Fernando Lafuente
ferlafu@googlemail.com
Al hablar de "guerras comerciales" será conveniente tener presente que para muchos lectores y oyentes surgirá en la mente una contradicción lógica relativa a la comprensión de ambas palabras juntas, casi antónimas. Por un lado, la guerra representa, en el sentido amplio, " una lucha armada entre distintas partes" (naciones o bandos), según la Real Academia Española, análogo a sinónimos de conflicto bélico, enfrentamiento armado, rebelión, revuelta, etc. También la Enciclopedia Británica define la guerra como "un conflicto entre grupos políticos que involucra hostilidades de considerable duración y magnitud". Por el otro, el comercio significa una actividad socioeconómica consistente en el intercambio ventajoso y pacífico de bienes o servicios mediante compra o venta entre las partes. Así pues, nos hallamos ante una expresión de doble cara con idea de guardar su adecuada acepción, puesto que hablamos igualmente de "guerra" al referirnos a sinónimos como conflicto, pelea, rivalidad o pugna entre las partes sin recurrir a la fuerza o a las armas. Con el mismo propósito se comprenden tales expresiones, empleadas a menudo en las distintas lenguas, como "guerra de precios", “guerra de las rosas“, "guerra fría", "guerra publicitaria", "guerra financiera", „guerra del petróleo“, "guerra psicológica",
„guerra asimétrica“, „guerra relámpago“, "guerra del agua", "guerra de divisas", "guerra de vieira", „guerra electrónica“, „guerra de las divas“, "guerra comercial", etc. El trato de esta última requiere tener en cuenta que abarca tanto aquellos conflictos bélicos de la historia como los enfrentamientos y disturbios corrientes, digamos de carácter sosegado, actuales en el mundo del siglo XXI.
Para citar este libro puede utilizar el siguiente formato:
Fernando Lafuente (2019): “De Catón el Viejo a Trump el Magnate”, Biblioteca virtual de Derecho, Economía, Ciencias Sociales y Tesis Doctorales (noviembre 2019). En línea:
https://www.eumed.net/libros/1869/index.html