normalmente retomando algún concepto fundamental de una de las teorías.
(C) Además de los elementos anteriores se buscó incluir teorías que pudieran complementarse y cuya vinculación fuera posible dados los supuestos fundamentales que cada una maneja; asimismo, que permitieran abordar la relación de cooperación tecnológica enfatizando los aspectos cognitivos y de asignación de recursos involucrados en tal relación. Es así que se dejaron de lado:
En general las teorías de corte ortodoxo. En el planteamiento neoclásico la empresa se concibe como un agente maximizador de funciones de utilidad y las oportunidades tecnológicas están dadas exógenamente y se expresan como la función de producción o la de costos. Los fenómenos que determinan los costos de la empresa son hechos tecnológicos que tienen lugar dentro de una “caja negra”, misma que no es objeto de estudio bajo esta perspectiva.
Se concibe al sistema económico como en equilibrio, con infinitos compradores e infinitos vendedores. Supone que los agentes económicos son anónimos en el sentido de que no se conocen de manera directa, sino que su conocimiento mutuo está mediado por el mercado. Las decisiones económicas de los proveedores y usuarios de bienes se dan en un ambiente en el que el mercado es perfectamente competitivo debido a que: (i) Los agentes económicos establecen una relación estrictamente comercial y poseen racionalidad ilimitada. Esto es, en la relación de compra-venta los proveedores y usuarios tienen como único objetivo maximizar el beneficio y la utilidad, respectivamente, y para hacerlo no enfrentan limitaciones de ninguna especie en lo relativo al manejo y procesamiento de la información que requieren; (ii) la información de la que disponen, tanto proveedores como usuarios, para su toma de decisiones es completa y tiene carácter cuantitativo. Los agentes tienen conocimiento perfecto, exacto y oportuno de las cantidades y los precios de los bienes y los factores que están disponibles en el sistema. Lo anterior significa que las empresas pueden tomar la mejor decisión (que las lleva a maximizar) si disponen tan sólo de información sobre precio y cantidades, ya que los bienes, servicios y factores de producción son homogéneos. En este sentido, (iii) en el sistema neoclásico de mercados perfectos no existe incertidumbre. Razón por la que los costos de información, contratación y planeación son irrelevantes.
Es así que desde este enfoque teórico no son objeto de estudio: la organización interna de las empresas, las interacciones entre éstas no mediadas por el mercado, las innovaciones técnicas y organizacionales, ni el intercambio de información cualitativa entre las empresas; de aquí que el tópico de estudio de la presente investigación (la cooperación tecnológica inter firma) no tiene lugar.
Las teorías que centran su análisis en los incentivos. Como la teoría de la agencia (Jensen y Mecking,1976), los contratos incompletos (Grossman y Hart 1982) y los derechos de propiedad (Demsetz, 1967; Alchian y Demsetz, 1972). Esto porque como se señaló el interés de este trabajo es subrayar la problemática que plantea la coordinación de conocimientos y recursos. No obstante, se reconoce que en las relaciones de colaboración de cualquier tipo y a cualquier nivel, los incentivos son un elemento fundamental para vincularse; de allí que para tener una perspectiva completa del tópico en estudio, sería pertinente incorporarlos.
Como se adelantó en el punto (B), la inclusión de las teorías de los costos de transacción, de los recursos y evolutiva respondió a que al enfatizar elementos diferentes, pueden contribuir a explicar la CTIF subrayando distintos factores. En adición a este hecho, los tres enfoques teóricos manejan supuestos y razonamientos heterodoxos y, como se muestra en este trabajo, las diferencias en los mismos no resultan incompatibles.
3. Método de Trabajo y Algunas Aclaraciones
El interés por realizar el presente estudio surgió de reflexionar respecto a la cooperación entre empresas en el marco de la revisión teórica de la firma.
Esa reflexión llevó a concluir que cuando la empresa selecciona entre comprar, producir o cooperar, para una actividad específica, tiene el mismo objetivo (aprovechar de la mejor manera sus recursos), pero busca la forma más conveniente de alcanzarlo. En esas circunstancias, las ventajas y condiciones de una forma de coordinación de recursos sobre otra depende de factores que es necesario dilucidar.
Por otro lado, abordar la modalidad tecnológica de la cooperación inter firma interesó porque se considera que es mediante la introducción, ajuste y mejora de la tecnología que las empresas pueden permanecer en el mercado en el mediano y largo plazos, por lo que conocer las opciones que tiene la empresa para mejorar su conocimiento respecto a qué y cómo hacer las cosas, incluye considerar y entender este tipo de acuerdos tecnológicos.
Es así que pensando en los hechos que permiten a la empresa ser competitiva porque la empresa mejore su tecnología, se buscó incluir teorías que de forma clara pudieran ayudar a explicarlos.
