Revista: Caribeña de Ciencias Sociales
ISSN: 2254-7630

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LOS DEMONIOS DEL MAR CONTRA EL LEON IBERICO: PIRATAS Y CORSARIOS EN LAS COSTAS DE CUBA (SIGLOS XV-XVI)

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Océanos, combates, navíos y marinos en la Historia
Los océanos y mares han sido un factor muy importante en la historia de naciones e imperios a lo largo de la Historia Universal. Al  analizar la historia del pasado de la humanidad, desde las civilizaciones sumerias, hititas y egipcias, hasta la edad contemporánea, este análisis  permite comprobar que las acciones que tuvieron como escenario de combate o comercio el mar  fueron un pilar fundamental en la estrategia política de ministros, reyes y emperadores, llegando incluso a la literatura con una de las más grandes obras de todos los tiempos:  “La Ilíada”, de Homero donde se narran avatares de combates cerca de navíos y la importancia de estos en el ataque y asedio de una ciudad fortificada (Troya).1
Hoy, en pleno siglo XXI, los océanos son un escenario fundamental de la geopolítica mundial, desde su inclusión en los planes bélicos en los anales del Imperio Británico.  En él se trasladan mercancías y las rutas comerciales son custodiadas por poderosas fuerzas militares de índole naval como en el pasado, esto demuestra que este es aún un escenario donde las aspiraciones de las grandes potencias constituyen campo de conflictos y objetivos estratégicos para mantener su posición en el ranking mundial. Por todo ello el estudio de la historia, personalidades y sucesos del pasado son fuente de análisis y estudio del presente para preparar el futuro y no cometer errores
El presente trabajo pretende demostrar a través del análisis de personalidades y hechos históricos pertenecientes a los siglos XVI, XVII y XVIII, el accionar de las grandes potencias en el archipiélago cubano, principalmente en su parte sur-oriental utilizando como punta de lanza el corso y la piratería contra el poder naval y terrestre español
Los métodos utilizados fueron la búsqueda bibliográfica, el análisis de documentos en archivos, bibliotecas públicas y privadas, visualización de materiales audiovisuales, y estudios de mapas y planos de la época.
Entre los documentos estudiados se destaca el libro “Piratas y Corsarios en Cuba”, de Saturnino  Ullivarri, muy aclamado por la crítica desde que fuera editado en 1931, hoy esta publicación es referencia obligada sobre el tema, aunque en ocasiones adolece de la falta de referencias y fuentes bibliográficas en algunos temas, además que los sucesos que abarca es a nivel nacional, no regional o local.
Se destaca asimismo, “Piratas en el archipiélago cubano” de Antonio Núñez Jiménez, el cual, en un volumen de apenas 118 páginas realiza un bosquejo general sobre el tema, pero de manera global, no en una zona en particular, (exceptuando Isla de la Juventud, en aquel tiempo de Pinos),pero a pesar de ello es un material valioso para la referencia rápida del tema.
En la década de 1980, un texto aborda el tema desde la óptica geopolítica del Gran Caribe, es “Piratas en el Caribe” de Francisco Mota, el cual hace referencia en ocasiones a sucesos y personalidades del ámbito naval en la región abordada en la presente investigación.
El voluminoso estudio “The rise and fall of the great powers”, de Paul Kennedy, es un texto obligado para entender el actuar de las potencias europeas desde el año 1500 D.C hasta el siglo XX. Hace un análisis efectivo y muy interesante desde el punto de vista económico y el de los intereses geopolíticos y militares de las grandes potencias de la época, sus acciones y desaciertos que condujeron a su auge y posterior declinación.
Obras como “El Corso en Cuba”, de Cesar García del Pino, y el libro “Inglaterra, la Habana, 1762” de Gustavo Placer Cervera, no podían faltar entre los textos citados, ambas abordan con fidelidad y con aspectos novedosos en base a investigaciones en archivos nacionales y de otras naciones, el interactuar comercial y europeo de la época en aguas de la entonces colonia de España. Son textos de obligatorio estudio sobre el aspecto en cuestión.
El tema ha sido trabajado por autores como Esquemeling, Daniel Defoe, y no pueden faltar los protagonistas de los hechos que se mencionan en la investigación como John Hawkins, William Dampier, entre otros muchos.
Una señalización necesaria es mencionar en la investigación el uso de los Portulanos, mapas necesarios para entender varias teorías que hoy recorren el mundo, sus autores, e hipótesis sobre el tema.
Navíos en ruta a lo desconocido.
