Revista académica de economía
con
el Número Internacional Normalizado de
Publicaciones Seriadas ISSN
1696-8352
LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES Y EL INDIGENISMO
Ricardo Tito Atahuichi Salvatierra (CV)
ricardotito39@hotmail.com
Entre las conquistas de la humanidad, la más grande y plena, es el grado del
pensamiento adquirido; no son las obras materiales, que constituyen los
pensamientos hechos realidad, sino las ideas y los conocimientos que conforman
la conciencia social alcanzada por el hombre en la historia.
Las ideas y los conocimientos son el resumen de las relaciones sociales, políticas, económicas y científicas que el hombre acumula en cada etapa de la historia (comunismo primitivo, esclavismo, feudalismo, capitalismo y “socialismo”; y si responden a sus necesidades e intereses no perecen y son aplicados oportunamente.
En la etapa de la inteligencia y la razón, en la que vivimos, el ser humano
busca, estudia, aplica y generaliza conocimientos, ideas y experiencias
anteriores y nuevas para avanzar en su lucha por vencer toda forma de opresión,
atraso, pobreza y liberarse de su sometimiento a la economía, que produjo una
sociedad, emergente de un modo de producción de apropiación individual del
producto del trabajo social, que dio origen a la propiedad privada y con ella a
las clases sociales que se encuentran en irreconciliable lucha de intereses
razón porque busca liberarse de ese sometimiento, que lo hizo acuciado por la
necesidad de sobrevivir, utilizando experiencias, conocimientos, ciencia, ideas
liberales, marxistas, etc. tratando de establecer otra forma de organización y
sistema social armonioso y justo, que garantice la plenitud de la democracia, la
libertad, la igualdad y la fraternidad.
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:
Tito Atahuichi Salvatierra, R. “Las reformas constitucionales y el indigenismo" en Observatorio de la Economía Latinoamericana, Nº 117, julio 2009. Texto completo en http://www.eumed.net/cursecon/ecolat/bo/
costumbres, hábitos y tradiciones practicadas por las etnias y parte de la población nacional (challas, koas, etc.) que son estimuladas en su conservación por indigenistas e indianistas y para preservar el sistema social, por organismos ligados al FMI, BID, BM (ONGs), las transnacionales, la burguesía y los partidos neoliberales porque les sirve, junto al atraso y la pobreza, de apoyo para tratar de sustituir y dividir el Estado revolucionario y la patria con el fin de conformar el Estado neoliberal compuesto por pequeños “Estados étnicos” (36) y el Estado oriental constituido por la “nación camba” que el gobierno favorece con su política indigenista.
Pretensión que fue alcanzada, ante el fracaso de la Asamblea Constituyente, en parte, al dividir la Nación boliviana en 36 “naciones étnicas” contenidas en el Estado “Plurinacional”, por medio de la “Nueva Constitución” aprobada por la voluntad concertada de los partidos, con representación (MAS – IPSP, Podemos y otros.) en el Congreso, y no de los constituyentes ni del soberano que rechazó la propuesta gubernamental, de crear un nuevo Estado y aprobar una Nueva Constitución al no respaldar con el voto, a los representantes del gobierno a la Constituyente razón porque obtuvo una representación del 53% y no la del 67% del total de 255 constituyentes, que conformaban los 2/3 necesarios establecidos por el derecho liberal, para que la asamblea Constituyente al ser Originaria hubiese poseído el poder soberano para crear un nuevo Estado y aprobar una Constitución por decisión del pueblo.
El soberano no respaldo la creación del “Estado Plurinacional” y la “nueva Constitución” porque no reflejaba su voluntad y la Constituyente, porque el Estado revolucionario fue el resultado de su insurgencia (1952) que la burguesía no pudo destruir no obstante que, como clase social tomo el poder en 1985 y aplicó la política neoliberal (DS 21060), aun vigente, resistida y repudiada al retomar el año 2003, la política económica nacionalista revolucionaria establecida en la Agenda de Octubre dirigida a desarrollar la industria y diversificar la economía con el uso de nuestros recursos naturales (gas, petróleo), abrogar el D S 21060 y nacionalizar los hidrocarburos.