ENCUENTRO INTERNACIONAL SOBRE Esta página muestra parte del texto de la ponencia, pero carece de las tablas o imágenes o fórmulas o notas que pudiera haber en el texto original.
Pulsando aquí
puede solicitar que le enviemos el Informe Completo y Actas Oficiales en CD-ROM Si usted participó en este Encuentro, le enviaremos a la vez su certificado en papel oficial. Vea aquí los resúmenes de otros Encuentros Internacionales como éste VEA AQUÍ LOS PRÓXIMOS ENCUENTROS CONVOCADOS
|
Palabras claves: Capitalismo, Neoliberalismo, imperialismo,
función del Estado, desregulación financiera, privatización.
“…en el campo de las ideas el capitalismo ha declarado ser el único modo de
organizar la vida moderna concebible para la humanidad y la anulación abierta de
la soberanía nacional como clave de las relaciones internacionales entre los
Estados, en nombre de los derechos humanos”
Perry Anderson
Si Marx tenía razón cuando dijo que: “las ideas dominantes en el mundo son
siempre las ideas de las clases dominantes”, es muy claro que estas clases, en
sí mismas, no han cambiado nada en los últimos cien años. Es decir, los dueños
del mundo siguen siendo los propietarios de los medios materiales de producción,
a escala nacional e internacional. Sin embargo, es igualmente evidente que las
formas de su dominación ideológica sí han cambiado, y de modo significativo.
Para entender el fenómeno del neoliberalismo es importante recordar la evolución
que ha tenido la política económica del capitalismo a lo largo de la Historia.
Mercantilismo (XV-XVIII) Primera Política Económica. Según sus teóricos la
riqueza de una nación residía en la cantidad de oro, plata y metales preciosos
que esta tuviera y no en la capacidad de producción. Le es inherente el
proteccionismo aduanal para impedir que el comercio de otras naciones penetrase
su mercado llevándose el dinero al exterior. Buscó mayores exportaciones y
menores importaciones. Sentó las bases del desarrollo manufacturero.
Liberalismo (XVIII-XIX) Contrapartida teórica del mercantilismo. Planteaba la
lucha libre del mercado, lo que garantizaba el triunfo de los más poderosos y a
su vez aceleraba la concentración y desarrollo industrial del siglo XIX
La filosofía del liberalismo se basa en la consideración del derecho como
productor de la voluntad humana, en cuanto supone que la razón individual es
absolutamente libre. En su aspecto económico propugna el libre cambio y la
iniciativa individual en la producción, en lo político, pide la implantación
legal de la libertad de pensamiento, conciencia, imprenta, asociación, trabajo,
etc.
Entre los principios del liberalismo tenemos:
1. Libertad individual, que se ampara en los derechos del hombre (religiosa,
pensamiento, expresión, etc.).
2. Estado Constitucional. Su premisa es la división de poderes (legislativo,
ejecutivo y judicial).
3. Conversión de los vasallos del rey en ciudadanos de la nación y la
participación de los mismos en las actividades políticas mediante el sufragio.
4. Soberanía como patrimonio no del rey, sino de la nación.
5. Libertad económica de producción, empresa, intereses, competencia y
circulación de las mercancías exentas de trabas jurídicas, todo lo cual supone:
*Libertad de comercio frente a las limitaciones aduanales internas que
establecía el sistema feudal.
*Libertad de producción para alcanzar un buen precio.
*Libertad de trabajo y contratación frente a las limitaciones que el sistema
cooperativo imponía al trabajo artesanal y la libre contratación.
En la segunda mitad del siglo XIX el capitalismo entra en una nueva fase de su
desarrollo: El imperialismo. El desarrollo de las fuerzas productivas y de la
libre competencia propugnada por la ideología y la política liberales propicio
un aumento sin limites de la producción que amenazaba frecuentemente con la
ruptura del ciclo de reproducción del capital: las crisis económicas se hicieron
mas profundas y frecuentes; se agravo su complejidad y el mercado
automáticamente ya no se bastaba para corregir los nuevos desequilibrios. Este
conjunto de condiciones maduraron al calor de acontecimientos históricos como el
desencadenamiento de la Primera Guerra Mundial; el triunfo de la Revolución
Socialista de Octubre y la crisis del 29. Progresivamente se planteaba la
necesidad de la regulación del ciclo económico para conservar la estabilidad de
régimen capitalista.
