Letty Elizalde-Marín*
ESPOCH, Ecuador
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RESUMEN
En el mundo contable contemporáneo, la auditoria permite determinar y valorar la aplicación tanto de las políticas como los programas de las organizaciones empresariales, advirtiendo si existen controles seguros, ajustados a las necesidades de las mismas. Además, le corresponde corroborar la exactitud, autenticidad e integridad de los procesos y expedientes, así como los demás documentos administrativos, contables, financieros, presentados por la entidad, de igual forma, sugerir las mejoras que procedan de acuerdo a los criterios establecidos. En este contexto, dentro de la auditoria, se encuentra una rama contable financiera, la cual tiene como finalidad examinar los estados financieros y a través de ellos las transacciones contables realizadas por la entidad, con la finalidad de emitir una opinión técnica y profesional con respecto a la racionalidad de la posición financiera de le empresa. Por lo tanto, la auditoría financiera, se establece como todo un proceso sistemático de evaluación que una organización empresarial debe ejecutar para lograr conocer su situación económica y así poder hacerle frente a sus compromisos con sus respectivas ganancias, contando con una examinación adecuada de calidad, realizada por un equipo de auditores profesionales. En consecuencia, este artículo tiene como objetivo analizar la auditoría financiera como proceso para la toma de decisiones gerenciales, para cumplir con dicho propósito se utiliza una metodología de tipo documental, con diseño bibliográfico, consultando diferentes fuentes, recopilando información relevante, destacando aspectos relacionados a la auditoría financiera, normas de auditoría financiera, su proceso, planificación, ejecución, el informe financiero, dictamen, información, la toma de decisiones, tipos de decisiones, las decisiones programadas y no programadas y el proceso de toma de decisiones. Metodológicamente, esta investigación fue desarrollada de tipo documental, ya que se concentró exclusivamente en la compilación de información en diversas fuentes, explorar varios documentos escritos referentes a la auditoría financiera como proceso para la toma de decisiones gerenciales. Igualmente, se enmarcó en un diseño bibliográfico, basándose en la búsqueda metódica del documental recopilado relacionado a la auditoría financiera y sus etapas, proceso, su relación con las toma de decisiones gerenciales, con la finalidad de realizar un análisis. De igual manera, para la fase donde se consolida la información, se utiliza una base de datos elaborada para tal efecto, en la que se guarda lo recabado. En el desarrollo de la etapa de análisis de los documentos, fuentes o datos, se procedió a elaborar las fichas de contenido textual, lo cual ayudó a manejar la información obtenida. En este sentido, la organización de estos contenidos, así como la revisión esquemática, permite verificar si el proceso de investigación es acertado, en lugar de erróneo, valorar el material recopilado, así como la detección de excesos en las ideas transcritas, con el fin de organizar, uniformar la investigación de manera eficaz, para constatar que no falten datos esenciales. Tras el proceso anterior, se clasifica el material recopilado siendo depurados aquellos datos con mayor relevancia para responder al objetivo de estudio. De allí, fue ejecutada la lectura e interpretación de los textos a los fines de formular un análisis y reflexiones finales del contenido. Logrando establecer que la auditoría financiera como proceso para la toma de decisiones gerenciales, es imprescindible a los fines de visualizar la situación financiera de cualquier organización.
Palabras clave: Auditoria- financiero- auditoría financiera- proceso- toma de decisiones- gerenciales.
