ESTUDIO SOBRE MICROREGIONES Y CORREDORES RURALES
Margarita Camarena Luhrs
RESUMEN La región Purhépecha en Michoacán, México, es analizada por sus centros y
corredores urbanos/rurales para describir procesos que son características de
los espacios sociales y que les imprimen un cierto orden. Este conocimiento es
útil para explicar las interacciones espaciales que aúnan dinero y mercados, a
múltiples factores de la localización con su contraparte activa, la circulación
entre lugares, y que son tan decisivos para el éxito de la inversión, como para
lograr la mejor gestión local regional. En este trabajo intentamos explicar cómo
este espacio social es producido por amplias dinámicas locales y regionales.
Asimismo, indagamos por qué este espacio está relacionado con el surgimiento y
readaptación de los lugares funcionalmente adecuados que organizan las
microregiones y sus corredores rurales. En resumen, presentamos los distintos
niveles de desarrollo espacial que estructuran a la región purhépecha.
Palabras clave: niveles de desarrollo espacial, región purhépecha, microregiones,
centros urbanos, centros rurales, corredores rurales
ABSTRACT Purhépecha region in Michoacán, Mexico, is analyzed by its urban/rural centers
and corridors to describe processes characteristic of social spaces, that are
giving a certain order to places. This knowledge is useful to explain spatial
interactions bringing together money and markets, and the many factors of
localization with its active counterpart, the circulation among places, decisive
for any successful investment, as to achieve the best local regional management.
In this work we intent to explain how this spatial order is produced by wide
regional and local dynamics. We also related this space with the emergence and
readaption of former functional places that organizes purhépecha’s microregions
and its rural corridors. In brief, we presented the different spatial
development levels, structuring the purhepecha region. Key words: spatial development levels, purhépecha region, microregions, urban
centers, rural centers, rural corridors
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INTRODUCCIÓN El objetivo de este trabajo es determinar subsistemas urbanos y rurales, en
términos de su funcionamiento espacial y accesibilidad, y de si éstos presentan
indicadores de costos que permitan una agrupación más eficiente, tal que
facilite su incorporación a los circuitos amplios de producción para garantizar
el desarrollo de la región purhépecha. Además de considerar elementos básicos de la dispersión de la población,
desarrollo de las localidades y accesibilidad entre ellas, se producen índices
de ruralidad y urbanización. Y para dimensionar el grado de desarrollo se toman
lo índices de marginación como una medida de acceso a satisfactores. La
accesibilidad entre localidades se determina con base en la configuración de la
red de infraestructura de caminos, y toma en cuenta la magnitud de los
intercambios económicos, sociales y políticos. Determinado lo anterior, el análisis espacial se desarrolla a partir de la
definición de la red de infraestructura de caminos, basada en el patrón de sus
nodos y arcos, así como en el establecimiento de centros y subcentros de
articulación, y en la determinación de estándares de cobertura y accesibilidad
geográficos. A partir de todo ello, se identifica la estructura regional y los
cuatro subsistemas espaciales que la conforman. Para ello, en la primera parte, se presentan los resultados del análisis de
indicadores sobe hechos dinámicos y estructuras espaciales que son testigos de
la apropiación múltiple del espacio natural y de lo desarrollado sobre él. En
particular se destacan los resultados del análisis de la organización espacial,
la marginalidad característica de cada uno de los 23 municipios estudiados y de
la accesibilidad que relaciona las 972 localidades que forman el universo total
de la región en estudio. Culturas de relación con el medio y productos del
recorrido regular entre lugares, conforman un sistema espacial particularmente
bien concebido y balanceado que supera excepcionalmente las difíciles
condiciones del terreno comprendido por la región en estudio.
