Edgar LLanga*
Jimena Guamán Vásquez**
Doménika Huilca Benavides***
Escuela Superior Politécnica de Chimborazo, Ecuador
edgar.llanga@espoch.edu.ec
RESUMEN
El presente trabajo de investigación hace un análisis de la educación emocional y el aprendizaje, ambos términos a lo largo de las últimas décadas se han visto relacionados constantemente, puesto que la sociedad y en especial el área educativa se han interesado en descubrir innovadores métodos de aprendizaje que se acoplen a las nuevas necesidades de los estudiantes cambiando una educación memorística, tradicional y obsoleta por una educación capaz de difundir mayor cantidad de conocimientos en menor tiempo y con mayor adhesión en los estudiantes. Este trabajo tiene como objetivo definir los aspectos fundamentales que se encuentran en relación al vínculo permanente de la educación emocional con el aprendizaje, es realizado con el propósito de brindar a la sociedad una nueva perspectiva dentro del modelo de enseñanza-aprendizaje que en los últimos años ha tomado impulso gracias al deseo de la sociedad de innovarse y evolucionar. El trabajo se sustenta en una revisión bibliográfica de carácter descriptivo.
PALABRAS CLAVE
Educación emocional, emociones, estudiantes, conocimientos, aprendizaje.
ABSTRACT
This research work is an analysis of emotional education and learning, both terms over the last few decades have been related constantly, since society and especially the educational area have been interested in discovering innovative learning methods that fit to the needs of students changing education memory, traditional and obsolete by an education able to disseminate more knowledge in lesstime and with greater commitment in students. This work aims to define fundamental aspects that are in relation to the permanent link of emotional education with learning, it is done with the purpose of providing a new perspectivewithin the model of teaching and learning society in recent years it has taken momentum thanks to the desireto innovate and evolve society. Work is based on a literature review of descriptive character.
KEYSWORDS
Emotional education, emotions, students, knowledge, learning.
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:
Edgar LLanga, Jimena Guamán Vásquez y Doménika Huilca Benavides (2019): “¿Cómo se relacionan la educación emocional y el aprendizaje?”, Revista Atlante: Cuadernos de Educación y Desarrollo (junio 2019). En línea:
https://www.eumed.net/rev/atlante/2019/06/educacion-emocional-aprendizaje.html
//hdl.handle.net/20.500.11763/atlante1906educacion-emocional-aprendizaje
INTRODUCCIÓN
Cada sociedad desde su concepción ha buscado constantemente personas que sobresalgan de los demás para tener en ellos una guía o un modelo a seguir, personas que sobresalgan gracias a sus dotes naturales creando con el tiempo la definición de “personas inteligentes”, en un principio se creía que estas personas eran aquellas capaces de desarrollar dos inteligencias las cuales se creían hace unos pocos años que eran las únicas que el hombre poseía, la inteligencia lógica matemática y la inteligencia lingüística con el paso de los años las personas modificaron este pensamiento y estipularon que la inteligencia sería determinada mediante evaluaciones estableciendo pruebas, exámenes y demás métodos de valoración de conocimientos, actualmente en pleno siglo XXI la definición de la inteligencia se ha modificado notablemente ya que su perspectiva establece que las “personas inteligentes” son aquellas capaces de tener un control de sus habilidades emocionales haciendo énfasis en el uso, comprensión y regulación de los estados de ánimo, todos estos aspectos se encuentran abarcados en la inteligencia emocional que aplicada a los procesos de aprendizaje se convierte en la educación emocional, a través de un adecuado manejo de este se ha comprobado que las personas tienen mayor probabilidad de alcanzar el éxito en sus vidas y encontrarle sentido a la misma. Por ejemplo, una persona que alcanzó notas sobresalientes en la escuela y el colegio no es capaz de alcanzar el éxito en su etapa adulta ya que para ello necesita de otras habilidades, las cuales están relacionadas precisamente con los procesos del manejo adecuado de los sentimientos y emociones.
Así nace la educación emocional la cual tiene como objetivo ser una respuesta a las necesidades que día a día los alumnos van presentando en su proceso de aprendizaje, resulta fundamental la participación de los profesores durante el progreso de esta educación, funcionando como figuras que deben servir de guía para los estudiantes durante el reconocimiento y manejo adecuado de las emociones, por lo cual se deben desarrollar programas encaminados a potenciar las actitudes emocionales del alumno ya que las mismas llegan a influir a lo largo del desarrollo del ser humano en varios aspectos, influyen en la vida social del alumno durante sus clases, en su rendimiento académico, en su vida familiar y en el futuro será componente clave en su vida para alcanzar el éxito o caer en el fracaso, siendo primordial desarrollar estrategias por parte de todo el sistema educativo, de los profesores, de los padres de familia y claramente debe existir motivación del estudiante por desarrollar o localizar su inteligencia emocional, siendo capaz de reconocer no sólo su potencial cognitivo sino también sus habilidades emocionales, los profesores sobresalen dentro de este proceso ya que el mismo debe ser capaz de reconocer en cada uno de sus estudiantes las actitudes cognitivas y emocionales, potenciando en cada uno de ellos lo que le haga falta para que todos por igual tengan las mismas oportunidades de alcanzar el éxito.
DESARROLLO
El desarrollo de conocimientos y habilidades dentro del proceso de aprendizaje lo definimos como la educación. Afirma (Delors, 2013) que la educación es la enseñanza encaminada a la diversidad de la especie humana y que contribuye a la toma de coincidencia de las semejanzas y la interdependencia entre todos los seres humanos. Entendemos también como conocimiento de las emociones incluyéndola como parte clave de una educación integral, siendo así que la “emoción” procede del vocablo latino “moveré” que significa moverse; es así como se entiende que en toda emoción hay implícita una tendencia a la acción (Elizondo, 2016). Las emociones son aparte de la vida diaria es por ello que se relaciona con la educación y ambas se inician desde los primeros días de vida y deben estar presente a lo largo de la existencia, juega un papel importante en las competencias emocionales que son los conocimientos y capacidades que cada individuo tiene, aquello mencionado permite interiorizar y resolver diferentes problemas que se presenten, evitando así malos comportamientos de las emociones negativas. Propone (Cassa, 2005)educar emocionalmente significa validar las emociones, empatizar con los demás, ayudar a identificar y a nombrar las emociones que se están sintiendo, poner límites, enseñar formas aceptables de expresión y de relación con los demás, quererse y aceptarse a uno mismo, respetar a los demás y proponer estrategias para resolver problemas, la educación de las emociones tiene que servir de puente para aproximar lo que queremos ser, desde un punto de vista ético, y lo que somos, desde un punto de vista biológico. Por lo tanto la educación emocional viene a ser un proceso de enseñanza continuo y permanente de reflexiones, dinámicas, herramientas y métodos de autoconciencia a nivel de establecer relaciones con otros y consigo mismo, potenciando la inteligencia y competencias emocionales para un desarrollo cognitivo, contribuyendo a la realización de un bienestar social y personal en donde se regulen las emociones positivas y negativas, proporcionando habilidades afirmativas en la educación actual y la de un futuro dentro de la sociedad.