Influencia importante en la adopción de una política económica en este período
lo tuvo la teoría de L. M. Keynes del “desarrollo sin crisis del capitalismo” a
partir del “Capitalismo regulado” (Keynesianismo). El Keynesianismo cobró auge
sobre todo en Estados Unidos con el gobierno de F.D. Roosevelt, después de la
crisis de 1929-1933, cuando fue necesario poner en marcha los recursos
financieros y económicos del Estado para salvar de esa manera los bancos
privados y los consorcios industriales que se hallan en quiebra. Como política
económica se fortaleció durante el período de la Segunda Guerra Mundial
(1939-1945) y el período de posguerra, en sus dos primeras décadas (años 50 y
60). La significación histórica del keynesianismo -como de toda escuela del
pensamiento económico- esta en haber dado respuesta a las necesidades del
momento: estabilizo al sistema capitalista, atenuando las crisis económicas;
alivio el problema del desempleo y mejoró sensiblemente el rostro del
capitalismo con sus políticas sociales benévolas y una mejoría en la
redistribución del ingreso. Las políticas de corte keynesiano concretadas en el
modelo del welfare state fueron decisivas en la competencia contra el sistema
socialista ya que crearon expectativas reales sobre la posibilidad del
mejoramiento y la convergencia social, aún en el capitalismo. El keynesianismo
propició el crecimiento de las clases medias y una movilidad social sin
precedentes hacia arriba. A pesar de sus valores indiscutibles eran
cuestionables sus resultados en materia de productividad, y cada día se hacia
más difícil la contención de las crisis económicas.
En la historia económica del capitalismo un momento culminante es la crisis
económica de los años 70, por su amplitud y profundidad. Esta crisis que estalla
por lo financiero es expresión del agotamiento del modelo de acumulación
extensiva sobre la base del uso de tecnologías ampliamente derrochadoras de
petróleo. Aquí entra en crisis la organización de la producción fordista y esto
se expresa en superproducciones costosas y poco competitivas. La elevación
drástica de los precios del petróleo por decisión de la OPEP seria el
catalizador de una crisis que venia gestándose desde los años 60. En los 70
confluyeron la crisis estructural del régimen capitalista, la crisis financiera,
la petrolera y la ecológica. El capital transnacional se ve obligado a hacer
reajustes bruscos para adecuarse a las nuevas exigencias del desarrollo de las
fuerzas productivas; asimila la tecnología japonesa con el objetivo del logro de
una mayor productividad y, también con ese propósito, culpa a su propio estado y
al conjunto de políticas que hasta ese momento le habían favorecido del
estancamiento y la baja productividad. Se acelera la bancarrota del
keynesianismo y asciende la ideología neoliberal.
Fue precisamente en el período posterior a este conflicto bélico mundial que
surge el Neoliberalismo como una reacción teórica y política contra el Estado
intervensionista. El Neoliberalismo lo podemos definir como una concepción
económica que por una parte engrandece el libre juego de las fuerzas del mercado
y la capacidad del empresario, como los mecanismos que por excelencia garantizan
la asignación optima de los recursos, eficiencia y el saneamiento de la economía
y por otra parte limita la función del Estado como agente económico.
El texto que le dio origen es “Camino de la Servidumbre”, escrito en 1944 por el
economista austríaco Friedrich August von Hayek (1899-1992). Esta obra
constituye un ataque apasionado contra cualquier limitación de los mecanismos
del Mercado por parte del Estado, esto se consideraba un atentado, no sólo a la
libertad económica sino a la política. En 1947 Hayek convocó a todos los que
apoyaban sus teorías a una reunión en Mont Pérelin (Suiza), a la que asistieron
entre otros: Milton Friedman, Karl Pepper y Walter Leppman. Allí se fundó la
sociedad de Mont Pélerin, una organización neoliberal, altamente organizada que
celebraba reuniones internacionales cada dos años.
A partir de este momento se fueron perfilando dos escuelas fundamentales en
desarrollo de la teoría neoliberal.
1. La escuela europea liderada por Hayek y un grupo de economistas ingleses.
2. La escuela norteamericana, con sede en la universidad de Chicago llamado
“Escuela de Chicago” o monetaristas liderada por Milton Friedman.