La segunda parte, está dedicada al análisis espacial. Expone los resultados del
modelado de múltiples centros de gravedad para profundizar el análisis espacial,
aprovechando métodos numéricos de gran utilidad, para determinar, además de la
estructura regional purhépecha, -a partir de los subsistemas que conforma el
universo de sus localidades-, los niveles de desarrollo espacial que han
resultado de la peculiar producción-apropiación del medio físico natural, como
de las culturas de circulación, propiamente de recorridos regulares, que han
dado relevancia a la integración de las localidades y a sus rutas de acceso. Con base en lo anterior, se presentan las conclusiones obtenidas que se espera
sean útiles a los fines de la planeación integrada del desarrollo local-regional
purhépecha. Las recomendaciones corresponden a las posibilidades de actuación
que derivan de los distintos niveles de desarrollo especial descubiertos. En
síntesis, el aporte realizado consiste en la regionalización purhépecha. a
partir de los subsistemas urbanos o urbanos-rurales que estructuran la región en
estudio.
PRIMERA PARTE: INDICADORES GENERALES PARA EL ANÁLISIS ESPACIAL Históricamente, el área de influencia del pueblo purhépecha comprendía parte
importante de los estados de Michoacán, Jalisco, Guanajuato y Querétaro. Desde
la conquista los territorios de este grupo étnico fueron disminuyendo y la
actual región está ubicada en el sector centro-noroeste del estado de Michoacán.
El área se divide en cuatro subregiones: Japóndarhu (lugar del lago), Eráxamani
(Cañada de los once pueblos), Juátarisi (Meseta) y la ciénega de Zacapu. Posee
una riqueza natural y cultural singulares. Esta conformación actual supera las divisiones político administrativas
municipales aunque aún exprese el cambio y la forma política que han ido
adquiriendo los subsistemas regionales al desaparecer el cacicazgo que cumplía
funciones y servicios que el Estado no había logrado asumir, por la lejanía de
las localidades de los centros articulados funcionalmente por la federación pero
también por la debilidad política o desinterés de otras fuerzas sociales, que
corresponden con otros patrones de las relaciones interpersonales.
Según el Instituto Nacional Indigenista (INI) antes del año 2000, la población
purhépecha se concentraba sobre todo en 22 municipios.
Según la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) ,
desde el punto de vista de la presencia indígena actualmente la región
purhépecha consiste en 14 municipios, de los cuales 7 se consideran indígenas
(con 40% o más de población indígena), 4 con presencia indígena (con al menos
10% de población indígena) y 3 con población indígena dispersa.
Con base en la regionalización definida por el Gobierno del estado de Michoacán
en 2004, la Región Purhépecha queda comprendida por los siguientes 11 municipios
: Para definir el área de estudio, se recurre a dos fuentes de información que han
definido a la región purhépecha desde diversos puntos de vista. En primer caso
la presencia histórica de de población del grupo étnico purhépecha, tanto del
INI antes del 2000 hasta el último análisis de la CDI, que muestra una
disminución en el área de 22 a 14 municipios. En segundo lugar, el criterio de
regionalización del Gobierno de Michoacán, el cual considera 11 municipios con
los criterios de cuencas hidrológicas y de infraestructura. Y existe una
clasificación de la región purhépecha que comprende 16 municipios para fines del
estudio de su problemática socio-ambiental. Un análisis sobre la interacción espacial de la región y la conformación de
circuitos y corredores regionales debería considerar que la dinámica de los
intercambios sobrepasa los territorios establecidos por criterios culturales,
como en el caso de los pueblos indígenas, tal como se aprecia en su división
política administrativa municipal. Por lo anterior, al considerar los criterios
disponibles, para el presente estudio se considera que la región purhépecha está
conformada por 23 municipios que tienen en común tanto elementos históricos de
presencia indígena, como una unidad geográfica con rasgos comunes de
infraestructura y sobre todo de continuidad territorial. La región purhépecha cuenta con una extensión territorial de casi 8 mil Km2, con
una población en 2005 de 841 mil 903 habitantes que constituyen el 21.2% de la
población total del Estado. Los 23 municipios que comprenden la Región Purhépecha, en términos de su
estructura espacial presentan rasgos contrastantes. Para 2005, la densidad fue de 106 habitantes por Km2, con extremos muy densos
como los registrados por Zacapu, Patzcuaro y Uruapan, y otros, con una densidad
menor, como Tocumbo, Tancitaro, Taretan y Nuevo Parangaricutiro. La tasa de crecimiento media anual presenta variaciones importantes ya que a
nivel regional es del 0.1%, lo que indica un cambio demográfico poco
significativo. Sin embargo, observada por municipios presenta variaciones muy
importantes, ya que hay algunos con despoblamiento, tasas negativas de más del
1.5%, como Coeneo, Tocumbo, Los Reyes, Tangancícuaro, Tangamandapio y Taretán.