Como se señaló en la introducción, lo que fundamentalmente importa saber de la CTIF es por qué la empresa la selecciona y cuáles son sus particularidades; lo que a su vez permite avanzar en el conocimiento de las ventajas y circunstancias por las que la empresa deja de comprar o de producir.
Las preguntas de investigación que dieron origen a este trabajo y que se resuelven en el desarrollo de la misma, son:
(i) ¿Qué hay detrás de la decisión de la empresa para cooperar tecnológicamente con otra?: ¿Es una cuestión exclusivamente económica o también cognitiva?, ¿Qué elementos y razonamientos inciden en seleccionar la cooperación tecnológica inter firma como forma de coordinación de recursos?, ¿Por qué la cooperación tecnológica inter firma no es una práctica generalizada?
(ii) Para explicar teóricamente la CTIF, ¿es suficiente una teoría o sería deseable la complementariedad explicativa de distintas teorías?, ¿es posible combinar elementos de distintos enfoques teóricos?, ¿qué explicación ofrece la propuesta teórica así construida?
La manera en que aquí se abordó el tópico en estudio es mediante la integración de elementos de tres teorías. Se considera que tales elementos están presentes en la evaluación que la empresa hace al decidir seleccionar esta forma de coordinación de recursos tecnológicos. Los tres planteamientos teóricos tienen que ver con la teoría de la firma y no con la cooperación, estrictamente hablando. Como se adelantó, las teorías en cuestión son costos de transacción (el planteamiento de Williamson), recursos (Penrose) y evolutiva (Nelson y Winter, principalmente).
Con el fin de avanzar en la justificación teórica de la CTIF mediante la integración de elementos teóricos y sin que con ello se llegara a un planteamiento con incompatibilidades de supuestos y razonamientos, una vez que se definió la CTIF y que se comprendió el mecanismo que se considera le da lugar y la forma en que impacta en los resultados competitivos de la empresa, se procedió a revisar sistemáticamente las tres teorías a detalle para conocer los supuestos subyacentes en sus principales explicaciones y para contrastar las posiciones respecto a tópicos específicos; así mismo se desarrolló el razonamiento de la CTIF desde cada teoría con el fin de entender cómo la justificarían y de contrastarlas.
Analizados supuestos, conceptos y la propia CTIF desde cada perspectiva teórica, el trabajo se centró en buscar una explicación más completa de la misma a través del análisis de la decisión de la empresa para optar por esta alternativa de coordinación de recursos. Se consideró factible avanzar al respecto porque no se encontraron diferencias irreconciliables entre las tres teorías para proceder a recoger instrumental teórico para la explicación deseada.
En cuanto a la extracción de conclusiones (específicamente la propuesta de explicación complementaria de la CTIF), el procedimiento fue el siguiente. Una vez que se concluyó que las teorías no presentan diferenciasirreconciliables, fue posible establecer una definición amplia de la firma y de su objetivo con base en las tres teorías, esto aunado a la interpretación de la CTIF desde cada una de ellas, llevó a la construcción del proceso por el que la empresa decide cómo coordinar sus recursos tecnológicos y a establecer el contexto en el que toma esa decisión.
Este conjunto de hechos permitió destacar la naturaleza de esta forma de coordinación de recursos y una serie de características de la misma que facilitan entender porque, en los últimos años, ha aumentado el número de acuerdos de este tipo. Por otro lado, el análisis a detalle de supuestos y razonamientos teóricos permitió mostrar que es posible “tender puentes” entre las teorías consideradas con el fin de explicar la CTIF.
El Trabajo que se Presenta es Exclusivamente Teórico
Como se verá, el trabajo de investigación es teórico, razón por la cual no se realizó trabajo de campo. Sin embargo, la autora de esta tesis llevó a cabo la revisión de trabajos empíricos que pudieran relacionarse con lo que en esta investigación se considera cooperación tecnológica inter firma. Así mismo, analizó la CTIF en la evolución tecnológica de la industria automotriz a nivel mundial (Taboada 2002 y 2003b) y examinó un contrato de suministro y desarrollo en la industria automotriz (Taboada 2004a), en este fue posible “reconocer” elementos teóricos de la CTIF destacados en este trabajo de tesis .
Es pertinente señalar que en la revisión teórica y empírica en torno a la cooperación tecnológica inter firma no se encontró ningún autor que la definiera y que señalara las formas en que considera se presenta, aún cuando en el caso empírico varios refieren el término o, aún más, la presentan como tópico de estudio central (p.ej. Cusumano, 2000; Nijssen, Reekkum y Hulshoff, 2001 y Rafailidis y Tslekidis, 2003). Al no definirla, dejan abierta la posibilidad de entenderla de distintas maneras, de que no quede claro a que aluden los resultados de sus investigaciones y de que los mismos no sean comparables.
