Revista académica de economía
con
el Número Internacional Normalizado de
Publicaciones Seriadas ISSN
1696-8352
Ricardo Tito Atahuichi Salvatierra (CV)
ricardotito39@hotmail.com
El deseo de progreso de la humanidad permite encontrar los medios inverosímiles y sorprendentes para avanzar en la lucha contra toda forma de dominio, abuso, explotación y atraso impuesta por las clases opresoras.
Los pueblos y movimientos sociales conforme a las experiencias que realizan, para la solución de sus problemas inmediatos, elevan el grado de confianza en su fuerza, capacidad y conciencia social a través de su participación y movilización directa. Situación que les permite objetividad para avanzar, en el proceso de su liberación, a pesar de los errores que pudiesen cometer, de los que aprehenden lecciones de trascendencia particular, que les prepara y organiza para encarar movilizaciones posteriores posibilitando así la generalización y aplicación de esas experiencias en nuevos procesos que permite, a los pueblos, dar saltos históricos de trascendencia a efectos de alcanzar nuevas conquistas para el bien de la humanidad y su progreso. Por Ej. la experiencia del pueblo francés, en la Comuna de Paris, fue tomada por los bolcheviques con el objeto de preparar y organizar la revolución de 1917.
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:
Atahuichi Salvatierra, R.T. “Asamblea Constituyente y la experiencia venezolana" en Observatorio de la Economía Latinoamericana, Nº 72, 2006. Texto completo en http://www.eumed.net/cursecon/ecolat/bo/
La época de la inteligencia y la razón en la que vivimos, la conciencia social alcanzada por la humanidad, el desarrollo de la revolución socialista mundial, la cibernética, ciencia y la tecnología permite que los pueblos efectivicen, a través de su participación directa y presión social permanente, nuevos éxitos en los procesos de liberación nacional y cambio social, que se proponen, de manera que hoy es posible incluso, lo que ayer parecía una quimera descabellada (Salvador Allende en Chile), tomar el poder en forma democrática sin necesidad de recurrir a la revolución violenta (caso venezolano).
La experiencia del proceso nacionalista revolucionario de la Republica Bolivariana de Venezuela muestra la iniciativa y capacidad creadora de un pueblo que con su voluntad, acción y participación directa ha logrado tomar el poder en forma democrática, por medio de una Asamblea Constituyente Originaria ( 1999 ), a la cabeza de un Militar (Hugo Chávez) que conduce un proceso nacionalista revolucionario socializante.
En esta etapa de la historia el ascenso de la revolución socialista mundial se expresa y manifiesta en forma concentrada, desigual y combinada, en centros imprevisibles como es el caso de Venezuela donde Chávez, actual Presidente de la Republica Bolivariana, luego de haber ganado las elecciones generales de 1998, superado el fracasado golpe de Estado, en su contra, digitado por el imperialismo norteamericano, por medio de una Asamblea Constituyente, a la que convocó (1999), toma el poder por la vía democrática e impulsa el proceso de la revolución mundial.
Chávez gracias a su movimiento y al proceso de radicalización del pueblo ganó 125 escaños del total de 131 significando su representación , mas del 95% de constituyentes que conformaron la Asamblea Nacional Constituyente que aprobó la nueva Constitución y refundó el Estado dando origen a la Republica Bolivariana de Venezuela por el carácter originario que tuvo ese evento. La representación mayoritaria de constituyentes ganada por Chávez (95%) le significo la toma del poder por que al ser la Constituyente Originaria esta decidió, haciendo uso de su poder ilimitado y su naturaleza política , la organización, funcionamiento y estructura de un nuevo Estado. Hoy, el gobierno de Chávez, que gano la confianza del pueblo venezolano impulsa medidas antiimperialistas y va constituyendo un Estado revolucionario en el que la propiedad estatizada es la base del sustento de la economía nacional.
La dirección del MAS debe estudiar esa experiencia y considerar que su representación en la Constituyente solo alcanza al 52,9 % (135 de 255 escaños) situación que define a la Constituyente como derivada. Forzarla a que cumpla una función originaria es una ingenuidad política. El gobierno al infringir el candado constitucional de los 2/3, de la ideología liberal, esta creando las condiciones necesarias para que la oligarquía y la oposición hagan posible la desmembración del Estado nacional.