Destaca que ninguno de estos municipios es indígena. Asimismo, destaca una acentuada concentración de la población ya que el 57.2% de
la población se asienta en cuatro municipios. En un primer nivel está Uruapan,
con el 33.2% de la población de la región; en un segundo nivel están Pátzcuaro,
Zacapú y los Reyes, con porcentajes entre 6% y 10%; el resto de los municipios
tienen participaciones muy menores, de entre 1% y 4%. La región cuenta con 972 localidades habitadas en 2005, de las cuales 952 (el
98%) se clasifican como rurales, 15 mixtas (1.5%) y 5 urbanas (0.5%). Las
localidades rurales concentran al 37% de la población de la región, las
localidades mixtas al 16% y las urbanas al 46%. Estás dos características de la
población indican una gran dispersión equilibrada por núcleos urbanos. Asociado
a esto, si se analiza la concentración-dispersión de la población, se puede
observar que existe una tendencia hacia la urbanización, con un índice del 0.27
que convive con una significativa dispersión rural, con un índice del 0.21.
Estos datos se contrastarán más adelante con los niveles de accesibilidad.
La marginalidad de la zona se califica como baja en términos generales, no
obstante que, como se mencionará más adelante, se constata correlación entre la
marginalidad y el índice de ruralidad. A nivel municipal se identifican cuatro tipos iniciales de organización espacial
con base en los índices correlativos de ruralidad y urbanización. Así, se
identifican municipios urbanos, mixtos, rurales y muy rurales. Aunque la mayoría de los habitantes vive en municipios netamente urbanos, los
municipios con características rurales representan casi un tercio, el 32.8%, de
la población de la región purhépecha en análisis. Todos los municipios cuentan con un buen número de poblaciones rurales; sin
embargo, en cada grupo es posible identificar algunos rasgos característicos.
Los municipios con características urbanas presentan al menos una localidad con
más de 50 mil habitantes y tienen en promedio un grado de urbanización del
74.1%. En cambio los municipios con características rurales tienen un grado de
urbanización de 0.0% y un grado de ruralidad promedio del 67.3%. Más adelante
esta clasificación será contrastada con la distribución espacial para determinar
funciones de dependencia entre municipios. De las cinco calificaciones de grados de marginalidad la región presenta un
nivel de marginalidad, de -0.70063, que se clasifica como bajo. Esto significa
que en general las condiciones socioeconómicas no muestran un rezago
significativo en comparación con otras regiones del país. La población que
habita en condiciones de marginalidad promedio muy baja y baja representa el
mayor porcentaje de la población de la región, el 74.1%; en tanto que el 25.9%
tiene condiciones de marginalidad intermedias. Sin embargo, a nivel municipal
hay cuatro casos con grado de marginalidad alto: Charapan, Chilchota, Nahuatzen
y Tancítaro, de los cuales los tres primeros son municipios indígenas según la
clasificación de la CDI (ver cuadro 6). En el análisis de la relación entre ruralidad y marginación destacan dos
municipios que difieren significativamente de la tendencia general dentro de la
región. En la parte inferior de la gráfica se encuentran Nahuatzen (0.20,
0.38380) y Charapan (0.35, 0.57347), los cuales presentan índices de
marginalidad significativamente más altos que el esperado para el índice de
ruralidad que los califica como municipios rurales. Estos dos municipios son
calificados como indígenas por la CDI. Además del tamaño de la población, una característica importante adicional que
confirma la naturaleza urbana o rural de una localidad es la accesibilidad . En
función de la densidad de localidades en un determinado territorio, las vías de
comunicación, los servicios de transporte existentes y los niveles de
interacción se pueden obtener indicadores de la accesibilidad a través
indicadores como el costo y el tiempo de transporte. Estos dos indicadores
pueden determinarse tanto para las personas (por persona) para atender motivos
de viaje de trabajo, estudios, de salud, etcétera; como para mercancías o
insumos necesarios para la producción. En este estudio se toma como base el
costo de transporte por persona en servicios de transporte público. Al tomar como base el costo promedio del transporte de personas la región
presenta niveles contrastantes de accesibilidad.