Las décadas de los años 50 y 60 son consideradas como etapa de auge del
capitalismo en las cuales presentó el crecimiento más rápido de su historia,
realmente las condiciones no eran favorables para que las teorías neoliberales
se extendieran y concretaran oficialmente. Desafiando el consenso oficial de
esta etapa, ellos argumentaban que la desigualdad era un valor positivo en si
mismo y que la vitalidad de la competencia garantizaba la prosperidad de todos.
Este mensaje permaneció en teoría cerca de dos décadas. La llegada de la gran
crisis económica de 1973 cuando el capitalismo cambió bajas tasas de crecimiento
por altas tasa de inflación, abrió el terreno al neoliberalismo y a partir de
ahí sus ideas comenzaron a ganar terreno. Según los neoliberales las raíces de
esta crisis estaban con el poder excesivo de los sindicatos y del movimiento
obrero en general que habían socavado las bases de la acumulación capitalista
privada, con sus presiones para el aumento de salario y sobre el Estado para que
este aumentara los gastos sociales. Todo esto, según ellos, destruían los
niveles de ganancia de las empresas desencadenaba en una crisis.
¿Cuál es la propuesta neoliberal para salir de la crisis?
1. La existencia de un Estado fuerte solo desde el punto de vista político (en
su capacidad de frenar al movimiento obrero y sindical).
2. Desde el punto de vista económico devolver la iniciativa a la empresa
privada:
-Lograr la estabilidad monetaria, para ello debe lograrse:
I. Disciplina presupuestaria
II. Contención del gasto social
III. Restauración de una “tasa natural”, de desempleo
IV. Reformas fiscales.
V. Reducciones de impuestos sobre las ganancias más altas y sobre las rentas.
De esta forma una nueva y saludable desigualdad volverá a dinamizar las
economías avanzadas, al polarizar la sociedad bruscamente. La oportunidad de
aplicación del programa neoliberal surgió por ves primera para el mundo
desarrollado en 1979, cuando llega al poder en Inglaterra Margaret Thatcher. A
partir de estos momentos se produce una ola de derechización, en Europa
fundamentalmente, que favorece al programa Neoliberal.
- 1980 Reegan llega a la presidencia en Estados Unidos.
- H Khol en Alemania, derrota al gobierno social liberal de H Schnudt.
- 1983 Gana las elecciones una coalición de derecha en Dinamarca.
Volviendo al “Modelo Clásico” de neoliberalismo en el mundo desarrollado,
Inglaterra, adoptó algunas medidas:
• Contrajo la emisión monetaria.
• Se elevaron las Tasas de Interés.
• Bajaron drásticamente los impuestos sobre los intereses altos.
• Se abolieron los controles sobre los flujos financieros.
• Se crearon niveles de desempleos masivos.
• Aplastaron huelgas (mineros del carbón).
• Se impuso una nueva legislación antisindical.
• Se cortaron los gastos sociales.
• Para las viviendas públicas (el impuesto sobre la vivienda por el número de
habitantes y no por metros cuadrados).
• Amplios programas de privatización en las diferentes ramas:
Industria Básica.
Acero.
Electricidad.
Petróleo.
Gas.
Agua.
Este paquete de medidas fue el más sistemático y ambicioso de todas las
experiencias neoliberales en los países del capitalismo desarrollado, fue quizás
también el más drástico en sus comienzos.
Recordar los slogans de M. Thatcher:
- ¨ Los peniques no caen del cielo, hay que sudarlos ¨
- ¨ Cada cual que se levante por sus propios pies ¨
En el resto de Europa los gobiernos de derecha en este periodo practicaron un
neoliberalismo más cauteloso, manteniendo el énfasis en la disciplina
presupuestaria y las reformas fiscales, pero sin cortes dramáticos en los gastos
sociales, ni enfrentamientos deliberados a los sindicatos, con los que se
trataba de mantener el estado de Bienestar General. Al mismo tiempo en algunos
países europeos, llegan al poder gobiernos de proyección social-demócrata:
Francia (F. Milterrand), España (Felipe González), Grecia (A. Papandreus),
Portugal (M. Soares) e Italia (B. Craxi), los cuales a pesar de sus críticas
precampañas al modelo neoliberal, se vieron obligados por los organismos
financieros internacionales a aplicar el neoliberalismo ejemplo:
Francia (En 1983 se vio obligada a:)
• Estabilidad Monetaria.
• Contención Presupuestaria.
• Concepciones Fiscales a los capitalistas.
