INTRODUCCIÓN

Analizar la participación como un medio o como un fin, debe ser considerado ¿para qué queremos motivar la participación?, ¿para quiénes? En tanto la participación no es un fin por sí misma, no se trata de formar una sociedad participativa si no tenemos completamente claro para qué queremos una sociedad participativa. La participación debe favorecer la construcción de sujetos pensantes, que sean capaces de decidir y disentir, hay participación si hay sujeto consciente. Porque, si no es así, pueden ser objetos de intervención de otros y de la manipulación de otros. La participación es el resultado de un proceso los comunitarios van presentando diferentes niveles de participación hasta llegar a la toma de decisiones.

El desarrollo cultural recoge un conjunto de aspectos que se mueven desde aquellas ideas que regulan los procesos del desarrollo (participación comprometida, enfoque endógeno, necesidades sentidas, toma de decisiones, saberes compartidos), hasta la concepción y aplicación de las políticas culturales en estrecha coordinación con las demás políticas de desarrollo. El desarrollo cultural privilegia el conocimiento que sobre los bienes y valores tienen los verdaderos protagonistas del desarrollo y percibe a la cultura y sus expresiones imbricadas con todas las prácticas sociales como actividad humana, pues es a través de ella que los hombres y mujeres hacen la historia.

El proyecto ENTRESCULTURAS que se desarrolla en el Consejo Popular No. 18 desde enero de 2002, ha posibilitado la obtención de importantes resultados que contribuyen a la modificación del ambiente cultural de la comunidad. Un acercamiento a la realidad comunitaria del Consejo Popular ha permitido corroborar la existencia de necesidades culturales tales como, ausencia de grupos de la propia comunidad que contribuyan al disfrute sano y sistemático de acciones artísticas (pintura, escultura, música, literatura).

Ausencia de animadores y promotores culturales de los propios comunitarios, insuficiencias en la coordinación del trabajo comunitario que afecta la efectividad del mismo y la solución a problemas que pueden ser resueltos por la propia comunidad, ausencia de espacios culturales para la comunidad, limitaciones en la participación a las actividades que se programan, ausencia de una biblioteca comunitaria que contribuya al hábito de la lectura.

La participación comunitaria exige el conocimiento de la cultura de esa comunidad, donde los elementos de las tradiciones, costumbres y religiosidad señalan pautas en la participación y el liderazgo, precisamente el asunto que se trata en el presente trabajo es el de la participación social en el proyecto ENTRESCULTURAS que se ejecuta en el Consejo Popular No.18 de Las Tunas.

MATERIALES Y MÉTODOS

Análisis y crítica de las fuentes, análisis-síntesis, análisis de contenido en sus dimensiones cuantitativa y cualitativa, triangulación de datos y teorías. Se utilizó el Sistema computarizado de Contenidos Actuales (Current Content), las microfichas, revistas especializadas. Se consultaron sitios de información especializada.

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Proyecto ENTRESCULTURAS: Finalidad y contenido

El análisis de la participación social en el proyecto descansará en un conjunto de resultados obtenidos por el programa de Maestría y en la implementación del proyecto, en los órdenes teórico y metodológico el tema ha sido abordado por varios autores entre ellos Martínez (1996); Ander-Egg (1998); Merino (1997); Gainza (2000); Zapata (2002); Gómez (2008); Castellanos (2008); Diéguez (2002); Macías (2008) muestran una diversidad de enfoques, perspectivas y concepciones metodológicas, los cuales han enriquecido el tema de los proyectos culturales como instrumento de la gestión cultural.

Con el objetivo de favorecer el desarrollo cultural comunitario del municipio de Las Tunas nace en el seno del Departamento de Estudios Socioculturales de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanísticas, el proyecto de transformación cultural: ENTRESCULTURAS, “laboratorio natural de la carrera de Estudios Socioculturales”, al decir de la coordinadora e inspiradora.