La conformación geográfica de la región purhépecha en estudio y la
infraestructura carretera presentan un nivel de accesibilidad alto, con
distancias a 20 km, para una mayor cantidad de municipios fuera de las que
tienen centros urbanos. La distancia promedio de viaje es de 16 kilómetros que
representa un costo por viaje por persona de $17.19. Esto implicaría un costo
total de movilización para la población de la región de $14 millones 472 mil 313
pesos. Este dato significativo, se contrastará con el resultado del modelaje de
centros articuladores que se presenta en el acápite 21. Como es de esperarse las zonas con los mejores niveles de accesibilidad son los
municipios más urbanos: Uruapan, Pátzcuaro y Zacapu. Con este nivel de
accesibilidad los municipios clasificados como rurales destacan Nuevo
Parangaricutiro y Peribán con una accesibilidad alta por su cercanía a Uruapan y
a Los Reyes de Salgado, respectivamente. Los municipios con los menores niveles de accesibilidad son Charapan, Tancitaro
y Taretán, los tres clasificados como rurales con distancias por arriba de 37
kilómetros. El resto de los municipios presentan condiciones de accesibilidad
calificadas como medias, con distancias entre 21 y 36 km. Los centros urbanos con una mayor cobertura dentro de la región son Los Reyes de
Salgado y Uruapan con cinco municipios cada uno. Las cobertura extrema desde Los
Reyes de Salgado es Tancítaro con una distancia de casi 52 km, y desde Uruapan
es Taretán con una distancia de poco más de 40 Km. Por su parte, Paracho y
Pátzcuaro tienen una cobertura de tres municipios cada uno. De este análisis inicial de accesibilidad, se puede identificar a un grupo de
municipios excéntricos, aquellos que presentan una mayor accesibilidad a zonas
urbanas fuera de la región. La zona urbana conformada por Zamora y Jacona tiene
una cobertura que abarca los municipios de Chilchota, Tangancícuaro y
Tangamandapio. Estas características de excentricidad, más que nada para
Tangamandapio, en un momento determinado pueden definir criterios de
interregionalidad ya que su ubicación los hace más accesibles a la región
Lerma-Chapala, por su proximidad al lago. El análisis inicial de accesibilidad confirma el hecho de la relación
inversamente proporcional entre ruralidad y accesibilidad: los datos obtenidos
muestran la tendencia de que a mayor índice de ruralidad se tiene un mayor costo
del transporte por persona (ver gráfica 2).
A partir de los datos anteriores es posible clasificar a los municipios
considerando las condiciones de ruralidad y marginalidad (ver cuadro 8).
En esta clasificación resaltan Charapan, Chilchota, Nahuatzen y Tancítaro como
los municipios con características rurales y con grado de marginalidad alto. De
éstos, los tres primeros son indígenas. Asimismo, también es posible clasificar a los municipios considerando las
condiciones de ruralidad y accesibilidad (ver cuadro 9).
En esta clasificación resaltan Charapan, Taretán y Tancítaro como los municipios
con características rurales y con accesibilidad baja, de éstos el primero es
indígena. Las tres características de ruralidad, marginalidad y accesibilidad en los
municipios de la región purhépecha del estado de Michoacán le imprimen algunos
contrastes a la región, los que se pueden asociar en algunas zonas con problemas
en diferentes niveles de su desarrollo: variaciones en el equipamiento de
infraestructura y en las capacidades administrativas municipales, limitaciones
en el acceso al mercado de productores y de satisfactores básicos, menores
niveles de bienestar, movimientos pendulares de fin de semana entre zonas
urbanas y rurales (desplazamiento de mano de obra), migración, entre otros. Considerando los resultados de los cuadros 8 y 9 es posible clasificar los
municipios en seis niveles calificados de desarrollo espacial con base en la
combinación de la organización espacial, marginalidad y accesibilidad. El nivel
1 tiene mejores condiciones y el nivel 6 las mayores menores (ver cuadro 10).