La inteligencia es la capacidad de entender, razonar y comprender acciones que se desarrollan, elaborando estrategias o resoluciones dentro del medio. “La inteligencia es intrínseca a la vida” (Osho, 2010).Afirma (Pacheco, 2004) que las personas emocionalmente inteligentes no sólo serán más hábiles para percibir, comprender y manejar sus propias emociones, sino también serán capaces de extrapolar sus habilidades de percepción, comprensión y manejo de emociones. Esta teoría proporciona un nuevo marco para investigar la adaptación social y emocional puesto que la inteligencia emocional jugaría un papel elemental en el establecimiento, mantenimiento y la calidad de las relaciones interpersonales. Define (Extremera & Fernández, 2002) a la inteligencia emocional como la habilidad de las personas para atender y percibir los sentimientos de forma apropiada y precisa, la capacidad para asimilarlos y comprenderlos de manera adecuada y la destreza para regular y modificar el estado de ánimo o el de los demás. La vida está llena de situación y conflictos que al sobrellevarlos a diario gracias a relaciones inter e intrapersonales se desarrollan habilidades sociales que involucran emociones internas, privadas y son favorables para el crecimiento personal, el estar motivado, perseverar ante frustraciones dejando de lado pensamientos negativos permitirá confiar en lo que se puede y quiere hacer, identificando con claridad el sentimiento que produce un acontecimiento malo o bueno, ante esto se podrá razonar y pensar que pudo a ver afectado dicho suceso entonces se buscarán alternativas para salir de dicho problema, siendo la educación emocional una clave fundamental para dicha resolución.
La educación emocional tiene como objetivo principal desarrollar competencias emocionales en el proceso educativo. Describe (Alzina & Fernández, 2000) a las competencias como un conjunto de conocimientos, capacidades, habilidades y actitudes necesarias para tomar conciencia, comprender, expresar y regular de forma apropiada los fenómenos emocionales cuya finalidad es aportar un valor añadido a las funciones profesionales y promover el bienestar personal y social mencionando así varios elementos como la conciencia, regulación y autonomía emocional así como la competencia social, competencias para la vida y el bienestar. En base a lo expuesto anteriormente (Saarni, 1997)define las competencias emocionales como un conjunto articulado de capacidades y habilidades que un individuo necesita para desenvolverse en un ambiente cambiante y surgir como una persona diferenciada, mejor adaptada, eficiente y con mayor confianza en sí misma. Para formular su modelo se retoman tres teorías cuyo punto central es la emoción: el modelo relacional, el modelo funcionalista y el socio constructivista. Sin embargo también menciona los modelos de las competencias que son tres teorías, el modelo relacional que son emociones que se desarrollan en categorías dando procesos de adaptación en un entorno de convivencias, estas serán interpretados y podría ser buenos o malas, además de estar motivado, el modelo funcional resalta la importancia social de las emociones, el individuo comprende e interpreta la relación que existe entre el ambiente logrando mantenerse o establecerse, el modelo socio constructivista donde el aprendizaje es el resultado de las emociones en un ambiente social, tomando en cuenta la experimentación propuesta en el contexto. Sostiene (Molero, 2010) que el estudio tiene relación con el conocimiento de las competencias emocionales de los jóvenes, independientemente de su procedencia geográfica y cultural muestra el acercamiento emocional que se establece entre las distintas culturas que comparten un mismo lugar en el espacio y en el tiempo, también la distancia entre los sentimientos y emociones de estos grupos.
Sostiene (Alzina & Fernández, 2000)que el proceso educativo, continuo y permanente, que pretende desarrollar el conocimiento sobre las propias emociones y las de los demás capacitando al individuo para que adopte comportamientos que tengan presente los principios de prevención y desarrollo humano se define como educación emocional. La finalidad de lo mencionado es el desarrollo integral de cada persona, intelectual o académicamente que se evidencia en las etapas de la vida con un equilibrio y un crecimiento adecuado favoreciendo así el aprendizaje y contribuyendo a la sociedad a un progreso y bienestar para alcanzar la felicidad. Propone (Salmurri, 2004)varios apartados como: aumenta y mejora que es el reconocimiento y la comprensión de emociones, la comprensión de problemas sociales, el desarrollo de una eficaz capacidad de solución alternativa de problemas, el autocontrol y la capacidad de tolerar la frustración, el rendimiento académico, la flexibilidad cognitiva entre otras, la siguiente es reduce y previene síntomas internalizados de tristeza y ansiedad, la iniciación en el consumo de sustancias tóxicas, síntomas externalizados de agresividad y conducta destructiva, aislamiento, una atmósfera donde hay quejas, deserción escolar, suspensos y expulsiones. Tomando en consideración estos apartados menciona (Castro, 2005)que se reduce y previene aquellos aspectos valiosos para la educación emocional a lo largo de la vida en donde se aplica cada uno de ellos mejorando la forma de pensar, el razonamiento y la resolución de problemas, optimizando las emociones, enriqueciendo la capacidad intelectual y sobre todo la motivación en función a las emociones desarrolladas por lo tanto generando necesidades de satisfacción del aprendizaje .
Argumenta (Alzina, 2005) que la educación emocional es una forma de prevención primaria inespecífica, entendiendo como la adquisición de competencias que se pueden aplicar a una multiplicidad de situaciones, tales como la prevención del consumo de drogas, prevención del estrés, ansiedad, depresión, violencia, entre otras. Sin embargo, la prevención primaria inespecífica pretende minimizar la vulnerabilidad de la persona a determinadas disfunciones (estrés, depresión, impulsividad, agresividad) o prevenir su ocurrencia. Para ello se propone el desarrollo de competencias básicas para la vida. Cuando todavía no hay disfunción, la prevención primaria tiende a confluir con la educación para maximizar las tendencias constructivas y minimizar las destructivas. Afirma (Vivas, 2003)que los gobiernos locales deben preocuparse por la educación emocional de sus ciudadanos y comprometerse a apoyar y promover programas preventivos para una buena educación emocional orientados a tal fin, como talleres de desarrollo personal, entrenamientos en técnicas de relajación, programas deportivos que permitan canalizar la agresividad, la depresión y el estrés, promoción de la convivencia y la solidaridad, entre otros. Igualmente debe prestarse atención a la programación televisiva que llega a la población infantil y juvenil de manera que sea más formativa y orientadora y no promueva patrones de conducta equivoca. Al aplicar estrategias de la educación emocional se generan múltiples situaciones como comunicación efectiva y afectiva, resolución de conflictos, toma de decisiones, prevención inespecífica (consumo de drogas, sida, violencia, anorexia, intentos de suicidio). En último término se trata de desarrollar la autoestima, con expectativas realistas sobre sí mismo, desarrollar la capacidad de fluir y la capacidad para adoptar una actitud positiva ante la vida. Señala (Cassa, 2005)que el llevar a la práctica la educación emocional no es cuestión de desarrollar actividades, sino de desarrollar actitudes y formas de expresión en las que el educador o la persona adulta tenga en cuenta el modelo que ofrece día a día, para que las emociones sean vividas, respetadas y acogidas en su amplitud.
