Germán López Noreña
Esta página muestra parte del texto pero sin formato.
Puede bajarse el libro completo en PDF comprimido ZIP (199 páginas, 3.86 Mb) pulsando aquí
De manera singular y sin mediar ningún tipo de reparo, se han concebido y puesto en marcha las llamadas Ciudades Del Conocimiento en la América Latina. Siendo ellas una expresión más de la Globalización económica, con sus explícitos procesos económicos, caracterizados por el acceso a nuevas formas de mercado, en los que prima la exclusión y la implementación de las nuevas políticas y las directrices de la llamada Sociedad Del Conocimiento, por parte de de los organismos internacionales que orquestan y lideran esta cuestión.
Sin embargo, pese a promulgar en su razón de ser, como ya se dijo anteriormente, en el propender por lograr una alta participación de las personas -en la perspectiva de mejorar la calidad de vida de ellas- del planeta, esto no se ha concretado. •
La verdad es que en ellas se cobija es una elite. Lo que en términos de Luz Arabany Ramírez en su articulo ya referenciado, no es más que una construcción de una elite para una elite, en la que se ha creado en su interior estructuras y procesos que son ajenos a los que no saben, a los que no tienen, y a los que no pueden.
De los actores protagónicos de las mencionadas ciudades, en lo que respecta a su diseño, construcción y puesta en marcha de ellas: el estudio del Triángulo de Sábato-Botana , y la Triple Hélice (gobierno-empresa-academia), dan cuenta de ello. Algo importante a resaltar lo es la poca participación de la Sociedad Civil en estos modelos de Desarrollo.
El Triángulo Sábato-Botana
http://www.monografias.com/trabajos67/
Sobre la emergencia del Triángulo Sábato-Botana, Martínez Vidal (1997), se refiere a él de la siguiente manera:
En 1968, por encargo de Gustavo Lagos, director del Instituto de Integración para América Latina (INTAL), juntamente con Natalio Botana, presentó a The World Order Model Conference en Bellagio, Italia, el llamado "Modelo del Triángulo". En este trabajo Sábato aprovechó sus experiencias en CNEA y culminó una etapa de acción, vivencias y reflexión. Marcó un hito importante, no sólo en su actividad intelectual, sino por la gran influencia que tuvo el mismo en la estructuración de lo que se denominó el "pensamiento latinoamericano en ciencia, tecnología y desarrollo". Detectó la urgencia de entender las relaciones entre tecnología y política económica. Economistas y tecnólogos desconocían mutuamente sus problemáticas y hablaban lenguajes diferentes. De aquí su esfuerzo para procurar acercarlos a través del foro de la "Librería de las Artes" o su actuación en el Instituto Di Tella, que desembocaron en el modelo del triángulo.
El documento sobre "Régimen de tecnología", en sus puntos 12) y 13) describe el triángulo I-G-E, el contenido de sus vértices e intrarrelaciones y las interrelaciones entre vértices.
Sábato dio así un "marco conceptual y operativo" a todo lo hecho por él en la década anterior y "consideró al triángulo como una racionalización de los éxitos y fracasos del SATI/CNEA, culminando una etapa". Decía, irónicamente, que "optó por el triángulo, porque es la figura más complicada que puede entender un economista".
Sábato-Botana entendieron además que la infraestructura científico-tecnológica no conformaba de ninguna manera un "sistema", que sólo era un complejo de elementos desarticulados, sin relaciones entre sí, ni con la sociedad. Explicitaron esa desarticulación existente y sintetizaron con un primer enfoque sistémico, implícito y pragmático, las interrelaciones necesarias para acceder a una sociedad moderna y "lograr capacidad técnico-científica de decisión propia a través de la inserción de la ciencia y la técnica en la trama misma del proceso de desarrollo", tanto del sector productivo, como de la sociedad, con un esquema didáctico muy simple.
(Martínez Vidal; 1997: Págs. 143-144)
En aras de elucidar, algunos aspectos de la incidencia en el “Desarrollo” en América Latina de los modelos mencionados en el párrafo anterior y en lo relacionado con La Ciudad Del Conocimiento en América Latina, veamos algunos aspectos de sus componentes.
