DEMANDA DE AUTOMÓVILES NUEVOS EN VENEZUELA
Elvis Padilla
Jonny Sequera
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II.2.5. El Modelo de Trandel (1991)
Trandel (1991) incorpora la variable calidad a los estudios de demanda de automóviles, en los cuales, se han omitido debido en gran parte a la dificultad inherente de medir esta característica.
Trandel (1991) sostiene que si la calidad es un determinante importante de la demanda de automóviles, el hecho de no incluir una medida de la misma en la regresión, puede influir en la estimación de los coeficientes de la ecuación y en particular, si la calidad está positivamente correlacionada con las ventas y el precio, los estudios que omiten la calidad pueden subestimar la sensibilidad de los consumidores de automóviles nuevos a cambios en el precio, es decir, se estaría subestimando la estimación de la elasticidad precio.
Para demostrarlo, Trandel (1991) utilizó la ecuación desarrollada por Levinsohn (1988) (*), rescribiéndola de la siguiente manera:
LOGSALES = β0 + β1 LOGPRICE + β2 LCMPPRCE + β3 DUM84 + β4 DUM85
+ β5 FOREIGN + β6 QUALITY + β7 CMPQLTY + u
donde:
LOGSALES = Logaritmo de las ventas del modelo en el año relevante. LOGPRICE = Logaritmo del precio al detal sugerido por el fabricante. LCMPPRCE = Logaritmo del precio promedio de los competidores. DUM84 y 85 = Variable dummy del año relevante. FOREIGN = Variable dummy si el auto es producido fuera de EEUU. QUALITY = Calidad de cada automóvil. CMPQLTY = Calidad media de sus vecinos.
En base a las mismas características físicas, los automóviles compiten por ventas con sus similares, así un cambio en el precio de cualquier automóvil, afectará sólo la cantidad demandada de ese auto y la de sus vecinos espaciales, es decir, de los automóviles que sean de similares características.
Para medir la calidad de un auto, Trandel (1991) analizó los rasgos específicos de cada uno de los modelos de automóviles publicados por la Consumer Reports de los EE.UU., para los que consideró aspectos como: ahorro de combustible, calidad de marcha del motor, cambio, aceleración, capacidad de anulación de accidente, precisión de manejo, frenado, paseo, ruido, posición del conductor, asientos delanteros, asientos traseros, control del clima, comandos, demostraciones, incidencia en la reparación y facilidad de servicio. A cada una de estas características las ubicó en una escala de cinco puntos y las promedió, obteniendo así una medida de calidad para cada modelo analizado.
Los resultados obtenidos por Trandel (1991), para una muestra de 70 modelos para los años 1982-85, indican que ambas variables de calidad son estadísticamente significativas y tienen los signos esperados, es decir, que cuando aumenta la calidad del automóvil, aumentan las ventas de éste y caen las de sus competidores.
El resultado más importante según Trandel (1991), es que el hecho de haber incluido calidad afectó la estimación de la elasticidad precio como se pensaba. Sin incluir las variable de calidad, la elasticidad la elasticidad precio era igual a -1.88 y al incluirla fue de -2.42, lo que reafirma la hipótesis de Trandel expuesta al comienzo.
* Estudio sobre el mercado de automóviles estadounidense,
enfocado a los efectos de varias políticas comerciales hipotéticas (ver Trandel,
1991; p. 523).