Gloria de la Caridad Vargas Medina*
Yudermis Ortiz García**
Centro Universitario Municipal Songo La Maya, Cuba
gloria@uo.edu.cu
Resumen  
La ponencia aborda las insuficiencias  que se manifiestan en los profesionales de la Educación Artística, en su  desempeño en el trabajo comunitario a partir de las distintas expresiones del  arte y la cultura, lo que permite un acercamiento a la esencia del trabajo  comunitario desde la inserción en el desarrollo socioeducativo, mediante los  proyectos extensionistas que se desarrollan en el Consejo de Poblado Salvador  Rosales en el  municipio Songo-La Maya.
Palabras claves: Profesionales, trabajo comunitario, inserción, proyectos extensionistas, desarrollo socioeducativo.
Summary
    The paper addresses the shortcomings that manifest  in the professionals of Art Education, in their performance in community work  from the different expressions of art and culture, which allows an approach to  the essence of community work from the insertion in socio-educational  development through the extension projects that are developed in the Salvador  Rosales Town Council in the municipality of Songo-La Maya.
  
  Keywords: Professionals, community work, insertion, extension  projects, socio-educational development. 
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato: 
Gloria de la Caridad Vargas Medina y Yudermis Ortiz García (2019): “La inserción de los profesionales de la educación artística en proyectos extensionistas para el desarrollo socioeducativo”, Revista Atlante: Cuadernos de Educación y Desarrollo (octubre 2019). En línea: 
https://www.eumed.net/rev/atlante/2019/10/profesionales-educacion-artistica.html
//hdl.handle.net/20.500.11763/atlante1910profesionales-educacion-artistica
INTRODUCCIÓN 
Para fomentar el trabajo sociocultural -  comunitario se debe estimular la formación de profesionales de la  cultura con una clara concepción humanista, conocedores de los múltiples  aspectos de la vida comunitaria, exige del individuo requisitos, tales como:  altos niveles educativos e instructivos, madurez ideológica, convicciones  profundas, profesionalidad y responsabilidad ante los retos que la sociedad  impone. 
Para la sociedad en general resulta de  vital importancia determinar los fines de la educación, su identificación como  función de la sociedad, que al decir del Comandante en jefe Fidel Castro Ruz se  resumen en “preparar al hombre, desde que empieza a tener conciencia, para  cumplir los más elementales deberes sociales, para producir los bienes  materiales y los bienes espirituales que la sociedad necesita” .
Atendiendo a estas reflexiones se puede  apreciar como en la política educativa cubana se define como formar a las  nuevas generaciones y a todo el pueblo en la concepción científica del mundo,  desarrollar en toda su plenitud humana las capacidades intelectuales, físicas y  espirituales del individuo y fomentar en él, elevados sentimientos y gustos  estéticos; que les permita convertir los principios ideopolíticos y morales en  convicciones personales y hábitos de conductas diarias. 
El concepto martiano de educación  constituye un sistema de acciones encaminadas a preparar al hombre para la  vida, esto queda reflejado cuando señala: “Educar no es dar carreras para  vivir, sino templar el alma para la vida”. 
Estas ideas están relacionadas con el  proyecto político-social y cultural que se sustenta en el papel de la educación  en la formación de una sociedad nueva, donde promover la cultura es una de las  vías educativas indirectas que se utiliza para concretar las formas de  participación ciudadana en su autogobierno y desarrollo. Es por eso que la  educación constituye una de las funciones más importantes de la sociedad. No se  concibe el desarrollo de la humanidad, ni de su historia, la   transmisión a las nuevas generaciones de la  herencia cultural y los conocimientos, ni la continuidad del progreso social, sin  que esté presente la educación; fenómeno que se manifiesta directa e  indirectamente, organizado, activo y en ocasiones espontáneo a todo lo largo de  la vida, determinando el comportamiento social.