E iniciemos por el Estado, pues: “Ha quedado demostrado que el Desarrollo es una condición que no se obtiene con el simple devenir histórico que abraza un proceso natural de evolución, la realidad advierte que esta noción se ubica lejos de representar una vía objetiva. Dicha condición que, sin duda, involucra la adquisición de capacidad sistemática para crear progreso tecnológico, demanda de una activa y decidida participación estatal, donde los esfuerzos sean canalizados, entre otras cosas, a la creación y levantamiento de una infraestructura científico-tecnológica sólida” (Silvana Andrea Figueroa Delgado; 2009)
Idea que es sustentada por Silvana Andrea Figueroa (2009), al realizar un breve recorrido por la historia de la política estatal-económica de Inglaterra y Alemania , en la que hace presencia una significativa protección arancelaria para la producción agrícola e industrial de la población nativa; aspecto este que riñe con las políticas en este tópico en la actualidad en los países latinoamericanos y mucho más aun en las denominadas Ciudades del Conocimiento para esta parte del continente americano.
Para Inglaterra, sobresalen entre otras los siguientes aspectos y disposiciones, los que de una manera u otra fueron elementos determinantes, desde la política estatal para erigirla como la cuna de la revolución industrial:
• Inglaterra, funge en el escenario de la trama histórica el haber sido la cuna del Capitalismo. Significada del incipiente taller, a la gestación de la fabrica y la división del trabajo. Para trascender a la conformación de los gremios y la instauración de la banca, en la perspectiva de la consolidación del capital industrial.
• La invención de la maquina a vapor y el ferrocarril enrutaron a esta nación en la senda y la hegemonía de la producción capitalista hasta los años cincuenta del siglo XIX. Erigiendo la estructura Estatal-económica de los ingleses como un verdadero portento del desarrollo industrial, tecnológico y comercial.
• Las medidas tempranamente implementadas en el reinado de Eduardo III entre los años 1323-1327, con las que se protege la producción interna a nivel de los productos agrícolas y el sector de manufacturas; y se reglamenta o prácticamente se prohíbe la importación de productos de otros países. Lográndose con las anteriores reglamentaciones el desarrollo de la industria local y creatividad del sector fabril ingles.
• Isabel I, entre 1558-1603 suspendió un alto porcentaje del comercio en ultramar, favoreciendo de esta manera la industria en los sectores de la metalurgia y la producción de embarcaciones.
• A inicios del siglo XVI, le fue permitido el ingreso a protestantes emigrantes de lo que hoy es Bélgica y Francia los que aportaron al desarrollo de Inglaterra con sus conocimientos en las artes manufactureras en el lino, la seda, el papel, construcción de relojes y del metal. De igual manera, los italianos contribuyeron al forjamiento del aparataje industrial de esta nación, quienes obligados por el régimen proteccionista y la no posibilidad de exportar sus productos a Inglaterra, se hicieron ciudadanos y aportaron con sus conocimientos en la tapicería persa y artículos de lujo (List; 1885).
La Máquina A Vapor Perfeccionada Por James Wat Elemento Fundamental En La Revolución Industrial En El Reino Unido
http://es.wikipedia.org/wiki/
• La promulgación de la primera ley formal de patentes en 1624 por parte del parlamento inglés, en la que se le daba monopolio a los inventores sobre sus creaciones por espacio de catorce años, propició un interesante desarrollo de la industria inglesa (Penrose; 1974).
• Las leyes de navegación contempladas en las llamadas Actas de Navegación inglesas emanadas en 1651 por el parlamento representaron para Inglaterra el monopolio mercantil marítimo de ese entonces y varias décadas después.
• En 1694 se gestó el Banco de Inglaterra, cuyo razón de ser inicialmente fue el cubrir los gastos, mediante deudas públicas, a prominentes comerciantes (Dowd; 1971).
Las Dos Revoluciones Industriales
http://4.bp.blogspot.com/
En este y gracias a este contexto de normatividad e intervención estatal, conllevó a que Inglaterra se consolidara como una potencia industrial a nivel global. Más, no obstante, siempre fue así. Entonces mencionemos algunos elementos dinamizadores de ello.
Uno de los aspectos que dinamizaron los cambios de producción y de la parte laboral, fue el aprendizaje productivo realizado de manera no científica, por parte de los artesanos e incluso los ingenieros, bajo el mando ya de personas inscritas en el capitalismo (Braverman; 1974). Evento que fue caldo de cultivo, para el surgimiento de nuevas formas de producción y de trabajo, representadas en la imposición de la máquina por parte del capitalista al otrora artesano y la división del trabajo.
