Elvis Rebeca Filtres Fonseca
Salvador Fonseca Nueva
Delio Barbán Mendoza
eviltresf@udg.co.cu
Universidad de Granma
Resumen.
Determinar en que medida los habitantes del municipio Yara tienen conocimiento de cuáles son las tradiciones culturales que han dominado su idiosincrasia y los identifican hasta el presente, evaluar el estado actual de la bibliografía y el grado de acceso a la misma constituye el objetivo del presente trabajo. Constituye una necesidad la realización de publicaciones como fuentes teóricas o material de estudio para los futuros profesionales de la carrera de Estudios Socioculturales.
El trabajo está estructurado en tres direcciones, la primera se refiere al análisis etimológico y semántico de un grupo de términos importantes como son costumbres, mitos, leyendas y tradiciones y la segunda a los antecedentes históricos relacionados con las tradiciones fundamentales del municipio Yara, su esencia y características y la tercera a las formas en que se desarrollan algunas de las tradiciones culturales en la actualidad y la muestra de los resultados.
Palabras claves: Universo, tradiciones.
Introducción.
Cuba se distingue, bien por la imaginación de sus hijos, por su fabulación poética, su fantasía exagerada, la superstición de sus habitantes y las tradiciones culturales que inventa mitos, a veces de excesiva fantasía peligrosa , surgiendo en la imaginación popular para revelar una de las mayores fuerza de la creación folklórica mundial.
Cuando la tradición es bella es arte (FEIJÓO, Samuel. Mitología cubana, 1986). Es por eso que Cuba ha tenido la sabiduría de crear una cultura con fisonomía propia , resultado de la elaboración de un folklore de una sorprendente vitalidad, recibiendo, mezclando y transformando aportes diversos que acabaron por dar origen a lo que es hoy la cultura nacional.
Estos aportes han jugado un papel importante en la historia de Cuba , principalmente dentro de las costumbres, tradiciones hechos, sucesos de cada una de las regiones, ciudades y pueblos, quienes han sido forjadores y protagonistas a la vez.
Las tradiciones en el municipio Yara encuentran un intensivo para su mayor difusión en los espacios culturales e históricos, los que son necesarios para el conocimiento de los pueblos. La historia de esta doctrina en Cuba no es fácil reconstruir, ya que el material para esta tarea no es dable encontrarlo en libros, ni siquiera en colecciones manuscritas, sino que aparece disperso y en franco proceso de deterioro dentro de las publicaciones periódicas de los siglos XVIII y XIX, que a penas pueden consultarse en las bibliotecas porque no abundan y es necesario tomar medidas para su conservación.
Desarrollo
1-. Algunas consideraciones teóricas acerca de los conceptos y características de las tradiciones culturales.
La cultura popular tradicional, expresada en diferentes formas y manifestaciones - materiales y espirituales constituye un patrimonio de inestimable significación para todo pueblo, en el que expresan valores de la nacionalidad que nutren y fortalecen, en un proceso de dinámica recreación la identidad nacional.
Sus manifestaciones en la cultura material, expresadas en los asentamientos rurales, la vivienda y las construcciones auxiliares rurales, el mobiliario y ajuar de la vivienda rural, las comidas y las bebidas de la población rural, los instrumentos de trabajo agrícola, los modos y medios de transporte rural, las artes y embarcaciones de la pesca marítima y la artesanía popular tradicional.
En el campo de la cultura espiritual se incluyen: las fiestas populares tradicionales, la música popular tradicional, las danzas y bailes populares tradicionales y las tradiciones orales. Todo ello precedido por el estudio de una historia étnica.
Las expresiones culturales, fruto del saber popular, estuvieron relegadas por mucho tiempo a la esfera de los fenómenos, sobre los que no había un interés oficial. Sólo un pequeño grupo de investigadores, liderado por Fernando Ortiz, emprendió en la primera mitad del siglo XX , esa ingente tarea, contribuyó a su conocimiento y a la vez , estableció sus profundas implicaciones para la cultura cubana ( Atlas Etnológico en soporte digital, http://www.mined.co.cu)
Existen diversos enfoques semánticos o teóricos – conceptuales acerca de algunos términos empleados en este artículo que los autores teniendo en cuenta los criterios de otros autores, Armando Hard Dávalos y Gertrudis Gómez de Avellaneda, han elaborado la definición de algunos de ellos.
