Ernesto José Parra Muñoz (CV)
eparram@udg.co.cu
Universidad de Granma
RESUMEN
En el devenir histórico, la prensa periódica ha desempeñado un papel activo y ha sido arma eficaz para divulgar las ideas de los grandes escritores, estadistas, filósofos y científicos; el sentimiento nacional encontró su vehículo idóneo en la literatura, expresado a través de este medio y que reflejaba los problemas que acechaban a la sociedad que les vio nacer. A causa de la opresión del régimen colonial que promovió el descontento y la angustia de un grupo de hombres que representaban a la intelectualidad del país, salieron de ese crisol los primeros materiales impresos de la época.
Palabras Claves: imprenta, prensa, neocolonia , ciudad,periodicos, Bayamo.
Introducción
La llegada de la imprenta a la villa de San Salvador de Bayamo en el 1855, le aportaría un nuevo matiz como suceso de relevancia cultural de la época. Francisco Murtra que anteriormente había llevado a otras ciudades de la Isla esta nueva tecnología, logra el objetivo de que la ciudad no quedara al margen de esta novedad, publicando El Boletín de Bayamo, el que circuló entre mayo de 1856 y febrero de 1857, conocido hasta la fecha como el primer periódico impreso en esta ciudad; así llegaba Bayamo a su segunda publicación precedida a inicios del siglo por el Antirregañón Floridano1 , publicado bajo las órdenes del Ejército Español en 1801, se plantea, según el criterio de algunos investigadores, que éste se hacía manuscrito; en el año 1856 se publica Crónicas y Tradiciones de San Salvador de Bayamo 2, primer libro publicado en la localidad bayamesa.
En los inicios de la prensa periódica en Bayamo en la época de 1902-1925, no se puede dejar de mencionar El Cubano Libre, primer periódico independiente que se publicó en el país en el año 1868; este órgano sale a la luz en un momento trascendental para la ciudad y para Cuba, unido al movimiento independentista iniciado por los cubanos en La Demajagua. Los días que precedieron al 10 de octubre de 1868 y una vez creada las condiciones para comenzar la lucha, Carlos Manuel de Céspedes tiene la visión de crear un periódico que respondiera completamente a los anhelos de los mambises, sus páginas reflejaron el espíritu revolucionario de los cubanos que luchaban contra la colonia española. Conocida la orden por las tropas mambisas que logran tomar la ciudad de Bayamo bajo las órdenes de Céspedes, se dirigen a la imprenta La Regeneración, donde se imprime el primer número de El Cubano Libre con fecha 18 de octubre de 1868; aquel domingo histórico marcó el surgimiento y desarrollo de la prensa periódica, que progresivamente se fue convirtiendo en un hecho fundamental para dar a conocer el programa de la Revolución del 68.
Días antes del alzamiento del 10 de octubre de 1868 se tomó la decisión por Carlos Manuel de Céspedes, el Padre de la Patria, de publicar un periódico que fuera portavoz del programa revolucionario. Se discutió sobre su nombre, y el poeta y periodista José Joaquín Palma dijo: « ¿No vamos a libertar al cubano? El periódico, pues, debe llamarse El Cubano Libre»3 En su primera etapa tenía un formato de 36 x 26,5 cm, cuatro páginas de cuatro columnas editado en letra grande de 12 puntos.
A medida que cursaba el siglo XIX el periodismo alcanzaba auge en Bayamo, disímiles periódicos y boletines surgieron manifestando de múltiples formas el desarrollo y arraigo cultural de las clases que lo engendraron para su información y recreación; aunque pocas personas de la población podían acceder a ellos.
La quema de la ciudad de Bayamo el 12 de enero de 1869, fue la mejor muestra de patriotismo de un pueblo que había decidido perderlo todo antes de caer en manos de las fuerzas españolas; después de esta importante acción, los principales lugares quedaron destrozados por el fuego y junto a ello una fuente importante de publicaciones y documentos históricos.
Desde 1899 en Bayamo circulaba el periódico El Eco y El Oriente. El primero se confirma que existió hasta inicios del siglo XX, ya que aparece un ejemplar de fecha 17 de mayo de 1900, pero no se puede precisar su tiempo de duración; su director fue José Ricardo O´Farril, y el administrador José Mugica Ríos. Denominado como publicación política, independiente y de intereses generales; en la parte superior del machón refleja el siguiente enunciado: PAZ; ORDEN; TRABAJO, MORALIDAD, JUSTICIA. Con un espacio de cuatro columnas, impreso en blanco y negro, en la primera página aparecen anuncios comerciales de la ciudad.