He aquí ya, los albores de una de las exigencias de la llamada Segunda Revolución Industrial, en lo relacionado a los agentes y a las tendencias. Es decir, la aplicación científica y la automatización para lo primero, y la transición del trabajador técnico experimentado al de orden científico, para lo segundo.
Acontecimiento que conllevó el despojo de los medios de producción por el gran capital al artesano-trabajador, dándose la supremacía del capital industrial sobre el capital comercial. Lo que según, Víctor M Figueroa (1986), propició las bases para la aparición del trabajo general, contemplado y significado en lo científico, lo creativo, y lo inventivo.
Mehdí Shafaeddin (1998), nos resalta, entre otros, dos elementos importantes que influyeron en el Desarrollo Industrial del Reino Unido: El primero está relacionado con la manera en que Inglaterra se erigió como una gran potencia mundial a costo de la explotación desmedida de sus colonias y en detrimento del desarrollo de las mismas; y el segundo, de cómo la exportación de la maquinaria producida en las fabricas inglesas a las colonias, bajo su dominio, fue prohibida, situación que incrementó la brecha tecnológica entre las colonias e Inglaterra.
Silvana Andrea Figueroa (2009; Pág. 11) citando a este autor, a Reinert (1999), y Chang (2003); señala que Gran Bretaña:
[…] comenzó su incursión en el libre comercio propiamente en los años 1840, en un momento en que su base industrial se encontraba fortalecida y su posición era de evidente ventaja. La idea era colocar con toda facilidad la producción manufacturera en otras partes del globo, al mismo tiempo que se abastecía de materia prima barata. Hay quienes sostienen que la liberalización de granos de 1846 en Gran Bretaña, no fue tanto el descuido de un sector como lo fue del impulso del otro, es decir, fue una estrategia deliberada para que distintas naciones vieran rentable la producción de granos y se olvidaran de la fabricación de bienes finales y de capital, conservando así su papel central en esta actividad.
No obstante, este exceso de confianza de la Gran Bretaña en la apertura, hizo que fuera perdiendo su lugar como primera potencia económica frente a países que para ese entonces se encontraban enfocados en el fortalecimiento de sus mercados internos, con una activa participación estatal interna. Alemania, fue una de ellas.
Ahora bien ¿Qué nos deja para la reflexión, la anterior semblanza histórica del Desarrollo Industrial en Inglaterra? Sin duda, ella nos deja enseñanzas importantes, a tener en cuenta, si en verdad América Latina propende por lograr el Desarrollo. Luego, veamos algunas de ellas, contrastadas con unas cuantas medidas que se ha implementado en esta sección del continente americano:
América Latina: Un Entorno Económico Global
http://blogs.creamoselfuturo.com/industria
• Los Estados Latinoamericanos en aras de la construcción de un Desarrollo verdaderamente Sostenible, deben adquirir un eficiente y efectivo compromiso integral, revertido en una injerencia generosa e integral. Integralidad que no solamente debe corresponder al desarrollo de una infraestructura científico-tecnológica, sino también ella debe estar sujeta a las exigencias ecológicas actuales para el planeta en un sentido holístico.
• Las medidas adoptadas por Inglaterra y Alemania en lo relacionado a la protección de la producción nativa y las restricciones al ingreso de la producción foránea, son ejemplo en cierta manera de políticas estatales a implementar por los gobiernos latinoamericanos, para gestar independencia económica y tecnológica de los países ya consolidados.
• La experiencia en suelo latinoamericano de la denominada política de industrialización a través de la “Sustitución De Las Importaciones” no
http://www.oei.es/revistactsi/numero1/albornoz1.gif
dio los frutos esperados al no alcanzar los logros esperados en tecnología. Sin embargo, el haberse logrado algunos desarrollos en lo que correspondió a la investigación básica y en la fabricación de bienes finales, en esta política para la América Latina, no se cumplió los preceptos instaurados en el Triángulo de Sábato-Botana. Es decir, la tan anhelada complementariedad e integralidad entre el Estado-Empresa-estructura científico tecnológica en aras del Desarrollo latinoamericano, aun sigue siendo una tarea a realizar.
Ya mencionados los anteriores elementos, articulados ellos con el proceso de industrialización y tecnologización de los países referenciados y la América Latina, volvamos nuevamente a las críticas de las denominadas Ciudades del Conocimiento en esta parte del continente americano.