A partir de esta clasificación basada en tres indicadores es posible contrastar
características socioeconómicas para cada nivel de desarrollo espacial. En este
sentido, sería posible considerar tres elementos de fomento al desarrollo. En primer lugar, se puede considerar a los niveles 1 y 2 como municipios sujetos
a políticas de consolidación en los aspectos económicos y administrativos. Por
el perfil de los tres indicadores (ruralidad, marginalidad y accesibilidad), a
partir de estos siete municipios se puede considerar que se estructura la región
a partir de los siguientes subsistemas conformados por las localidades que se
indican: a) el subsistema urbano-rural de Uruapan-Nuevo Parangaricutiro, y el
subsistema urbano de Zacapu, b) el subsistema urbano-rural Pátzcuaro-
Erongarícuaro-Tzintzuntzan, y c) el subsistema urbano-rural de Los
Reyes-Periban-Tingüindin-Tocumbo. En segundo lugar, a los niveles 3 y 4, que agrupan a la mayoría de los
municipios, se les puede considerar como municipios sujetos a programas
enfocados al desarrollo de aquellas actividades que presenten las mejores
posibilidades de crecimiento. En este nivel sobresale el subsistemas
urbano-rural Paracho-Cheran-Nahuatzen. Por último, en tercer lugar, los niveles 5 y 6 que presentan las condiciones de
desarrollo espacial menos favorables. De estos 7 municipios restantes, sólo
Erongarícuaro y Tzintzuntzan están integrados a subsistemas urbano-rurales, para
el resto deberán definirse subsistemas rurales a partir de los cuales podrán
enfocarse políticas de desarrollo.
SEGUNDA PARTE: ANÁLISIS ESPACIAL Se considera que no es realista definir la característica de “ruralidad” de una
zona o localidad únicamente con base en la magnitud de la población. La
importancia de una localidad está definida tanto por sus características propias
como por el grado de interacción con otras localidades. El grado de interacción
está representado por la magnitud de los intercambios físicos (económicos) como
de información (social y políticos) y está en función del grado de desarrollo de
cada localidad y de la accesibilidad existente entre ellas. Así, la definición de subsistemas rurales parte de considerar como elementos
básicos la dispersión de la población, el grado de desarrollo de las localidades
y la accesibilidad existente entre ellas. Para este análisis se considera la
población de las localidades y los índices de ruralidad y urbanización. Como
indicador del grado de desarrollo se toma el índice de marginación, porque
representa una medida de acceso a bienes satisfactores de origen públicos o
privados: ejemplos son escuelas, centros de salud y oficinas administrativas, en
el primer caso; y mercados, servicios de transporte y empleo, en el segundo. La
accesibilidad entre localidades se efectúa con base en la configuración de la
red de infraestructura de caminos (carreteras, caminos rurales, terracerías,
brechas y veredas de animales, antiguos caminos reales o de herradura, y caminos
de labranzas ). El análisis espacial se realiza a partir de la combinación conjunta de la
definición de la red de infraestructura de caminos, con base en el patrón de los
nodos y arcos, y del establecimiento de centros y subcentros de geográficos. Con
base en el siguiente esquema:
El análisis de la dispersión de la población se basa en la definición de zonas
rurales basadas en el espacio. Se consideran zonas de aproximadamente 40 km2 de
área (cuadrados de 6.5x6.5 km) dado que se considera dentro del límite máximo de
desagregación y de homogeneización del espacio . Se agrupó la población de las
localidades ubicadas en esas áreas. Esto implicó agrupar las 972 localidades en
196 zonas. Cada zona tiene un centroide (nodo) con la población existente en las
localidades agrupadas, el índice de marginación, las coordenadas geográficas y
la altura sobre el nivel del mar (ver gráfica 3).