De la misma manera responde a las prioridades de la Política Científica del Ministerio de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente y del territorio y “es el primero que se aprueba con la visión del trabajo cultural a partir de una concepción amplia de la cultura. Asimismo el proyecto parte de la tesis: “Defensa de la cultura nacional, espada y escudo de la nación, condición necesaria para salvaguardar las conquistas alcanzadas por la revolución, el socialismo y participar conscientemente en la Batalla de Ideas.” Refleja de forma concreta uno de los aspectos esenciales para los que fue pensado, contribuir a elevar los niveles de cultura de los comunitarios en función de influir con su participación comprometida en el proyecto social que se construye en Cuba.

El núcleo duro del mismo es:

El conocimiento y reconocimiento del patrimonio cultural, local, nacional y universal, como garantía del desarrollo del sentimiento de pertenencia e identidad y el reforzamiento de los valores compartidos de la sociedad cubana actual y su intención consiste en: Potenciar la subjetividad humana mediante el trabajo cultural para lograr el protagonismo de los actores sociales en el proceso de su propio desarrollo sociocultural. (Macías; 2005: 5)

La búsqueda de soluciones a una problemática existente constituye uno de los aspectos esenciales de todo proyecto sociocultural. ENTRESCULTURAS dirige su interés, en su primera etapa, hacia las limitaciones en el conocimiento de los mecanismos y procedimientos que podrían potenciar la actividad cultural de las comunidades del Consejo Popular No.18, en los años 2002-2008, de manera que den respuestas a las necesidades socioculturales e influyan en los ritmos de desarrollo espiritual de la comunidad y el territorio de Las Tunas.

Como expresión cualitativa y cuantitativa de los propósitos que se deseaban alcanzar, es propuesto el objetivo general:

Diseñar un sistema de trabajo sociocultural, conformada por una estrategia, una metodología, y un proyecto de transformación para el desarrollo, que tenga como soporte la participación comprometida de la población, la utilización de los recursos y potencialidades de la comunidad y el conocimiento y reconocimiento del Patrimonio Cultural local, nacional y universal, como garantía de la asunción del sentimiento de identidad y del centro Universitario como la institución cultural y formadora de los profesionales del trabajo sociocultural. (Macías; 2005:4)

El proyecto es un instrumento de trabajo que en manos de cualquier agente social, le brinda un conjunto de orientaciones encaminadas a modificar un a realidad determinada. El proyecto ENTRESCULTURAS se convirtió en una guía para la acción comunitaria en el consejo. Sus elementos más característicos se exponen a continuación:

1. La participación: eje transversal de la propuesta

• En el mejoramiento de la calidad de vida.

• En la defensa de la cultura, el Patrimonio Cultural y la Identidad Cultural.

• En la estimulación de las potencialidades de los grupos e individuos en la comunidad.

• En la toma de decisiones para el desarrollo cultural de la comunidad.

• En el reforzamiento de los valores compartidos de la sociedad cubana.

2. Los presupuestos teóricos y metodológicos se concretan en:

• Concebir a la comunidad como un organismo social, en el que se desarrollan todas las relaciones sociales, como proceso en movimiento permanente en torno a las tensiones internas y externas. Instancia de resistencia y autoreproducción de los pueblos, espacio de aprendizaje colectivo, donde la palabra se hace carne y la praxis transforma la realidad a partir de la transformación de las pautas culturales. Ámbito en el que se produce y reproduce la vida sociocultural.

• Dimensionar el desarrollo desde la perspectiva de la cultura, cualificando los distintos niveles de actuación del hombre, se enfatiza en dos principios básicos que caracterizan el método aplicado:

a. Principio de la comunicación.

b. Principio de la observación reflexión.

Proceso a través del cual el estado, o cualquier institución u organización territorial, incluyendo el municipio, la comunidad y en una escala más reducida, el barrio, incrementa la participación de la población en la vida cultural y promueve la creatividad de todos los ciudadanos. De igual modo defiende su identidad y diversidad, ajustándose a las condiciones históricas - concretas de su contexto y a un proyecto de futuro. La participación es un eje transversal del desarrollo cultural, en tanto la población debe sentir como suyo el proyecto, para que lo pueda hacer realidad de manera efectiva.

3. Desarrolla un ciclo con tres momentos: diagnostico, solución, constatación.

La aplicación de este modelo de investigación acción permite la realización de un sistema de tareas en tres dimensiones fundamentales.

