Luis Joaquin Ducon Fonseca
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Mediante la ley 159, de 1959 la administración de los puertos en Colombia pasó a una entidad llamada: COLPUERTOS, la cual administra los mismos hasta 1993. La nueva entidad creada con el tiempo presenta altos índices de ineficiencia y corrupción, que la lleva a incurrir en pérdidas, por lo cual el mismo gobierno nacional en varios años se ve abocado a cubrir las pérdidas, sufragando sus costos operativos; quedando márgenes muy estrechos o nulos para ampliaciones y modernizaciones.
La ineficiencia, baja productividad, lleva a el gobierno nacional a tomar la decisión, de liquidar COLPUERTOS según: (Solano 1999) “Ante el cúmulo de deficiencias operativas a, administrativas y sobrecostos que perjudicaron a gran número de líneas navieras, importadores y exportadores, situación que perjudicaba las relaciones comerciales del país de privatizar la actividad portuaria.”
Durante la administración de Colpuertos, este ejerció el monopolio de las actividades portuarias del país para el manejo de carga de exportación e importación. En la estructura de costos debido a la situación de monopolio que ejercía la empresa, los costos de las operaciones se dispararon, lo cual se traslado a los precios cobrados a los usuarios y todo ello luego paso a los consumidores, dando por resultados un encarecimiento de las importaciones y las exportaciones y perdida de competitividad del los productos Colombianos en el exterior.
3.1.4. LA PRIVATIZACIÓN 1993
La caótica situación creada por la administración COLPUERTOS, en los puertos colombianos, llevo al gobierno nacional a ver lo que estaba pasando en otros países, teniendo de presente que el trasporte marítimo representa aproximadamente el 80% del volumen del comercio exterior, y según el documento (COMPES 3315) ¨el nivel de movilización de carga que posea un puerto determinara la importancia de este país y su participación en el comercio internacional ¨; por tanto el control de acción portuaria, su operación debe estar vinculada al la política comercial exterior, y esto no se puede realizar si la dirección y el control esta en cabeza de organismos burocráticos de carácter estatal.
La inserción de los capitales privados en la operación de los puertos marítimos se había ya convertido en una tendencia estratégica en el mundo, y uno de los primeros países en privatizar sus puertos fue Inglaterra en 1981, que vendió los 21 puertos que controlaba la empresa publica” Transportation Board” a operadores privados, ejemplo que se replico en Malasia, filipinas, y fue prontamente adoptado en otros lugares.
En varios países del mundo, como Inglaterra, India; a nivel Latino americano: Chile, México, Argentina, Brasil ya han vinculado al sector privado a las actividades portuarias, ya como concesionarios y en otros como desarrolladores de iniciativas.
A partir de 1993, mediante la ley 1ª del mismo año fueron dadas en concesión a las Sociedades Portuarias Regionales, los puertos de: Buenaventura, Santa Marta, Barranquilla, Cartagena y Tumaco.
De los comparativos de las tablas 4,5,6 se puede entrever que la privatización trajo consigo, la modernización de los puertos, y el incremento de los volúmenes de carga movilizados, la baja del tiempo de operación, y por ende disminución de los costos, y de contera de los precios de los productos transados.
A partir de la década del 80, con mas contundencia desde los noventa con la apertura económica, la movilización de carga por el puerto de Buenaventura es de aproximadamente el 31.7% del total; en el periodo comprendido entre los años 1994-2004, revelando la importancia, por la ubicación en el océano pacifico { Collazos, Borrero (2006)]