Se comentó en puntos anteriores que con base en la magnitud de la población y la
conectividad geográfica que la región purhépecha en estudio, está estructurada
con base en 4 subsistemas urbanos o urbanos rurales. Al considerar la agrupación
por zonas, para dichos subsistemas se puede determinar su importancia en
términos de la cobertura en número de localidades. El subsistema urbano-rural de
Uruapan-Nuevo Parangaricutiro se agrupa en 2 zonas con 39 localidades y una
población conjunta de casi 257 mil habitantes; el subsistema urbano de Zacapu
que agrupa 7 localidades con una población conjunta de más de 55 mil habitantes;
el subsistema urbano-rural Patzcuaro-Erongarícuaro-Tzintzuntzan que agrupa en
tres zonas a 23 localidades con casi 65 mil habitantes; el subsistema
urbano-rural de Los Reyes-Periban-Tingüindin-Tocumbo que en cuatro zonas se
agrupan 32 localidades con más de 57 habitantes. Sin embargo, en la definición de 196 zonas, de la región purhépecha en su
conjunto, destacan algunos subsistemas rurales a nivel de agrupación de
localidades, tales como Paracho que agrupa 5 localidades con más de 18 mil
habitantes; Quiroga que agrupa a 3 localidades con más de 17 mil habitantes; y
las localidades agrupadas en el corredor Huancito-Ichán, en el municipio de
Chilchota, que agrupan a 10 localidades con casi 16 mil habitantes, conocidos
como de la Cañada de lños once pueblors. Estos subsistemas rurales presentan
características de densidad de localidades y de población que sugieren ahondar
el análisis para determinar si existen interacciones internas para que puedan
determinarse como zonas rurales-urbanas. Hasta el momento se ha desarrollado el análisis espacial con base en el manejo
de la información que considera elementos de desarrollo espacial con base en
indicadores agrupados y en datos de accesibilidad. Sin embargo, el uso de
técnicas numéricas proveen de criterios adicionales para el análisis espacial,
con los cuales se alcanza cabalmente el objetivo propuesto en este trabajo.
Con base en un modelo de múltiples centros de gravedad en el que la población
(número de habitantes) representa la fuerza de atracción, en tanto que la
distancia y los costos de transporte asociados ($/pasajero-kilómetro) como
elementos “repulsivos” de las zonas se puede llevar a cabo una identificación
cuantitativa de los centros articuladores de la estructura espacial. A partir del número de municipios comprendidos en la región purhépecha se hace
un análisis desde un centro articulador hasta 10 centros. Los resultados del
modelo hacen posible identificar centros articuladores del espacio regional que
permita proveer de mayor accesibilidad a las área urbanas. Esta información se
contrasta con los centros articuladores urbanos actuales identificados en el
acápite 11 (ver cuadro 7). Los resultados del modelado espacial respecto a las diferentes medidas de
eficiencia obtenidas, son elocuentes a partir de la accesibilidad desde esos
centros hacia las zonas inmediatas (ver cuadro 11 y gráfica 4).
La determinación del número de centros idóneo para la estructuración de una
región está determinado por los sumatoria de los costos de “acceso” (calculados)
y los costos de “gestión” (por determinar) de las localidades. Este costo de
“gestión” se basa en la determinación de las economías de escala que es posible
obtener a partir del tamaño de las localidades: en cierto rango de población,
entre mayor es la población de una localidad se obtienen economías de escala en
los diferentes servicios urbanos y en el suministro de los recursos necesarios
para su desarrollo, el tamaño estará acotado por las des-economías generadas por
el sobredimensionamiento de la infraestructura, saturación de capacidades, entre
otras. Para el caso de la región purhépecha, entre los puntos extremos de uno y 10
centros se encuentra una variada gama de costos de acceso, en pesos por
habitante. El primer mínimo de la curva de costos se obtiene cuando hay seis
centros, de hecho la reducción de costos de uno a ocho centros es del 56%. Para
un mayor número de centros el siguiente mínimo de la curva se encuentra en los 9
centros, con una reducción de uno a 15 del 58%: una reducción de costos
considerablemente menor. Para determinar el número mínimo idóneo de centros a partir de los dos mínimos
de la tabla, 6 o 9 centros, se compara el costo promedio del cuadro 11 con el
costo promedio ponderado del cuadro 7, de $17.19 por persona. De esta
comparación se obtiene que para seis centros se alcanza el menor costo promedio
total y se logra que los costos asociados a cada centro sean inferiores a $17.19
pesos.
