APORTES DE LA CIENCIA REGIONAL AL ESTUDIO DEL CAMBIO CLIMÁTICO

APORTES DE LA CIENCIA REGIONAL AL ESTUDIO DEL CAMBIO CLIMÁTICO

Andrés E. Miguel Velasco (CV)
Pedro Maldonado Cruz (CV)
Julio César Torres Váldez (CV)
Nestor Solís Jiménez(CV)

6.2.2. Marco conceptual: la simetría regional
6.2.2.1. La visión asimétrica del desarrollo regional

La simetría (S+) consiste en el proceso que propicia un desarrollo regional (ÐЯ) proporcional y equilibrado entre las ЯS y ciudades de un país. La asimetría (S-), por su parte, promueve la Ç en unos cuantos lugares centrales, polos, clústeres e incluso redes, a costa del estancamiento o deterioro de los espacios o ЯS circundantes. La (S+) proporciona una secuencia lineal del desarrollo territorial, la (S-) da pie a una secuencia nolineal. La (S+) reduce las δR, la (S-) las mantiene o incrementa.

La visión asimétrica del ÐЯ se fundamenta en la teoría de los “polos de crecimiento” o “polos de desarrollo” (Perroux 1955). El polo espacial es resultado de la: a) creación de una industria motriz; b) intervención pública en la creación de la infraestructura y servicios; c) presencia de una iniciativa empresarial decidida a invertir y a innovar; y d) creación de efectos de difusión de los beneficios del polo, pues sin éstos últimos lo que se crearía sería un "enclave de desarrollo" o “polo fallido”, es decir, se crearía una ciudad, asentamiento humano, o industria motriz que no genera beneficios en su área de influencia.

Con una perspectiva semejante, y en el tenor de justificar las bondades de la Ç, durante la década de los 90s del siglo XX surgió el concepto de “clúster territorial” como explicación moderna de la concentración territorial de la industria o los servicios: éstos se conciben como aglomeraciones de empresas, normalmente de una industria determinada, en una Я (Porter 1990). Se considera que influyen de manera positiva en el desarrollo económico de un país mediante la generación de empresas, empleos, y la posibilidad de forjar derramas de conocimiento que eleven el nivel educativo de la población (Krugman 1997).

A diferencia de los polos de crecimiento cuyo propósito fundamental es suscitar la acumulación de capital, el éxito de los clústeres estriba además, en promover y mantener la competitividad empresarial y regional para poder integrarse al proceso de globalización. Otra diferencia importante estriba en que el polo se basa en la localización e impacto de una industria motriz, en tanto que el clúster resulta de la concentración de las cadenas productivas de los diversos sectores económicos, fundamentalmente orientados a la exportación, y cimentados en la sociedad del conocimiento científico y tecnológico.

Un factor importante explicativo de los efectos propagadores de los polos y los clústeres a lo largo del territorio lo constituye la difusión de las innovaciones. En el caso particular de los clústeres, se propone que el impulso a la misma deriva de su búsqueda permanente de la competitividad, dado que son una colección de compañías e instituciones geográficamente cercanas entre sí, ligadas por intereses comunes, y aunque sus actividades se complementan, entran a la vez en una dinámica de competencia entre ellas y con otros espacios geográficos, por lo cual la “competitividad”, que es el incremento permanente de la productividad, el adelanto en la innovación, la apropiación de nichos particulares de mercado, y por consiguiente incremento de las ganancias económicas, es el indicador de que las actividades se realizan adecuadamente en Я.

En la dinámica asimétrica, el sistema espacial crea orden en los nodos, pero δR en sus áreas de influencia; es decir, tienden a generar un sistema espacial donde convive el orden con el desorden y el caos espacial, por lo cual puede dar margen a polos, clústeres o concentraciones “fallidas”.