A finales de la década del 90 del pasado  siglo, precisamente en medio de los cambios producidos por el derrumbe del  campo socialista, Cuba ha estado inmersa en una renovación conceptual en el  ámbito de la cultura, donde se ha desarrollado una estrategia que de respuesta  a los efectos de la globalización neoliberal que se ha venido desplegando por  las grandes potencias; una estrategia que tiene además como fin contrarrestar  los efectos nocivos derivados de la globalización en la dimensión cultural, a  través de las nuevas tecnologías de 1 (Fidel Castro Ruz: Discurso de Fidel  Castro en reunión con profesores en la Biblioteca Nacional.) En Revista  Educación y Cultura .La Habana, 1974. (pag28) 
El Comandante en Jefe Fidel Castro  expresó el veintinueve de diciembre del 2001 en la sesión extraordinaria de la  Asamblea Nacional, que en las actuales contiendas de ideas que lleva el pueblo  se realizan diferentes batallas, las cuales se encuentran enlazadas entre sí y  tienen como fin el desarrollo de la cultura general integral de nuestro pueblo:  los promotores culturales son una evidencia de esta importante batalla 2. 
Se hace imprescindible tener en cuenta  en el presente trabajo algunos conceptos de relación entre educación y cultura  así como enseñanza artística que poseen rasgos coincidentes y se asumen a la  hora de fundamentar la investigación que al respecto tenemos: La cultura de un  pueblo llega a configurarse como personalidad colectiva, porque contiene toda  la creación que ese pueblo ha logrado alcanzar en la ciencia, el arte y la  literatura. Cultura (del latín “cultura”: cultivo, elaboración). Conjunto de  valores materiales y espirituales, así como de los procedimientos para  crearlos, aplicarlos y transmitirlos, obtenidos por el hombre en el proceso de  la práctica histórico- social. 
Cultura: Conjunto de conocimientos que  permite a alguien desarrollar su juicio crítico. Conjunto de modos de vida y  costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico,  industrial en una época, grupo social. Conjunto de manifestaciones en que se  expresa la vida tradicional de un pueblo. ( ) Cultura: Conjunto de valores  espirituales y materiales creados por la humanidad en el curso de la historia.  Nivel de desarrollo alcanzado por la sociedad en la instrucción, la ciencia, la  literatura, el arte, la moral, la filosofía, etc., y las instituciones  correspondientes. Reflejo de un complicado proceso que comenzó con la  conquista, síntesis de la unión de españoles, africanos, indios y asiáticos con  pinceladas nada despreciables de franceses y latinoamericanos, estos últimos a  partir de la culminación del ciclo continental independentista, la cultura  cubana dio pasos excepcionales en el siglo XlX y XX  . El ser nacional, definido entre otros  elementos a partir de una sólida asunción cultural, amplió sus dimensiones y  afianzó sus componentes para consolidar la autoctonía y la Identidad cultural  de la Isla ( ). En un sentido más estricto de la palabra, suele hablarse de  cultura material (técnica, experiencia de producción y otros valores  materiales) y de cultura espiritual (resultados en el campo de la ciencia, del  arte y la literatura, de la filosofía, de la moral, de la instrucción, etc.). 2  Castro Ruz Fidel Intervención en la Asamblea Nacional del Poder Popular 29  diciembre 2001.Periódico Granma 30 /12 /2001. 
La cultura es fenómeno histórico que se  desarrolla en dependencia del cambio de las formaciones económicos – sociales.  Frente a las teorías idealistas de la cultura, que la separan de su base  material y la explican como un producto espiritual de la “élite”, el marxismo –  leninismo ve el proceso de producción de bienes materiales como la base y la  fuente del progreso de la cultura espiritual; ello explica, precisamente, que  la cultura sea fruto de la actividad de las amplias masas de trabajadores. 
Dependiente, en lo decisivo, de las  condiciones materiales, la cultura espiritual no cambia automáticamente tras el  cambio de la cultura material, sino que se caracteriza por poseer una  independencia y sucesividad relativas en su desarrollo, por una recíproca  influencia por las culturas de los distintos pueblos. 
