El presente trabajo se realizó en las instalaciones de la Escuela Preparatoria Melchor Ocampo, de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo; teniendo en cuenta que los tutores poseen diferentes características para desempeñarse.
La tutoría que se aplica en el nivel superior en México, particularmente en las universidades públicas, está alcanzando niveles de consolidación que permiten augurar procesos de institucionalización creciente para, progresivamente, incorporar la actividad de tutoría como una función sustantiva.
El esfuerzo que se haga para reforzar la tutoría en la construcción del Sistema Nacional de Bachillerato (SNB), debe ser visto como una inversión indispensable que evitará otros costos. El fracaso escolar o la toma de decisiones equivocadas por la falta de apoyo en el momento oportuno pueden ser evitados mediante una tutoría, a la que se asigne un lugar preponderante en el quehacer escolar. (SNB, 2010)
La posibilidad de disminuir la reprobación, rezago, deserción y mejorar la eficiencia terminal en la Educación Media Superior, está ligada a la calidad con la que se preste el servicio de tutoría.
Por lo que la tutoría es considerada como un método de enseñanza, por medio del cual un estudiante o un grupo de estudiantes reciben educación personalizada e individualizada de parte de un profesor. (ANUIES, 2000).
Para conocer el quehacer del tutor, se aplicó un cuestionario a un total de 27 tutorados (87%), existiendo muerte estadística 4 (13%); con la finalidad de valorar el quehacer del tutor en cuanto a conocimientos, habilidades, actitudes y valores.
Palabras Claves: Diagnóstico, características del tutor, tutorados, deserción, reprobación, eficiencia terminal.
La tutoría que se aplica en el nivel superior en México, particularmente en las universidades públicas, está alcanzando niveles de consolidación que permiten augurar procesos de institucionalización creciente para, progresivamente, incorporar la actividad de tutoría como una función sustantiva. La Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) no escapa a esta perspectiva, ya que su Programa Institucional de Tutoría es reconocido por la comunidad como una actividad propia de la vida universitaria, y varias de las dependencias universitarias cuentan con cuerpos de tutoría formalmente instaurados por los respectivos Consejos Técnicos.
La Educación Media Superior (EMS) reconoce cada vez la necesidad de contar con la figura del tutor a lo largo de los estudios que se cursan en ese nivel educativo. Con la implantación del Marco Curricular Común (MCC), esta figura se vuelve aún más relevante de lo que ya lo era en el pasado. Para entender la mayor importancia que la figura del tutor adquiere, es necesario conocer el quehacer del tutor en la Escuela Preparatoria Melchor Ocampo, con la finalidad de abatir los índices de reprobación, rezago escolar, disminuir las tasas de abandono de los estudios y mejorar la eficiencia terminal.
El esfuerzo que se haga para reforzar la tutoría en la construcción del Sistema Nacional de Bachillerato (SNB) debe ser visto como una inversión indispensable que evitará otros costos. En este escenario, la atención personalizada del estudiante constituye, sin lugar a dudas, un recurso de gran valor, ya que al visualizar al alumno como el actor central del proceso formativo, además de propiciar el logro de los objetivos indicados, contribuye a la adaptación del estudiante al ambiente escolar y al fortalecimiento de sus habilidades de estudio y de trabajo.
Por tal motivo, se hace necesario elaborar este trabajo de investigación diagnóstica titulado: El Quehacer del Tutor en la Escuela Preparatoria Melchor Ocampo de la U.M.S.N.H.
Existen diversas formas de entender el concepto de tutor. Sin embargo y considerando sus orígenes uno se puede preguntar hasta qué punto el concepto de tutoría se ha independizado de otros como orientación, asesoría o guía; por lo tanto definir tutoría en el aprendizaje resulta complicado y no se debe exclusivamente a su procedencia, sino también a la función misma que desempeña y como se relaciona con otras prácticas educativas, resulta difícil establecer fronteras claras entre algunas de estas prácticas como por ejemplo, dentro de un programa de actualización en alguna institución, es habitual que a un mismo tiempo se desarrollen tareas de formación y orientación y que también tenga a su cargo una inspección y que, incluso algunos profesores actúen como tutores. Es frecuente que se produzca un doblamiento de funciones.