Para comprender los beneficios que aporta desarrollar la educación emocional es fundamental definir claramente qué es la inteligencia emocional. Los creadores de esta educación la definen como:
“la habilidad para percibir, valorar y expresar emociones con exactitud, la habilidad para acceder y/o generar sentimientos que faciliten el pensamiento; la habilidad para comprender emociones y el conocimiento emocional y la habilidad para regular las emociones promoviendo un crecimiento emocional e intelectual” (Mayer & Solovey, 1997).
El fundamento principal de esta educación según (Extremera & Fernandez, 2004) es mejorar el desarrollo socioemocional de los estudiantes resolviendo problemas desde una nueva perspectiva dejando de lado los métodos convencionales adoptando así un nuevo proceso que conduce al autocontrol propiciando el bienestar, lo cual conlleva a tomar control de los actos, pensamientos y emociones reduciendo la posibilidad de cometer errores por lo cual para las personas que desarrollan la educación emocional se les facilita de un modo u otro alcanzar el éxito ya que cuentan con más herramientas a su favor, por lo general las personas con esta inteligencia presentan elevados niveles de salud mental, satisfacción y bienestar (Goleman, 1995). Así por ejemplo, la mayor parte de la población juvenil se encuentra implicada en comportamientos de riesgo lo cual se debe a que no se ha desarrollado en estas personas inteligencia emocional produciendo un desequilibrio en las emociones por lo cual se deben adquirir las competencias necesarias para cumplir al menos con las competencias básicas mentales, algunos de estos comportamientos son baja autoestima, depresión, estrés, violencia, delincuencia, anorexia, sida, suicidio, consumo de drogas, conducta sexual imprudente entre otras circunstancias negativas a las cuales los jóvenes se encuentran expuestos constantemente. Si se tiene un correcto uso de las emociones estas serán beneficiosas en múltiples aspectos de la vida. La educación emocional puede desarrollarse y ser de beneficio para el hombre siempre y cuando se dominen, manejen y controlen las emociones (Goleman, 1999). En la época antigua cuando la supervivencia física lo era todo, el cerebro creció con la idea de actuar antes de pensar, algo que servía al momento de competir con otras tribus o con animales por supervivencia, lastimosamente sigue diseñando de la misma forma actualmente ocasionando los “secuestros emocionales” los cuales conllevan a perder el control de la mente racional, volviéndote esclavo de las emociones.
El hombre debe educarse emocionalmente civilizando al cerebro y acostumbrarlo a pensar antes de actuar.Debe ser consciente de sí mismo entrenándose, reconociendo y etiquetando sus sentimientos y emociones. Regular las emociones propias al sentir estímulos permite decidir cómo responder para que la mente lógica tome el control, reaccionando de la mejor manera posible ante dificultades (Huerta, 2017). Para lo cual se debe reconocer, etiquetar y regular las emociones, por ejemplo para tomar control sobre las emociones se debe respirar lentamente contando del 1 al 5, así la mente estabilizará la presión arterial, en el proceso la mente racional retomará el centro de comando de tu cuerpo y generará una reacción lógica y prudente evitando la pérdida de control ante el secuestro emocional. Estas son habilidades que dependen de una buena comunicación entre la mente racional y emocional, para evitar problemas se deben fortalecer la relación entre estas dos partes, mientras mejor se comuniquen mejores decisiones se toman, se debe practicar estos procesos los cuales ocasionarán un cambio, una mejor educación emocional que equivale a mejores habilidades sociales (Goleman, 1999) al generar empatía, desarrollando la inteligencia emocional para detectar sentimientos propios y de las personas que te rodean permitiendo comprenderlas y comprenderte creando relaciones más sólidas. Del mismo modo trabajar con las emociones desarrolla la persistencia y la automotivación, por ejemplo, desde pequeños se cree que fallar es algo negativo pero fallar es necesario para el desarrollo y crecimiento en cualquier aspecto de la vida, una mayor educación emocional crea una mente optimista generando pensamientos positivos, por más veces que falles la mente se sentirá motivada de seguir intentándolo hasta alcanzar una meta. Fallar está bien significa que estas más cerca de cumplir tus objetivos.
Las emociones constan de cuatro percepciones básicas la alegría opuesta a la tristeza y el enojo opuesto al miedo (Mandiola, 2015). Una situación de miedo por ejemplo, te hace reaccionar huyendo del lugar y en el caso de la tristeza ocasiona un estado de querer recostarse. Todas las emociones van de la mano de una reacción fisiológica inmediata. El miedo acelera los latidos del corazón generando un estado de alerta, la tristeza ocasiona un nudo en la garganta, ganas de llorar y no hacer nada. Las emociones no son absolutas cada uno reacciona de manera diferente y en intensidades cambiantes frente a un hecho que causa emoción siendo particular de cada persona y momento en el que se encuentre (Neus, 2013).Por esto es complicado identificar las emociones que se derivan de una interacción difícil por otro lado tal vez el problema sea no entender como clasificarlas, para lo cual se consideran los siguientes términos ira, tristeza, temor, placer, sorpresa y vergüenza, por lo tanto para identificar las emociones es fundamental la definición y reconocimiento exacto de cada una de estas sensaciones o estados de ánimo que experimentas diariamente ya que esto ayuda a forjar las emociones de una manera sana y constructiva encaminada al éxito, esto no sólo beneficia a la propia persona sino es favorable también para quienes te rodean ya que al manejar las emociones propicias una actitud positiva lo cual conlleva a un fácil desenvolvimiento dentro de la sociedad (Silva, 2017).