Corría el año 1480, cuando del entonces reino de Inglaterra, partían varias expediciones buscando nuevas rutas para llegar a las legendarias tierras del oriente.
En 1298, Marco Polo, un mercader y viajero de la entonces poderosa Republica de Venecia, estaba en prisión, allí conoce a un escritor Rustichello de Pisa, a quien relató sus fabulosos viajes, que fueron el tema del libro conocido en principio como “Le divisament du monde”, “Livre des merveilles du monde”, o como es más conocido hoy en día: “Il Milione”, el cual enalteció la imaginación de Europa durante más de 300 años, las riquezas del Gran Khan, de Kimbalú, (los descendientes de la dinastía Yuan fundada en China por Kublai Khan, descendiente de Gengis Khan) fueron objeto de codicia por los monarcas y señores feudales del continente europeo.
En 1452-1453, la capital del entonces decadente Imperio Bizantino, Constantinopla, es atacada y expugnada por los turcos, los cuales cierran rutas ya utilizadas desde hacía siglos por mercaderes franceses, ingleses, españoles y de otras naciones.  Apoyados por una poderosa máquina militar, con un poder naval y terrestre que no tenía rivales en muchos países, el imperio otomano rápidamente se convierte en un importante actor de la geopolítica mundial, que hasta el siglo XIX  daría mucho que preocupar a otras grandes potencias.
Es por ello que en:
-           1480: Un buque inglés bajo el comando de Thayde o John Lloyd zarpa para encontrar Brasil (apoyándose en viejos mapas medievales).
-           1481; Buques Georg y Trinity.(Ibídem)
-           1492: viajes de Cristóbal Colon (Monarquía Española).
En esta ocasión no analizaremos los viajes de marinos portugueses, pues la escuela de marinos del príncipe Enrique el Navegante, ameritaría otra investigación.
Sin embargo, no podemos dejar de analizar algo se convertiría en junto al navío, la brújula, las armas de fuego, la pólvora y el papel, en uno de los instrumentos que hoy despiertan el interés de los investigadores como El profesor Charles H. Hapgoog, en su texto “maps of ancient sea kings”.
Varias teorías hacen referencia a que algunos capitanes, poseían mapas de antiguos marinos que habían recorrido mares desconocidos para la época, entre estos se destacan los mapas de Ibn Ben Zara, Piri Reis, las referencias de un célebre viajero árabe Ibn Khaldun, Hadji Ahmet, entre otros.  Algunos se refieren incluso a los viajes del almirante chino Cheng Ho, y al IV libro de Shan Hai “La antigüedad en las montañas” (2500 a.C.) donde se describen montañas al otro lado del Océano Pacifico, en lo que hoy es América del Norte.
Ello hacia que los capitanes con mapas eran objeto de solicitud y estimación, los mismos eran secreto de estado y se recomendaba destruirlos antes que elementos hostiles se apoderaran de ellos, hay autores que plantean, (aun hoy sin comprobar) que Colon poseía  uno de los mapas que descubría nuevas rutas en mares desconocidos.
Todo ello no impide reconocer la valentía y el arrojo de cientos de navegantes que se aventuraron a lo desconocido, aún más después del choque de civilizaciones que tuvo como protagonistas a la vieja Europa y a una joven América que entra por las puertas de la Historia Universal en 1492.
Los sucesos que se desencadenaron desde ese momento, exaltaron la imaginación, y ya Colon desde su Tercer Viaje (1498) escribe: “Navegue a la Isla de Madera por camino no acostumbrado, por evitar escándalos que pudiera tener con una armada de Francia, que me aguardaba al Cabo San Vicente, de allí a las Islas de Canarias, de donde me partí con una nao y dos carabelas y envié los otros navíos a derecho camino a las Indias a la isla española.” 2
Ya entonces comienzan las hostilidades entre los poderes europeos, es Francisco I de Francia, el Rey Caballero, el que pide que se le muestre la cláusula del testamento de Adán donde se le excluía de poseer las tierras descubiertas al tener noticias en 1493 de la bula del papa Alejandro VI, que dividía entre España y Portugal los territorios americanos.
Fue gigantesca la magnitud del conflicto iniciado que se extendería desde Europa hasta los mares americanos, baste decir que entre 1504 y 1527, 832 buques parten hacia América desde Sevilla,  España, pero solo hay noticias y documentos demostrando el regreso de 538
(39% perdidos), aquí entra desde el clima como factor adverso, hasta los saqueadores del mar, entran en escena:  inicialmente filibusteros, a los que siguen piratas de talla internacional, hasta llegar a los Almirantes de grandes escuadras navales, auspiciadas y equipadas por compañías comerciales, apoyadas por monarquías, que así debilitaban a su enemigo en tiempo de guerra y paz.