Al entrar en el siglo XX era evidente el auge que tuvo la creación de nuevos periódicos, algunos preservaron los espacios y características similares a los que le precedieron, otros eran diferentes en su totalidad. Otro periódico que circuló en la ciudad fue El Bayamés, fundado en 1906, Periódico Semanal de Intereses Generales, cuyo director era Olimpo Fonseca Pérez y administrador José Mugica Ríos, el que contaba con cuatro páginas, editadas a igual número de columnas, impreso en blanco y negro; circuló en diferentes etapas, dejaba de circular y reaparecía sucesivamente; su política editorial fue encaminada a la publicación de anuncios, temas culturales y judiciales, entre otros; aunque la mayor parte del espacio era ocupado por anuncios comerciales.
En 1907 aparece La Voz del Pueblo y en 1909 El Fénix; circulaba también el periódico La Regeneración, denominado Diario político independiente, redactado a cinco columnas, en blanco y negro, siendo su director Santiago Palacios y administrador Enrique Soriano, existiendo ejemplares correspondientes a los años de 1910 hasta 1915, el que tuvo quinta y sexta épocas, lo que corrobora su larga permanencia en circulación. En la primera página aparece la crónica social y noticias de carácter general.
En los años 1912 a 1928, 1934 y 1937 se edita Bayamo4 , denominado periódico de información independiente, redactado a seis columnas en blanco y negro, de vida prolífera en el campo de la propaganda y caracterizado por diferentes formas, tamaños y diseños, muestra evidente de los numerosos cambios de directores y métodos de edición. En 1920 circuló bajo la idea de ser un órgano de interés generalmente político, dirigido por Rafael Fajardo Gamboa; la dirección de esta publicación estuvo bajo las órdenes del procurador Juan Castillo Suárez, procedente de Jiguaní donde había dirigido un periódico y tenía su propia imprenta.
En general el periódico dedicaba sus espacios a los anuncios comerciales, notas de interés, crónicas sociales, secciones literarias, editoriales e informaciones internacionales y ya en sus últimos tiempos, a temas locales, históricos. Al hacer mención en sus páginas sobre las personalidades de la época, estas eran resaltadas mediante fotos fundamentalmente.
Bayamo, fue además vocero oficial del Centro de Veteranos de Bayamo y de información independiente. Llama la atención como en los años posteriores este órgano publicaba una cifra considerable de temas relacionados con el abandono del Gobierno hacia Bayamo y las necesidades por las que atravesaba su pueblo; la discriminación racial, entre otros temas como la situación de las malas condiciones de las calles y la falta de sanidad, males que constituían una amenaza para la ciudad, sobre estos aspectos incluso publicaban fotos.
Ya en el año 1912 la ciudad vio nacer el periódico El Derecho, denominado interdiario de la vida bayamesa, que vuelve a circular en los años 1925 y 1932, con diferentes directores y nuevos diseños editoriales, redactado a seis columnas en blanco y negro; en ese año circuló como órgano independiente dirigido por José García Guerra, Pedro (Perico) Rebustillo Carbonell atendía la crónica social y laboraban como sus colaboradores los hermanos Augusto y Manuel Fabré Bonet; Erasmo Rodríguez Tamayo y el abogado Conrado Augusto Bonet León.
En 1914 aparece El Dictamen, Diario Político Independiente, acogido a la Franquicia Postal e inscripto como Correspondencia de Segunda Clase en la Oficina de Correos de esta ciudad, redactado a seis columnas y recogía temas de información general y también se editó El Káiser, dirigido por Eustaquiano Reyes, con carácter eminentemente político.
En 1916 se funda por Manuel de la Guardia Serrano. El Heraldo de Oriente, órgano de información general, miembro de la prensa Asociada en Cuba, se editaba en blanco y negro en ocho páginas de seis columnas cada una; se anunciaba bajo el lema de “Con todos y para todos”; la mayor parte de su espacio estaba destinada a los anuncios comerciales a tal extremo que por citar uno de ellos, el dedicado a la cerveza Hatuey abarcaba la página central en su totalidad. Su contenido incluía crónicas sociales, notas informativas, policiales, así como una sección fija dedicada a la religión.
Una particularidad que se refleja aquí y es preciso resaltar, son las denuncias, específicamente en los casos de drogas, prostitución y robo, temas estos publicados y tratados abiertamente. El alcalde municipal en aquel entonces los tramitaba personalmente utilizando esta vía y dictaminó establecer mediante resolución el envío de algunos ejemplares de El Heraldo de Oriente al jefe de la policía en Santiago de Cuba.
