CIENTÍFICO - TEÓRICO - ESTADÍSTICO - COMERCIAL JURÍDICO - SOCIOLÓGICO
RECOPILADO POR EL PROFESOR MANUEL SERRA MORET
M
MÜLLER, Adam Heinrich
Filósofo social y político alemán (1779-1829). Se mostró siempre en oposición con las doctrinas individualistas y racionalistas de la llamada escuela clásica iniciada con Adam Smith. Su objetivo era "espiritualizar" la economía política. Según Müller, el principio esencial en que se funda la moneda, no tiene nada que ver con su valor físico, sino en la función espiritual que se la asigna como medio de intercambio y como medida de valor de las obras y objetos que han adquirido utilidad social. El capital simboliza el sentimiento creador y el trabajo de nuestros antepasados y la base de las realizaciones futuras. Entre otras obras, es autor de Die Lehre vom Gegensatze (1804); Elemente der Staatskunst (3 vols. 1810), y Versuche einer neuen Theorie des Geldes (1816).
MÜLLER-LYER, Franz Carl
Psicólogo y sociólogo alemán (1857-1916). En materia económica, sentó la teoría de que las herencias y transmisiones de propiedad entre los miembros de una familia o de una misma estirpe eran ia causa primordial de las grandes diferencias de clase. Calificaba de "anarquía de la producción" a la existencia de unidades individuales económicas en concurrencia. Se_n él, las crisis periódicas son debidas al I¡ubconsumo y a los bajos salarios. Abogaba por el establecimiento de un sistema centralizado de producción y de distribución con objeto de poner en equilibrio a la producción y al consumo. Sus libros se hicieron populares y consiguieron repetidas ediciones. Entre ellos se destacan Der Sinn des Lebens una die Wissenschalt (1910); Die Familie. (1912); Phasen .der Liebe (1913), y Die Ziihmung der Normen, Soziologie der Leiden (1914).
Economista inglés (1571-1641). Fué el máximo exponente de las doctrinas mercantilistas en el mundo británico. Comerciante acaudalado y director de la East. India Company, para defender la legitimidad de este monopolio comercial entre Inglaterra y Oriente, escribió dos libros que hicieron época: A Discourse of Trade, from England into the East Indies (1621) y England's Treasure by Forraign Trade, or, the Balance of our Forraign Trade in the Rule of our Treasure (1630). En ellos rompió con la tradicionales teorías dineristas o bullicionist y combatió las doctrinas de Malynes con respecto a los males que reportaban a Inglaterra las pretendidas manipulaciones de los agentes privados de cambio. En su segundo libro aparece, aunque. en forma embrionaria, la teoría cuantitativa de la moneda, así como los gérmenes de una teoría del valor, lo mismo que muy atinadas consideraciones relativas a las finanzas públicas.
MUTUALISMO
La ayuda mutua, en forma inorgánica, se ha practicado desde la infancia de la humanidad. Es digno de leerse un libro que con este título publicó el famoso escritor ruso Kropotkine en el que estudia las múltiples formas de ayuda mutua que vienen practicando los animales de la selva probablemente desde la era cenozoica. Los gremios de la Edad Media comenzaron a establecer reglas de mutualismo que cristalizaron más tarde en las sociedades mutuas actuales que tienen ya una tradición superior a dos siglos. Nacidas como una evolución progresista del ahorro, se desarrollaron con suma rapidez, especialmente en Francia, Alemania, Inglaterra, Italia y norte de España; En 1923, la población voluntariamente asegurada contra los riesgos de enfermedad representaba el 57 por ciento en Dinamarca, el 14 por ciento en Bélgica y en Cataluña, el 12 por ciento en Suecia y en Francia, y el 7 por ciento en Italia.
Los países americanos del Sur comenzaron a crear entidades mutualistas a mediados del siglo pasado con normas que provenían casi exclusivamente de Francia. Estas entidades se crearon simultáneamente en Chile, Argentina y Uruguay. La primera institución argentina de esta naturaleza es de 1832 y la más antigua de las existentes es la Tipográfica Bonaerense, fundada en 1857. Actualmente existen 211 sociedades de este tipo en la Capital Federal, siendo las más potentes las de las colonias extranjeras, algunas de las cuales cuentan con capitales importantes. Siguiendo el ejemplo de las instituciones similares europeas, estas sociedades cuentan con todos los servicios médicos, con importantes nosocomios y con todos los medios de la ciencia para atender a sus asociados. Por lo general, las cuotas de los asociados cubren el socorro por enfermedad y accidente; maternidad, invalidez y vejez; fallecimiento, y algunas, desocupación. En Gran Bretaña es muy común el seguro por subsidio de enterramiento.
Aprovechando la existencia de las mutualidades, Alemania implantó el seguro obligatorio contra enfermedades en 1883; Austria en 1888; Hungría en 1891; Luxemburgo en 1901; Noruega en 1909. Servía en 1910; Gran Bretaña en 1911; Rusia y Rumania en 1912: Bulgaria en 1918; Checoslovaquia y Portugal en 1919; Polonia en 1920; Japón y Grecia en 1922; Chile en 1924; Lituania en 1925 y Francia en 1930. La Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas lo tiene establecido con carácter general desde 1923.