Primeros ataques
En 1521 una flota francesa corsaria de 7 navíos, captura 2 carabelas cargadas de oro que viajaban a España.(Fueron liberadas a la altura de cabo Corrientes por una escuadra española comandada por Alejandro Manrique.).
En 1522 Jean Fleury conocido en España también como Juan Florín o Juan Florentino, fue un oficial y corsario de la marina francesa que logra capturar la flota española en la cual se enviaba al emperador Carlos V el fabuloso tesoro que Hernán Cortés había capturado al destruir y saquear la confederación azteca;  (apoderándose de 2 de las tres carabelas que contenían el botín).
En 1528, el corsario Diego Ingenios ataca Cubagua, en el litoral de la actual Venezuela.
Cuba:  Primeros ataques de Corsarios y Piratas
El primer ataque en aguas del archipiélago cubano no ocurre como plantean algunos autores en la zona oriental, es en la villa de San Cristóbal de la Habana, y los sucesos se desencadenan desde la llegada a la bahía en enero de 1538 de 5 navíos españoles cargados de mercancías, hasta el15 de marzo del mismo año, cuando un patache francés(embarcación muy ligera, de dos mástiles, usada para reconocer costas, apoyar con su rapidez y poder de fuego escuadras y convoyes, y reconocer costas) , se aproxima a la costa, y al perseguirlo 3 de las naves españolas tiene lugar el primer combate naval entre potencias europeas en aguas cubanas. Luego de un intercambio de cañones y pedradas a la altura del Mariel, el francés huye y errores de los españoles, hacen que en la maniobra  encallen sus buques que son tomados por los corsarios y seguidamente la villa es saqueada y quemada. Es el primer incendio que sufrió la Villa de La Habana, donde se perdieron totalmente documentos y actas capitulares de la naciente ciudad
El 5 de abril de 1538 la región oriental es escenario de otro enfrentamiento. Está documentado en el Nobiliario de Conquistadores de las Indias el combate naval entre el sevillano Diego Pérez y otro patache francés, que había capturado unos días antes un galeón español, el corsario es obligado a replegarse y abandonar las aguas de Santiago de Cuba. Sin embargo, días después, el corsario entra en la bahía de la Habana y la villa nuevamente es saqueada.
El llamado Puerto Menor de Manzanillo (más tarde Puerto Real de Manzanillo, embrión de la ciudad del mismo nombre) es atacado en julio de 1573 por una flota de varios navíos franceses, los cuales se llevaron todos los artículos de valor de los vecinos y 3000 cueros curtidos.
De esta primera etapa se desprende que los barcos utilizados por los atacantes se caracterizaban por su velocidad, poco calado y armamento, sin embargo es digno de reflexionar que el patache siempre fue utilizado como acompañante de otros navíos, por lo cual, los protagonistas pueden ser parte de avanzadillas y exploradores de flotas aún mayores que acechaban en las cercanías.
En 1543 se destaca la figura del corsario y pirata Roberto Baal, fuerzas bajo su mando atacan Santiago de Cuba y la Habana siendo obligadas a retroceder por la resistencia de los vecinos.
El 17 de febrero de 1546 es atacada Baracoa por Hallebarde, celebre corsario de Gascuña, ocupa el pueblo ante la huida de los vecinos, saquea la villa, pero no la incendia, tampoco se lleva el ganado para curtir pieles.
El domingo 17 de abril del mismo año, ataca en el mismo puerto de Santiago de Cuba una carabela (embarcación ligera, alta y larga, estrecha, de aparejo redondo o latino y con tres mástiles, sobre una sola cubierta y elevado castillo de popa; navegaba a unos 8 nudos (unos 15 km/h)), la captura con mercancías y un valiosos cargamento de cueros. Se retira sin ser molestado y cerca de la costa libera a la tripulación española en pequeños botes.