El costo total de movilización con los seis centros articuladores en su
conjunto, es de poco más de 11 millones de pesos, un 23.6% inferior a los 14.47
millones calculados en el análisis geográfico espacial. Estos datos sugieren una
mayor eficiencia en la movilización de la región si se consideran centros
articuladores. Con base en el modelo, se definen 6 centros articuladores de la región
purhépecha. La importancia relativa de estos centros se define a partir de la
población asignada y el costo de accesibilidad (ver cuadros 13 y 14).
Con base en los indicadores de accesibilidad
mencionados en el punto 11, se tiene una accesibilidad alta para todos
los centros articuladores. Según el cuadro 13, el costo máximo es de
$16.50/persona, que está dentro de los rangos de alta accesibilidad (ver
cuadro 7) A partir de los datos de localidades y población asignada, distancia y costo de
viaje, del cuadro 13, se pueden hacer algunas observaciones generales sobre las
características de los centros articuladores. En primer lugar, destacan los centros articuladores con una mayor de población y
localidades, tal como Uruapan, Los Reyes de Salgado y Tzintzuntzan; en este
último caso, agrupando a Patzcuaro y Quiroga. . En el otro extremo están Tangancícuaro y Nahuatzen, que presenta características
netamente rurales, una cantidad considerable de localidades con un porcentaje de
población de casi el 10%, lo que significa una menor densidad de localidades y
población, con la distancia de viaje más grande y la también mayor área de
influencia. El resto de los municipios presentan condiciones similares en términos de la
distancia de viaje y de densidad de población. Es importante hacer hincapié en que a partir de los seis municipios
articuladores y la definición de subsistemas de la primera parte, es posible
reformular esos subsistemas urbanos considerando análisis microrregionales que
incluyan no sólo las condiciones específicas de la infraestructura de
comunicaciones y su interacción con las la demanda de flujos de la población
urbana y rural, sino también elementos de carácter histórico-regional, e incluso
elementos de identificación cultural, por ejemplo, características indígenas y
mestizas, el reparto de la tierra, e incluso elementos tales como la migración y
planes específicos de desarrollo regional. Movilidad y organización espacial, las expectativas regionales, pueden
estudiarse también a partir de la cosmovisión que le da sentido a sus ideas de
tiempo y con base en sus prácticas culturales de asimilación al medio ambiente
desde el sentir purhépecha, porque el paso constante entre lugares como el que
se da entre lo cotidiano y lo imaginario, construye sus posiciones
espacio-temporales, la especificidad de sus espacios públicos y privados y
delimita las fronteras simbólicas desde otras perspectivas socio-antropológicas
de rutas y localidades. CONCLUSIONES De acuerdo con la magnitud de la población y la conectividad geográfica, la
región purhépecha, está estructurada con base en 4 subsistemas urbanos o urbanos
rurales. Al considerar la agrupación por zonas, para dichos subsistemas, se
determina su importancia en términos de la cobertura que tienen por su número de
localidades. Así, se tiene que el a) subsistema urbano-rural de Uruapan-Nuevo
Parangaricutiro, se agrupa en 2 zonas con 39 localidades y una población
conjunta de casi 257 mil habitantes; b) el subsistema urbano de Zacapu, agrupa 7
localidades con una población conjunta de más de 55 mil habitantes; c) el
subsistema urbano-rural Patzcuaro-Erongarícuaro-Tzintzuntzan, agrupa en tres
zonas a 23 localidades con casi 65 mil habitantes; y d) el subsistema
urbano-rural de Los Reyes-Periban-Tingüindin-Tocumbo, que en cuatro zonas agrupa
a 32 localidades con más de 57 mil habitantes. Esta regionalización es coincidente con las subregiones étnico-geográficas que
distinguen también cuatro componentes, aunque con distintos límites e
interacciones a los descubiertos y privilegiados aquí, y que integran las
demarcaciones tradicionales de: Japóndarhu (lugar del lago), Eráxamani (Cañada
de los once pueblos), Juátarisi (Meseta) y la ciénega de Zacapu. Entre las conclusiones particulares destacan las siguientes. Con base en el
análisis de la organización espacial, la marginalidad y la accesibilidad de los