La educación emocional determina la capacidad potencial para aprender habilidades prácticas, se basa en el autoconocimiento esta es la conciencia emocional o de uno mismo, siendo así la capacidad de conocerte, componente clave de la educación emocional que significa tener un profundo entendimiento de las emociones, fortalezas, debilidades, necesidades e impulsos propios, las personas con una fuerte autoconciencia no son demasiado críticas y tampoco tienen esperanzas irreales más bien son honestos consigo mismos y con los demás, las personas con alto grado de autoconciencia reconocen como sus sentimientos los afectan a sí mismos y a otras personas y por ende a su desempeño (Extremera, Fernandez, & Mestre, 2004). Una persona autoconsciente conoce sus límites y planea como realizar su trabajo posee indicadores: la conciencia emocional que es la capacidad para reconocer como las emociones afectan las acciones y la capacidad de usar los valores como guías en el proceso de la toma de decisiones. El segundo indicador es la valoración adecuada de uno mismo siendo el reconocimiento sincero de puntos fuertes y debilidades teniendo una visión clara de lo que se debe fortalecer y la capacidad de aprender gracias a la experiencia. La confianza en cada uno expresa el coraje que se deriva de la certeza de las capacidades de valores y objetivos (Alvarez, 2006). El siguiente indicador son las habilidades sociales, capacidades para inducir respuestas deseables en los demás, poder generar influencia a través de tácticas de persuasión, poder comunicarse emitiendo mensajes claros y convincentes, generar liderazgo al inspirar y dirigir a grupos y personas propiciando impulso hacia al cambio que contribuye a la resolución de conflictos y desarrolla relaciones al colaborar y cooperar para generar habilidades de equipo. Cada una de estas capacidades de la inteligencia emocional está integrada por un conjunto de competencias emocionales y habilidades prácticas que facilitan el equilibrio emocional. Definiéndose competencia emocional como la capacidad adquirida que da lugar a una realización sobresaliente en algún aspecto de la competencia emocional, muestra hasta qué punto trasladas el potencial de la inteligencia emocional a la vida. Estas habilidades son: la autorregulación o el autocontrol el cual es la capacidad de controlar o gestionar los impulsos y estados de ánimo, está compuesto por el autocontrol, la confiabilidad, la integridad, la adaptabilidad y la innovación que son diferentes capacidades que debes tener para manejar las emociones y controlar las reacciones, la siguiente es la motivación o compromiso que son tendencias emocionales que guían o facilitan el logro de los objetivos se compone de la motivación del logro que es el esfuerzo por ser mejor, de la excelencia que es el compromiso que secunda los objetivos de un grupo, la iniciativa que es la prontitud para actuar cuando se presenta la ocasión y el optimismo que es la persistencia en la consecución de los objetivos a pesar de obstáculos y contratiempos; la última habilidad es la empatía que es un factor externo siendo la conciencia sobre los sentimientos necesidades y preocupaciones de los demás la conciencia que se debe tener sobre lo que los demás sienten o necesitan (Lòpez, 2013).
La educación emocional tiene múltiples beneficios que dependen del área en la cual sea aplicada, el trabajo al estar orientado en el ámbito educativo tiene los siguientes beneficios: mayor capacidad para comprender las emociones propias y de los demás al entender cómo se construyen los sentimientos, conocer en que se ubican los focos de atención, que se omite, que se distorsiona y que creencias y valores forman el propio universo, creando una visión general de las necesidades, limitaciones y potencialidades permitiendo el conocimiento propio para un menor juzgamiento creando un puente de comprensión que permita empatizar, el siguiente es la mayor motivación para conseguir los sueños, al tomar conciencia de uno mismo se puede crear un plan para cambiar cualquier aspecto negativo que dependa de uno aprovechando así las fortalezas, conocer esto aumenta la energía para lograr los objetivos y definir sueños, la tercera es la menor probabilidad de desarrollar enfermedades, está científicamente comprobado que el estrés provocado por una mala gestión de las emociones y pensamientos se relaciona con una esperanza de vida más corta y con una menor capacidad de recuperación al enfermarse, personas positivas y con alta empatía tienen menos problemas cardiovasculares y menor probabilidad de desarrollar cáncer, otro beneficio es el mayor capacidad para disfrutar del presente, la educación emocional te hace más consciente de lo que sucede a tu alrededor y por lo tanto te permite valorar todos los momentos de tu vida logrando disfrutar de la misma, otro beneficio es la mayor capacidad de conectarse con los demás aquí la educación emocional toma en cuenta el trato con otros ya que es la base para alcanzar los objetivos debido a la vida en sociedad se genera una dependencia de las relaciones para crecer, autorrealizarse y ser feliz, el ultimo beneficio es la mayor capacidad para ayudar a los demás permite comprender al otro y crear un mundo mejor, el conocerse implica conocer al ser humano en sí, todo lo que aprendas de ti mismo te ayudará a relacionarte mejor con los demás, reeducarse es posible las conductas te acercarán cada vez más a lo que deseas (Alzina, 2005).
Afirma (Reeve, 2010) que: “las emociones son fenómenos subjetivos, fisiológicos, funcionales y expresivos de corta duración que nos preparan a reaccionar en forma adaptativa a los sucesos importantes de nuestras vidas”. La educación emocional en los estudiantes forma parte importante ya que esta se refleja en las actividades que se realiza a diario y definirá que tan buenos son en ellas. (Maureira & Sánchez, 2011) “La emoción es un proceso adaptativo que forma parte de los procesos afectivos, es decir, si bien toda emoción puede ser considerada como una forma de proceso afectivo, no todos los procesos afectivos son procesos emocionales”. El entorno influirá en las emociones que se demuestren o sean expresadas en un determinado momento, tanto así que podrá generar cambios en las personas implicadas. (Gondim & Estramiana, 2010) dijeron: “las emociones son el reflejo de estados afectivos personales y colectivos, influyen en las relaciones interpersonales y grupales y expresan nuestras reacciones ante los valores, costumbres y normas sociales que dan cuenta de las diferencias culturales”. Las emociones llegan a trascender en los estudiantes a tal punto que es necesario tener un equilibrio para que puedan estar de manera óptima con ellos mismos en el ámbito personal y en el ámbito del estudio. (Fernández & Ruiz, 2008) dieron a conocer la relación existente entre: “inteligencia emocional y rendimiento académico, resaltando que el rendimiento académico está vinculado a otras variables psicológicas reflejadas en actitudes y comportamientos del estudiante como son: la actitud hacia la escuela, hacia un curso determinado, además de su propio autoconcepto académico”. El ser humano con sus capacidades desarrolladas ha logrado construir elementos que sobrepasan destrezas comunes, de manera que continúa alcanzando conocimientos tanto así que ha logrado independizarse según sus necesidades.
Plantearon (Ausubel, Novak, & Hanesin, 1997) que: “las teorías del aprendizaje son más interdependientes que mutuamente exclusivas”. En los inicios del aprendizaje el ser humano tuvo que aprender por sus propios medios, aprendió a distinguir lo que lo estaba a su alrededor, explorando su entorno para poder orientarse. También en los inicios del aprendizaje surge la enseñanza intencional, espontánea y natural. El aprendizaje se inició en nuestros ancestros como una necesidad de descubrir y aprender a cerca el medio ambiente que los rodeaba. El aprendizaje ha llevado a desarrollar la educación de cada individuo ya que es una de las funciones necesarias para los seres humanos, animales y hasta sistemas artificiales. (Barrows, 1986) lo define como: “un método de aprendizaje basado en el principio de usar problemas como punto de partida para la adquisición e integración de los nuevos conocimientos”. El aprendizaje se puede desarrollar aún más con un principio de problemas ya que se buscará resolver los mismos de alguna manera y esto también ayudará a saber utilizar lo aprendido en momentos en los que sean necesarios. El aprendizaje también se puede dar de manera autónoma de los estudiantes ya que de esta manera nació al principio del desarrollo humano.