Los rasgos distintivos de la cultura  son: carácter popular, ideales comunistas, concepción científica del mundo,  humanismo socialista, colectivismo, patriotismo e internacionalismo socialista.  El papel rector en la creación y en el desarrollo de la cultura socialista lo  desempeña el Partido Comunista, cuya acción influye sobre toda la actividad  cultural y educativa del estado socialista. Particularmente, en Grecia y Roma,  se relaciona con el problema de la formación humana, a través de lo que hoy  llamamos humanidades. A dichas disciplinas se le ha reconocido históricamente  un valor esencial para el hombre y especialmente para lo que debía ser, se les  atribuía la capacidad de formar al hombre verdadero.” ( ) 
El Renacimiento la reconoce como la  “bonae litterae” (poesía, ciencia, filosofía, filología, estudio de lenguas  clásicas, pintura, escultura...) en función de la búsqueda del ideal clásico,  desde el fundamento que aportaba la sabiduría de los antiguos. Ello estaba  orientado a la formación de un hombre destinado a vivir en el mundo y a  dominarlo
Cultura: Conjunto de  conocimientos que permite a alguien desarrollar su juicio crítico. Conjunto de  modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico,  científico, industrial en una época, grupo social. Conjunto de manifestaciones  en que se expresa la vida tradicional de un pueblo. ( ) Cultura: Conjunto de  valores espirituales y materiales creados por la humanidad en el curso de la  historia. Nivel de desarrollo alcanzado por la sociedad en la instrucción, la  ciencia, la literatura, el arte, la moral, la filosofía, etc., y las  instituciones correspondientes. Reflejo de un complicado proceso que comenzó  con la conquista, síntesis de la unión de españoles, africanos, indios y  asiáticos con pinceladas nada despreciables de franceses y latinoamericanos,  estos últimos a partir de la culminación del ciclo continental independentista,  la cultura cubana dio pasos excepcionales en el siglo XlX y XX
. El ser nacional, definido entre otros  elementos a partir de una sólida asunción cultural, amplió sus dimensiones y  afianzó sus componentes para consolidar la autoctonía y la Identidad cultural  de la Isla ( ). En un sentido más estricto de la palabra, suele hablarse de  cultura material (técnica, experiencia de producción y otros valores  materiales) y de cultura espiritual (resultados en el campo de la ciencia, del  arte y la literatura, de la filosofía, de la moral, de la instrucción, etc.). 2  Castro Ruz Fidel Intervención en la Asamblea Nacional del Poder Popular 29  diciembre 2001.Periódico Granma 30 /12 /2001. La cultura es fenómeno histórico  que se desarrolla en dependencia del cambio de las formaciones económicos –  sociales. Frente a las teorías idealistas de la cultura, que la separan de su  base material y la explican como un producto espiritual de la “élite”, el  marxismo – leninismo ve el proceso de producción de bienes materiales como la  base y la fuente del progreso de la cultura espiritual; ello explica,  precisamente, que la cultura sea fruto de la actividad de las amplias masas de  trabajadores. Dependiente, en lo decisivo, de las condiciones materiales, la  cultura espiritual no cambia automáticamente tras el cambio de la cultura  material, sino que se caracteriza por poseer una independencia y sucesividad  relativas en su desarrollo, por una recíproca influencia por las culturas de  los distintos pueblos. Los rasgos distintivos de la cultura son: carácter  popular, ideales comunistas, concepción científica del mundo, humanismo socialista,  colectivismo, patriotismo e internacionalismo socialista. El papel rector en la  creación y en el desarrollo de la cultura socialista lo desempeña el Partido  Comunista, cuya acción influye sobre toda la actividad cultural y educativa del  estado socialista. ( ) “Particularmente, en Grecia y Roma, se relaciona con el  problema de la formación humana, a través de lo que hoy llamamos humanidades. A  dichas disciplinas se le ha reconocido históricamente un valor esencial para el  hombre y especialmente para lo que debía ser, se les atribuía la capacidad de  formar al hombre verdadero.” El Renacimiento la reconoce como la “bonae  litterae” (poesía, ciencia, filosofía, filología, estudio de lenguas clásicas,  pintura, escultura...) en función de la búsqueda del ideal clásico, desde el  fundamento que aportaba la sabiduría de los antiguos. Ello estaba orientado a  la formación de un hombre destinado a vivir en el mundo y a dominarlo. Ya la  época Moderna sienta las bases para la eliminación del carácter aristocrático y  contemplativo de la cultura de épocas anteriores, ampliándose el espectro de  sus componentes que incluía el estudio más profundo, que en el renacimiento, de  las ciencias naturales, de las matemáticas y la física, que contemplaba el  problema del desarrollo de lo que hoy llamamos técnica. La Enciclopedia