Tradición: elemento de la herencia social y cultural que se transmite de generación en generación y que se conserva en la sociedad, en las clases y grupos sociales en el transcurso de un largo tiempo.
La tradición abarca los objetos de la herencia social y sus momentos y en ella actúan determinadas situaciones sociales, normas de conductas, valores, ideas, ritos, ceremonias y costumbres que determinan su calidad.
Costumbres: formas estereotipadas de la regulación social que se produce en forma determinada en la sociedad o en el grupo social o habitual para todos sus miembros, los términos de tradición y costumbres están muy relacionados y frecuentemente se identifican a costumbres con tradiciones, ritual, ceremonias.
Para ello no es así, por cuanto sus relaciones son de identidad y diferencia, su concordancia se resume en que ambas sirven como manifestaciones de lo general, de lo que se repite, de lo masivo.
Leyenda: es un relato oral o escrito, generalizado trasmitido de generación en generación que tiene más de histórico que de verdadero, a partir de un primer impulso real, se teje una trama ficticia además se ubican las cosas en un tiempo histórico y un espacio verídico, los protagonistas son los hombres y las relaciones de éstos con su medio constituyen el motivo de propagación de las leyendas.
Mitos: narraciones que, en la sociedad en la cual son contadas, se consideran como acontecimientos verdaderos que ocurrieron en el pasado remoto.
“LUZ DE YARA” una leyenda antigua.
Generalmente cada pueblo tiene una leyenda, pero seguro que todas no tienen un arraigo tan profundo y alcance nacional como esta a la que hacemos referencia, ésta constituye además, una de las tradiciones más connotada de nuestro territorio. La trasmisión oral ha venido de generación en generación al igual que ésta luz, se dice apariencias por las noches y el susto lo pasó más de una persona.
Esta luz se acercaba y en la medida que lo hacía su tamaño aumentaba, atraía a las personas que la veían, hacía que éstas aunque le temían, involuntariamente la siguieran, estas caminaban largas distancias a separación prudencial de la luz, cuando se alejaba un tanto, se detenía y se posaba generalmente en lugares altos como barrancos, árboles, casas, etc. Cuando sus seguidores la alcanzaban seguía su destino sin ocasionar daños a quienes la seguían. Los lugares que eran frecuentados por esta luz cambiaban su entorno, su fisonomía por completo.
Es bueno destacar que desde el siglo XIX ya se hablaba en Yara y en Cuba de la “Luz de Yara” y prueba de esto es que en 1895 existió un regimiento mambí llamado Luz de Yara.
La hipótesis acerca del surgimiento de esta luz, nos dicen que se originó cuando el cacique Hatuey fue quemado en al hoguera y su espíritu comenzó a vagar convertido en una luz por la sabana de yara. Otros moradores del pueblo cuentan que fue al ser quemada una vieja iglesia que existía en el pueblo.
Sería realmente larga la lista de testimonios de personas de edad avanzada, pobladores de la zona y barrios aledaños, que de una forma u otra dicen haber escuchado los cuentos de sus antepasados o haber visto personalmente esta prodigiosa luz..
Nota interesante.
Hace algún tiempo en la emisora Radio Reloj fue leído un artículo de la periodista Gretel Heredia Techos de las Viltres, donde cuenta que tres hermanos que salieron una noche por Guasimilla, poblado rural del municipio, de repente vieron una luz que salió al paso, corrieron asustados a contarlo a sus padres y entonces todos contemplaron como la luz se posaba en la copa de un árbol.