Lo define (Feldman, 2005): “como un proceso de cambio en el comportamiento de una persona generado por la experiencia”. El aprendizaje en cada persona se puede dar de diferentes maneras ya que se alcanzará de diferentes formas pudiendo ser de manera espontánea y natural, porque es una necesidad innata de todos los seres humanos. Este será un proceso en el que se adquirirá destrezas, potencial, sabiduría, experiencia y razonamiento. Según (Silva, Mendez, & Herrera, 2015): “el aprendizaje estratégico es un eslabón fundamental en la enseñanza estratégica, apoyada en la tecnología informática, al generar un metamodelo de aprendizaje estratégico (MAE) basado en Cloud Computing”. Este tipo de aprendizaje es importante para la enseñanza en la actualidad ya que está utilizando la tecnología para los estudiantes y de esta manera potencia el interés en ellos.
El aprendizaje humano según (Feo, 2015): “es la autoconciencia de los procedimientos y procesos que se activan ante la demanda de solución a un problema o demanda de formación, según la situación a solventar por parte del sujeto que desea aprender”. El aprendizaje para los seres humanos es indispensable y necesario por lo que siempre siente que necesita aprender más. El aprendizaje humano se basa en lograr, desarrollar, conocer y emplear la información dada, es decir, adaptarnos a los nuevos conocimientos adquiridos. (Domjan, 2010) expresa que: “el aprendizaje es un cambio duradero en los mecanismos de la conducta que involucra estímulos y/o respuestas específicas y que es resultado de la experiencia previa con esos estímulos y respuestas o con otros similares”. Mientras más información se valla aprendiendo el cerebro humano ira dando cambios significativos que podrán ser significativos o no y estos harán más fácil la adaptación al ambiente en el que se encuentre. También es probable que el aprendizaje necesite de especialización para llegar a mejorarlo, para ello se encuentran las escuelas, colegios, universidades, entre otras opciones. En la actualidad se sabe que el aprendizaje humano se ve mejorado constantemente mientras se aprenda diferentes temas y se siga actualizando dicha información ya que el mundo avanza exponencialmente.
Debido a la insuficiente información depositada en el genoma y a la variedad de entornos en los que se desarrolla la vida del ser humano, desde el momento mismo de su nacimiento, es necesario adquirir información y conocimientos, lo más detallados y pertinentes posibles, sobre tales ambientes y entornos en los que se ve obligado a participar y en consecuencia poder prosperar en ellos. Cada individuo cambia y se desarrolla en el curso de su vida, así la necesidad de aprendizaje es constante. En estas circunstancias, aunque los propósitos biológicos finales son siempre los mismos tales como sobrevivir y reproducirse, resultan subjetivos, intermediados y especificados por la cultura y la sociedad cambiante de cada generación, de un modo tal, que su origen biológico casi desaparece en el imaginario individual y social. De esta forma el ser humano y el aprendizaje están entrelazados de gradualmente, ya que el pasar de los años en una persona demanda una mayor complejidad de este proceso, lo que podría significar la total realización de un individuo para la sociedad. Para reconocer el proceder del aprendizaje es necesario describir las características neurofisiológicas elementales del cerebro que corresponde a ser el órgano principal para el aprendizaje, analizando su propia estructura: neuronas y redes neuronales, sinapsis y sus vías de comunicación (axones y dendritas), haciendo posible caracterizar que su naturaleza constitutiva esencial es la plasticidad, que se ha definido como la capacidad neuronal de cambiar estructuralmente. Según (Montes, 2012) las sinapsis que más información transmiten se refuerzan, y las redes neuronales se modifican o establecen cuando son más requeridas para procesar y transmitir mensajes. Ahora se sabe que en algunas regiones del cerebro, como el hipocampo, que procesa ciertas formas de memoria, se pueden generar nuevas neuronas aun entre los adultos. Los sistemas neuronales más demandados desarrollan nuevas conexiones, con aumento de dendritas y sus espículas y la longitud y ramificaciones terminales de axones, especialmente los pertenecientes a redes neuronales de procesamiento local.
Los procesos neurobiológicos que posibilitan el aprendizaje se basan, en las operaciones celulares que tienen la tarea de obtener información, procesarla, evaluarla, y luego recuperarla para utilizarla en el cumplimiento de metas u objetivos. Este complejo conjunto de funciones trabaja a partir de los procesamientos específicos realizados en los llamados módulos cerebrales, amplios grupos de redes neuronales que suelen localizarse en regiones particulares del cerebro encargado de diversas funciones (visual, lingüística, emocional). Aunque los módulos operan con cierta independencia en su propio dominio, están interconectados por redes neuronales aún más amplias que utilizan masivamente los procesamientos en paralelo y secuencia con constante retroalimentación. Según (Montes, 2012) esta organización neuronal modular explica que cada una de las facultades cognitivas que pueden describirse incluya varios componentes o tipos que se procesan en módulos aún más acotados pero interrelacionados. El propósito de los organismos vivos es adaptarse constante y dinámicamente a sus propios ambientes, ya que no son nunca estáticos, y tampoco lo es la relación del individuo con ellos, este último debe siempre cambiar, es decir, aprender. Los procesos mentales que hacen posible aprender se pueden clasificar en categorías principales como son: la atención y percepción, las memorias o recuerdos, las emociones y sentimientos y la racionalidad. Estas instancias son reconocidas como las bases necesarias para la obtención activa de conocimientos ya que un individuo con curiosidad y motivación emocional se tiene la capacidad de realizar investigación necesaria para alcanzar esa información.
