Ricardo Tito Atahuichi Salvatierra (CV)
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En 1825, declarada la independencia por medio  de  una Constituyente Originaria , nace  un tipo de Estado capitalista denominado República. Iniciándose con ella la  etapa  de la conformación de la nación  boliviana, sobre la base  de la Constitución Bolivariana y  mas  de  30 pueblos aborígenes que hoy  constituyen  lo  que  se denomina  “nacionalidades” entre  las  que  destacan los quechuas,  aymaras tupi guaraníes, ayoreos, etc..

Al crearse la  República , la sociedad  feudal altoperuana adquirió una forma de organización política  que partió de una concepción naturalista  del Estado y el derecho cuya  base  es  la  soberanía y  el  sentido  de la  unidad  nacional. Estado que  se  estructuró asentado  en  principios   doctrinales constitucionales que son: la igualdad  de  los hombres ante la ley, el respeto a la  libertad, el  derecho de las personas a la propiedad, etc..

Para citar este artículo puede utilizar el siguiente formato:

Atahuichi Salvatierra, R.T. “La Asamblea Constituyente y las Nacionalidades" en Observatorio de la Economía Latinoamericana, Nº 77, 2007. Texto completo en http://www.eumed.net/cursecon/ecolat/bo/

Bolívar a través  de  su gobierno desarrolló una política  liberal, con el fin   de  fortalecer el Estado naciente, cuyos  objetivos fueron: organizar y  consolidar el Estado Republicano  y  constituir  una  burguesía nacional fuerte que produzca el cambio del modo de producción feudal por el capitalista, a efectos de lograr la unidad nacional y conformar la nación boliviana. Para cuyo fin estableció  soluciones  a los problemas de la sociedad  feudal,  con disposiciones legales  concretas. Por Ej. Con el decreto de 29 de Agosto (1825)  declaró a todos los hombres  iguales ante  la ley y puso en vigencia los  decretos expedidos en Trujillo, Pucara y el Cusco que abolían el trabajo  gratuito y la  servidumbre, la minoridad  legal  de los nativos y convertía  a los colonos  en obreros agrícolas fijándoles un salario mínimo obligatorio extensivo a los  trabajadores  de  las  minas  y  los  obrajes, y  con los del 13 y 22 de Diciembre de 1825 estableció  los fundamentos para crear posteriormente el  Ejercito profesional y los impuestos. Objetivos que se lograron  parcialmente con la revolución  de    1952 (abolición del trabajo y la servidumbre gratuita, etc.) a consecuencia del débil desarrollo capitalista,  la monoproducción y  exportación de los recursos naturales como materias primas evitando la industrialización y diversificación económica que sirven de  base para resolver el problema de la incorporación de las  minorías nacionales y el de las “nacionalidades”  a la vida nacional.

Los  representantes  a la Constituyente y el MAS tienen que comprender: qué la nación y el problema  de las  nacionalidades  es propio de la época moderna, emergente  del desarrollo del capitalismo  y su constitución como sistema social; que con su política dirigida a exacerbar el  problema  de las “nacionalidades”, el cambio de los símbolos nacionales o el de la sede de gobierno a Sucre, etc.,  están alentando el  regionalismo y  creando   condiciones   para el  separatismo que engendra el peligro  de la  división del Estado al igual que  las oligarquías que propugnan la “nación camba”. Cuando  es necesario constituir una nación sólida que integre a todos los sectores sociales por medio de una democracia participativa, que se exprese en  una autonomía regional y provincial,  que posibilite la  democratización plena y  elimine los privilegios  sin excepción, al igual que  las limitaciones al ejercicio de los derechos de las minorías nacionales. Por Ej. incorporando en la Constitución garantías que permitan: que las autoridades de  jerarquía nacional, departamental, etc. sean nombradas por elección directa de los pueblos con     revocatoria de mandato; la   incorporación de cabildos  abiertos  como órganos  de  discusión y  solución de problemas que efectivicen la participación de la población en general.

Las reformas sugeridas y la aplicación de una política que incentive la industrialización de los  recursos naturales, la diversificación  económica, etc.  posibilitará la conformación de  un  Estado soberano que  desarrollará  el “carácter nacional”  que  se  halla  en  un proceso de formación débil a consecuencia de  la monoproducción y la función antipatria, particularmente, de los últimos gobiernos que  aplicaron  la política neoliberal  atentando, incluido el  gobierno actual,  contra la voluntad del pueblo que busca constituir una nación  soberana y libre de toda forma de  dominio.