Esta luz aún muchas personas la ven en diferentes lugares de Yara. Debido a las características de esta leyenda los pobladores utilizan algunas frases, por ejemplo:
Podemos apreciar que “Luz de Yara” actualmente continua siendo una leyenda viva y aún cuando estamos en el siglo XXI nadie sabe cuál es su origen. Muchos han tratado de darle una explicación a esto, se dice que son fuegos fatuos que salen debido a los huesos de animales y personas que hay sepultados por esta zona producto a la guerra, pero no por esto ha dejado de ser una leyenda generalizada en el municipio. Para los habitantes de esta zona es como un mito simbólico que ha devenido una tradición.
En honor a esta leyenda se publicó un tabloide cuyo nombre es “Luz de Yara”, en el se plasman los trabajos del taller literario “Carlos Manuel de Céspedes” que se desarrolla en el municipio, de esta forma se trasmiten también a los pobladores la luz del arte y la cultura yarense.
¨ MÚSICA DE ÓRGANO EN YARA ¨
El primer órgano había llegado a yara en 1911, traído por Juan González específicamente al barrio de calambrosio, lugar donde después residirían todos los órganos de la zona. Este primer instrumento se llamó ¨ El Impuesto ¨ y sus músicos fueron:
Debido a la cercanía geográfica de manzanillo había una influencia de esta música en la zona, propiciando que las fiestas yarenses o verbenas se hicieran fundamentalmente con órganos. Por esta razón al pasar de los años ya existían en Yara varios órganos, entre ellos estaban:
Por ser estas orquestas muy costosas solo podían ser alquiladas por las familias adineradas. La situación económica, política y social era pésima en esta época y los campesinos que eran los que sufrían más esta situación no tenían recursos para alquilar para sus fiestas ni un órgano. Necesitaban una diversión menos costosa y más fácil de transportar y es en ese momento cuando comienza a proliferar y a hacerse popular ¨ Las Melcochas ¨ , aunque la música de órgano no desaparece y sigue siendo muy gustada en la zona.
LA MELCOCHA: Una tradición musical.
Los habitantes de la zona llamaban “melcochas” a la música que era tocada con acordeón. La llamaban así porque el músico al ejecutar alguna melodía con este instrumento, los movimientos del estirar y encoger de éste asemejaban a los movimientos de cuando se amasaba la mezcla azucarada y pegajosa (melcocha) con la que se hacían los caramelos para algunas celebraciones.
Se dice que la llegada de este instrumento a la zona data del principio del siglo XX y que el primer acordeonista fue Francisco Hidalgo, más conocido como (Chicho Amable), que falleció a la edad de 100 años en 1998. Por las décadas del treinta y cuarenta ya existían varios campesinos en la zona que sabían tocar el acordeón, entre ellos se destacan.
Debido a la necesidad de una diversión menos costosa que la música de órgano y más fácil de transportar, estos campesinos comienzan a formar varios grupos musicales con sus hermanos, primos e hijos y es en este momento cunado comienzan a hacerse populares en las zonas más rurales de Yara “las melcochas”. Es valido destacar que ninguno de estos músicos tenía formación académica, eran músicos de oídos. Tocaban en guateques , cumpleaños, fiestas familiares, siempre después del trabajo en el campo, por lo que con ellos se podía llevar a cabo la recreación con menos recursos.
Las melcochas eran formatos peculiares porque no se correspondían con ningunos de los formatos musicales establecidos, sextetos, septetos, orquestas charangas, etc, dependiendo de la voluntad de incorporación de los músicos y aprovechando los instrumentos con que contaban. Era un formato acústico, integrado por cinco, seis o siete músicos, donde eran empleados los siguientes instrumentos pertenecientes al complejo genérico del son:
Musicalmente hacían son, principalmente guaracha-son y una música instrumental tratando de imitar al órgano, es por ello que podemos decir que se acerca bastante a la música de órgano, hecha para bailar con fines de diversión local, por lo que constituye una música de carácter elitista, ni con fines mercantiles ya que sus creadores no dependían de ella para vivir. Entre los grupos que surgen están:
La transmisión de esta música a otras generaciones va a estar acompañada de algunos cambios y en esto va a influir considerablemente que cada transmisor tiene su propia forma de interpretar y entender esta música, así como el desarrollo económico, social y cultural que va a adquirir la zona después del triunfo de la Revolución.