como  diccionario razonado de las ciencias, las artes y los oficios lo recoge, con lo  cual puede apreciarse entonces cómo el preámbulo ideológico de la Revolución  Francesa contribuyó a la difusión de la cultura y a la pérdida de su carácter  elitista, con lo que se afirma su universalidad. El propio Hegel le atribuye un  sentido universal a la cultura que revela el espíritu de la Modernidad. Así  desde su fundamento idealista comprende que la cultura consiste, en espirituales  que rigen la conciencia y la vida y fue capaz de interpretar la relación de la  historia de la filosofía con la historia de las demás ciencias y con la  historia de la cultura, principalmente la historia del arte y de la religión  atendiendo a su contenido de objetos universales. Sobre la base de lo anterior,  el Marxismo aportó desde la comprensión sistémica de la actividad humana, los  fundamentos esenciales para la interpretación dialéctico – materialista de la  cultura, en la que se concreta la comprensión de su lugar en la formación,  esencialidad y desarrollo humano. En ese mismo sentido existen hoy diversas  acepciones y definiciones de cultura en el marco de los acercamientos  contemporáneos al fenómeno cultural. 
Una aproximación filosófica al problema  debe subrayar ante todo su condición de creación humana."...Su alcance y  definición está dado en todo lo que el hombre ha creado sobre la naturaleza y  lo define y distingue en el reino animal. Quítenle al hombre la cultura y  tendremos la fiera..."( ) No puede olvidarse que la cultura, en tanto  expresión de la multifacética actividad humana, material y espiritual, en sus  dimensiones práctica, cognoscitiva, valorativa y comunicativa constituye ante  todo manifestación del proceso de devenir y ascensión humana. La cultura es un  fenómeno multidimensional y su aprehensión conceptual resulta polisémica. Es  por eso que consideramos, ante todo, la cultura como concreción de la actividad  humana, material y espiritual, en sus dimensiones prácticas, cognoscitivas, valorativas  y comunicativas. Esto posibilita su interpretación como medida del desarrollo  humano, en tanto refiere el ser esencial del hombre, su proceso de asunción, su  autorrealización, pues ¨…el contenido verdadero de la cultura lo constituye el  desarrollo propio del individuo como sujeto social, el desarrollo de sus  fuerzas creadoras, de sus relaciones, necesidades, capacidades y formas de  comunicación…¨ ( ) Y por ello, precisamente, que se asume que cultura es,  también, acumulación, tradición, herencia y deviene un proceso de producción de  significados en el contexto de relaciones humanas. Ello deriva necesariamente  en otra cuestión de gran importancia ya que la cultura se expresa y concreta en  los valores. 
No puede el investigador, desde ningún  punto de vista, rendir culto a un pensamiento, sin considerar la época, las  circunstancias, el proceso de formación y desarrollo de dicho pensamiento, las  contradicciones y retos que enfrentara, y mucho menos, dejar a un lado, lo que  concierne al ser humano que es su portador. La noción contemporánea de cultura  refiere uno de los significados originales atribuidos en latín al término  cultura, colere, que es el cultivo o tendencia a cultivarse. Así, comprendemos  la cultura tanto en el orden material como espiritual, y ello nos conduce a  entenderla como medida del desarrollo humano, por cuanto supone el proceso  permanente de humanización, de realización humana. Porque implica "... lo  creado por el hombre a partir de la transformación de la naturaleza, y sobre la  base de una visión de fondo de sus raíces antropológicas..." ( ) -- Y es  que la cultura en su expresión filosófica “...designa el ser esencial del  hombre y su medida de ascensión, sintetiza en toda su concreción la producción  humana material y espiritual...” ( ), sin embargo, no puede desconocerse que se  le atribuyen diversos significados, por ejemplo: se habla de cultura material,  normativa, de costumbres, lenguaje verbal, sistemas simbólicos, valores. Es en  realidad un término que tiene hoy carácter polivalente, como lo refieren  diversos debates al respecto. De ahí, que pueda interpretarse por parte de esta  autora que cultura no es más que el conjunto de realizaciones materiales y  espirituales en las que se objetiva la multifacética actividad humana, así comprende  el conjunto de saberes, destrezas, procedimientos, modos de actuación y  resultados que se obtienen en el proceso de transformación de la realidad  objetiva por el hombre. Pero, a su vez, supone el proceso de creación y  apropiación, por lo que conlleva el problema de la herencia, de la continuidad  y ruptura, del enriquecimiento y superación, del desarrollo. Y es que, aun  cuando la cultura refiere el mundo creado por el hombre – en tanto producto-  comprende a su vez, el proceso de su realización. De ahí, su carácter complejo  y contradictorio. 