El Heraldo de Bayamo, sale en el año 1917 dirigido por Olimpo Fonseca y administrado por Santiago Palacios; su línea editorial resaltaba el valor de la juventud como clase del futuro; los anuncios comerciales, crónicas sociales y otros temas de interés local eran abordados en sus páginas al igual que el uso de fotos y grabados.
En él laboraban varios corresponsales de otras regiones; se editaba a cuatro páginas de seis columnas y se autotitulaba como diario de información e intereses generales, inscripto como correspondencia de segunda clase en las Oficinas de Correos de Bayamo; la suscripción mensual costaba 75 centavos y ocho cuarenta la anual. Se mantuvo circulando en el año 1922 y principios del 1923.
En 1918 se publica El Tiempo, diario político y de información, formateado a seis columnas, en blanco y negro, en su primera página refleja informaciones de interés local.
En 1919 se publica La Polémica, denominado Diario Independiente editado a cuatro columnas en blanco y negro. En 1920 surge bajo la dirección de Luis Tablada Mojena el bisemanario Bayamo Ardiendo, este era aceptado con mucho interés y leído por el pueblo por ser exponente de las ideas del brigadier Luis A. Milanés contra la jefatura del general José Fernández de Castro; respondía a los intereses del Partido Conservador.
El Imparcial fue el primer periódico en Bayamo en el año 1923, dirigido por Manuel Camps Reyes. Editado con una frecuencia diaria, abarcaba informaciones de interés general, tenía un espacio de seis columnas en blanco y negro; en las temáticas de este órgano se publicaban comentarios, notas informativas, crónicas sociales, salutaciones y anuncios comerciales, a los que se dedicaban las páginas dos y tres en su totalidad, aunque estas aparecían también en la primera y cuarta.
En este año sale a la luz El Paladín, interdiario defensor de los intereses del pueblo, su estructura y contenido eran similares al señalado anteriormente; del que se editaban mil ejemplares, así lo confirma la nota publicada el 23 de mayo de 1923; a partir de junio de ese año circulaba diariamente. Luis Estrada y Estrada fue su director político y como administrador y director editorial Blas Domínguez.
También en la época del 1920, aunque no se tiene la certeza del año, circuló en Bayamo el bisemanario político independiente y de interés general La Opinión; se editaba en cuatro páginas, a seis columnas en blanco y negro, bajo la dirección de Manuel Planas Rodríguez y como jefe de redacción Conrado Bonet y en el que laboraban además de los periodistas de plantilla, corresponsales de otras zonas; quienes enviaban notas informativas y sociales. Tenía una sección diaria fija dedicada a la cultura y los espacios de las páginas dos y tres estaban destinados a los anuncios comerciales; en las demás páginas se insertaban crónicas sociales y una que otra nota de interés general.
Durante el año 1925 reaparece El Derecho como interdiario de la vida bayamesa; esta vez ocupa el cargo de director político Quintín George, jefe de redacción José Maceo Verdecia y Manuel Fabré Bonet se incorpora como administrador, su director general era Conrado Bonet. Dedica sus páginas a la publicación de noticias policiales, crónicas de simpatía y salutaciones a visitantes.
Sus páginas dos y tres estaban destinadas a los anuncios comerciales; en la primera había una sección fija denominada Vibraciones, en la que se recogían aspectos jurídicos, sanciones, delitos y otras cuestiones legales; contaba igualmente con una sección fija de crónicas sociales y utiliza el género de entrevistas realizadas a personalidades de la época. El espacio estaba diseñado a cuatro páginas y se escribía a seis columnas en blanco y negro; utilizaba fotos y otros grabados, en algunas ocasiones editaba suplementos en los que se divulgaban temas de sumo interés social o sobre sucesos históricos a conmemorar.
Conclusiones.
Es palpable el sentimiento patriótico y de identidad de los bayameses que constituyeron reclamos basados en las necesidades locales de carácter social como consecuencia de las guerras independentistas.
La prensa periódica bayamesa de la época de 1902-1925 está signada por la neocolonia, la herencia empobrecida de una ciudad en ruinas y el deseo de sus pobladores de transformar el ambiente de insalubridad, carencia de escuelas, falta de hospitales e instituciones culturales, lo que se contraponía con las acciones de un pequeño grupo de propietarios de tierra, ganado y otras producciones y representantes de partidos políticos, que deseaban el progreso de la ciudad, sin tener en cuenta la intromisión de los intereses políticos y económicos que promovía la política de Estados Unidos hacia Cuba.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA.