DIRECCIONES RESPONDE A FORMA DE ORGANIZACION

Apropiación de conocimientos Qué, por qué, para qué Conferencias, Seminarios, Talleres

Aplicación Cómo de la actuación Seminarios, Talleres, Debates

Evaluación Sistematización Qué, por qué, Cómo Diagnóstico, eventos científicos, publicaciones, observaciones análisis, informes

El 22 de Enero de 2002 inició sus actividades en el Consejo Popular No. 18 el proyecto ENTRESCULTURAS. Tuvo apoyo por parte del grupo de trabajo comunitario, las autoridades municipales y la población en general, quienes junto a los estudiantes de la carrera y el colectivo de profesores han desarrollado jornadas importantes de trabajo cultural a favor del crecimiento cultural y el cambio del barrio.

Al comenzar el proyecto se realizó un estudio diagnóstico participativo con el fin de lograr una caracterización del barrio e identificar los principales problemas culturales sobre los que los actores sociales en coordinación con las instituciones participantes volcarían toda la acción. El estudio arrojó los siguientes datos:

La circunscripción 87, perteneciente al Consejo Popular 18, está ubicada al norte de la avenida Camilo Cienfuegos, limita al sur con la calle Augusto Cebreco, al este con la calle 25 y al oeste con la calle 21, su población es de 1036 habitantes de los cuales 310 son hombres y 446 mujeres, 210 niños y 204 personas de la 3ra edad. Existe un total de 18 niños cuya edad está comprendida hasta los 7 años y 3 de ellos no pasan de los 2 años de vida. En el periodo que se analiza 811 jóvenes se encuentran entre los 17 y 31años.

Los comunitarios viven en edificios multifamiliares, un total de 7 y 314 apartamentos, 2 consultorios del médico de la familia y una unidad gastronómica “Dos Palmas”.

Del total de sus habitantes 445 están ubicados laboralmente, de estos 11 trabajan en la agricultura, 70 son profesionales, 22 médicos, 8 enfermeras 24 maestros y un periodista. Cuenta además con 18 personas con nivel de escolaridad de técnico medio, trabajan por cuenta propia 26 miembros de la comunidad y 13 son artesanos, hay 6 trabajadores sociales.

La circunscripción presenta en su estructura las organizaciones Comités de Defensa de la Revolución, Federación de Mujeres Cubanas, las asociaciones de combatientes los que fomentan las tradiciones patrias y la formación de valores, desempeñando un rol específico en la contribución de los intereses y el enriquecimiento espiritual, fiel exponente de las raíces, la cultura y la identidad que son portadores los cubanos.

Actividades políticas, recreativas, laborales son organizadas a través de los 11 Comités de Defensa de la Revolución, en que están organizados los miembros de la comunidad, cuentan con el delegado del Poder Popular quien junto al grupo de trabajo comunitario tienen la misión principal de velar por el bienestar de los ciudadanos, con el cuidado y protección de los medios colectivos e individuales, preservar, los principios patrióticos y adoptar las estrategias en función de alcanzar el nivel de participación que garantice las respuestas a los problemas desde el interior de la comunidad.

La Federación de Mujeres Cubanas, alberga en su seno a 411 federadas, quienes realizan una labor comunitaria que demuestra en la cotidianidad la capacidad de participación de la mujer en los procesos complejos y cambiantes de la sociedad cubana actual.

Esta organización en unión con los Comités de Defensa de la Revolución, marcha a la vanguardia en la organización y ejecución de las labores acometidas por la circunscripción. Las organizaciones políticas son un importante elemento en el desarrollo y consolidación de una conciencia acorde con los principios del proyecto social que se construye en el país.

En la comunidad funciona una sede del programa Educa a tu hijo con una matrícula de 10 niños, en la que los pequeños y sus padres reciben orientaciones didácticas con el objetivo de contribuir a la formación del niño desde las primeras edades. Los adolescentes tienen un club de lectura en el que pueden obtener la información precisa de acuerdo a sus intereses lo que en alguna medida palea la situación que tiene la comunidad de no contar con una biblioteca comunitaria, los adultos mayores se agrupan en un círculo de abuelos que contribuye a mejorar la calidad de vida de los que han arribado a la tercera edad.

