Revista académica de economía
con
el Número Internacional Normalizado de
Publicaciones Seriadas ISSN
1696-8352
EL PROYECTO DE CONSTITUCIÓN Y LA CLASE PROLETARIA
Ricardo Tito Atahuichi Salvatierra (CV)
ricardotito39@hotmail.com
La interacción social permanente y la naturaleza gregaria del hombre, en su relación con el medio geográfico, social, político, cultural y el modo de producción le permitió, alcanzar formas de organización social expresadas en la horda, gens, fratría, clan, tribu, etc., hasta llegar a la sociedad clasista contemporánea constituida por una superestructura política, jurídica y social y una estructura económica definida por el modo de producción capitalista.
Al inventar los instrumentos de producción, descubrir el fuego, la agricultura y la domesticación de los animales el hombre, dio origen a la propiedad privada y con ella a la existencia de las clases sociales y a la transición de la sociedad colectivista o del "comunismo primitivo" a la sociedad clasista conformada por los sistemas sociales del esclavismo, feudalismo, capitalismo y el “socialismo” resultantes de los cambios que se dieron en el modo de producción en los distintos periodos del desarrollo de la sociedad.
Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:
Tito Atahuichi Salvatierra, R.: “El proyecto de constitución y la clase proletaria" en Observatorio de la Economía Latinoamericana, Nº 101, agosto 2008. Texto completo en http://www.eumed.net/cursecon/ecolat/bo/
El proletariado como clase social tiene su origen en la revolución industrial inglesa (1765); su fortaleza se asienta en la diversificación económica y el desarrollo industrial capitalista; es propia de la época moderna; sus centros de aglutinamiento son las fabricas y otras organizaciones de producción agraria, minera, ganadera, textil, etc.; se encuentra organizado en sindicatos que nacieron originalmente por el desenvolvimiento de la lucha de clases y la necesidad de la defensa de sus intereses; no tiene una calidad particular, sino que por su función en la economía y en la sociedad, para él liberarse, tiene que liberar a toda la humanidad.
En Bolivia se fue estructurando a partir del año 1900 (gobiernos liberales) y se vigorizó con el desarrollo del capitalismo particularmente en las minas y las fabricas textiles; su relación directa con la producción y la generación de la riqueza le permite una objetividad política correcta que establece su participación por medio de sus sindicatos; constituye la vanguardia del pueblo trabajador y de todos los sectores oprimidos, marginados, excluidos y pobres de la sociedad nacional.
En 1937, Junto a los gobiernos socialistas de David Toro y German Busch, apuntaló y efectivizó la nacionalización del petróleo y la fundación de Yacimientos Petrolíferos (YPFB); en 1952 encabezó la insurgencia revolucionaria nacional, por medio de la Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia (FSTMB), que definió el cambio del modo de producción y la estructura y superestructura feudal por la del capitalismo e impuso la constitución del Estado revolucionario, sustentado por empresas estatales ( YPFB, ENFE, ENDE, COMIBOL, etc.), buscando el desarrollo industrial y la diversificación económica, como hoy también lo hace luchando por la aplicación de la Agenda de Octubre y la abrogación del DS 21060, con el objeto de consolidar la soberanía del Estado y vencer el atraso y la pobreza.
En el Proyecto de Constitución, al proponerse el Estado plurinacional, se ignora la función del proletariado y la naturaleza clasista del capitalismo que asimiló a las etnias a su modo de producción de manera que hoy forman parte del proletariado y de las clases sociales de la Nación boliviana.