Y es que, abordar hoy cualquier cuestión  relativa a la cultura, supone hacerlo desde el acervo acumulado por la  humanidad, a la altura del Tercer Milenio, vale decir, desde el conjunto de  valores materiales y espirituales creados a lo largo de su historia. En este  sentido se descubre su dimensión valorativa, ya que la cultura no sólo sirve de  fundamento sino que se expresa en los valores. 
Cultura y valores constituyen conceptos-  que designan fenómenos sociales altamente complejos en la contemporaneidad-  estrechamente vinculados. Si bien, la cultura no puede reducirse a los valores,  lo cual resulta totalmente absurdo, no puede negarse que estos constituyen una  de sus aristas esenciales. La cultura es fundamento de los valores y se expresa  en ellos. Los valores, a su vez, sirven de punto de partida en la realización  de conquistas culturales. La significación práctica de ambos fenómenos se  manifiesta con fuerza en un mundo donde se asocian no sólo a la defensa de lo  creado sino a la propia existencia de la Humanidad como sujeto creador. 
De esto que sea importante para esta  investigadora potenciar la idea de que la cultura puede ser considerada como la  esencia de la nacionalidad y la importancia que el imperialismo concede a la  penetración cultural como fase principal de su trabajo colonizador para dominar  los pueblos y debilitarlos en la conciencia propia, que les permite reconocerse  como tales, quebrando su capacidad y su resistencia, para consolidar sin lucha  su dominación. 
Un pueblo que se olvida de su cultura  llega a olvidarse de su propia nacionalidad. Ya antes habíamos examinado la  cultura como medida del desarrollo humano alcanzado por el hombre en su  quehacer, tanto espiritual como en su accionar social en general, de donde ese  resultado cultural final no se produce en forma abstracta ni al margen de una  sociedad dada, sino auténtica, la conciencia de lo pasado, el patrimonio de lo  conservado y la reflexión acerca del porvenir”. ( ) 
“La cultura de cada país tiene por tanto  una historia de gestación y desarrollo en la que se aprecia la forma peculiar  de vincularse lo universal con lo propio, lo auténtico con lo foráneo, y donde  se alcanza de igual manera la conciencia En todo este proceso se van marcando  los hitos fundamentales de conformación de la nacionalidad y su consolidación  de nación, a través de diferentes peldaños en los cuales va surgiendo un  producto genuino y peculiar que progresivamente se sitúa cualitativamente  superior y diferente, si bien el concepto de Identidad nacional, posee una  mayor amplitud al abarcar todos estos fenómenos así como aquellos asociados a  la vida económica, geográfica, incluyendo, factores demográficos étnicos y  también la conciencia histórica de sí mismo y su realización como tal. El  concepto de Identidad cultural designa en su contenido el sentimiento de  pertenencia a esa cultura, el hecho de reconocerse en ella, y por  experimentarse y desarrollarse a través de la misma. 
