EL LIBRO Y EL BIOS: ALGUNOS MOMENTOS EN SU HISTORIOGRAFÍA. LECTURA DESDE EL PARADIGMA ECOLÓGICO
(VOLUMEN II)
Germán López Noreña
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La pradera de San Isidro, de Francisco de Goya (1788). La ciudad aparece vista desde el suroeste, y algo distinta de como la pudo dibujar Wyngaerde doscientos años antes.
http://es.wikipedia.org/wiki/Historia_de_Madrid
La historia de la ciudad está determinada por el establecimiento en ella en una primera instancia de, la corte real (junio de 1561) y luego, con la consolidación del país, de la capital de éste. Sin embargo, antes de esto, el área de la actual ciudad ya había sido poblada con el establecimiento de comunidades más o menos relevantes. La aparición de Madrid en la historia data del siglo IX, siglo en que el emir Muhammad I (852-886) levanta una fortaleza en el lugar ocupado actualmente por el Palacio Real.
La historiográfica de la ciudad, se puede dividir en los siguientes períodos: el paleontológico, el prehistórico y romano, el de la dominación musulmana, la conquista cristiana, el de las comunidades, la capitalidad y los Austrias, posprimeros Borbones, la guerra de La Independencia, el siglo XIX y La Restauración, Segunda Republica y la Guerra Civil, Dictadura Franquista, y Democracia.
El establecimiento de la imprenta en esta ciudad se da en la época llamada La Capitalidad y los Austrias en la que la Corte se estableció de manera permanente en Madrid. Situación que erige a Madrid como capital de la monarquía, y es caldo de cultivo para el desarrollo de la imprenta y el libro en esta ciudad.
Ahora bien sobre la imprenta y el libro impreso en Madrid, dejemos que sea el trabajo varias veces citado de Aranda Rancón, realizado en la Universidad de Málaga, quien nos ilustre:
Una De Las Marcas Utilizadas en las Impresiones de Los Libros Por Pedro Madrigal (Madrid, 1586-1594) Viuda y Herederos
http://marcasdeimpresor.blogspot.com/2009_06_01_archive.html
Tan pronto como la Corte se estableció de forma permanente en Madrid en 1561 y la ciudad se convirtió en la nueva capital, su población comenzó a aumentar a un ritmo extraordinario. La creciente demanda de libros, que ya había sido conocida anteriormente por Toledo y Alcalá, llevó al establecimiento del primer taller de imprenta en el propio Madrid.
Ninguno de los impresores de Madrid del siglo XVI fue muy diestro técnicamente hablando. Uno de los mejores fue Pedro Madrigal, que comenzó a imprimir en 1588 y murió en 1594. Imprimió varios libros tanto en castellano como en latín, incluida una traducción al castellano de la Ierusalen libertada de Tasso, en 1587. En consonancia con el estatus de la nueva capital, Felipe II inauguró una Imprenta Real, con Tomás Junti como su primer impresor, comenzando a desempeñar su nuevo cargo en 1594.
6.2.3 La Imprenta y El Libro En Alcalá De Henares
Grabado de las casas de Juan de las Navas (J. Morán, Vida de Cervantes, III. El Quijote. 1862-1863).
vallisoletvm.blogspot.com/2010_04_01_archive.html
Los orígenes de la ciudad de Alcalá se remontan y articulan al nacimiento de la Complutum romana, ciudad que en sus más de cuatro siglos de existencia alcanzaría gran esplendor y una importancia que mantendría a lo largo de todo el periodo visigótico. Del período de dominación musulmana, se establecen los orígenes del nombre actual de la ciudad. Alcalá le debe a la construcción de una ciudad que con el tiempo se conoció como Al-Qalat-Nahar (El castillo del Henares), su denominación actual.
La Reconquista Cristiana, propicia la nueva reconstrucción de la ciudad en lo que supuso desde entonces fue su emplazamiento definitivo, ubicación en lo que hoy la Catedral Magistral. No obstante lo anterior, el verdadero esplendor de la urbe se dio solamente a finales del siglo XV. En 1499 el Cardenal Cisneros funda la Universidad –modelo de muchas de las universidades fundadas en América-, produciéndose a partir de ese momento una renovación urbanística que convierte a Alcalá en una ciudad universitaria, siguiendo los cánones arquitectónicos clásicos.
Es en este marco histórico que suele suceder el establecimiento de la imprenta en Alcalá de Henares, cuyo slogan actual, es la ciudad del saber, y declarada en 1988 por la UNESCO, patrimonio de la humanidad. Cuna de Catalina de Aragón y de Manuel De Cervantes Saavedra, entre otras personalidades ilustres, siendo este último célebremente conocido como “el manco de Lepanto” y autor del siempre clásico Don Quijote De La Mancha.
La Biblia Poliglota
http://cvc.cervantes.es/artes/ciudades_patrimonio/alcala_henares/indice/biblia.htm
Según consta en las crónicas, la Imprenta de Alcalá de Henares comenzó su labor tipográfica y divulgativa con la publicación en 1492 de la Gramática Latina, de Nebrija. A ello hay que añadir otra edición famosa: la de la Vita Christi Cartoxano Romançado, en traducción de Fray Ambrosio de Montesinos e impresa por Estanislao Polono en 1502. Engarce del trabajo universitario con la difusión cultural, la imprenta fue un fecundo ingenio que propagó el nombre de la villa y multiplicó las oportunidades de sabiduría de todos aquellos catedráticos y escolares que frecuentaban la calle de los Libreros. Poniendo orden en este proceso, Cayetano Enríquez de Salamanca explica que las actividades de la prensa universitaria fueron iniciadas por Arnaldo Guillén de Brocar y por su hijo Juan a comienzos del siglo XVI. Los sucedió Méndez de Robles, cuya imprenta ya no fue exclusiva, pues «algunos Colegios Menores tuvieron también la suya propia y hubo otras muchas entre los siglos XVI y XVIII, que dieron celebridad a Alcalá, publicando obras para uso de la Universidad, generalmente en latín». (Alcalá de Henares y su Universidad Complutense, Escuela Nacional de Administración Pública [Antigua Universidad de Alcalá de Henares], 1973, pp. 133). Tomamos de la misma fuente otros datos de importancia: Cisneros ordenó en 1510 que se trasladara desde Logroño hasta Alcalá el citado impresor alemán, Guillén de Brocar. Éste se encargó de labrar los primeros caracteres que hubo de hebreo, caldeo y griego en el mundo.
(http://cvc.cervantes.es/artes/ciudades_patrimonio/alcala_henares/indice/biblia.htm)
Una vez más observamos, como en Segovia, el dinamismo de un alto prelado, fue fundamental en dotar de un claustro de educación superior y la imprenta, a una my importante ciudad española, sumado al desarrollo y al auge logrado por Alcalá De Henares en el periodo histórico ya mencionado.