• Abandono del pleno empleo (a fines de la década de los 80 el nivel de
desempleo era mayor que el de Inglaterra conservadora.)
España:
o Jamás se trató de aplicar una política Keynesiana o redistributiva.
o Firme política monetaria.
o Favorable al principio de la privatización.
o Desempleo 20% de población económicamente activa.
Mientras esto sucedía en Europa, en los Estados Unidos la prioridad Neoliberal
fue la competencia militar con la URSS, concedida como una estrategia para
quebrar la economía soviética y por esa vía, derrumbar el socialismo.
Reegan también:
- Redujo los impuestos a favor de los ricos.
- Elevo las tazas de interés.
- Aplasto al movimiento huelguístico: la única huelga seria de sugestión
(controladores aéreos).
Pero no respetó la disciplina presupuestaria al lanzarse a una carrera
armamentista sin precedentes, con enormes gastos militares (guerra de las
galaxias) que crearon un déficit público mucho mayor que cualquier otro
presidente norteamericano en la historia (Keynesianismo militar encubierto o
disfrazado).
El balance del programa neoliberal hasta mediados de la década del 90 radica en:
1- Prioridad más inmediata del neoliberalismo era detener la inflación de los
70.
Países de la organización período tasas de inflación
Del comercio y del desempleo 70-80 8,8% a 5,5%
2- La inflación ( tasa de ganancia ) aumenta de 5,4 puntos a 5,3
3- Derrota del movimiento sindical, expresada en la caída dramática del número
de huelga en los años 80 y la notable contención de los salarios (la tasa media
de desempleo se duplica que en los años 70 de un 4%).
El crecimiento de las tasas de desempleo es concebido como un mecanismo natural
y necesario de cualquiera economía de mercado eficiente.
4- El grado de desigualdad aumentó significativamente: los salarios más altos
cayeron en un 20%.
A mediados de los 80, mientras que los valores aumentaron a veces más
rápidamente que los salarios.
En todos estos aspectos el neoliberalismo tubo éxitos indudables, pero todas
estas medidas se habían tomado con un fin histórico, reanimar al capitalismo
mundial restableciendo tasas de crecimiento económico estable, como existían
antes de la crisis de los 70.
Sin embargo en este sentido no hubo ningún cambio significativo, pues la tasa
media de crecimiento económico es muy baja.
Esta contradicción se debe a que a pesar de que el neoliberalismo crea
condiciones favorables a favor del capital, la tasa de acumulación, o sea la
efectiva inversión del capital en el sector productivo, a penas creció en los
80.
En el conjunto de los países capitalistas desarrollados las cifras son:
1960-Incremento Anual 5,5%
1970-Incremento Anual 3,6%
1980-Incremento Anual 2,9%
Por cada dólar emanado de la producción, circulan entre 30 y 50 surgidos del
mercado financiero
¿Por qué ocurre esto?
Ello ocurre por que la desregulación financiera, que es propia del programa
neoliberal. La misma favoreció, sin proponérselo, condiciones mucho más
propicias para la inversión especulativa que la productiva. La desregulación
financiera es considerada un elemento clave en la política neoliberal, con esto
surgen los agentes económicos financieros. Hoy el capital financiero goza de una
autonomía bastante grande.
En los ochenta ocurre una explosión en los mercados cambiarios internacionales,
cuyas operaciones monetarias terminaron por reducir al mercado mundial de
mercancías reales (aumentar las inversiones en las bolsas de valores,
condicionada con el desarrollo de las ciencias, la tecnología y la informática).
El bienestar general no disminuyó mucho, a pesar de las medidas para contener
los gastos sociales, pues el Estado se vio obligado a derogar billones de
dólares por los conceptos:
*Aumento de los gastos sociales por el desempleo
*Aumento demográfico de los jubilados (gastos empresariales).
Para 1991 la economía y la situación general de los países europeos era
preocupante:
- La deuda pública alcanzó dimensiones alarmantes
- Endeudamiento privado y empresarial elevado
- Desocupación (treinta millones de personas)
En estas condiciones era lógico esperar una fuerte reacción contra el
neoliberalismo, pero por el contrario tuvo un nuevo respiro en algunos países
europeos (Alemania, Australia, Italia).