LAS FIESTAS DEL SAN JOSÉ
Datan del año 1830, fecha en que había tomado auge en esta zona la producción tabacalera. Inicialmente, éstas eran organizadas por el alcalde y los cristianos del pueblo y de otras zonas cercanas, se hacía con el objetivo de recaudar dinero para los fondos de la iglesia y la alcaldía.
Estas fiestas desde sus inicios comenzaban el 19 de Marzo, día en que se debía iniciar la primavera debido a que la zona era eminentemente agrícola.
Esta festividad era conocida y nombrada en toda Cuba por sus colorido y calidad; en ella se realizaban bautizos, matrimonios y peregrinaciones a las que venían pobladores de todas las partes del país y así se le llamaba: ¨ Los Bautizos de San José ¨
LA VENTA DE LAS GARDENIAS
Se dice que, desde la década del 30, las sabanas de Yara se encontraban cubiertas de esas olorosas flores que con el nombre de ¨ Gardenias ¨ o ¨ Jazmín del Cabo ¨ muchos la conocían. Crecían de forma silvestre en estas fértiles llanuras.
Eran muchos los pobladores que se dedicaban a la venta de estas flores y no solo lo hacían en la zona sino que se dirigían a otras ciudades como Manzanillo, Bayamo, Santiago de Cuba, Camagüey y la Habana. El precio era muy bajo debido a la época, se vendían diez Jazmines por un centavo. Eran pocas las casas que no tuvieran una planta de jazmín en su jardín.
Los vendedores tenían su picardía para la venta, por ejemplo, en las entradas de los clubes nocturnos con el caballero ponían una flor en el vestido o el pelo de dos o tres damas, cunado este olor se expandía en el salón, todas las demás querían lucir esta flor.
En ciudad de La Habana existía gran auges de venta de las gardenias, en esta actividad surgen pregones como:
BAILE DE LAS CINTAS
Este baile se ha hecho tradición en un poblado del municipio, Veguitas. Es un baile de procedencia haitiana. Llegó a esta zona en la década del 30, fue traído por un comerciante santiaguero que, en esta tarea se hizo residente en el poblado, de nombre Rafael García, introdujo el baile en las comparsas del carnaval.
Este baile consiste en 24 ó 12 cintas de colores diferentes, atadas a la punta de un mástil , las cuales se van tejiendo al compás de la música. Los bailadores se van cruzando, cuando unas entran, otros salen. Estos llevan el vestuario según el color de la cinta que le corresponde. Es un componente de las comparsas, arraigado de tal manera en esta zona, que se ha convertido en una tradición del carnaval yarense y ha competido en distintos carnavales de la provincia.
La letra de canción que acompañaba a este baile decía así:
Somos Riveros de Veguitas
vamos arroyando hasta el mar
porque el placer nos invita.
Como cubanos a arroyar.
Entra, sale, mira mi cinta
Tejiendo voy, que alegre estoy.
Esto es gozar.
El autor de esta letra fue un poblador de esta zona llamado Luís Estrada y el acompañamiento musical iba a cargo de la conga, con sus instrumentos característicos, trompetas, tambores, saxofón y percusión. Los cantores eran los mismos bailadores, que solo eran hombres.
A continuación solo mencionaremos otras tradiciones que forman parte del patrimonio cultural de la zona:
Cuando se escuchaba el Guamo era la predicción de desgracias humanas, hambre y miserias pues las aguas lo arrastraban todo.
La música que amenizaba aquellas festividades era preferentemente de órgano y comenzaban muchas veces por la mañana y finalizan en altas horas de la noche e incluso en la madrugada.
2. Actividades tradicionales insertadas en el municipio Yara en la actualidad.
Actualmente se han insertado en el municipio un grupo de actividades tradicionales, dentro de estas encontramos:
LOS MARIACHIS
Luego de dos años y medios de férreos y consagración fue graduado el grupo de música mexicana Mariachi ¨ Sangre de Rey ¨, del Municipio Yara, sueño que se hizo realidad para la mayoría de la población, puesto que el gusto por este género musical en el territorio es muy profundo, lo cual se ha corroborado de buena manera en las actuaciones que se han efectuados; la presencia popular colmó los espacios donde ellos actuaron.