En las ciudades de América Latina se ha puesto en evidencia, como en otrora tiempos, la implementación de modelos foráneos de Desarrollo aplicados en países y regiones de mayor nivel de industrialización, en los que como es de esperarse, se declara de manera unilateral al olvido la identidad y particularidades culturales de los conglomerados humanos latinoamericanos.
Con la caída del muro de Berlín y el desmantelamiento de la ex-Unión Soviética y los “socialismos históricos”, la última moda en el mundo económico y la academia es hablar del neoliberalismo y la economía de mercado libre. Contrario al entendimiento de este modelo cuando fue concebido en Europa durante el siglo diecinueve, el neoliberalismo actual y sus políticas librecambistas no buscan reproducir ese viejo sistema, sino que por el contrario, es algo que se engendra dentro de lo que se denomina el “nuevo orden internacional”.
El capitalismo mundial, especialmente el de las sociedades ricas e industrializadas del Norte, están optimistas y hablan acerca de la democratización, transición y oportunidades de crecimiento, especialmente en regiones como Asia y América Latina. Países como Taiwán, Singapur, Costa Rica, Chile se presentan al resto del mundo como modelos los cuales han logrado combinar exitosamente un liberalismo económico junto a una democracia política. De esta manera, el Tercer Mundo es invitado a seguir dichos modelos para alcanzar una casi instantánea modernidad que les permita eliminar sus subdesarrollos crónicos.
Este optimismo, sin embargo, se contradice con la realidad del llamado Tercer Mundo, en donde la desnutrición y la mortalidad infantil, el hambre, la pobreza y la cesantía han aumentado dramáticamente durante las décadas finales del siglo veinte. Mucho se ha escrito acerca de las fallas de los “socialismos históricos”, pero muy pocos se atreven a comentar hoy día acerca de las fallas del “capitalismo desarrollista” tal como se practica en las regiones del Sur.
La percepción de la realidad del Tercer Mundo por parte de los países ricos e industrializados del Norte se basan en análisis simplistas los cuales la mayoría de las veces sólo intentan justificar el control y dominación de las economías el Sur de acuerdo a sus propios intereses. Así, estos análisis intentan explicar un conjunto de elementos objetivos diferentes e interconectados entre sí, como a la vez, prescribir como soluciones ciertos tipos de democracias “protegidas y restringidas”, cuyas metas finales son: reducción de la tasa de endeudamiento externo, control de la inflación, disminución de los gastos públicos combinados con elecciones formales junto a la aplicación de políticas de privatización. Estas son en general, las fórmulas promovidas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BM) junto a otras agencias crediticias internacionales para alcanzar las ansiadas metas de la modernización y el desarrollo de América Latina y otras regiones del planeta.
(Jorge Gilbert Ceballos; 1997-1998)
Otro aspecto convergente en contra de las llamadas Ciudades Del Conocimiento latinoamericanas lo encarna los bajos niveles de producción de conocimiento. En realidad en este ítem tan necesario para las Ciudades del Conocimiento, estamos en un nivel bastante bajo:
Producción Escrita En Latinoamérica En La Década 1992-2002
http://www.Producción latinoamericana en biblioteconomía y documentación en el Social Science Citation Index (SSCI)
[…] el gasto de Inversión en Ciencia y Tecnología en (CyT) en Latinoamérica es bastante bajo y no se ha incrementado en la última década. El Análisis de la producción científica de los países de América Latina y el Caribe, a través de diversas bases de datos internacionales de publicaciones científicas, tanto multidisciplinarias como disciplinarias, refleja una baja participación de los investigadores de la región en la producción científica mundial, dentro de la franja que se denomina como “corriente principal de la ciencia”.
Nivel De Coautoría En América Latina Década 1992-2002 Según El SCI
De las 983.000 publicadas en el Sciencie Citation Index (SCI) en 1997, solamente 21.955 corresponde a América Latina y el Caribe […] La razón que con más frecuencia se ha aducido para explicar la baja producción de conocimiento en América Latina ha sido la poca inversión, argumentadose que es muy baja en relación a otras regiones; correlativamente se argumenta sobre la inexistencia de una infraestructura tecnologica o comunicacional suficiente; se agregan en ocasiones también dificultades juridico-politicas, como carencia de una institucionalidad y de una política científica.