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2 Carbonell Alard, J: Estampas de Bayamo. Santiago de Cuba, Editorial Oriente 1982.
Carpentier A., García Luis J., Schiesser, G., Rius, H. Géneros de Opinión. Editorial Pablo de la Torriente 1988.
3- Fonseca García Ludín B. Cultura y despotismo: la libertad de imprenta en el Bayamo colonial. En Revista Cultural, Ventana Sur No. 5 de enero – junio de 2008. p. 2-5
4- García Luis, J:La regulación de la prensa en Cuba: referentes morales y deontológicos. [Tesis de doctorado] Facultad de Comunicación, Universidad de La Habana 2004 .
5- Maceo Verdecia, J. (1941) Bayamo. Segunda edición corregida e ilustrada. La Habana, La Mercantil.
6- Mari Aguilera, I. (2005) Fuego y Ocaso. Ediciones Bayamo.
7- Marrero, Juan: De El Cubano Libre a Patria. Dos siglos de periodismo en Cuba. Editorial Pablo de la Torriente. La Habana, 1999
8- Naranjo Tamayo, A:Panorama de la República en Bayamo (1898 – 1925). Ediciones Bayamo 2007.
9- Naranjo Tamayo, A., Guevara Díaz, O., Tamayo- Saco, C. Panorama de la República en Bayamo (1898 – 1925). Ediciones Bayamo 2008.
10- Olivera Pérez, D., Pérez Alonso, Maikel: Análisis de Medios. Selección de Lecturas. Universidad de la Habana 2008.
11- Riera Hernández, M. Bayamo Político 1898 – 1956. La Habana 1957.
12- Torres - Cuevas, E. y Loyola Vega. O:Historia de Cuba 1492 – 1898. Formación y Liberación de la Nación. Segunda Edición. Editorial Pueblo Y Educación 2002.
13- Valdés García, Á. R. y Rondón Remón, L: Algunos aspectos del desarrollo histórico de la prensa plana en Granma. [Tesis de pregrado] 1984.
DOCUMENTOS DE ARCHIVO CONSULTADOS
Del Fondo Neocolonia:
1 Este periódico es mencionado en Algunos aspectos del desarrollo histórico de la prensa plana en Granma. [Tesis de pregrado] Valdés García, Á. R. y Rondón Remón, L. (1984).
2 Este periódico se menciona en el artículo Cultura y despotismo: la libertad de imprenta en el Bayamo colonial, de Fonseca García Ludín B, publicado en Revista Cultural, Ventana Sur No. 5 de enero – junio de 2008. p. 2-5
3 Marrero, Juan en DE EL CUBANO LIBRE A PATRIA. Dos siglos de periodismo en Cuba. Editorial Pablo de la Torriente. La Habana, 1999: señala que”El periódico vio la luz en la noche del 17 de octubre, en una vetusta imprenta donde se editó, en años anteriores, un periódico denominado La Regeneración, dirigido por Francisco Vicente Aguilera. Su primer director fue José Joaquín Palma. En su primer número publicó bajo el título «Orden del día», un documento firmado por Céspedes como general en jefe del Ejército Libertador, en el cual ofrecía al pueblo de Bayamo velar por su tranquilidad y respetar sus propiedades. También publicó noticias sobre los primeros hechos de armas y una sección poética donde aparecen las dos primeras estrofas de La Bayamesa (hoy Himno Nacional). A partir de su segunda semana, y durante dos meses y medio, El Cubano Libre salió a diario con editoriales y artículos de fondo, noticias de la guerra, disposiciones oficiales, gacetillas y hasta una sección literaria.” El Cubano Libre, nacido en Bayamo días después del alzamiento de La Demajagua, ha quedado como el exponente principal de esa prensa.
4 Este periódico en el año 1912 fue propiedad del brigadier Luis A. Milanés Tamayo, patriota que lo utilizó como vía para divulgar los asuntos del Partido Liberal, en este período funge como director de este el doctor Blas A. Domínguez Martí, aunque en los momentos de ser fundado desempeño ese cargo Jesús Masdeu, periodista de la localidad que posteriormente se traslada a La Habana. Durante los primeros meses de 1937 el editor de Bayamo lo fue Joel Lovaina Chacón y su administrador y su administrador Enrique Orlando Lacalle.