Clasificación JEL: M4- M41- M42- Z19
ENLACES a Wikipedia JEL y UNESCO: 13 M- M41-M42
ABSTRACT
In the contemporary accounting world, auditing makes it possible to determine and assess the application of both policies and programs of business organizations, warning whether there are safe controls, adjusted to their needs. In addition, it is necessary to corroborate the accuracy, authenticity and integrity of the processes and files, as well as the other administrative, accounting and financial documents submitted by the entity, as well as to suggest improvements that proceed according to the established criteria. In this context, within the audit, there is a financial accounting branch, whose purpose is to examine the financial statements and through them the accounting transactions made by the entity, with the purpose of issuing a technical and professional opinion with respect to the rationality of the financial position of the company. Therefore, the financial audit is established as a whole systematic evaluation process that a business organization must execute to get to know its economic situation and thus be able to face its commitments with their respective earnings, having an adequate quality examination, performed by a team of professional auditors. Consequently, this article aims to analyze the financial audit as a process for making managerial decisions, to meet this purpose a methodology of documentary type is used, with bibliographic design, consulting different sources, gathering relevant information, highlighting aspects related to financial audit, financial audit standards, its process, planning, execution, financial report, opinion, information, decision making, types of decisions, scheduled and unscheduled decisions and the decision-making process. Methodologically, this research was developed as a documentary type, since it focused exclusively on the compilation of information in diverse sources, exploring several written documents referring to the financial audit as a process for making managerial decisions. Likewise, it was framed in a bibliographic design, based on the methodical search of the compiled documentary related to the financial audit and its stages, process, its relationship with management decision making, with the purpose of carrying out an analysis. In the same way, for the phase where the information is consolidated, a database elaborated for this purpose is used, in which the information collected is saved. In the development of the analysis stage of the documents, sources or data, the textual content cards were developed, which helped to manage the information obtained. In this sense, the organization of these contents, as well as the schematic review, allows to verify if the research process is correct, instead of erroneous, to evaluate the material collected, as well as the detection of excesses in the ideas transcribed, in order to organize, standardize the investigation in an efficient way, to verify that there is no lack of essential data. After the previous process, the collected material is classified, with the most relevant data being purified to respond to the study objective. From there, the reading and interpretation of the texts was executed in order to formulate an analysis and final reflections of the content. Achieving establish that the financial audit as a process for making managerial decisions, is essential for the purposes of visualizing the financial situation of any organization.
Key words: Audit- financial- financial audit- process- decision making- management.
JEL Classification: JEL: M4- M41- M42- Z19
Links to Wikipedia JEL and UNESCO: 13 M- M41-M42
Para citar este artículo puede uitlizar el siguiente formato:
Letty Elizalde-Marín (2018): "Auditoria financiera como proceso para la toma de decisiones gerenciales", Revista Observatorio de la Economía Latinoamericana, (octubre 2018). En línea:
https://www.eumed.net/rev/oel/2018/10/auditoria-financiera-decisiones.html
//hdl.handle.net/20.500.11763/oel1810auditoria-financiera-decisiones
Para Estupiñán (2012), la auditoría financiera, también conocida como auditoría contable, se trata de un método por el que se examina y analiza la información que una empresa tiene reflejada en los estados de sus cuentas. Dicha auditoría podrá ser realizada por un auditor interno o externo a la empresa, pero un auditor del sector privado, no del público como pasa por ejemplo en la auditoría fiscal.
Su importancia es vital para cualquier organización, sea empresarial o no, porque es necesario conocer cuál es la situación real devenida de la actuación financiera ejercida por la gerencia, a los fines de afrontar cualquier problemática que pueda estarse presentando.
Según Catacora (2012), la auditoría financiera es la acumulación, examen sistemático y objetivo de evidencia, con el propósito de: a) Emitir una opinión independiente respecto a si los estados financieros de la entidad auditada presentan razonablemente en todo aspecto significativo, y de acuerdo con las Normas Básicas del Sistema de Contabilidad Integrada, la situación patrimonial y financiera, los resultados de sus operaciones, los flujos de efectivo, la evolución del patrimonio neto, la ejecución presupuestaria de recursos, la ejecución presupuestaria de gastos, y los cambios en la cuenta ahorro-inversión-financiamiento, b) Determinar si: 1) la información financiera se encuentra presentada de acuerdo con criterios establecidos o declarados expresamente; 2) la entidad auditada ha cumplido con requisitos financieros específicos y 3) el control interno relacionado con la presentación de informes financieros, ha sido diseñado e implantado para lograr los objetivos.
En el mismo sentido, Sánchez (2006), plantea que la auditoría financiera consiste en el examen, evaluación de los documentos, operaciones, registros y estados financieros de la entidad, para determinar si ellos reflejan razonablemente su situación financiera, asi como, los resultados de sus operaciones, además del cumplimiento de las disposiciones económico-financiero y el control interno.