Las calles y caminos vecinales son accesibles, la comunidad cuenta con acueducto que ofrece agua potable y clorada a los habitantes de manera estable. El servicio eléctrico es de red nacional (sin tendederas) y el alumbrado público es suficiente. La comunicación se logra con el empleo de teléfonos públicos y privados, la correspondencia y el servicio de la prensa.

En la zona se prestan servicios de peluquería, arreglos de calzado y barbería, se construye un área deportiva para contribuir al bienestar popular. Conviven 6 brigadistas sanitarios y una brigada de producción y defensa. Otro servicio pero de orden económico es la unidad gastronómica “Dos Palmas”, la que es frecuentada asiduamente por los vecinos.

En la comunidad coexisten el protestantismo y santería, una casa de culto, y una vivienda donde se realizan actividades de espiritismo, expresión de las creencias y tradiciones culturales de los miembros de la comunidad, entre los comunitarios hay personas que son católicos y aunque no todos lo practican si tienen esa fe religiosa.

El diagnóstico de la realidad permitió conocer las necesidades culturales de la comunidad entre ellas se destacan las siguientes:

• Es muy limitado el conocimiento de la memoria histórica tanto en los actores sociales como en los comunitarios.

• Pocos grupos en la comunidad que contribuyan al disfrute sano y sistemático de acciones artísticas (pintura, escultura, música, literatura, danza, teatro).

• Ausencia de animadores y poca preparación de la promotora cultural de la comunidad.

• Dificultades en la coordinación del trabajo comunitario limita la solución a problemas que pueden ser resueltos por la propia comunidad.

• Ausencia de espacios culturales en la comunidad.

• Ausencia de una biblioteca comunitaria pues la pública se encuentra distante lo que afecta el hábito de la lectura.

• Limitaciones en el conocimiento por parte del grupo de trabajo comunitario de los mecanismos y procedimientos que podrían potenciar la actividad cultural de la comunidad.

• La instalación deportiva existente no satisface la demanda de la comunidad.

• Limitado asesoramiento por los especialistas de la dirección municipal de cultura en las diferentes manifestaciones artísticas.

• No se realiza una integración efectiva de los nuevos actores sociales que se incorporan a la comunidad, en función de mejores resultados del trabajo sociocultural.

• El trabajo sociciocultural en la comunidad se realiza partiendo de la empiria.

El 95.7% de la población encuestada le gusta su barrio, y el 90.5% de los adultos con familias quieren que sus hijos se críen en él, argumentando que “es un barrio tranquilo”, 47% plantean dificultades con las actividades deportivas y recreativas para jóvenes y niños, aspectos considerados por el proyecto para el proceso de implementación de nuevas acciones que den respuestas a estas problemáticas.

Al iniciar el proyecto la participación presentó algunas dificultades al desestimar los comunitarios la alternativa de solución de los problemas con los propios recursos de la comunidad, situación que fue cambiando en la medida que se ejecutaban las actividades dirigidas fundamentalmente por estudiantes de la carrera en Estudios Socioculturales.

Entre las principales acciones desarrolladas por el proyecto se relacionan las siguientes:

Elaboración y puesta en marcha de proyectos de animación sociocultural para niños, amas de casa y adultos mayores entre ellos:

• Proyecto de animación sociocultural para la cultura artística y literaria en niños.

• Proyecto de animación y tradiciones culinarias para el desarrollo cultural de las mujeres de la circunscripción 87.

• Proyecto de animación sociocultural para la tercera edad de la circunscripción 87.

• Proyecto para la apreciación cinematográfica con niños de la circunscripción 87.

• Proyecto para la formación de animadores socioculturales de la circunscripción 87.

Cada uno de ellos tiene como objetivo esencial el diseño y ejecución de un conjunto de actividades para lograr la participación de los comunitarios en el desarrollo cultural en la comunidad. Parten de los referentes de la metodología para el trabajo sociocultural comunitario que permite analizar y comprender la comunidad en toda su dimensión para el perfeccionamiento de su quehacer sociocultural.