En Cuba la cultura dignifica, lo mismo  que la ciencia, porque los trabajadores, dueños del poder político y económico,  la desarrollan y enriquecen. Se enfatiza entonces en la idea de que no es  gratuito el hecho de que los cubanos le otorguemos a la cultura un sitio de  preeminencia en medio de estos tiempos duros. Defender la cultura es defender  lo que somos, y lo que fuimos, y lo que seremos. No en vano Fidel ha dicho que  aún en tiempos de dificultades y de escaseces económicas, la cultura es lo  primero que hay que defender. Y es que todos los valores seminales de la nación  los contiene la cultura como proceso vital. Para contribuir a paliar los  efectos negativos de los procesos globalizadores en la cultura, surge la figura  del promotor cultural que desde su desempeño profesional se convierte en factor  de coordinación e integración principal entre las diferentes instituciones y  agentes que interactúan en la comunidad y forman parte indispensable del  desarrollo social sostenible con ideas más eficientes, con nuevas formas de  transmitir al pueblo y al mundo las verdades del proyecto social –cultural  comunitario cubano. -- En este proceso el Instructor de Arte como promotor  cultural realiza una tarea de importancia primordial, pues dentro de sus  funciones se encarga de coordinar las acciones de todos los entes e instituciones  sociales que contribuyen al desarrollo comunitario, lo que exige una alta  responsabilidad y un enorme arsenal de métodos e instrumentos que devienen del  desarrollo de su capacidad profesional. 
El Instructor de Arte desde sus  funciones debe establecer las relaciones necesarias con las instituciones  docentes y culturales para aprovechar las potencialidades que brinda la escuela  como centro cultural de la comunidad para desarrollar muchas de las actividades  en las que participa. 
En el estudio de las tesis de maestría  defendidas por Rosa María López Mustelier (2009) y Amparo Herrera Molinet  (2011), Vilma Galano (2012) hacen referencia a la preparación del Instructor de  arte para desarrollar su trabajo a partir de alternativas y estrategias para  lograr la formación cultural y comunitaria de estos, pero no vinculan este  trabajo con la labor del promotor cultural. El Instructor de Arte como promotor  cultural constituye un agente imprescindible para el desarrollo cultural desde  su contribución a la misión que se desarrolla en las comunidades donde debe  lograr procesos participativos de apreciación y creación del arte y la  literatura, el fortalecimiento espiritual de la población, la formación,  atención, afianzamiento y desarrollo del movimiento de artistas aficionados y  la salvaguarda de la cultura popular tradicional, estas ideas resumen que esta  figura, realiza una labor de promoción pero a la vez esta labor es educativa.  La educación como proceso apunta a  las transformaciones necesarias que  debe enfrentar la comunidad parar lograr desarrollo, adoptando desarrollo  comunitario como estatus y nivel alcanzado. Educar a la comunidad para poner en  práctica sistemática y consciente actitudes de detección y solución de problemas.  Lamentablemente en los proyectos de desarrollo comunitario, no existe  conciencia de la existencia de este sistema, debido a que no se aprecian como  procesos educativos, sino en su mayoría constituyen acciones asistenciales  encaminadas a la solución de problemas específicos. Por tal razón se hará  especial énfasis en el análisis del trabajo comunitario del Instructor de Arte  como promotor cultural como proceso de investigación educativa, dado el  incremento incesante que en los últimos años tienen los proyectos culturales y  la ausencia de esta visión en la gran mayoría de ellos. Esta situación ha sido detectada con la aplicación de diferentes  instrumentos y técnicas de investigación, a partir de la intervención  investigativa de la autora se ha detectado que: 1.-Se presenta una insuficiente  labor en el trabajo sociocultural -  comunitario
2. La no implementación de los proyectos  culturales donde se involucran a la comunidad. 
En los estudios desarrollados se ha  podido comprobar que son abundantes las investigaciones sobre el tema de la  promoción cultural, pero muy poco sobre el desempeño profesional comunitario  del Instructor de Arte. 
La inserción de la carrera de  Licenciatura en Instructor de Arte del municipio Songo La Maya  al proyecto sociocultural Gestión del  Patrimonio Cultural de la Localidad  de  Salvador Rosales que se desarrolló durante 3 cursos permitió poder brindar una  solución a las problemáticas planteadas y se determinó el objetivo: Elaborar un  plan de actividades pedagógicas para perfeccionar el desempeño profesional de  los estudiantes de la carrera Licenciatura en Instructor de Arte del municipio  Songo La Maya  desde su actividad en las  comunidades. La elaboración de las actividades comunitarias del desempeño  profesional de los estudiantes de la carrera Instructor de Arte como Promotores   culturales y su inserción en la comunidad.  Las propuestas de actividades es una manera de planificar y dirigir las  acciones para alcanzar objetivos determinados desde las potencialidades de la  carrera Licenciatura en Instructor de Arte y su aporte al trabajo comunitario. 