Por su parte, Bujan (2018), expresa que la auditoría financiera, o más exactamente, una auditoria de estados financieros, es la revisión de los estados financieros de una empresa o cualquier otra persona jurídica (incluyendo gobiernos) con base a una serie de normas previamente establecidas, dando como resultado la publicación de una opinión independiente sobre si los estados financieros son relevantes, precisos, completos y presentados con justicia.
En consecuencia y tomando en consideración a los postulados citados, se puede inferir, que la auditoría financiera es todo un proceso de evaluación, revisión, argumentación y dictamen sobre todos los elementos que forman parte de las actividades económicas de las entidades comerciales, sirviendo de bastión a la gerencia para la toma de decisiones.
De acuerdo a Cano (2005), el objetivo de la auditoría financiera, es el de determinar si los estados de cuentas y los registros que en ellos hagan las empresas o entidades corporativas, cumplen o no con la normativa contable vigente, sin ocultar vicio ni mala fe alguna, ni escondiendo o camuflando algún estado (es necesario pensar en quiebras, falta de solvencia y liquidez, entre otros).
De igual forma, Bujan (2018), explica que las auditorias financieras existen para añadir credibilidad a la afirmación implícita en la gestión de una organización de que sus estados financieros reflejaban fielmente la postura de la organización y el funcionamiento a las partes interesadas de la empresa. En este sentido, las principales partes interesadas de una empresa son sus accionistas normalmente, pero otras partes, tales como las autoridades fiscales, los bancos, los reguladores, proveedores, clientes y empleados, también pueden tener un interés en asegurar que los estados financieros sean exactos.
Para Ruiz (2014), los objetivos de una auditoría financiera, son, a grandes rasgos, evaluar de forma objetiva y concreta las actividades de la empresa o cualquiera de sus áreas para cumplir sus metas. Al ser su enfoque integral, es considerada como una auditoría de economía y eficiencia y su importancia responde a la responsabilidad de reajustar la organización de la empresa para alcanzar la rentabilidad óptima.
En consecuencia y tomando en consideración a los teóricos analizados, se puede inferir, que los objetivos de la auditoría financiera, a pesar de nombrar el determinar, el añadir, el evaluar, todos se centran en uno general, el dictaminar la información económico-financiera de las organizaciones empresariales, con la finalidad de poder establecer estrategias, que vayan acorde a los resultados emitidos.
Para Catacora (2012), rara vez las pymes se someten a una auditoría contable con tal rigor como lo pueden hacer las grandes empresas. Por ello, no está de más saber el procedimiento básico para que el propio empresario pueda realizar una auditoría contable y conocer más a fondo el estado de sus cuentas.
Continúa el autor agregando ¿Cuál es el procedimiento de la auditoría financiera?:
En este sentido Estupiñán (2012), expresa que como resultado de la auditoría financiera se pueden emitir los siguientes tipos de informe:
Asimismo, Bujan (2018), plantea que dentro de los procedimientos de la auditoría financiera están:
Para Gómez (2010), los Procedimientos de auditoría obligaciones financieras son los siguientes:
Al terminar la revisión de las obligaciones financieras, el auditor debe preparar el programa de auditoría que va a realizar durante el examen a la empresa, este será el que le dé una seguridad razonable sobre el estudio que ha realizado.
Tomando en consideración a los postulados citados, se puede inferir, que los procedimientos de la auditoría financiera, son diversos, según cada autor, pero todos concuerdan en que el mismo es sistemático, y debe de realizarse con el manejo de la información contable, revisión de evidencias y sus operativas, elaborando una serie de pasos para concretar un resultado financiero de la entidad o departamento auditado.
Para la Contraloría General del Estado Bolívar en Venezuela (2012), la auditoría financiera debe regirse por las siguientes normas:
Cano (2005), señala que las nomas para el ejercicio de la autoría financiera, se definen como los principios generales que orientan el trabajo de auditoria, estableciendo el marco conceptual dentro del cual el auditor decide las acciones a tomar en la planeación, ejecución, y elaboración del informe, sobre el examen de los estados financiero así como además operaciones relacionadas con actividades económicas administrativas.
Por otra parte Estupiñán (2004), afirma que las normas de auditoria de estados financieros (auditoría financiera) tienen como objetivo constituir el marco de actuación que deberá sujetarse el contador público independiente que emita dictámenes (opiniones para efectos ante terceros con el fin de confirmar la veracidad, pertinencia o relevancia suficiente de la información sujeta a examinar. Del mismo modo, para Mantilla (2007), son las normas que afectan a las condiciones que debe de reunir el auditor en su comportamiento en el desarrollo de la actividad de auditoria.
Para Whittington y Pany (2005), las normas de auditoría son, las indicaciones que en forma obligatoria los auditores tienen que cumplir en el desempeño de sus funciones, presentando los requisitos personales y profesionales del auditor, además de orientaciones para la uniformidad en el trabajo contable, con el propósito de lograr un buen nivel de calidad en el examen, como también, indicar lo concerniente a la elaboración del informe de auditoría.
En este contexto, las Normas de Auditoria Generalmente Aceptadas (2008), aplicables al ejercicio de la auditoria de la gestión contable, se refieren a: la persona (personales), el trabajo y el informe de auditoría financiera.
En el mismo orden de ideas, Chillida (2009), indica que las NAGA, son un conjunto de principios, procedimientos, reglas o normas que regulan el ejercicio de la auditoria tanto interna como externa, ayudan a los auditores a cumplir con sus responsabilidades profesionales en la revisión de los estados financieros, incluyendo las capacidades como persona, las competencias, la independencia, las evidencias y opinión.
Por su parte, Ackoff (2009), explica que las normas de auditoria generalmente aceptadas (NAGA), son los principios fundamentales de auditoria a los que debe enmarcarse su desempeño los auditores durante todo el proceso, el cumplimiento de estas normas garantiza la calidad del trabajo profesional del auditor.
Por lo tanto, en consideración a los postulados citados, se puede inferir, que las Normas de Auditoria Generalmente Aceptadas (NAGA), vienen a ser las guías a seguir, por todo profesional que ejerce una auditoría financiera, unifica todos los procesos, hablando un solo idioma para auditar, los documentos que deben de utilizarse, las evidencias que deben ser solicitadas, los formularios a aplicar y los dictamen que se arrojaran.
El proceso de auditoría financiera es para Salinas (2010), un conjunto de acciones o actividades sistemáticas que se realizan o tienen lugar con la finalidad de analizar y apreciar, con vistas a eventuales acciones correctivas, el control interno referente a las operaciones financieras de la empresa. Mientras que Mendivil (2010), la reseña con el proceso de técnicas de investigación aplicables a una partida o a un grupo de hechos y circunstancias relativas a los estados financieros sujetos a examen, mediante los cuales, el contador público obtiene las bases para fundamentar su opinión.
Por su parte Rodríguez (2007), la refiere como el conjunto de pasos necesarios para aplicar el método, los principios y las técnicas de la herramienta en forma correcta y la información relevante para poder después efectuar el análisis completo del resultado que se obtuvo por una examen detallado de la gestión financiera de una empresa, con el fin de evaluar la eficiencia de los mismos, sus metas fijadas, sus recursos, sus métodos, controles, así como su forma de operar.
En este mismo orden, Estupiñán (2012), reseña que el proceso seguido en una auditoría financiera, se puede resumir en lo siguiente: inicia con la expedición de la orden de trabajo y culmina con la emisión del informe respectivo, cubriendo todas las actividades vinculadas con las instrucciones impartidas por la jefatura, relacionadas con el ente examinado.
Constituye la primera fase del proceso de auditoría y de su concepción dependerá la eficiencia y efectividad en el logro de los objetivos propuestos, utilizando los recursos estrictamente necesarios.
Esta fase debe considerar alternativas y seleccionar los métodos y prácticas más apropiadas para realizar las tareas, por tanto esta actividad debe ser cuidadosa, creativa positiva e imaginativa; por lo que necesariamente debe ser ejecutada por los miembros más experimentados del equipo de trabajo.
La planificación de la auditoría financiera, comienza con la obtención de información necesaria para definir la estrategia a emplear y culmina con la definición detallada de las tareas a realizar en la fase de ejecución.
En esta fase el auditor debe aplicar los procedimientos establecidos en los programas de auditoría y desarrollar completamente los hallazgos significativos relacionados con las áreas y componentes considerados como críticos, determinando los atributos de condición, criterio, efecto y causa que motivaron cada desviación o problema identificado.
Es de fundamental importancia que el auditor mantenga una comunicación continua y constante con los funcionarios y empleados responsables durante el examen, con el propósito de mantenerles informados sobre las desviaciones detectadas a fin de que en forma oportuna se presente los justificativos o se tomen las acciones correctivas pertinentes.
La comunicación de resultados es la última fase del proceso de la auditoría, sin embargo ésta se cumple en el transcurso del desarrollo de la auditoría.
Está dirigida a los funcionarios de la entidad examinada con el propósito de que presenten la información verbal o escrita respecto a los asuntos observados, además comprende también, la redacción y revisión final del informe borrador, el que será elaborado en el transcurso del examen, con el fin de que el último día de trabajo en el campo y previa convocatoria, se comunique los resultados mediante la lectura del borrador del informe a las autoridades y funcionarios responsables de las operaciones examinadas, de conformidad con la ley pertinente.
La carta de dictamen.
Los estados financieros.
Las notas aclaratorias correspondientes.
La información financiera complementaria y,
Los comentarios, conclusiones y recomendaciones relativos a los hallazgos de auditoría.
Según las Normas Internaciones de Auditoria (2008), el planeamiento de la auditoria comprende el desarrollo de la estrategia global para su conducción, al igual que el establecimiento de un enfoque apropiado sobre la naturaleza, oportunidad y alcance de los procedimientos de la auditoría que deben aplicarse, dicho planteamiento debe permitir que el equipo de auditores pueda hacer uso apropiado del potencial humano disponible.
Por su parte Palma (2012), señala que la planificación de la auditoría comprende unas actividades preliminares enfocadas en la evaluación de independencia y entendimiento de los términos del trabajo, para luego pasar a la definición de la estrategia general de auditoría, estableciendo los siguientes puntos; marco de referencia aplicable, definición de plazos, áreas de énfasis con base a los riesgos, alcance, oportunidad, naturaleza de las pruebas, miembros y asignación de tareas a equipo.
Continuando el autor, dentro de la planificación se determina el desarrollo del plan de auditoría, la herramienta para análisis de riesgo, pruebas específicas por componente (naturaleza, oportunidad y alcance), así como la previsión de los posibles cambios en la planeación a través de un proceso reiterado y constante de comunicación con el cliente.
Igualmente Estupiñán (2006), explica que la planificación consiste en determinar adecuada y razonablemente los procedimientos de auditoría que correspondan aplicar, como y cuando se ejecutaran, para que se cumpla la actividad de forma eficiente y efectiva. De allí que, la planificación permite identificar lo que debe hacerse en una auditoría, por quien y cuando. Generalmente la planificación es vista como una secuencia de pasos que conducen a la ejecución de procedimientos sustantivos de auditoría, sin embargo, este proceso debe proseguir en forma continua durante el curso de la evaluación.
En consecuencia, y tomando en consideración lo expuesto por los autores, se puede inferir, que el planeamiento de auditoría es asumido como una secuencia de pasos a seguir que conducen a la ejecución de procedimientos sustantivos de auditoría, sin embargo, este proceso debe proseguir de forma continua durante el curso de la evaluación, por ejemplo; los resultados de la comprensión de la estructura del control interno tienen un impacto directo al planear los procedimientos sustantivos de auditoría.