Las actividades estuvieron orientadas hacia las tres direcciones fundamentales del proyecto: artística- literaria, cultura de salud y cultura ambiental, basándose en la animación sociocultural y sus técnicas participativas.

Las mismas, según opinan los comunitarios de la circunscripción, en entrevista realizada (50) y en la encuesta aplicada a un total de 150 miembros de la comunidad, se promocionan en el tiempo requerido a través de pancartas, cara a cara con los comunitarios y la coordinación con los presidentes de los Comités de Defensa de la Revolución, y demás miembros del grupo de trabajo comunitario. Lo que ha contribuido a que se avance de forma sistemática en la participación deseada pues las personas realizan con anterioridad sus labores en el hogar para poder participar.

Los proyectos dedicados a los niños estuvieron orientados a formar valores como la honestidad, el compañerismo, patriotismo, humanismo, dignidad, amabilidad y el respeto hacia los demás, así como desarrollar sus habilidades creativas, apreciación literaria, las artes plásticas y cinematográficas además del cuidado del medio ambiente.

Ejemplo de las actividades desarrolladas fueron concursos cuyos temas eran seleccionados por ellos mismos, visitas a galerías taller, debates sobre el cuidado del entorno, exposiciones de sus dibujos, confección de muñecas, comprensión de cuentos y relatos, interpretación e identificación de autores y obras musicales de la localidad, entrevistas con combatientes de la Revolución en aras de fomentar sentimientos de patriotismo e identidad, la apreciación cinematográfica a través de debates de filmes como “Elpidio Valdés”, relacionados con la cotidianeidad de los niños en lo que estos se veían reflejados. Además, se planificaron talleres con el público infantil en el cine 28 de Septiembre, institución cercana a la comunidad, espacio que ofrece múltiples oportunidades a la labor sociocultural emprendida por el proyecto ENTRESCULTURAS.

En este propósito en el proyecto para la formación de animadores socioculturales “Formando el Futuro” se planteó como objetivo contribuir a la detección en la comunidad de la circunscripción 87, de sus propios agentes de transformación, al mismo tiempo dar respuesta a la necesidad planteada por la comunidad relacionada con los multiplicadores del cambio sociocultural.

Hechas las consideraciones anteriores fueron escogidos los niños por su alta sensibilidad, motivación y preocupación. Por medio de actividades estratégicamente trazadas se descubrieron y potenciaron sus aptitudes artísticas, para convertirlos en los animadores principales de las actividades organizadas, en los Comités de Defensa de la Revolución. Tal intención fue cumplida, a través de sus propias ideas e iniciativas los niños se reúnen y preparan sus actividades de animación sociocultural.

Cabe agregar que el proyecto para las personas de la tercera edad, fue elaborado con una participación destacada de los vecinos de la comunidad. La ejecución del mismo propició múltiples acciones que respondieron a la satisfacción de sus necesidades culturales. Por ejemplo: recordar la música del ayer escuchando boleros y danzones interpretados por los propios comunitarios; charlas sobre la salud y el deporte como elemento indispensable para la preparación física, juegos de dominó, la lectura e interpretación de poemas de amor, la conmemoración de acontecimientos históricos en los que se recordaban momentos importantes de sus vidas y reflexiones sobre la unidad familiar.

En cuanto al proyecto de animación para las amas de casa y el fomento de tradiciones culinarias, las actividades se dirigieron a aportar conocimientos útiles para el quehacer cotidiano. Por ejemplo: consejos del hogar, secciones de curiosidad, conferencias de cultura alimentaría, exposiciones culinarias y de plantas ornamentales, literatura, se logró la participación de las mujeres escritoras, poetas, narradoras orales lo que permitió que las mujeres de esa comunidad tuvieran contacto directo con las creadoras del territorio y pudieron conocer de sus obras de manera directa.

Se realizaron talleres de mujeres creadoras donde fueron presentadas recetas de cocina y objetos de corte – costura, como resultados de la creatividad e iniciativas propias. Además del intercambio con especialistas cuya participación fue posible como resultado de la coordinación adecuada entre los estudiantes y las instituciones culturales del municipio en el que esta enclavada la comunidad.