La explicación teórica que ofrecen los trabajos respecto a la cooperación inter firma usualmente no se refiere a su modalidad tecnológica y generalmente se presenta exponiéndola exclusivamente con una o dos variables, dentro de una teoría en particular (p.ej. Okada, 2000; Britto, s/f) o de dos teorías (p. ej. Jorde y Teece, 1990; Madhok, 2000, y Tallman, 2000; Sako, 1998; De Jong, Nootboom, Helper y Sako, s/f) .
Entre estos trabajos empíricos existen varios que buscan dar cuenta de distintas formas de cooperación entre empresas desde las teorías aquí incluidas (principalmente de los costos de transacción y evolutiva); normalmente lo que hacen sus autores es analizar una o varias características que consideran tiene una forma de colaboración específica. La explicación de sus resultados es desde una perspectiva teórica o a lo sumo dos. Cuando el caso es este último, los trabajos no plantean la forma de la articulación teórica, ni es su interés avanzar al respecto.
Por otro lado, dada la definición de la cooperación tecnológica inter firma y las características de la misma derivadas y resaltadas en esta investigación, fue posible encontrar coincidencias parciales con algunos de esos trabajos porque lo que analizan corresponde con alguna de las modalidades de cooperación que para efecto de esta investigación es de carácter tecnológica: alianzas estratégicas (Hagedoorn 1990; Hagedoorn y Lundan, 2001; Hagedoorn y van Kranenburg, 2003; Narula, 1999), acuerdos para intercambiar información y transferir tecnología (Bidavit, et al, 1988) y subcontratación tecnológica (Nishiguchi, 1994; Takeishi, 2001), o porque estudiaron alguna(s) de las características que en esta investigación se considera tiene la CTIF (p.ej. Bongart, 1993; Lazaric y Marengo,1998; Sako, 1998; Fritch y Lukas, 1999; Plunket, 2001; entre otros).
Los resultados de estos trabajos pueden considerarse un primer acercamiento empírico al tópico en estudio, aunque de ninguna manera se pretende que constituyan evidencia que respalde esta investigación. Lo anterior es así, porque el ejercicio empírico necesario para considerar los elementos teóricos complementarios que en este trabajo se incluyen tienen que ver con tres teorías y, por lo tanto, debe incluir un amplio espectro de variables al mismo tiempo. Se reitera que la propuesta que aquí se presenta es exclusivamente teórica, por lo que tal ejercicio no es fundamental para el mismo.
Algunas Aclaraciones
Como se apuntó en la introducción, en el capítulo I de esta tesis el interés es presentar y contrastar de manera clara los supuestos y razonamientos básicos de cada una de las teorías para con ello avanzar en la posibilidad, primero, de interpretar desde cada una a la CTIF y, después, de generar una explicación recogiendo elementos de las mismas. Para tal efecto, se buscó presentar cada teoría de tal forma que los conceptos puedan comprenderse, compararse y localizarse rápidamente.
El capítulo I es el más extenso, y para algunos lectores puede parecer excesivo su tamaño y la cantidad de citas textuales incluidas. Se decidió presentar la revisión de esa forma y con esa extensión para que fuera clara la lectura de la CTIF desde cada teoría. La inclusión de diversas citas textuales, responde al interés de que las inferencias que posteriormente se realizan puedan ser contrastadas con lo que los propios autores afirman y no con lo que la autora de este trabajo interpreta al respecto (esto último es particularmente importante porque en los capítulos siguientes ya no se incluyen señalamientos literales de los autores, ni se explican conceptos específicos de las distintas teorías). Hechas estas aclaraciones conviene apuntar que si se tienen claros los planteamientos teóricos aquí incluidos, no es necesario que se realice la lectura de este primer capítulo.
Por su parte, en el capítulo IV (Cooperación Tecnológica Inter Firma: Explicación Desde una Propuesta Teórica Integradora) se hace referencia a otros autores, además de los estudiados. Se incluyen porque aportan razonamientos de importancia para comprender el tópico en estudio y porque se ubican, fundamentalmente en el marco de la teoría evolutiva (específicamente en la teoría de la innovación).
En el punto cinco (Particularidades de la Cooperación Tecnológica Inter firma) de ese mismo capítulo IV, se remite a algunos trabajos empíricos, pero como se señaló en líneas previas, con su inclusión no se pretende considerarlos evidencia empírica de esta investigación. Se les menciona incidentalmente porque se piensa que son un primer acercamiento empírico que puede ilustrar respecto a la pertinencia de incluir alguna característica en particular, ceteris paribus, para dar cuenta de lo que sucede con la CTIF.