Al analizar diversos documentos, se encuentra un dato curioso: prácticamente no existieron ataques entre los años 1546-1552, tal vez la causa era una escuadra naval española bajo el mando de Blasco Núñez de Vela, que escoltaba navíos y hacia cruceros de vigilancia, pero en 1547, se aprobaba por la corona que los buques con destino a España, o en viajes entre las colonias podría viajar sin esperar a los convoyes o flotas, por ello, tal vez en los primeros días de abril de 1552, se produce un nuevo ataque a un galeón pequeño de 120 toneladas que era asaltado por un jabeque filibustero francés, entrando al puerto de la Habana en la “….mañana del 28 de abril con serias averías en su arboladura y obra muerta y con tres tripulantes heridos”3
Al  analizar los hechos que azotaban a la Isla en esa etapa, bajo el ataque de verdaderas flotas corsarias, es inevitable recordar el asalto de Jacques de Sores a Santiago de Cuba el 1 de julio de 1554, donde se mantuvo hasta el 2 de agosto, llegando incluso luego de ocupar la ciudad a alternar con los vecinos, respetar la iglesia, perdonarle rescates y visitar mansiones, llegando uno de los vecinos, de nombre Alfonso de Sosa a escribir a España en carta del 24 de noviembre de 1554: “…varios navíos franceses se han hecho dueños de estos mares, como lo es el Emperador del Rio San Lúcar” 4
No fue así en la Habana, donde en el año 1555, Jacques de Sores toma la villa y la destruye hasta sus cimientos, luego de hechos recogidos por la historia como la heroica resistencia de Lobera, la cobardía de Angulo, y el trazado del primer plano y sondeo de la Bahía de la Habana.
El ataque de Guillermo Mermi en ese año a la Habana, vuelve a destruir las viviendas, sin embargo, meses después los habaneros celebraban la muerte del pirata, al asaltar este un galeón español mandado por Alvar Sánchez de Oviedo, el cual lo derrota y conquista fama al manejar simultáneamente 14 arcabuces que eran cargados por dos pajes, lo cual le permitía disparar ininterrumpidamente, haciendo numerosas bajas entre los asaltantes.  Fue recompensado por el rey con un título de nobleza.
En 1556 retorna el sistema de flotas, y en América se basifican dos flotas españolas, una bajo el mando de Don Tello de Guzmán, y la otra bajo el comando de Don Diego López, una escuadrilla fue situada en Santiago de Cuba, y otros navíos en crucero cerca de la Habana.
El  16 de enero de 1556, Diego de Mazariegos parte a Santiago de Cuba, recibe noticias de un posible ataque a la villa por piratas franceses, al retornar persuadido de que eran falsas informaciones recibe la noticia que en junio, el día del Corpus Christi, la ciudad oriental había sido saqueada, pero es olvidado el incidente por un peligro sobre la Habana por parte de galeras piratas y carabelas que acechaban, suceso que se repite meses más tarde, pero entonces se acercaban los galeones de la escuadra de Pedro  Menéndez de Avilés, ante el cual se retiraron de inmediato los barcos piratas. Este marino ordena a varios de sus capitanes que se establezcan en Santiago de Cuba para vigilar las costas de la Española y hacer cruceros contra franceses e ingleses
Entre las figuras que navegan en corso al sur de Cuba no podemos olvidar aun corsario que le dio nombre a un accidente natural cerca de cabo Cruz, el nombre de Punta del Inglés, algunos sostienen que es un recuerdo del pirata, corsario, almirante y caballero John Hawkins, del cual escribe Ullivarri:  “Hawkins fue bien conocido en la jurisdicción de Manzanillo, donde denominaban a su tripulación “los escoceses”….y por la costa sur: Guantánamo, Puerto Escondido, Cabo Cruz Manzanillo y alrededores del puerto de Casilda” 5
Este corsario fue en la zona un astuto negociante, que bajo la amenaza de las armas comerciaba con productos europeos, pero sobre todo era traficante de esclavos, los cuales eran muy demandados por los españoles, llegando a cerrar tratos y potenciar intercambios por todo el delta del Cauto.
Pierre el Vasco y Juan Oxman fueron dos de los aventureros que merodeaban por la zona, sin embargo sus correrías se extendieron principalmente para la parte occidental, aunque amenazaban y aun saquearon cerca del litoral de Manzanillo, sin embargo, en la Historia fue recogido el caso de J. Richards, conocido entre los españoles como “El capitán Mota”, el cual luego de apresar un navío español se dirige a Manzanillo a pedir rescate, y al ir sus rehenes a búscalo al Hato de Yara es atacado por Gómez de Rojas y capturado, no así su hijo que pudo huir, y al enterarse de que su padre había sido ejecutado, ataca Santiago de Cuba en 1586 destruyéndola a tal punto que incluso se pensó en el traslado de la villa.