En las técnicas (entrevistas, taller de reflexión y encuesta) para evaluar los criterios de los comunitarios y particularmente de las mujeres, se pudo apreciar el impacto positivo de las iniciativas presentadas. Según la opinión de las mujeres el 90% de las encuestadas consideró muy bueno el que se desarrollara el proyecto y se estimulara el desarrollo de las mujeres, al mismo tiempo en el taller de reflexión y en las entrevistas fue un criterio ponderado el que desde el inicio de las actividades se notaba un ambiente muy bueno entre las mujeres, destacando que tenían mucho entusiasmo por todas las actividades de la comunidad. Con referencia a lo anterior vale agregar el criterio mayoritario de las implicadas en las acciones socioculturales de la oportunidad que significaba la ejecución del proyecto, en el sentido de la posibilidad que brinda para que las mujeres pudieran compartir con las creadoras, artistas e intelectuales del territorio.

En la valoración realizada con niños se destacó de manera especial los criterios dados por los padres, quienes opinaron que, las actividades culturales estimularon la imaginación de los niños contribuyendo a la formación de habilidades manuales y valores esenciales como la creatividad, el amor a la familia, a la patria, al barrio, a los amigos. Además de brindar enseñanzas referidas a la educación formal, el cumplimiento de las tareas escolares, la cooperación y respeto a los vecinos.

Estas ideas fueron validadas por las personas de la tercera edad. El 90% expresó que participar en juegos, compartir chistes y adivinanzas los alejaba de preocupaciones, dolencias y aún cuando el tiempo de duración de las actividades concluye continúan intercambiando opiniones, por lo que ha favorecido el fortalecimiento de las relaciones interpersonales.

Por su parte las amas de casa coincidieron en que ha sido de gran provecho la realización del proyecto. Este ha influido en sus estados de ánimo, aislándolas de lo cotidiano e integrándolas a la vida social de la comunidad, teniendo en cuenta sus capacidades manuales, artísticas y literarias. También ha posibilitado la interacción entre diferentes generaciones, el intercambio de ideas y la unidad como eslabón fundamental para la búsqueda de soluciones a los problemas que presenta la comunidad y que muchas veces puede ser resuelto con la participación de los propios vecinos.

De manera general contribuyeron al fortalecimiento de las relaciones interpersonales, intercambiándose experiencias y conocimiento sobre las normas de convivencia y las condiciones propicias para una vida saludable y feliz. Además del fomento de la defensa y preservación de la identidad y el sentimiento de pertenencia para el desarrollo de la comunidad.

Estos cambios no solo han influido en el desarrollo cultural de la circunscripción 87. Las respuestas brindadas por los 50 estudiantes encuestados y la entrevista en grupo realizada con los estudiantes de 5to año del curso 2008-2009, expusieron la influencia del proyecto en su preparación académica. Más del 80% expresó sentirse capacitado para desempeñar las funciones como gestores culturales, coincidiendo en que diseñar y ejecutar acciones de animación sociocultural les permitió el intercambio con los comunitarios y consolidar los conocimientos aprendidos.

No obstante estos resultados favorables hay una parte de la población que concibe la participación en las acciones, desde la óptica de clientes-consumidores, consolidando las maneras de actuar “a la espera de soluciones”, desestimando la alternativa de solución de los problemas con los propios recursos de la comunidad.

Mediante el estudio realizado se constató que una parte de la población no se siente del todo interesada en implicarse en su realidad sociocultural y ayudar a su transformación, se perciben como beneficiarios de una acción, que debe ser estructurada, y es responsabilidad del Estado.

Dentro del proceso de transformación comunitaria conciben su rol como el de cliente, paciente, consumidor, asistenciado o público. En otros casos, se señala que su participación debe consistir en contribuir a través de sus críticas, y no siempre ven claramente como encauzarlas.

