Ricardo V. Santes-Álvarez
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La gráfica de la figura 22 señala la corresponsabilidad en general en los casos individuales según la relevancia de las variables.
En los casos de PdN y SB se determina que las variables PP e Inc tienen un comportamiento similar al patrón general de la figura 21, es decir, se significan como las de mayor importancia en las fuentes, con la primera adquiriendo los valores más altos, seguida de la variable Inc (en PdN, 0.3 y 0.2, respectivamente; en SB, 0.3 y 0.27, respectivamente).
Nuevamente, como en el patrón general, los pares AcIn, y AnIn ocupan la segunda posición (en PdN, los valores fueron de 0.1 y 0.2, mientras que en SB, fueron de 0.11 y 0.18, en el orden acostumbrado), dejando la posición final a ReCu y Req (0.1 y 0.1 en PdN; 0.7 y 0.7 en SB). En este punto, es interesante observar que tanto en PdN como en SB, el par ReCu—Req adquirió valores equivalentes, lo que establece un equilibrio en el par y, en un primer momento, permite aducir que los datos contribuyen de manera favorable a la corresponsabilidad. No obstante, cabe recordar que en esta etapa del análisis se está considerando el total de respuestas, esto es, se toman en cuenta tanto las variables que contribuyen favorablemente a la corresponsabilidad como aquellas que lo hacen en sentido contrario. Una elaboración más fina permitirá adquirir la perspectiva adecuada de la corresponsabilidad positiva y, con ello, de la gobernanza ambiental. Pero antes de pasar a esa etapa, se comentará el caso de Alco Pacífico.
Distinto a lo sucedido con PdN y SB, en el caso de AP se observa un comportamiento de variables diferente del patrón general. Aquí, si bien el tema de la participación pública mantiene preferencia respecto al de inclusión, se aprecia que en los extremos de la gráfica hay dos variables que adquieren la mayor relevancia del conjunto; éstas son AcIn y Req, con una contribución de 0.27 para cada una. Por consecuencia, en comparación con los otros casos, AP es atípico; los resultados dan soporte a la suposición de que AP obedece a una dinámica distinta de corresponsabilidad, una en donde tres variables ubicadas en pares de corresponsabilidad diferentes concentran la mayor importancia del conjunto, con 72 por ciento del total. Estos resultados apuntan a un tipo de gobernación donde dominan los desequilibrios; pero esto queda más claro al concentrar la atención en lo que se llama corresponsabilidad positiva, como se hará a continuación.
9.1.4. Corresponsabilidad positiva
La gráfica de la figura 23 indica la preeminencia de la corresponsabilidad positiva en los casos. Como en el caso de la corresponsabilidad en general (figura 20), se advierte que las variables son consideradas con mayor relevancia (64 por ciento) por las fuentes que tratan el caso SB. Nuevamente, Paso del Norte y Alco Pacífico en ese orden, observan valores decrecientes (30 y 6 por ciento). Es factible aseverar que la explicación de la diferencia existente entre los resultados observados para SB y aquellos de PdN dada para corresponsabilidad en general es igualmente válida para esta representación gráfica: el tipo de problema y la circunstancia en que ocurre definen el comportamiento de las características de corresponsabilidad, siendo diferente la percepción y el tratamiento dado a cada caso.
Una primera impresión es que SB, al presentar la contribución más alta en valores de corresponsabilidad positiva debe exhibir las condiciones de una gobernanza ambiental; pero esto no es necesariamente así, pues se debe insistir en la importancia de los equilibrios entre variables al interior de los pares, y entre los mismos pares, pues en tanto y en cuanto se observen las menores distancias entre ellos, las posibilidades de una gobernación superior son mayores. Por el momento, se debe esperar a observar los resultados del análisis de la corresponsabilidad positiva en los estudios de caso individuales de acuerdo a la preferencia de las variables, que se ofrecen adelante.
De la figura 23 resalta, asimismo, el caso AP: además de mantener una marcada distancia en importancia con respecto a los casos PdN y SB, es notable que, distinto a lo que ocurre en estos últimos en cuanto a su variación de corresponsabilidad en general a corresponsabilidad positiva (que tiende al ascenso) en AP la variación es inversa. En otras palabras, el aporte de las variables de corresponsabilidad positiva con respecto a la corresponsabilidad en general es considerablemente menor, pasando de 14.67 por ciento a seis por ciento. Como se anotó, la cobertura de las variables revela que, en comparación con SB, y con PdN, AP no recibió atención relevante y que, cuando se le otorgó, tendió en su mayor parte a resaltar aspectos negativos del proceso, como denuncias de actuación gubernamental deficiente, inconformidad social, daños a la salud, entre otros. Con todo ello, se daba muestra de una gobernación de bajo perfil en AP.