Si a lo anterior agregamos la influencia que han ejercido y ejercen enfoques y estrategias de tutoría originadas en otro campo profesional como la psicología social y como su influencia se ha dejado sentir en la educación, se podrá entender que lo difícil no es definir la labor del tutor en sentido estricto, sino que lo verdaderamente complejo es examinar en profundidad las implicaciones que, en el ámbito del aprendizaje, tienen las, aparentemente bien delimitadas características de realizar la tutoría.
Algunas definiciones dadas a la tutoría son las siguientes:
“La tutoría es un método de enseñanza por medio del cual un estudiante o un grupo de estudiantes reciben educación personalizada e individualizada de parte de un profesor. Consiste en la orientación sistemática que proporciona un profesor para apoyar el avance académico de un estudiante conforme a sus necesidades y requerimientos particulares”. (ANUIES, 2000)
“Es la persona que, a través de la enseñanza, ayuda al alumno o alumna, a optimizar sus capacidades y formar su personalidad, mediante el descubrimiento de la realidad y la cultura, de tal forma que pueda vivir satisfactoriamente. Se fundamenta en cuatro elementos claves: a) ayuda, b) proceso de enseñanza-aprendizaje, c) formar personas, d) vivir satisfactoriamente.” (Lázaro y Asensi, 1987)
“La tutoría procura mejoras en desempeño académico, la solución de problemas escolares y el desarrollo de hábitos de estudio, trabajo, reflexión y convivencia social y ciudadana, sin perder de vista que el alumno es el principal responsable de su crecimiento y desarrollo personal”. (Moreno, 2003)
En estas reflexiones que se han hecho sobre la tutoría, se observa a través de los diferentes conceptos que se han mencionado una gran complejidad y problemáticas muy particulares de cada paradigma. Sin embargo, la aparición de nuevos paradigmas, de nuevos modos de entender y conceptualizar la realidad de la tutoría, de nuevos problemas de investigación y de nuevas formas metodológicas de encararlos, no suponen la desaparición de los anteriores, como dice Erickson, los viejos paradigmas subsisten aunque sea con marcapasos.
El modo actual de llevar a cabo la tutoría impone sus propias normas y valores a la decisión de cuál debe ser la forma de realizar la tutoría. Se utiliza al funcionamiento de la realidad de la enseñanza como fuente de normatividad, bien deduciendo y componiendo una práctica directamente extraída de las prácticas ya existentes, bien entendiendo que la explicación del funcionamiento de la realidad con la que nos encontramos marca el extremo de lo posible. Pero, pensar que en los fenómenos sociales los límites de lo posible, vienen fijados por el actual funcionamiento de lo real, es ignorar la historia y la dinámica del cambio social.
En general, la investigación sobre la tutoría ha olvidado las determinaciones sociales de la misma, sus condiciones materiales de existencia, sus relaciones económicas, ideológicas y políticas. Esto la hace parecer una práctica neutral, técnica y programable.
La deserción, reprobación, rezago y el bajo índice de eficiencia terminal, son los problemas alarmantes de nuestra dependencia. Por tanto se hace necesario conocer el quehacer del tutor, que es motivo central del presente trabajo, y se formula la siguiente pregunta:
Conceptualizando la palabra diagnóstico encontramos en el diccionario de la Real Academia Española, el siguiente texto: “Diagnóstico es el conjunto de signos que sirven para fijar el carácter peculiar de una enfermedad”, como se puede apreciar el término se asocia a una preocupación médica de querer explicar un padecimiento en el cuerpo humano; en la actualidad el diagnóstico ya se ha llevado a diferentes esferas del conocimiento aplicándose en las disciplinas una infinidad de instrumentos que caracterizan a éste término.
Una definición más amplia, pero apoyada a lo que es planificación es: “caracterización de los hechos sociales y económicos que determinan la realidad sobre la cual se pretende planificar. La diagnosis es por ello fase vital de las técnicas de planeación y planificación… En el diagnóstico se evalúa tendencias y situaciones, se explican hechos, se establecen las asociaciones de causalidad comprometidas y se dilucidan los problemas que atañen a una actividad dada. En sus aspectos más globales el diagnóstico proporciona las pautas y orientaciones generales, que incluyen los principales puntos de la estrategia a largo plazo destinada a materializar los objetivos últimos de planificación. (Calixto, 2009: 30)
Existen diversos tipos de diagnóstico que se utilizan en las instituciones educativas, como son: institucional, pedagógico, curricular, competencias, organizacional, administrativo y ambiental.