(Quintanilla Montoya; 2008)
http://www.google.com.co/imgres
Una cuestión interesante a analizar, es lo concerniente al porqué de la falta de fuerza de las ciudades del conocimiento en Latinoamérica. En realidad, la causa de mayor aceptación en la explicación de este fenómeno, lo es, la homogenización que en las ciudades de este tipo se está presentando en su proceso de desarrollo. Ello obedece al estarse copiando modelos foráneos, los que conducen a que ellas estén realizando las mismas cosas. Es decir en el marco de la dinámica Centro-Periferia .
En síntesis son ciudades que responden más que a una lógica interna a dictámenes económicos externos de la globalización.
El conocimiento que se moviliza en estas ciudades, no es ajeno a críticas y cuestionamientos. La concepción de conocimiento en la Ciudad Del Conocimiento latinoamericana, de la misma manera que el promulgado en la Sociedad Del Conocimiento de Peter Drucker, es reducido únicamente al tecnológico y/o científico. Y como es de esperarse, en una estrecha articulación con las TIC.
Una vez más vemos en lo que al conocimiento corresponde en estas ciudades, el ejercicio de tratar de ajustarse a la lógica de la Globalización económica. Cabe y es prioritario, pues preguntarnos, qué pasa con el conocimiento local de las ciudades, del social, del cultural, etc. De la gestación del conocimiento se observa alrededor de él serias presiones de tipo económico, pues en esto participan las NTIC “[…] lo cual ha creado, de paso, un profundo conflicto entre tiempo biológico y tiempo informático. El conocimiento nuevo surge de procesos caóticos que requieren su tiempo. Ser creativo significa ser capaz de relajarse en medio de la incertidumbre y de la confusión. En la mayoría de las organizaciones eso se vuelve cada vez más difícil, porque las cosas van demasiado deprisa” (Fritjof Capra; 2002: Pág. 167).
Paradójicamente, la Globalización con una de sus manifestaciones más prominentes como es el caso de las NTIC, las que hacen más cortas las largas distancias entre ciudades, a nivel interno en ellas hacen que suceda lo contrario, las fragmenta y las expande, con la manifestación de un acentuado fenómeno de exclusión.
Fragmentación y expansión, que se hace visible en el espacio, la riqueza, la educación, el poder, la participación, y el acceso a las oportunidades. La ciudad excluyente, discrimina como un gueto fortificado, análogo a los clásicos castillos feudales en los que pernoctan la casta que ha sido seleccionada, por lo que tienen, y lo que saben. Mientras que en la periferia vive la clase menos favorecida y excluida.
La exclusión se hace cada vez más grande en las ciudades llamadas del conocimiento en Latinoamérica, pese a la implementación de las NTIC y los beneficios de orden social y económico que de la aplicación de ellas se promulga:
Ninguna ciudad escapa a la dualidad que fomenta la actual economía, un proceso general de transformación urbana encaminado a la degradación y la fragmentación de la vida social. Que pone de manifiesto dos “velocidades” sociales. Una primera conectada por autopistas reales y virtuales, con un gran consumo y amplio acceso a las ventajas de la globalización, y una segunda dirigida a los no conectados, a aquellos que habitan en un medio degradado, con trabajo precario (si es que lo tienen) y con posibilidades mínimas (cuando no existentes) de accseso a la salud, la educación y la vivienda. Las barreras de carácter cultural, económico y social, entre ambos sectores se refuerzan con la existencia de verdaderas barreras materiales entre unos y otros.
(Muxí; 2004; Pág. 68)
De la amalgama de los términos Ciudad y Conocimiento con las complejidades que en ellos subyacen, de la cual se espera en La Ciudad Del Conocimiento constituyan un sistema, como un todo conformado por partes que interactúen de manera sincrónica en pos del mejoramiento del nivel de vida las personas, hoy por hoy, no es más que una utopia. Pues en verdad, la tan esperada y anhelada sinergia en las ciudades de este tipo en América latina –la que no se da-, ni configuran un sistema, y mucho menos un todo de alta complejidad.
Luego de manera general, ya establecidos los anteriores cuestionamientos a la Ciudad Del Conocimiento latinoamericana –si es que en verdad existen-, un aspecto de suma relevancia es el contemplarlas en la dimensión de Ecosistema. Pues bien en esta perspectiva, aprestémonos a incursionar en algunos aspectos de esta cuestión, y esto en la perspectiva teórica de la nueva concepción de la vida, o mejor desde el Paradigma Ecológico .