Para Estupiñán (2006), esta fase es la parte central de la auditoría, en ella se practican todas las pruebas y se utilizan todas las técnicas o procedimientos para ubicar las evidencias que sustentaran el informe, su contexto es el de satisfacer los objetivos establecidos en la asignación de actividades para desarrollar las tareas definidas en el plan de trabajo. En esta fase el equipo auditor, desarrolla los programas de auditoría para cada proceso significativo o línea, además aplicar pruebas mediante las diferentes técnicas que conduzcan a determinar los hallazgos.
Por su parte, Elizandro (2010), indica que con ella se busca obtener y analizar toda la información del proceso que se audita, con la finalidad de obtener evidencias suficiente, competente, relevante, es decir, contar con todos los elementos que le aseguren al auditor el establecimiento de conclusiones fundadas en el informe acerca de las situaciones analizadas en terreno, que entre otras incluyan; el nivel efectivo de exposición al riesgo, las causas que lo originan, los efectos o impactos que se podrían ocasionar al materializarse un riesgo, para en base a estos análisis, generar las recomendaciones que debería acoger la dirección o directiva.
De igual manera Gómez (2010), define esta fase con la aplicación de los procedimientos diseñados en cada uno de los programas de auditoría para la obtención de evidencias con el fin de emitir opiniones sobre la racionalidad de los estados financieros.
Tomando como base los criterios expuestos por los autores consultados, se puede inferir, que presentan ideas bien precisas como sustentadas, amplían de forma detallada cada uno de los pasos a cumplir en la ejecución de la auditoría, lo cual despeja cualquier duda existente. Es por ello, que la ejecución, se caracteriza por obtener, identificar, analizar, registrar suficiente información, de manera tal que permita cumplir con los objetivos del trabajo.
Según Keno (2010), al concluir el trabajo de auditoría contable, el auditor o auditores responsables deben elaborar un informe que comprende el dictamen u opinión sobre la racionalidad del contenido, así como la presentación de la información financiera analizada, los comentarios, conclusiones, recomendaciones sobre los hallazgos significativos relacionados con el ejercicio de la auditoría.
Según Henderson (2010), aquí se determinan los parámetros o directrices que se deben aplicar en la base del informe de la auditoría, con el fin de estructurar un documento con el resultado del proceso auditor que se comunica a los auditados o destinatarios correspondientes. Mientras que Hernández y Alvares (2012), indican que la etapa del informe de los resultados considera la emisión de un informe con análisis y recomendaciones factibles de interpretar que conlleven a un alto impacto o significación a la transparencia de gestión en los servicios así como un fortalecimiento a la labor de auditoría interna en el sector público.
Por ello, considerando las definiciones emitidas por los autores arriba mencionados, se pude inferir, que los informes se conocen como los documentos que sintetizan el resultado del cumplimiento de los objetivos definidos en la asignación de actividades de auditoría, en el plan de trabajo y el resultado de las puertas adelantadas en la fase de ejecución.
Para Guajardo (2013), el dictamen es la expresión de las conclusiones finales a la que ha llegado el equipo de auditoría, luego de realizar el proceso auditor, en torno de la gestión y los resultados, la razonabilidad de los estados contables, el cumplimiento de las normas así como el funcionamiento del sistema de control interno. Mientras que para Kennedy, Mc Mullen (2009), el dictamen del auditor debería contener una clara expresión de opinión escrita sobre los estados financieros tomados como un todo.
Igualmente, para Lacoma (2010), se informa acerca de la situación financiera de la compañía o de la persona auditada y los métodos o procedimientos empleados para llegar a esa conclusión. Luego se expresa la opinión del auditor respecto a la salud financiera de la organización empresarial y su conformidad o no, con los principios de contabilidad generalmente aceptados, Debe de contener uno de los siguientes tipos de opinión:
En consecuencia y tomando en consideración a los postulados citados, se puede inferir, en relación al dictamen que el mismo es la expresión de opinión con respecto a los estados financieros tomados en conjunto, o una aseveración en el sentido de que no pueda expresar su opinión, el dictamen debe contener una indicación clara y concisa de la naturaleza del examen del auditor y el grado de responsabilidad que se está sumiendo.