Por tanto, el diagnóstico utilizado en este trabajo es el Diagnóstico Pedagógico, el cual estudia de manera integral los diferentes aspectos de la práctica docente, reconociendo las relaciones que se establecen entre todos los elementos y agentes que intervienen en la situación investigada: profesores, alumnos, padres y autoridades educativas. (Ibídem: 67)
Se requiere tener el conocimiento actual de cuál es el quehacer del tutor, para el desarrollo de este reporte de investigación diagnóstica, con la finalidad de contribuir a abatir los problemas de deserción y reprobación, con lo que se podrá elevar la eficiencia terminal de la dependencia.
La Escuela Preparatoria Melchor Ocampo, es una Escuela de Educación Media Superior, que pertenece a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, institución autónoma y pública, la cual cuenta con una población estudiantil de más de cincuenta mil alumnos, siendo una de las más grandes del país.
La Universidad antes mencionada es la más antigua y de las más representativas de México. Desde su fundación se sustenta en los principios humanistas con los que Don Vasco de Quiroga, la fundó.
Existe un total de 31 tutorados y 9 tutores en la dependencia. Se aplicó un cuestionario a un total de 27 tutorados (87%), existiendo muerte estadística 4 (13%).
El cuestionario está integrado por 19 preguntas cerradas, la última abierta, además, tiene cinco alternativas de respuesta (totalmente de acuerdo, de acuerdo, más o menos de acuerdo, en desacuerdo y totalmente en desacuerdo). Asimismo, dicho cuestionario fue elaborado por la Asociación de Universidades e Instituciones de Educación Superior.
Una vez que se aplicó el cuestionario, se presentan los resultados obtenidos en los siguientes gráficos.
La pregunta es: Muestra el tutor buena disposición para atenderte como tutorado. Los Resultados: totalmente de acuerdo 81.5 %, y de acuerdo 18.5 %.
La pregunta es: La cordialidad y capacidad del tutor, lograr crear un clima de confianza para que puedas exponer tus problemas.
Resultados: Totalmente de acuerdo 14.8%, y de acuerdo el 14.8%.
La pregunta es: Te trata el tutor con respecto y atención.
Resultados: Totalmente de acuerdo 96.3%, y de acuerdo 3.7 %.
La pregunta es: Muestra el tutor interés por tus problemas académicos y personales, que afectan tu rendimiento como estudiante.
Resultados: totalmente de acuerdo 81.5%, y de acuerdo 18.5%.
La pregunta es: Muestra el tutor capacidad para escuchar tus problemas.
Resultados: Totalmente de acuerdo 22.2%, y de acuerdo 77.8%.
La pregunta es: muestra el tutor disposición para mantener una comunicación permanente contigo.
Resultados: totalmente de acuerdo 63%; 33.3% de acuerdo; y 3.7% más o menos de acuerdo.
La pregunta es: Tiene el tutor capacidad para resolver tus dudas académicas.
Los resultados son: totalmente de acuerdo 74.1%, y de acuerdo 25.9%.
La pregunta es: Tiene el tutor capacidad para orientarte en metodología y técnicas de estudio.
Resultado: Totalmente de acuerdo 44.4%, y 55.6% de acuerdo.
La pregunta es: Tiene el tutor capacidad para estimular el estudio independiente.
Resultados: Totalmente de acuerdo 51.9%, y 48.1% de acuerdo.
La pregunta es: El tutor te canaliza a las instancias adecuadas cuando tienes algún problema que rebasa su área de acción. (Solamente responda si lo has requerido).
Los resultados son: Totalmente de acuerdo 77.7%, de acuerdo el 16.7 %, y 5.6 % más o menos de acuerdo.
La pregunta es: El tutor que te fue asignado ha sido adecuado.
Los resultados son: Totalmente de acuerdo 96.3%, y el 3.7% de acuerdo.
De acuerdo con los resultados obtenidos, se concluye:
Además, se recomienda lo siguiente: