Retribución económica que corresponde a un empleo.
Antiguamente se llamaba 'gaje' al sueldo o estipendio que pagaba un príncipe a los servidores de su casa o a los soldados.
Actualmente se utiliza en plural en expresiones tales como "gajes del oficio" o "gajes del empleo" para referirse, no a los beneficios y emolumentos, sino a las molestias o perjuicios que ocasionalmente produce un empleo u ocupación.