Esta sugerencia por iniciar a la brevedad posible el estudio, se deriva de que yo en particular he venido estudiando la distribución espacial de los cuatro tamaños de las empresas manufactureras en el territorio nacional, concretamente en las entidades federativas de 1998 a 2003, cuyos resultados de mi análisis efectuado en ese periodo revelan que:
1.- la distribución espacial de las empresas industriales ha cambiado, situación que ha reorientado la demanda hacia nuevas entidades federativas, lo cual induce al diseño de nuevas políticas públicas y privadas para la asignación de recursos para ampliar o consolidar la competitividad de las empresas en el nuevo entorno de desarrollo regional;
2.- Es preocupante que el gasto público aplicado al fomento de políticas de desarrollo regional no haya igualado oportunidades de inversión en el desarrollo industrial significativo de la mayoría de las entidades federativas;
3.- Es alarmante que la gran empresa sea la que induzca las oportunidades de inversión y no las micro y pequeñas empresas que generan la mayor parte del empleo, que son la principal escuela en la formación de empresarios y que hacen realidad los sueños de los emprendedores que aspiran a crear su propio negocio;
4.- Es urgente revisar la política de desarrollo industrial regionalmente, no hacerlo es acentuar los desequilibrios en el crecimiento desigual de las inversiones públicas y privadas y por consiguiente en la competitividad macro y micro de las entidades federativas;
5.- El haber privilegiado en el pasado reciente la inversión pública y privada en ciertas entidades del país, hoy en día representa la amenaza de estar convirtiendo al país en un típico productor de bienes manufacturados para el mercado internacional y;
6.- En consecuencia, a su mercado interno, en un centro de consumo de la producción industrial de las grandes empresas extranjeras dentro de su estrategia de operación global;
7.- Lo anterior indica que hay un crecimiento asimétrico entre los diferentes tamaños de empresa, se ha dinamizado el de las grandes en ciertas demarcaciones territoriales, en tanto que se ha reducido el de las micro y pequeñas unidades de producción.