No se puede olvidar entre estos capitanes a Francis Drake, pero para referirse a este corsario, pirata y emulo de Hawkins sería necesaria una investigación completa, baste decir que nuestras costas fueron utilizadas como punto de carenar sus navíos, y asaltar sus presas. Es en su último viaje que”… por primera vez en la Historia Naval de Cuba dos flotas se enfrentan a en aguas cubanas; Baskerville contra Avellaneda cerca de Isla de Pinos (hoy Isla de la Juventud). 6
Es a finales del siglo XVI e inicios del XVII que un pirata cubano se hace famoso, es digno de mencionar que su tutor reconocido fue Sir Francis Drake, el marino ingles más popular y temido del momento, es el conocido por  Diego Grillo,  de raíces africanas, el cual navegó con el corsario inglés, recibiendo su entrenamiento a sus órdenes y entre 1587 y 1608 azoto las costas cubanas, aliado incluso a un famoso corsario holandés Cornelius Cornelizoon Jol´s “Pata de Palo”.
Muchos fueron las personalidades que la historia ha novelado con sus hazañas, pero no se debe olvidar que:
-           Cada uno de estos corsarios en algún momento, y otros constantemente recibían apoyo de sus gobiernos.
-           Los navíos corsarios y piratas no siempre navegaban solos, llegaban en ocasiones a forjar verdaderas alianzas, Hawkins por ejemplo, siempre navega con un mínimo de dos a tres navíos.
-           El abordaje a los galeones de batalla españoles en la mayoría de los casos culminaba en desastres, estos estaban fuertemente armados y tripulados, siendo muy difícil vencerlos.
-           Los vecinos de las villas en ocasiones eran engañados, pues pensaban en el comercio de rescate cuando en realidad eran piratas que se acercaban a saquear.
Las coronas europeas, forjaron un verdadero juego geopolítico, donde los aliados de hoy eran enemigos del mañana, llegando a jurar amistad, cuando sus corsarios en esos momentos atacaban posesiones de otros. Su objetivo era uno solo: Debilitar la monarquía española y saquear las riquezas del nuevo mundo; tal vez ninguno entendió esa idea como Oliverio Cromwell con su “Western Design”, comenzando un nuevo juego geopolítico que tendría como resultado el fortalecimiento de la flota inglesa y el inicio de una nueva era en las relaciones internacionales.

Bibliografía:
- Colón, Cristóbal. (1967). Diarios de Navegación, Editorial Espasa, Barcelona
-  Grandes enigmas de la humanidad. (2014) , Editorial Océano, Barcelona:
-  Geymont, Mario. (1987). Eneide con episodi significativi di Eliade e Odissea. Zanichelli.   Bologna.
- Hapgoog, Charles H. (1965).  Maps of ancient sea kings. Jackson, New York: 
-  Kennedy, Paul.  “The rise and fall of the great powers”.(1989),  Plaza Jane’s, Paris
_____________. (2001)  “The rise and fall of British Naval Mastery. Penguin Books, London:
- Mota. Francisco Mota. (1984.)  Piratas en el caribe: Casa de las Américas., La Habana,
- Núñez Jiménez, Antonio. (1986.) Piratas en el archipiélago cubano. Editorial Gente Nueva . Ciudad de la Habana:,
- Placer Cervera, Gustavo. (2007).Inglaterra, la Habana, 1762.  Editorial de Ciencias Sociales.  Ciudad de la Habana.
-  Pezuela, Jacobo  de la. (1866) Diccionario geográfico, estadístico, histórico de  la isla de Cuba. Imprenta del establecimiento de Mellado. Madrid,.
- Polo, Marco. (1983) Marco polo: El Millón. Editorial Gente Nueva, Ciudad de la Habana.
- Ullivarri, saturnino. (2004).  Pitaras y corsarios en Cuba.. Editorial Renacimiento, España
-  Woodbury, George.( 1951)  The Great days of Piracy in the Wes Indies.  W. W. Norton. New York

*Master en Ciencias en la especialidad de Cultura Económica y Política. Se desempeña como profesor universitario en la Universidad de Granma (Cuba). Ha dictado participado y dictado conferencias en eventos nacionales e internacionales. Sus investigaciones han sido publicadas en revistas nacionales y españolas.
1 Geymont, Mario. (1987). Eneide con episodi significativi di Eliade e Odissea. Zanichelli.   Bologna, p. 490.
2 Colón, Cristóbal. (1967). Diarios de Navegación, Editorial Espasa, Barcelona. P. 128
3 Ullivarri, Saturnino.(2004) Piratas y corsarios en Cuba.. Editorial Renacimiento, España. P. 77
4 Ibídem, p. 81
5 Ibídem, p. 124
6 Woodbury, George.( 1951)  The Great days of Piracy in the Wes Indies.  W. W. Norton. New York, p. 345

Recibido: 02/07/2019 Aceptado: 24/10/2019 Publicado: Octubre de 2019

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