APUNTES DE TEORÍA Y POLÍTICA MONETARIA
Mario Alberto Gaviria Ríos
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IMPLICACIONES DE POLÍTICA.
Durante el reinado de la teoría keynesiana se le plantearon como funciones a la política económica la búsqueda del pleno empleo, la estabilidad de la actividad económica y un crecimiento rápido.
Friedman se mostró inflexible en cuanto a que la política monetaria no se podía emplear para fijar magnitudes reales o para controlar factores reales como las tasas de interés, los niveles de empleo y producción. Sin embargo reconoció que esa política podría tener efectos de corto plazo importantes en ellos, aunque no siempre convenientes ni predecibles.
La función válida, según Friedman, para la política monetaria es la creación de una base estable para la expansión de la actividad económica. El sector productivo debe tener la posibilidad de tomar decisiones con confianza, en el momento oportuno y sin el temor de cambios repentinos que pudieran interferir sus planes. Por tanto, una meta adecuada de política es la consolidación de una estabilidad en los precios, sobre la cuál se puedan planear en forma confiable las transacciones comerciales presentes y futuras.
Un aspecto esencial de su planteamiento es la incorporación de los rezagos en el proceso de ajuste. Ello significa que el tiempo necesario para que las variaciones en la cantidad de dinero afecten a los precios puede fluctuar entre seis meses y dos años. La dificultad de precisar el período requerido hace que el control día a día (el monitoreo) sobre los efectos que está teniendo la política monetaria sea inoperante.
Ante ese hecho Friedman plantea la inconveniencia de aplicar una política monetaria discrecional para buscar la estabilidad en los precios, y se inclina por establecer una regla de comportamiento (su regla de oro): fijar una meta de crecimiento de la cantidad de dinero similar al crecimiento esperado de largo plazo del producto de la economía. Es decir, propuso una tasa constante de crecimiento de la oferta monetaria.