Todo aprendizaje siempre constituye un proceso complejo, que finalmente se expresa en una modificación de la conducta. En el desarrollo de este complejo proceso según (Pozo & Monereo, 1999) se pueden distinguir diferentes fases enlazadas íntimamente una con otra, tanto que a veces resulta difícil ubicar sus límites; un desarrollo adecuado del proceso comprende al menos nueve fases: la motivación, interés, atención, adquisición, comprensión e interiorización, asimilación, aplicación, transferencia y evaluación. La motivación que permite el aprendizaje de forma principal ya que el deseo de aprender, es decir las necesidades individuales impulsan al individuo a aprender más rápida y efectivamente. Algunos pensadores como (Maslow, 2016) consideran a la motivación como un estado de impulso, en el que se manifiestan motivos que tienen por objeto la reducción de una tensión causada por una necesidad. Cuanto más fuerte es la tensión más intensa suele ser la motivación. El interés en el proceso de aprendizaje expresa la intencionalidad de la persona por realizar algún objetivo; por ello, se dice que el interés está unido a las necesidades, las cuales lo condicionan. Autores como (Tapia, 2016) consideran que la estimulación del interés de una persona por aprender permite que se concentre mejor en sus pensamientos e intenciones sobre un objeto o situación determinada, para la búsqueda exitosa de las características y conocimiento de una temática. Es evidente que el interés está relacionado con la esfera emocional del individuo. Esto hace que se manifieste ante todo en la atención. La adquisición de conocimientos es una fase del proceso de aprendizaje en la cual el estudiante se pone inicialmente en contacto con los contenidos de una asignatura. Algunas veces se pueden presentar estos contenidos de forma tan vívida que con una sola vez que se lo presente se logra fijar la idea. La comprensión e interiorización es una fase avanzada en un proceso de aprendizaje, ya que involucra todos los pasos anteriores teniendo en cuenta la capacidad de abstracción y comprensión de conceptos, así como la memoria significativa. La comprensión está íntimamente relacionada también con la capacidad crítica del estudiante.
El cumplimiento de las fases del proceso de aprendizaje suele necesitar niveles diferentes de esfuerzo y planificación por parte de los docentes y los estudiantes; igualmente, cabe mencionar que estas fases pueden cumplirse dentro o fuera del centro educativo, dependiendo de la temática. Cada una de las fases se complementan una con la otra, es decir que coexiste de manera completa entre si dentro de un contexto de aprendizaje formal (escuelas, colegios, institutos, universidades) y la consecución de buenos resultados dependerá de varios factores: por ejemplo, que al inicio del proceso la motivación y el interés hayan sido desencadenados de tal manera que la expectativa por adquirir cierto conocimiento nuevo sea lo suficientemente fuerte para que se invierta el tiempo y el esfuerzo necesarios para ello. Solo así se podrán alcanzar niveles de atención y colaboración suficientes que permitan al individuo tener un interés completo en el proceso, para adquirir, comprender y asimilar los nuevos conocimientos de manera integral. Según (Yanez, 2016) la aplicación y transferencia de los nuevos conocimientos son fases del proceso, que permiten la efectividad del aprendizaje desarrollado, utilizando el conocimiento en contextos constituidos por situaciones reales a las que se puede enfrentar el individuo. Finalmente, la evaluación cualitativa y cuantitativa de los resultados del aprendizaje constituye una fase que permite observar sistemáticamente, caracterizar e inclusive, cuando sea necesario, medir en base a una escala matemática el alcance de estos resultados. El grado de alcance de éstos, así como el análisis del proceso integral de aprendizaje efectuado, permitirá luego la retroalimentación del sistema educativo y la implementación de acciones de mejora continua en nuevos procesos de aprendizaje en el futuro.
Según (López, 2018) los tipos de aprendizaje se clasifican en: impronta, observacional, enculturación, episódico, multimedia, e-learning, memorístico, significativo, informal, formal, tangencial, activo, síncrono y asincrónico. El aprendizaje por impronta es un aprendizaje que tiene un origen en una edad particular que es independiente de las consecuencias de los actos. Se describe situaciones en las se aprenden las características de un estímulo. Por su parte el aprendizaje observacional es el más característico del ser humano que conlleva a la imitación y repetición de un comportamiento. La enculturación es el proceso por el cual una persona aprende las características de una cultura ya que se encuentra en un ambiente donde es fácilmente observable la conducta y los valores que practican ya que se ven influenciados hacia ella. El aprendizaje episódico es un cambio en la conducta que se produce como resultado de una situación, se la denomina de esta manera porque se la registra con memoria episódica que es una de las tres formas de aprendizaje y recuperación explicita. El aprendizaje multimedia es cuando un individuo usa estímulos auditivos y visuales para obtener información y aprender. En el E-learning y aprendizaje aumentado se refiere a un aprendizaje online que utiliza diferentes equipos de comunicación móvil como los teléfonos móviles. El contenido digital aumentado puede incluir texto, imágenes, videos y audio que son instrumentos dinámicos para la educación. El aprendizaje por rutina o memorístico es una técnica que se centra en la memorización del material para que pueda ser recordado por un individuo exactamente de la forma en que fue leído y oído. La principal práctica es el aprendizaje por la repetición. El aprendizaje significativo corresponde al concepto de que el conocimiento aprendido se relaciona con otros y de esta manera tiene una contradicción con el aprendizaje memorístico. El aprendizaje informal es aquel que se presenta a través de la experiencia en situaciones diarias. Es aprender de la vida según como se presenta. El aprendizaje formal es el aprendizaje que se lleva a cabo dentro de una relación de docente y estudiante como un sistema escolar. El aprendizaje tangencial es el proceso mediante el cual las personas tienen una autoeducación en un tema que se desarrolla en un ambiente en el cual el individuo tiene un interés y disfruta el aprender. El aprendizaje activo ocurre cuando un individuo toma control de su proceso de aprendizaje dado que la comprensión es un pilar principal de la educación, de esta manera se reconoce que conocimiento tuvo un buen entendimiento. El aprendizaje síncrono tiene lugar en una comunicación en tiempo real, donde se comparte conocimiento entre dos o más personas. Por último el aprendizaje asincrónico es flexible ya que se da en cierta situación y se conserva para que el individuo participe siempre que sea su momento.
Según (Kolb, 1983) existe cuatro estilos de aprendizaje: el divergente, el asimilador, el convergente y el acomodado. El divergente tiende a aprender por medio de la experiencia concreta y la observación reflexiva. Tiene características como habilidades en la imaginación, tiende a ser proyectada hacia las personas, son liberales y muy humanísticos y se sienten influenciados por la curiosidad. El asimilador aprender a partir de la conceptualización abstracta y observación reflexiva, ya que persiguen un modelo teórico, abstracto ya que tiene la perspectiva de ser mucho más útil que una modelo practico, se considera un individuo planificador y sistemático. El convergente aprender a partir de la conceptualización abstracta y experimentación activa, se caracteriza en una actitud deductiva que aplica las ideas con la práctica, respondiendo a preferencias de trabajo con objetos, tiene intereses reducidos, que se ve reflejado en físicos y científicos. El acomodado aprende por la experiencia concreta y expresión activa, se caracteriza por un sentido de la adaptación e intuición desarrolladas, aplica el método ensayo y error, confía en la información proporcionada de otros investigadores y tienen facilidad en las relaciones sociales, teniendo campos técnicos y prácticos.