Las actividades desarrolladas  permitieron desde las orientaciones del proyecto determinar objetivos a corto,  mediano y largo plazo, así como el establecimiento de las acciones comunitarias  necesarias para alcanzarlas en las diferentes manifestaciones (Teatro – Danza -  Plástica – Música, Narrativa) 
Para lograr el fin o el cumplimiento de  los objetivos de las actividades era necesario tener en cuenta las fortalezas y  que sentido tenían estas para vencer dificultades que se determinaran en el  trabajo comunitario, con una optimización de tiempo y recursos. La propuesta de  actividades permitió definir qué hacer para transformar la situación existente.  Esto implica un proceso de planificación que comienza con el diagnóstico y  culmina en un plan general con actividades organizativas, objetivo a  desarrollar en determinados plazos, con un número de recursos y métodos que  aseguren el cumplimiento de los objetivos.
 MOMENTOS O FASES EN LA ELABORACIÓN 
Proyección-sensibilización Ejecución  REDACCIÓN DEL PROYECTO. APROBACIÓN DEL PROYECTO DIVULGACIÓN  DEL PROYECTO. APLICACIÓN
Equipo de trabajo Colectivo Equipo de  trabajo COMUNIDAD Profesores, Alumnos, Presidente de consejo  
La labor comunitaria del Instructor de  Arte, a criterio de la investigadora, debe estar encaminada a continuar  estimulando las capacidades creadoras de los educandos mediante el empleo de  métodos y procedimientos acordes a estas edades, que agudicen su observación,  desarrollen su sentido crítico y permitan enriquecer su creación, poniendo en  práctica los conocimientos y habilidades desplegados . El Taller lo diseña el  Instructor por lo que tiene todas las unidades que considere necesarias para  desarrollar el gusto estético del escolar, las mismas tienen características  muy particulares, pues todas las propuestas de actividades poseen un carácter  apreciativo, de modo que los jóvenes centren su atención en el análisis visual,  como un modo de preparación y familiarización con el taller de apreciación del  nivel medio-superior. 
El Taller debe partir de la demostración  práctica de los conocimientos, características y principios del objeto de  estudio, así como debe plantear la solución de tareas de carácter productivo,  en este caso para el desarrollo de la apreciación, ejemplo de esto es el análisis  de la función social de la arquitectura a partir de la acción de recorrer los  espacios arquitectónicos de la comunidad. El enfoque de estos talleres debe ser  de carácter práctico-visual potenciando en los estudiantes el desarrollo del  interés por ampliar sus conocimientos en cuanto a esta manifestación artística  de forma independiente. 
Objetivos generales que se persiguen en  estos educandos: 
• Continuar estimulando el desarrollo de  la imaginación, la creatividad, el gusto estético y el disfrute través de la  experimentación y la realización de actividades de creación plástica con  diferentes materiales y técnicas. 
• Ejercitar la utilización y apreciación  de los elementos estructurales de Artes Plásticas en el Caribe, y profundizar  en sus principios o leyes de organización, para enriquecer los procesos de  creación común de apreciación. 
• Continuar profundizando en el  desarrollo de la observación como una necesidad para lograr una mejor  apreciación y comprensión del mundo de imágenes visuales que los rodean. 
• Contribuir, mediante las actividades  de creación plástica, a la formación de actitudes y cualidades morales  relacionadas con el respeto a la creación y la defensa de la identidad. 
Orientaciones  metodológicas generales. 
El programa se impartirá siguiendo la  metodología de taller, que implica la participación activa de los alumnos en la  construcción de sus conocimientos y el desarrollo de habilidades para la  creación plástica y la apreciación de modo que puedan valorar y disfrutar el  mundo que los rodea, así como las obras de las artes plásticas. 
Por esta razón es necesario el  aprovechamiento de todas las experiencias del joven y situaciones motivadoras  que puedan crearse a partir de conversaciones, paseos por los alrededores,  excursiones a lugares de interés que les permitan apreciar las formas, los  colores, las texturas, las proporciones, los diferentes tipos de equilibrio y  ritmo, narraciones de anécdotas, la aplicación de diferentes técnicas  participativas, que puedan despertar en ellos los deseos de crear y  experimentar. 