TRIO TRADICIONAL
El amor por el arte lo manifiestan las personas de diferentes formas y muchas sin interés material, es decir, expresándose voluntariamente como artistas aficionados afiliados a las Casas de Cultura, instituciones que además de representarlos los prepara técnicamente para que las propuestas al público eleven su rigor cualitativo. Tal es el caso de un trío yarense que recibe el nombre de tradicional, formado por Armelio Guerra, Enrique Leyva y Rafael Ortiz, agrupación de una larga trayectoria ejecutando la música en diferentes géneros.
El trío tradicional es de esas agrupaciones de pequeño formato imprescindibles en la vida cultural del pueblo, a pesar de la ancianidad de sus integrantes no los vence el cansancio, acuden a cada llamado siempre dispuestos a entregarlo todo en función del bien espiritual del público que los aclama.
MONUMENTO AL CASIQUE HATUEY
Construido en Yara a la memoria del valeroso rebelde, situado en la calle Carlos Manuel de Céspedes entre Diez de Octubre y Grito de Yara, inaugurado el 21 de julio de 1999 por el ministro de cultura.
Es un espacio ambiental, polivalente y cultural, su escultural de 3.50 metros de altura fundida en hormigón representa el valiente cacique de pie, atado a un árbol bajo las llamas del fuego, la cabeza erguida, mirada aguzadora expresión del rechazo a quienes lo condenaban a morir en la hoguera.
En su interior una construcción de estilo colonial representación de la época, columnas con arcos de medio punto, techos a dos aguas, faroles, así como la simbolización de un parque. En esta se exponen obras de arte y objetos relacionados con la presencia de aborígenes en el territorio.
Aquí, a decir de los visitantes encontramos un lugar para la historia y la cultura, en la que se respira y se viven las huellas del pasado.
GUATEQUE CAMPESINO:
Es una fiesta campesina donde participan diferentes agrupaciones campesinas con música tradicional, danza, repentismo, controversia, evento de teatro entre otras. Aquí participan diferentes cooperativas de diferentes municipios, se exponen los platos típicos del municipio, se realizan ferias agropecuarias dirigidas por la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, con el fin de enriquecer esta tradición. En este festejo a nivel de municipio se selecciona una joven con características muy bella para participar en un concurso cuyo nombres es ¨ Flor de Virama ¨ el cual se realiza hasta nivel nacional en la provincia de las Tunas.
LA MANDANGA DE PACHALO
Este plato es típico del municipio de Yara y sus orígenes datan de los años 50. Tiene forma alargada y rectangular. Este plato se obtiene a partir de la mezcla de la harina de maíz con yuca, se rellena con carne de cerdo preparado con cachú y otros ingredientes como picante, ajo, cebolla entre otros, luego se fríe y está lista para comer.
El territorio yarense es muy reconocido por este sabroso alimento, ya que todas las personas que reciden en él o los transeúntes detienen el paso para probar las deliciosas mandangas.
NATURALEZA MUERTA
La idea surgió en el año 2000 por motivo de una presentación de este tipo de artesanía que iba a tener lugar en la cabecera provincial de Granma y fue en ese momento cuando su promotora da a conocer lo que es capaz de hacer con sus propias manos y recursos naturales ya muertos, o sea secos. Los materiales a utilizar para la realización de estas obras son: la hoja del maíz, las semillas de todo tipo de plantas, el friega platos, yagua, palillos de coco, flores disecas, alambre, papel, hilo, poliespuma y madera. Se realizan con estos materiales ramos de flores, tarjetas de invitación, buque de novias, cuadros para el adorno de paredes, cestas, entre otras.
CONCLUSIONES
Una vez concluido el presente trabajo se arriba a las siguientes conclusiones:
Existe un bajo porciento de conocimiento de las tradiciones culturales del municipio en niños, jóvenes y adultos. La investigación desarrollada contribuye a la divulgación y rescate de las tradiciones culturales del territorio y brinda a su vez una vía para su implementación en otros territorios.
Bibliografía.