Racionalismo:
De acuerdo con (Resnick, 1996) los situacionistas aportan teorías que explican como la participación en formas particulares de actividad social lleva a la competencia cognitiva personal. El aprendizaje es considerado inferencial es decir no se lo observa directamente pero se atiende a los resultados o productos. También el aprendizaje incluye un cambio de capacidad para desempeñarse de diferentes maneras. Las teorías de aprendizaje se remiten hace muchos años y reflejan la necesidad de entender a los demás, a uno mismo y al mundo que los rodea. Las posturas sobre el conocimiento y la relación con el entorno son el racionalismo y el empirismo, ambas están presentes en las teorías actuales del aprendizaje. El racionalismo, en palabras de (Ramirez, 2009)“no es una manera aislada de concebir la realidad, sino que es ante todo la suma de lo sensible con los conceptos, o mejor aún concepto equivale a realidad”. El hombre es presentado como animal dotado de razón; un animal capacitado para conocer. El racionalismo se refiere a la idea en la que el conocimiento se deriva de la razón en donde no incluye la participación de los sentidos. La diferencia entre mente y materia que se encuentra de manera prominente en las perspectivas racionalistas del conocimiento humano, se debe a Platón, quien distinguió entre el conocimiento adquirido a través de los sentidos y el adquirido por medio de la razón. Para (Resnick, 1996) las estructuras preparadas aportan a la situación de los individuos participantes ya que favorecen la producción de un aprendizaje contextualmente específico. El verdadero conocimiento de las ideas es innato y se convierte en consciente a través de la reflexión. La razón es la facultad mental más elevada debido a que mediante ella la gente aprende ideas abstractas. Sostiene que sólo se puede hablar de conocimiento cuando es necesario y válido. Los juicios tienen que poseer una necesidad lógica, no admitir lo contrario y ser válidos, ser así siempre y en todo lugar.
Empirismo
El empirismo sostiene la idea de que la única fuente del conocimiento es la experiencia y los recuerdos que se producen de cada situación. Según (Ramirez, 2009) el empirismo intenta reducir simultáneamente la razón a la sensibilidad y demostrar que el conocimiento sensible es el único conocimiento válido. El empirismo se inclina a la sensibilidad antes que a la razón debido a que las emociones pueden ayudar a procesar la atención, lo cual es necesario para desarrollar el aprendizaje y la memoria. Además, la motivación y las emociones se regulan de manera apropiada e influyen positivamente en la atención, el aprendizaje y la memoria, se pueden utilizar de manera constructiva para aumentar el interés emocional de los estudiantes si los involucraran en el aprendizaje. Este conocimiento se caracteriza por un enfoque basado en la experiencia y que responde a una u otra demanda social o necesidad práctica. De acuerdo con (Pozo., 2008). Es evidente que se requieren los dos tipos de aprendizaje, tanto implícito (asociativos) como explícito (constructivos).Los éxitos de las investigaciones empíricas se valoran por la práctica. El contenido es accesible para quien posee un amplio conocimiento descriptivo explicativo, rehacer los conocimientos empíricos no es tan complicado y ambos están conectados. Mientras la complejidad de las demandas sociales no sea muy grande, los conocimientos se dirigen hacia la ciencia desde la práctica y se satisfacen sin evidenciar un vínculo entre los conocimientos descriptivos y empíricos. Con el tiempo el conocimiento de tipo empírico ocupa el lugar principal. El conocimiento descriptivo se detiene en su desarrollo por fenómenos más complejos. Lo que caracteriza a la filosofía experimental es la recopilación y el ordenamiento de observaciones y reportes experimentales con el objeto de desarrollar explicaciones de fenómenos naturales basadas en ellos (Anstey, 2005)
Conductismo
Según (Wilkinson, 1995) “quizás haya algo de verdad en decir que el constructivismo es una teoría de aprendizaje más que una aproximación de enseñanza”. En los enfoques conductistas el aprendizaje era considerado como una asociación estímulo-respuesta además de la influencia que tuvo en la educación. Como teoría de aprendizaje, el conductismo data desde la época de Aristóteles quien realizaba ensayos de memoria concentrados en lograr asociaciones entre fenómenos como relámpagos y truenos. La teoría del conductismo se concentra en el estudio de conductas que se puede observar y medir. Se puede decir que esta teoría visualiza a la mente como si fuera una caja negra en donde las respuestas a los estímulos se observan y pueden ser medidos, ignorando la posibilidad de que cualquier proceso pueda producirse en el interior de nuestra mente. Para (Schmeck, 1988) “El aprendizaje es un subproducto del pensamiento. Aprendemos pensando, y la calidad del resultado de aprendizaje está determinada por la calidad de nuestros pensamientos”. El estudiante se transforma en una persona que reacciona adecuadamente a los estímulos del entorno, esta actividad se refiere a la práctica mental o física que debe ejercer para lograr los aprendizajes. Sin embargo, en una visión conductista, la educación concentra la importancia en el manejo del medioambiente, la modificación del comportamiento, el reforzamiento como actividad relevante y los objetivos de aprendizaje. La superación del conductismo permite al alumno comprometerse en procesos cognitivos con el aprendizaje pero no posee el control consciente de esos procesos como objetivo de aprendizaje. Sin embargo atribuir valor, significado y transferir los aprendizajes no constituyen de forma explícita el trabajo de los alumnos además de la ayuda pedagógica para ayudar a conseguirlo. La razón final para esto es aprender los métodos generales y particulares por medio de los cuales pueda controlar la conducta. (Watson, 1913).