En el curso 2018 - 19 con motivo de  lograr la inserción de los estudiantes   en acciones de proyecto, como parte de los indicadores del programa  nacional de extensión universitaria y  a  partir de la  experiencias en los diferentes  barrios y consejos populares  donde se  realizan actividades comunitarias en el Poblado de  Loma del Gato con las siguientes  acciones:  Se coordinó un encuentro  entre  los Instructores  de Artes con los factores de la comunidad  para elaborar un plan de actividades con el objetivo de desarrollar la cultura  comunitaria, se convocaron a las instituciones educativas, para contar con su  compromiso, de ser miembros del proyecto y se realizó un diagnóstico de los  principales problemas en los que podíamos contribuir desde la educación a la  solución. 
Visitaron, convocándolos a las  presentaciones del proyecto destacándolos y preparándolos para sus  presentaciones desde la caracterización inicial brindada por el Consejo Popular  o con los Instructores de los centros para realizar la actividad comunitaria.  Además se programó la presentación de los talentos artísticos conducidos por  los Instructores de Arte y  Promotores  culturales de la comunidad, donde trasmiten sus experiencias y sintieron como  un reconocimiento a su labor, actividad que tuvo un gran impacto en los  comunitarios. Se organizaron peñas literarias, lanzamientos de libros,  exposiciones de planta ornamentales exóticas endémica de la región caribeña.
Conclusiones:
     A partir de la experiencia adquirida y  la capacidad movilizativa del proyecto, se han realizado acciones comunitarias  en varios  poblados del  Consejos Popular     como son:    Platanillo,   Hullen,  La guácima, El quemao,  Loma del gato, y otras en casco centros perteneciente al batey del consejo popular  donde tuvo gran aceptación por los diferentes grupos etarios en las  comunidades. 
     Las experiencias obtenidas con la  participación de la carrera en el proyecto sociocultural comunitario Gestión  del Patrimonio Cultural de la Localidad   permiten constatar avances significativos en la integración  Universidad  - Comunidad, logrando de  este modo mejores indicadores de eficiencia con respecto a otros cursos  escolares, mayor integración de las instituciones educativas y culturales del  territorio, mejor desempeño de los docentes y de los estudiantes. A partir del  proyecto se ha podido evaluar con mayor efectividad las manifestaciones  positivas de los estudiantes, visto en su comportamiento, su desempeño y  preocupaciones por su superación y participación en los proyectos de extensión  universitaria, en las que se desarrollaron diferentes acciones tales como: 
Ejecuta: Estudiantes y profesores
     Fecha de cumplimiento: sep- nov
     Responsable:  Profesor y miembro del proyecto
Ejecuta: Estudiantes y profesores
     Fecha de cumplimiento: mensual
     Responsable: Profesor y miembro del proyecto
Ejecuta: Estudiantes y profesores
           Fecha  de cumplimiento: trimestral
     Responsable: Profesor y miembro del proyecto
     Capacitación a las  familias a través del taller  de  educación familiar en los elementos básicos sobre las artes
   Ejecuta:  Estudiantes y profesores
        Fecha  de cumplimiento: trimestral
  Responsable: Profesor y miembro del proyecto
Ejecuta: Estudiantes
     Fecha de  cumplimiento: septiembre.
     Responsable: Profesor y miembro del  proyecto
Ejecuta: Estudiantes
     Fecha de cumplimiento: Mensual 
     Responsable:  Profesor y miembro del proyecto
 Ejecuta:  Estudiantes
     Fecha de cumplimiento: 5 de julio 
     Responsable:  Presidente del consejo de poblado, estudiantes y miembros del proyecto.
Ejecuta:  Estudiantes
     Fecha de cumplimiento: 5 de julio 
     Responsable:  Profesor y miembro del proyecto
.             Ejecuta: Estudiantes y comunitarios
     Fecha de cumplimiento: 5 de julio 
     Responsable:  Profesor y miembro del proyecto
                                                
     Bibliografías 
Oficina del Historiador. La Habana. Ediciones Boloña.
Disponible en: www.unesco.org. Consultado el 2 de noviembre de 2013.