Varios factores confluyen en este rebote neoliberal:
1. Los procesos electorales de inicio de la década, con pérdidas de gobiernos
social-demócratas y con el triunfo de importantes fuerzas de derecha a favor del
programa neoliberal, entre los que se destacan:
*1991. Frente Unido de la derecha en Suecia
*1992. Victoria del primero de mayo en Gran Bretaña
*1993. Frente Unido en Francia (J. Cherek)
*1993. Frente Unido con Berlusconi, Italia
*1996. Frente Unido con Aznar en España
* Mantenimiento del Kohl en Alemania
2- El cambio de sistema producido en Europa del Este y la URSS en la confluencia
de las décadas de los 80 y los 90 tendió desde sus inicios hacia un capitalismo
neoliberal, inclusive en muchos aspectos más radical que el aplicado en
Occidente, caracterizado por.
- Deflación
- Desmantelamiento de los Servicios Públicos
- Privatizaciones
- Crecimiento del capital corrupto
- Polarización del capital
Se considera a los reformadores del Este como los neoliberales más
intransigentes.
El gran éxito del neoliberalismo no está en sus cuestionables éxitos económicos,
sino en haber convertido los mecanismos económicos en sistemas ideológicos.
Actualmente la competitividad ha dejado de ser un nuevo mecanismo económico para
convertirse en una ideología central.
Los 2 principios fundamentales de la política neoliberal son:
Neoliberalismo
-
Acción del mercado Capacidad del Empresario Limita la función del Estado como
agente económico
Eficiencia
En cuanto a las consecuencias económicas de las medidas neoliberales en las
últimas tres décadas podemos decir que sus efectos económicos son discutibles,
pero es claro que estas medidas socavan la democracia. Esencialmente, la hacen
imposible.
Esto fue entendido setenta años atrás por Keynes, quien señaló que “el
experimento de gobiernos democráticos es puesto en peligro por los mercados
financieros internacionales globales. Por lo tanto, el Sistema de Bretón Woods
diseñado por Keynes y el representante de Estados Unidos, Harry Dexter White,
después de la Segunda Guerra Mundial, se basaba en los siguientes principios:
1- Que los Estados pudieran introducir controles al movimiento internacional de
capitales, y
2- Que ellos pudieran establecer una muy minuciosa regulación del mercado
monetario, fijando la cotización de las monedas dentro de límites muy estrechos
a fin de impedir maniobras especulativas en contra de las mismas.
La primera de las medidas que desmanteló este sistema treinta años atrás fue la
liberación de los flujos financieros internacionales del capital. Y de este modo
se hizo presente, tal como estaba previsto, la amenaza que podía destruir los
experimentos democráticos. Mientras estas medidas se intensificaron e
incrementaron, redujeron las posibilidades de los gobiernos para adoptar
políticas ya que estas comenzaron a ser realmente determinadas cada vez más por
lo que es a veces denominado “el parlamento virtual de inversionistas y
prestamistas”. Ellos son quienes deciden qué políticas son aceptables y, si las
políticas adoptadas no son de su agrado, destruyen la moneda, socavan la
economía y demás.
En este sentido, otros elementos del programa neoliberal también tienen las
mismas consecuencias. Noam Chomsky señala que “las privatizaciones no tuvieron
justificación económica alguna. Sin embargo, hay una muy buena motivación
política: la privatización reduce la arena pública por definición y transfiere
decisiones de la arena pública a las manos de tiranías privadas que no rinden
cuentas ante nadie: las corporaciones no son otra cosa. Y esto, por definición,
quebrante las democracias. Ahora están negociando la privatización de los
servicios. Si llegara a materializarse, llevarían la arena pública a
virtualmente nada. La reducirían tan drásticamente que la democracia formal
podría ser tolerable. De hecho, ha sido introducida en América Latina sin mayor
preocupación por los efectos que pudiera tener.
Si atendemos a la situación mundial después de la derrota del fascismo, en 1945,
el escenario internacional se polarizaba entre el capitalismo y el socialismo.
Cabe distinguir, sin embargo, que mientras en Oriente los soviéticos utilizaban
los términos según la dupla mencionada, en la contraparte occidental, en cambio,
los conceptos oficiales del enfrentamiento eran completamente distintos. En
Occidente, la Guerra Fría fue presentada como una batalla entre la democracia y
el totalitarismo. El bloque occidental no utilizaba el término “capitalismo”
para autoreferenciarse, ya que este era considerado básicamente un concepto del
enemigo, un arma contra el sistema en lugar de una descripción del mismo.