Cognitivista
Según (Good & Brophy, 1996) los teóricos del cognoscitivismo reconocen que una buena cantidad de aprendizaje involucra las asociaciones que se establecen mediante la proximidad con otras personas y la repetición. También reconocen la importancia del reforzamiento. Esta corriente plantea que el conductismo no puede explicar en su totalidad la conducta humana. Se plantea que el aprendizaje ocurre gracias a un proceso de organización y reorganización cognitiva de la percepción, en este proceso la persona tienen un rol activo. Se basa en los procesos que tienen lugar atrás de los cambios de conducta. Estos cambios son observados para usarse como indicadores para entender lo que está pasando en la mente del que aprende. Las teorías cognitivistas toman las investigaciones de la psicología cognitiva tratando de explicar cómo sucede el aprendizaje describiendo los procesos mentales que permiten la construcción de conocimientos como análisis, razonamiento, validación, imágenes mentales, representaciones. Es la forma más sencilla de las capacidades aprendidas, y que constituye el fundamento de otros tipos más complejos de esas mismas capacidades (Gagne, 1985). Se considera como la relación entre ideas o enlaces entre estímulos y respuestas. Las investigaciones se concentran sobre la estructura de la memoria a largo y a corto plazo y sobre las estrategias que se emplean para adquirir conocimientos y solucionar problemas. El estudio de estrategias implícitas utilizadas por los expertos muestra que el aprendizaje es un proceso dinámico e interactivo que estimula una integración de diversos elementos, componentes y de nuevas estructuras por el aprendiz. Los procesos de tratamiento de la información mediante los que se realiza la elaboración de estructuras cognitivas están basados modelos cognitivistas. El sujeto es un ente activo procesador de información a partir de sus esquemas para aprender y solucionar problemas. (Vega, 2006)
De acuerdo con (Zapata, 2005) los contenidos de enseñanza tienen que ordenarse de manera que los elementos más simples y generales ocupen el primer lugar, incorporando después, de manera progresiva, los elementos más complejos y detallados. Las dificultades en el aprendizaje se refieren a un grupo de trastornos que suelen confundirse entre sí. Las razones fundamentales de la confusión son la falta de una definición clara, las ideas entrecruzadas entre los diferentes trastornos de las dificultades en el aprendizaje y en aspectos de privación educativa y social. Las dificultades se presentan con mayor frecuencia en la etapa de infancia por diversos motivos, en algunas ocasiones son detectadas a tiempo o no se las detectan. La clasificación de las dificultades del aprendizaje más usada divide las dificultades en específicas e inespecíficas que se denominan primarias y secundarias. De acuerdo con (Tillar, 1996) tomando como referencia una tradicional clasificación se diferencian, dentro del aprendizaje pedagógico los aprendizajes formales de los aprendizajes no formales. En las dificultades primarias se encuentran las dificultades en el desarrollo de las funciones psicológicas superiores, funciones complejas, humanas, que se localizan en la corteza cerebral ya que son aprendidas y consientes además se automatizan secundariamente. Será necesario estar consciente de que algunos problemas de aprendizaje requerirán de soluciones prescriptivas, mientras que otras serán más adecuadas para el ambiente de aprendizaje donde el aprendiz tiene más control (Schwier, 1995). En las dificultades secundarias, el niño no aprende porque un agente le impide aprender. Si ese agente desaparece, el niño no tiene ninguna dificultad de aprendizaje, solo que la causa sea una deficiencia mental, en donde el niño aprende de acuerdo a sus posibilidades que están disminuidas, con o sin dificultades. De esta manera, un estado depresivo, una alteración sensorial, una enseñanza inadecuada, una deficiencia de atención y patologías pueden desencadenar dificultad para aprender.
Para (Seattler, 1990) los objetivos conductistas fueron descripciones escritas de conductas específicas terminales que fueron manifestadas en términos de conductas observables y medibles. Para que un recuerdo se plasme en la memoria necesita estar asociado a una emoción. Durante toda la existencia se aprende infinidad de cosas pero con el paso del tiempo solo algunas perdurarán en los recuerdos y las emociones siendo los responsables de que esto ocurra. Los aprendizajes generados en la vida cotidiana o dentro de una institución educativa que se encuentran asociados a sentimientos que pueden ser positivos como la alegría y el orgullo o negativos como el miedo o la tristeza son los que permanecerán en la memoria. De acuerdo con (Therer, 1998) “Cuando se conoce como aprenden los y las estudiantes es que el esfuerzo de la enseñanza podría tener algún efecto positivo”. Además la memoria se pueden dividir en tres subtipos: corto plazo, operativa o de trabajo y largo plazo. La memoria de corto plazo es la capacidad de mantener en la mente una pequeña cantidad de información, si estos datos no son repasados con entusiasmo con la más mínima distracción se pueden olvidar. Está relacionada principalmente con el hipocampo. Operativa o de trabajo se produce cuando un conocimiento traspasó la memoria a corto plazo, teniendo la oportunidad de convertirse en un recuerdo a largo plazo o de quedar en el olvido a los pocos días. Si esa información no es repasada y no tiene compromiso emocional con ese conocimiento en el corto plazo la mayor parte desaparecerá.
Según (Saarni., 1999) la habilidad para afrontar emociones negativas mediante la utilización de estrategias de autocontrol que regulen la intensidad y la duración de tales estados emocionales. La memoria de trabajo también es la que permite extraer datos de la memoria de largo plazo para resolver una tarea en el presente. Es coordinada por la corteza pre frontal. La memoria de largo plazo se produce cuando una situación despierta las emociones y llegan a ser tan fuerte que los recuerdos pueden perdurar durante un gran lapso de tiempo e incluso toda la vida. Aun cuando se considere que esa información ya no está al alcance, solo es necesario repasar o practicar pocas veces para que se presente nuevamente. Se considera que la emoción es un elemento esencial para desarrollar el aprendizaje pues tiene influencia en el desarrollo de la afectividad y ayuda a entender los procesos de aprendizaje. La discusión sobre cómo enseñar tomando en cuenta la dimensión emocional o cómo ayudar al alumnado a conocer y expresar su experiencia emocional para estimular el aprendizaje no se ha profundizado (Albornoz, 1998). Las evidencias plantean el desarrollo entre relaciones emotivas que regulan la actividad y comportamiento además con procesos psicológicos como la memoria, la percepción o el pensamiento simbólico imprescindibles en el aprendizaje. También se considera que solamente aquellos fines hacia los cuales el sujeto tiene una actitud emocional positiva pueden motivar una actividad creadora (Smirnov & Leontiev, 1960).
“Las denominaciones no formal e informal son poco felices entre otras razones porque definen por la negativa lo cual puede dar lugar a importantes confusiones. Por ejemplo, que se visualice la educación no formal como una actividad desestructurada, donde todo vale es lo que ha llevado incluso a descalificar este ámbito educativo. Lo importante es destacar que estos aprendizajes no formales o informales, además de ser específicos son diversos e importantes en la historia educativa de cada uno” (Sirvent, 2009)
La educación emocional es importante dentro de la educación de cualquier persona, en especial de los niños. Para conseguir ser competentes de manera emocional se requiere de práctica continua además este tipo de aprendizaje debe iniciarse en los primeros años de vida y estar presente a lo largo de ella. La educación emocional es una innovación educativa que responde a necesidades sociales no atendidas en las materias académicas ordinarias (Bisquerra., 2003). Las emociones negativas son inevitables, es necesario aprender a identificarlas, regularlas y expresarlas de forma apropiada ante los demás. En cambio las positivas son la base del bienestar propio por lo que se propone trabajar la educación emocional como objetivo para obtener bienestar. Diversos autores y estudios confirman que a mayor desarrollo emocional, mayores habilidades sociales además se presentan menor número de conflictos, mejor convivencia escolar, mejor rendimiento académico y mejor desarrollo integral del niño. Según (Goleman, 1995). La inteligencia emocional es la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los otros, de motivarnos y de manejar bien nuestras emociones en nosotros mismos y en nuestras relaciones. Es la capacidad de aprovechar las emociones de la mejor manera y combinarlas con razonamiento para poder reconocer los sentimientos y de los demás, se puede comprender la situación de cada uno además de entender los puntos de vistas diferentes que pueden ser útiles para saber resolver situaciones de la vida cotidiana y disfrutar de un buen desarrollo psicológico.
CONCLUSIONES
Zapata, M. (Enero de 2005). SEQUENCING OF CONTENTS AND LEARNING OBJETCTS. Obtenido de http://www.um.es/ead/red/14/
BIBLIOGRAFíA