Lara (2010), establece que la auditoría contable se lleva acabo conforme a las normas o métodos dispuestos por los estándares de auditoria generalmente aceptados, que es diseñada para brindar una garantía de que lo detallado en los estados contables es preciso. Además se indican los métodos de contabilidad empleados por la compañía. Asimismo, esta sección incluye un resumen de la información recolectada durante la auditoria, el contenido de este resumen está determinado por lo que el auditor considera importante para los niveles ejecutivos de la empresa, este resumen no brinda la opinión del auditor sino que se enfoca en expresar, con claridad los resultados de la auditoria.
En el mismo sentido, López (2008), indica que el dictamen deberá incluir información financiera, donde se establezca que los estados financieros son responsabilidad de la administración de la entidad y una declaración de que el compromiso del auditor es expresar una opinión sobre la situación contable con base en la auditoria. Por su parte Pérez y Caso (2010). Explica que el contador plasma en su dictamen la opinión que se ha formado de los estados financieros examinados, es en esta fase, donde indica, si las cifras contenidas en los mismos son razonables y que demuestran la situación financiera de la entidad, los resultados de sus operaciones y el movimiento del efectivo por los ejercicios que haya auditado.
En consecuencia y tomando en consideración a los postulados citados, se puede inferir, que la información financiera, posee una importancia altísima, ya que considera todos los elementos tomados en cuenta puestos en evidencia por parte del dictamen del auditor.
Es una de las principales responsabilidades de mayor importancia para el gerente de una organización empresarial. Según Certo (2013, pág. 150), “una decisión es la escogencia de una alternativa entre varias opciones. El proceso de toma de decisiones comprende los pasos que cada quien toma las decisiones para llegar a esa escogencia”.
En este sentido, Robbins y De Cenzo (2012), afirma que es un proceso que comienza por identificar un problema, elegir una alternativa que pueda resolver el problema y termina por evaluar la eficacia de la decisión, la calidad de estas decisiones tiene mucho que ver al determinar el éxito o fracaso de una organización.
Para Espinoza (2016, pág. 7), “son actitudes que permiten examinar alternativas, elegir entre ellas, así como usar diversas herramientas y técnicas para tomar las mismas. El proceso de decisión comienza con un conflicto entre alternativas, este conflicto permanece hasta que una de las alternativas recibe mayor peso y en consecuencia, es escogida en el momento de la decisión, de allí que decir del autor, es optar por una o más alternativas.
De la misma manera, Herrera (2013), explica la toma de decisiones como la selección de un curso de acción entre varias opciones, un aspecto fundamental en la toma de decisiones es la percepción de la situación por parte del individuo o grupo de personas implicadas, ya que puede ser pervivida por una persona como un problema y por otra como una situación normal o hasta favorable.
De acuerdo al análisis de los teóricos referenciados, se puede inferir, que la toma de decisiones, es un elemento dentro de un proceso, el cual muy pocos no le gusta asumir, pero tienen que hacerlo, ya que del mismo, se desencadenaran diversas situaciones que favorezcan o desfavorezcan a toda la organización empresarial.
Para Robbins y De Cenzo (2012), el tipo de toma de decisiones viene diferenciado entre las decisiones programadas o de rutina y las no programadas. La primera representa el camino más eficiente para manejar problemas bien estructurados, no obstante, cuando los problemas no están bien estructurados los gerentes deben recurrir a la toma de decisiones no programas para encontrar soluciones únicas.
La toma de decisiones tiene un conjunto de bases que facilitan y permiten llegar a ella. Según Chiavenato (2015), presenta entre los tipos de decisiones las programadas y las no programadas. Estas presentan una serie de condiciones específicas para ser tomadas.
De la misma manera Koontz y Weihrich (2013), expresan que pueden distinguirse dos tipos de decisiones según los niveles de organización, la naturaleza de los problemas, programas y no programadas.
En consecuencia y tomando en consideración a los postulados citados, se puede inferir, que existen diversos tipos de decisiones, las cuales dependerán del nivel y responsabilidad de la persona que las está tomando y su entorno laboral, concordado con Koontz y Weihrich (2013), al expresar que pueden distinguirse dos tipos de decisiones según los niveles de organización, la naturaleza de los problemas, programas y no programadas.