Occidente se expresaba en nombre del “Mundo Libre” y no del “Mundo Capitalista”.
Perry Anderson manifiesta que en este sentido, el fin de la Guerra Fría produjo
que, por primera vez en la historia, el capitalismo comenzara a proclamarse como
lo que era, una ideología que anunciaba la llegada de un punto final del
desarrollo social construido sobre los supuestos del libre mercado más allá del
cual resultaba imposible pensar mejoras sustanciales. Francis Fukuyama dio la
expresión teórica más amplia y ambiciosa de esta visión del mundo en su libro El
Fin de la Historia. Pero en otras expresiones más vagas y populares también se
difundió el mismo mensaje: el capitalismo es el destino universal y permanente
de la humanidad. No hay nada fuera de este destino pleno.
Este es el núcleo del neoliberalismo en tanto doctrina económica todavía
masivamente dominante a nivel de los gobiernos en todo el mundo. Esta jactancia
fanfarrona de un capitalismo desregulado, como el mejor de todos los mundos
posibles, es una novedad del sistema hegemónico mundial actual. Ni siquiera en
los tiempos victorianos se proclamaba tan clamorosamente las virtudes y
necesidades del reino del capital. Las raíces de este cambio histórico son
claras: es un producto de la victoria cabal de Occidente en la Guerra Fría. No
sólo la derrota sino más bien de la desaparición total de su adversario
soviético, y de la consiguiente embriaguez de las clases poseedoras, que ahora
no necesitaban más eufemismos o circunlocuciones para disfrazar la naturaleza de
su dominio.
De ahí que los movimientos sociales hayan concentrado sus esfuerzos de
resistencia a las políticas neoliberales y al imperialismo en el sector
neoliberal del frente enemigo, es decir, esencialmente en la agenda económica de
la potencia hegemónica y sus aliados en los países ricos. Aquí, correctamente,
los blancos centrales han sido el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la
Organización Mundial del Comercio (OMC).
En esta batalla de ideas, la noción de mercados libres o sistemas de intercambio
de las mercancías, del trabajo, y del capital puro y autónomo, sin
interferencias políticas u otras, ha sido cada vez más claramente expuesta con
una mitificación. Todos los mercados, en todos los tiempos, son construidos y
regulados políticamente: la única cuestión pertinente es qué tipo de política
los moldea y determina. El neoliberalismo busca imponer su Gran Transformación
(para usar la fórmula acuñada por Kart Polanyi).
Como su predecesor, el estado victoriano, este proyecto a escala mundial
comporta la imposición de reglas de comercio que favorecen los intereses de los
Estados y corporaciones metropolitanos en detrimento de los intereses de los
países periféricos. El proteccionismo se vuelve un privilegio reservado al
Norte, mientras que en el Sur es visto como una infracción a las leyes
fundamentales de toda economía sana. Comparada con estas hipocresías, la noción
medieval de un precio justo podría parecer un modelo de ilustración.
Bibliografía:
-Anderson Perry: “Balance del Neoliberalismos. Lecciones para la izquierda”
“El Neoliberalismo y sus consecuencias económico-política y sociales.
- Borón, A. (2003): Nueva Hegemonía Mundial. Alternativas de cambio y
movimientos sociales. Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO).
Buenos Aires.
- Boron A. y otros. (2003). La trama del neoliberalismo. Editorial Ciencias
Sociales. La Habana. Cuba.
- Martínez, Osvaldo. “Neoliberalismo y crisis en América Latina. La cultura esta
en el centro de las Economía. Política moderna”
“La Globalización en la Economía-Mundial: la realidad y el mito. Cuba Socialista
# 2 3era Época.- 1996
Los procesos de integración frente a la crisis neoliberal
Debate. En Cuba Socialista # 14 3 era época 1999.
Pulsando aquí puede solicitar que
le enviemos el
Informe Completo en CD-ROM |
Los EVEntos están organizados por el grupo eumed●net de la Universidad de Málaga con el fin de fomentar la crítica de la ciencia económica y la participación creativa más abierta de académicos de España y Latinoamérica.
La organización de estos EVEntos no tiene fines de lucro. Los beneficios (si los hubiere) se destinarán al mantenimiento y desarrollo del sitio web EMVI.
Ver también Cómo colaborar con este sitio web