Ernesché Rodríguez Asien
Universidad de la Habana

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La economía japonesa está en problemas desde hace ya varios años, después de una cierta recuperación, volvió a recaer pero esta vez con más fuerza pues en el último trimestre del 2008 tuvo su mayor contracción desde la crisis petrolera de 1974, afectada sobre todo por una caída sin precedentes en las exportaciones.

En el último trimestre del 2008 el PIB nipón se contrajo un 3,2 % registrando su peor baja en 35 años, inclusive la caída fue superior que en otros países desarrollados.

La tasa anualizada de contracción ha sido de 12, 7% o sea tres trimestres seguidos de decrecimiento. A esto se le suma que hubo una importante caída en la tasa de inflación lo que posibilita una deflación.

El Banco de Japón advirtió que existe un riesgo de deflación hasta el 2011 o sea dos años continuos con este fenómeno que traería consecuencias muy negativas para la economía en general, pues el descenso en los precios provoca a su vez efectos negativos en las empresas como recortes de personal, reducción en la inversión de equipos, entre otros y que a la larga disminuye las ganancias empresariales.

Analizando el sector empresarial se puede comprobar que muchas compañías niponas obtuvieron resultados muy preocupantes, ejemplo de ello fue el segundo fabricante de automóviles del país, Honda que tuvo una caída en sus ganancias de un 89% en el cuarto trimestre del 2008. También la empresa de productos electrónicos Hitachi anunció que había tenido pérdidas por el entorno de los $ 7 800 millones.

Coinciden varios analistas que las empresas japonesas están siendo afectadas por una fuerte caída de las exportaciones, que han sido causadas por la apreciación del yen y el desplome de la demanda a nivel mundial causado por la recesión internacional.

Otro aspecto a tener en cuenta es que la producción industrial que cayó 9,6% en el mes de diciembre, la contracción mas fuerte desde que comenzaron los registros de medición, pero lo triste de ello es que el ministro de Economía de Japón dijo que era una situación sin precedentes y pronosticó que el decrecimiento en la producción industrial tenderá a continuar.

También debido a lo anterior la tasa de desempleo subió en diciembre del 2008 a 4,4% la cifra más alta en tres años.

El Gobierno nipón prevé un decrecimiento para el año fiscal 2008 que finaliza en marzo del 2009, estimando un retroceso de 0,8% en comparación con 1,3% anual previsto anteriormente. Pues pronostica que su economía va en vías de empeorar por primera vez en siete años, dado que el gasto de capital, los beneficios empresariales y las oportunidades laborales siguen descendiendo a gran ritmo en medio de la crisis económica internacional.

El primer ministro nipón Taro Aso ha declarado que la economía nipona a sufrido condiciones severas y se ha comprometido a implementar lo antes posible paquetes de estimulo incluidos en un presupuesto extra para estimular la economía.

¿Que esta pasando en el primer trimestre del 2009?

Se sabe que un yen más débil sería un alivio para los grandes exportadores de Japón. La fortaleza de la moneda en los últimos meses ha sido muy dañina para industria automotriz nipona, sobre todo la Toyota Motor Corp.

En el último trimestre del 2008, la economía se contrajo a su ritmo más veloz en tres décadas. En enero del 2009, las exportaciones sufrieron su mayor caída y el déficit comercial del país creció a un nivel record.

El índice Tankan que refleja la confianza empresarial nipona y que se da un informe cada tres meses, reflejó el peor nivel y la peor caída trimestral de su historia, entre enero y marzo, respecto a los tres meses anteriores, ubicándose en menos de 58 puntos, es decir 34 unidades por debajo de los menos 24 puntos registrados entre octubre y diciembre del 2008, siendo el sexto trimestre consecutivo de la confianza empresarial en Japón.

La producción industrial japonesa disminuyó por quinto mes consecutivo en febrero, con una caída del 9,4% respecto al mes anterior. La caída de mayor contracción en la demanda de automóviles y productos de alta tecnología japoneses en el mundo sigue siendo un factor clave que provoca la disminución de producción.

Las ventas de automóviles de Japón se desplomaron en marzo del 2009 en un 32%, donde las marcas de autos mas afectadas fueron Nissan y Toyota. Toyota, primer fabricante de automóviles del mundo, vio reducidas sus ventas en marzo en un 31% hasta las 135 700 unidades, sin contar con sus modelos de la marca de lujo Lexus. Por su parte, las ventas de Nissan se contrajeron un 33,5% hasta los 59,292 vehículos.

La tasa de desempleo de Japón en febrero del presente año a llegado a ser la mas alta en los últimos tres años ubicándose en un 4,4%. Los despidos masivos han conducido a que 2,99 millones de personas estén sin trabajo como consecuencia de la peor crisis económica que atraviesa el país desde la Segunda Guerra Mundial.

Han aparecido nuevos casos de suicidios en Japón a causa de esta crisis que a provocado un gran desempleo y empeorado la situación económica de los nipones. Solamente en el año 2008 se produjeron en este país 32 200 casos de suicido. En Japón se producen más de 30 000 casos de suicidio por undécimo año consecutivo. En enero de 2009 se quitaron voluntariamente la vida 2 655 personas, 113 más que en el mismo mes del año anterior, y en febrero 2 470 personas, 62 más de igual prior del año anterior.

Cuando la situación estaba bien, los inversionistas globales, adquirieron deuda barata en yenes, gracias a las bajísimas tasas de interés en Japón, luego vendían el yen por otras divisas e invertían las ganancias en distinto mercados, desde Nueva York a nueva Zelanda, para lograr mayores retornos. Los inversionistas revirtieron dichas operaciones, conocidas como carry trades, a medida que se agravaba la crisis financiera. Debido a que la disolución de la operación involucra la recompra de yenes, la divisa japonesa se fortalece. El yen se fortaleció más de 30% contra una canasta compuesta por las monedas de sus principales socios comerciales desde agosto de 2008 hasta principios de febrero.

Algunas Conclusiones

Para aliviar la situación de la apreciación del yen y por consiguiente la disminución de las importaciones y otras afectaciones más, el gobernador del Banco de Japón (BOJ), anunció la ampliación de ayudas financieras con la compra de deuda de empresas a más largo plazo, para facilitar la liquidez en plena crisis.

En marzo el BOJ decidió mantener los tipos de interés en 0,1% por tercer mes consecutivo y aprobó aumentar la cuantía mensual que podría adquirir de bonos del Gobierno a largo plazo hasta los 1,8 billones de yenes, para así impulsar la liquidez en los mercados. El anterior límite mensual para la compra de bonos del gobierno a largo plazo estaba situado en 1,4 billones de yenes.

Todas las medidas que están tomando las autoridades japonesas podrían mejorar en el mediano plazo algunos de los problemas económicos que existen la actualidad pero el gran problema que se teme en Japón es los dos años continuos de deflación que pronostica el gobierno que podría traer grandes dificultades para la inversión industrial en este país.

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