Para Daft (2017), las decisiones programadas son repetidas y están bien definidas, en ellas se cuenta para resolver el problema, están bien estructuradas debido a que por lo general, los criterios para ejercerla son claros, se cuenta con información acerca del desempeño de la misma, los caminas a seguir se especifican fácilmente y hay una certidumbre relativa de que la alternativa elegida será exitosa. Este tipo de decisiones son utilizadas por las empresas de forma rutinaria, repetitivas, tomando en consideración las soluciones anteriores, es decir, son manejadas de la misma manera.
Robbins y De Cenzo (2012), las definen como decisiones repetitivas que pueden manejarse mediante un planteamiento de rutina, las decisiones se programan en el grado que son repetitivas o de rutina y en el grado que ha funcionado un planteamiento definitivo para manejarlas, estas son sumamente sencillas y tiende a apoyarse en soluciones anteriores.
De igual manera, Mosley (2015), considera también en relación a esto que las decisiones programadas son las de rutina y repetitivas ya que tales decisiones tienden a ser similares y deben tomarse con frecuencia, los gerentes establecen una forma sistemática de manejarlas.
En consecuencia y tomando en consideración lo expuesto por los autores arriba mencionados, se puede inferir, que las decisiones programas son las más fáciles de tomar, ya que son muy repetitivas, existe un manual o procedimiento para hacerlo, sin ningún contratiempo conocido a ocurrir.
Robbins y De Cenzo (2012), definen las decisiones no programadas como decisiones únicas que requieren soluciones elaboradas a propósito, estas son únicas y no recurrentes, cuando la gerencia enfrente un problema mal estructurado o uno nuevo, no hay una solución común, se necesita una respuesta formulada a la medida del usuario.
Asimismo, Daft (2017), reseña, que las decisiones no programadas son nuevas y están definidas de manera deficiente, no existe ningún procedimiento para resolver el problema, este tipo de decisiones se utiliza cuando una organización empresarial no se ha percatado con anterioridad del problema y quizás no sepa responder ante él, por lo general, se pueden desarrollar pocas alternativas para una decisión no programada, de manera que se produce una solución a la medida de las necesidades que plantee el problema.
Complementa lo expuesto Mosley (2015), quien afirma, las decisiones no programadas son las que ocurren de manera infrecuente, debido a que intervienen variables distintas y que precisan una respuesta separada y diferente cada vez, es difícil establecer una forma sistemática de manejar estas decisiones.
De acuerdo a lo expuesto por los autores arriba mencionados, se puede inferir, que las decisiones no programas, son las más álgidas y difíciles de tomar, ya que se desprenden de circunstancias nuevas o desconocidas para la entidad, se ignora el resultado final de dicha decisión.
La toma de decisiones se comprende como un proceso en el cual se necesita definir, analizar, juzgar, correr riesgos y conducir la acción de parte de la gerencia de toda organización empresarial. Ahora bien, para Falcón (2014), en el proceso de toma de decisiones se pueden identificar seis etapas que son: identificación y diagnóstico, generación de alternativas, selección de la mejor alternativa, implementar la decisión y evaluar los resultados.
Según Altschul (2013), el proceso de toma de decisiones consiste en la facultad de escoger la mejor y más conveniente alternativa de un conjunto posible. Para el autor, la toma de decisiones responde a una concepción de procesos que integra de manera consiente el esfuerzo de las personas comprometidas con la decisión, para organizar las metas y calibrar los logros.
En consecuencia y tomando en consideración lo expuesto por los autores arriba mencionados, se puede inferir, que el proceso de la toma de decisiones, es muy álgido y contradictorio en muchos de los casos, pero muy necesario para el funcionamiento de las entidades económicas, contribuyen con el flujo de las operaciones y su buen desenvolvimiento, aunado a esto, requieren de un soporte que les ayuden a tomar la mejor decisión, para ello, se debe conocer la realidad de la situación económica de la empresa en tiempo real, es ahí, donde entra como respaldo y bastión la auditoría financiera.
REFERENCIAS
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