municipios, realizado en la primera parte, se determinan las características
generales de los 23 municipios que desde la perspectiva adoptada, identifican a
la región purhépecha, en contraste con otras regionalizaciones consultadas. Asimismo, existe una gran dispersión equilibrada por núcleos urbanos que destaca
la polarización entre número de localidades urbanas y rurales y la concentración
poblacional. El 98% de las localidades habitadas en 2005, son rurales; el 1.5%,
mixtas; y urbanas el 0.5%. mientras que las localidades urbanas concentran al
37% de la población y las mixtas al 16%, el 46% de la población restante, reside
en localidades urbanas. Que considerando los grados de marginalidad, no muestran
rezago significativo en comparación con otras regiones del país, akunque se
confirme una correlación significativa entre índice de ruralidad e índice de
marginalidad para la mayoría de los municipios de la región. El nivel de accesibilidad de la región es alto con distancias de 20 kilómetros
promedio entre las localidades. Las distancias pormedio de viaje son de 16
kilómetros lo cual implica un costo por viaje por persona de $17.19 pesos, o sea
un costo de movilización para el total de la población regional de
$14,472,313.00 pesos. La accesibilidad es mayor en municipios más urbanos; misma
que disminuye en el caso de los 3 municipios clasificados como netamente rurales
para los cuales la distancia es de 37 kilómetros. Lo cual confirma el hecho de
la relación inversamente proporcional entre ruralidad y accesibilidad para la
región purhépecha. En la segunda parte, el análisis espacial alcanza las dimensiones del modelado
de múltiples centros de gravedad para establecer los cuatro subsistemas que
estructuran la región purhépecha, tal como se ha dicho al incicio de estas
conclusiones. A tal conclusión se llegó a partir del estudio de los contrastes
entre organización espacial, ruralidad-urbanidad, marginalidad y accesibilidad
que define 6 niveles calificados de desarrollo espacial para el cuerpo entero de
la región en estudio. Dadas características socioeconómicas para cada uno de estos 6 niveles
calificados, el análisis espacial realizado a partir de la combinación conjunta
de la definición de la red de infraestructura de caminos, con base en el patrón
de los nodos y arcos, del establecimiento de centros y subcentros geográficos,
lleva a determinar la importancia de los distintos agrupamientos definidos por
las 196 zonas encontradas. El uso de técnicas numéricas provee de criterios adicionales que hacen posible
concluir, a partir de un modelo de múltiples centros de gravedad aplicado, que
son los centros articuladores del espacio regional, los que pueden ofrecer una
estimación más precisa de la eficiencia en la movilización regional, mismos que
proveen diferentes medidas de eficiencia obtenidas para costos de acceso
promedio ponderado de 9.81 kilómetros con un costo de 413.13 pesos por persona y
con un costo total de movilización regional de $11.05 millones de pesos.
El modelado de 8 centros articuladores de la región Purhépecha distribuye las
972 localidades del universo bajo las siguientes 6 municipios articuladores
ordenados de mayor a menor por el costo de viaje ($/habitante): Tangancícuaro,
Tzintzuntzan, Nahuatzen, Uruapan, Zacapu, y Los Reyes de Salgado. A cada uno de estos 6 municipios articuladores corresponden series específicas
de los otros 17 municipios asignados restantes que tal como se explico en la
parte final del trabajo, definen la jerarquía espacial de la región purhécha por
las particulares articulaciones que se observaron en este estudio de sus
microregiones y corredores urbanos y urbanos rurales. Por todo lo anterior, el análisis espacial del universo de las localidades que
articulan las microregiones purhépechas de Michoacán, demuestra que existen 6
grados de coherencia espacial, para los que se pueden hacer corresponder otros
tantos niveles de posibles intervenciones públicas o privadas que fortalezcan
los niveles de desarrollo espacial encontrados a partir de un gestión más
integrada del medio y de las capacidades culturales con las que se fundaron
desde un principio las capitales purhépechas: en emplazamientos <abiertos al
cielo>; y para beneficio de la gente del pueblo, tal como dice su nombre:
<purhépechas>.
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