La generalidad de los vecinos se mostraban interesados en alcanzar un papel protagónico en la búsqueda de alternativas y contribuir con soluciones propias. Esta «pasividad» de una parte de los comunitarios, sin embargo, no reduce la visión crítica de su realidad sociocultural comunitaria, pues reconocen sus demandas colectivas y las necesidades prioritarias; pero siempre desde la perspectiva de ver a las instituciones estatales como principales responsables en la concepción y ejecución de las acciones de transformación comunitaria, con argumentos que se diluyen en limitaciones objetivas impuestas por las circunstancias económicas del país, la provincia, el municipio y la propia comunidad.

Algunos personas se lamentan de la pobreza cultural de algunos conciudadanos, de su falta de sensibilidad y empobrecimiento espiritual, de conductas sociales inadecuadas y malas condiciones de vida, responsabilizando a la escuela como institución , a los medios de difusión masivos, y a los órganos de gobiernos locales, pero ello contrasta con lo poco responsables que se sienten como parte de un colectivo social, y el convencimiento de su incapacidad para transformar la conflictividad de su medio comunitario.

Es importante apuntar que tales conductas son el resultado del entrecruzamiento de múltiples factores de diversa índole y grado de generalidad, difíciles a veces de precisar: las características individuales, el ambiente grupal y la historia de la comunidad desempeñan un papel decisivo, pero no único. No debe obviarse que ha existido una tendencia en las comunidades a colocar a la población como destinataria de acciones diseñadas desde el grupo de trabajo comunitario, desde el cual se apela a su comprensión; se convoca a su ejecución, pero no siempre a ejercitar su creatividad y talento para contribuir a su diseño y rectificación.

Este hecho se complementa con un imaginario social, presente en una parte de los promotores, técnicos y profesionales de las instituciones que de alguna manera desarrollan las acciones culturales, quienes atribuyen significados limitados a la cultura y al papel de la población en los procesos de participación. Para ellos, participar es sinónimo de asistencia a las actividades programadas y organizadas por sus instituciones.

La noción de cultura es aprehendida en su acepción más estrecha, restringida al hecho artístico. La población es vista únicamente como destinataria de un conjunto de productos y servicios económicos, sociales y culturales, los cuales cada vez tienen que alcanzar una mayor calidad artística.

La macro-estrategia de acción del proyecto ha estado dirigida, fundamentalmente, a sensibilizar a los diferentes grupos sociales del barrio, con manifestaciones artísticas, literarias y de cultura popular tradicional.

Conclusiones

El proyecto ENTRESCULTURAS ha favorecido la participación de los miembros de la comunidad del Consejo Popular No.18, al poner en práctica un conjunto de acciones de carácter cultural auxiliándose de la animación sociocultural, lo que en primer lugar permitió un proceso de sensibilización que ha contribuido a los logros que hoy pueden mostrsrse.

Los miembros de la comunidad expresan su satisfacción por la puesta en marcha del proyecto que generó un conjunto de proyectos específicos particularmente para los niños, amas de casa y personas de la tercera edad, lo que ha impactado positivamente en el clima cultural de la zona y a generar procesos de participación a pequeña escala, especialmente en función de desarrollar actividades de orden artístico, literario.

La ejecución del proyecto ENTRESCULTURAS ha coadyuvado a mejorar las relaciones interpersonales a juicio de los miembros de la comunidad, pues las tareas desarrolladas han servido para compartir no solo el talento artístico, sino también para poner en práctica valores como la solidaridad, el compañerismo, la modestia, el altruismo, el humanismo, el patriotismo, el respeto al otro.

La participación de los comunitarios fue experimentando transformaciones graduales en lo que influyó de manera esencial la comprensión de los comunitarios y la labor de promoción desarrollada por el colectivo de investigadores promotores del proyecto (profesores y estudiantes de la carrera de Estudios Socioculturales).

El proyecto ha tenido como resultados en la comunidad, la participación en la autogestión cultural, en la protección de su entorno natural, en un incremento en los espacios y actividades culturales y el sentimiento de pertenencia e identidad, que está reflejado en los cambios de actitudes positivas con relación a la cultura en su sentido amplio, en un mayor disfrute de las actividades artísticas, literarias, y deportivas, así como elevación de los gustos y preferencias, que propicia la transformación sociocultural comunitaria y contribuye a un mayor desarrollo cultural .

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