LO QUE LOS POBRES QUIEREN SABER
Jos� Manuel Fern�ndez N��ez
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Los Partidos Pol�ticos
Qui�n ha le�do con atenci�n este texto, habr� notado que posiblemente nunca habr� existido una democracia tan amplia como la que proponemos.
Habr� notado tambi�n que los Partidos Pol�ticos a pesar de funcionar como un mal necesario, no son tan necesarios en la realidad. O m�s bien, que la funci�n de los partidos pol�ticos debe ser delimitada mejor, para que la sociedad pueda liberarse de las redes de corrupci�n y desesperanza que secundan; debemos salvar a la vez lo mejor de estos deviene.
Lo cierto es que el mal est� en las personas, que cuando somos apoderados en extremo, enceguecemos por el licor del Poder, terminamos vencidos por las tentaciones.
El Sistema Cuarta V�a intenta vencer al pecado salvando al pecador.
Los partidos pol�ticos son desapoderados en todos los alcances de poder a que estamos acostumbrados para convertirlos en Escuelas de Pol�tica, que sirven para formar y ayudar a promover planes nacionales, y no personas, y que pasan a ser Escuelas de L�deres comprometidos con la naci�n y no con un grupo de personas.
Terminamos con la monarqu�a de las partidocracias y las caudillocr�cias, e intenta asegurar a los ciudadanos en la libertad, en su estado m�s puro; esta es la libertad para hacer y vivir el bien.
Es libre la organizaci�n y creaci�n de partidos y asociaciones pol�ticas de acuerdo con la Ley de Partidos Escuela, siempre que sus tendencias se conformen atados a los principios establecidos en la Constituci�n tipo 4V.
Los partidos pol�ticos son parte del patrimonio de la naci�n y por ello nadie puede ser due�o de un partido pol�tico. Son instituciones populares, formadas por integrantes del pueblo.
El pueblo es el soberano que est� por sobre todos los poderes del Estado.
Los partidos pol�ticos tienen la funci�n de conocer, y dar a conocer, todos los candidatos al pueblo, as� como las doctrinas, teor�as y avances de las ciencias pol�ticas, y las estrategias de administraci�n de las naciones, del Estado y de los Planes de Desarrollo Nacional. Por ello, no se identificar�n con ning�n candidato.
Termina la �poca en que los l�deres secuestran las naciones por la pasi�n, el terror, el populismo o la compra de conciencias.
Comienza la era de la conciencia y la b�squeda de la verdad de c�mo debe ser gobernada una naci�n para mantenerla en el progreso sostenible permanente.
El pueblo conocer� los detalles que favorecen o desfavorecen a cada candidato. Cada candidato ser� evaluado por su propia verdad, con imparcialidad.
Los candidatos pueden ser propuestos por cualquier partido sin que eso signifique que ese partido trabajar� solo para ese candidato.
Cualquier partido propone y promueve a un nuevo candidato, y esto no significa que se le sigue como l�der; por eso se eligen seg�n la calidad de sus propuestas.
Cuando el Poder Electoral aprueba al candidato todos los partidos deber�n promover la verdad de dicho candidato y coordinarse entre ellos para evitar desacuerdos.
Los candidatos son aprobados por el Poder Electoral y nunca pueden pertenecer a la dirigencia de ning�n partido; ser�n investigados todos sus aspectos y promovidos con la verdad,
Los datos dudosos e indemostrables podr�n ser enlistados como rumores y ser� com�n dicha lista en todos los partidos.
La vida de un candidato es p�blica en cuanto a que todos tienen derecho a conocer sus verdades, pero es el mismo candidato quien controla lo que se va a promover de su persona.
Los datos deben ser presentados al Poder Electoral, y este convoca al candidato para que indique si aprueba la publicidad de los datos. El Poder Electoral se reserva el derecho de publicar el dato si lo considera importante para la conciencia del pueblo.
Se permitir� a los candidatos formar una gerencia nacional para vender como una marca o producto a su candidato. Esta debe ser desarticulada tan pronto pasan las elecciones.
De todos modos cualquier instituci�n acad�mica puede proponer candidatos con igualdad de derecho que un partido pol�tico, o secundar a una ya inscrito.
Todo candidato para actuar como tal debe ser inscrito por la direcci�n de alguna instituci�n acad�mica en el Registro de Candidatos del Poder Electoral.
Estas instituciones acad�micas, deben ser de tipo universitario, o de instrucci�n de bachilleres, o por partidos pol�ticos, o tecnol�gica.
Las actividades de promoci�n multitudinaria de los candidatos, son definitivamente sustituidas por promoci�n radial, televisiva y gr�fica. El Sistema EMP financia a los candidatos, no existe por tanto discriminaci�n financiera y depende del ingenio del candidato para crear un plan convincente de gobierno, y de c�mo lo comunica al pueblo.
El Estado financiar� las actividades de los partidos pol�ticos por el mecanismo EMP, distribuyendo un presupuesto seg�n la cantidad de horas personales de actividad sumadas en operaci�n benefactora con el pueblo.
Toda actividad electiva por participaci�n del pueblo en todo el territorio debe ser conocida y controlada por el Poder Electoral.
El Poder Electoral organizar� consultas populares de tipo voto electr�nico. Este proceso eliminar� gradualmente los candidatos hasta quedar por mayor�a simple de votos en un total de dos candidatos por cada posici�n a elegir.
Corresponde a los partidos pol�ticos promover el conocimiento de todos y sus programas de gesti�n y hacer actividades con todos los candidatos, sin discriminaci�n mayor que la que arroja la verdad.
La persona designada para ejercer una funci�n p�blica deber� prestar juramento En nombre de Dios y su Sant�sima Trinidad, de respetar la Constituci�n y las leyes, y de desempe�ar fielmente su cometido. Este juramento se prestar� ante cualquier funcionario u oficial p�blico.
Ninguna funci�n o cargo p�blico a que se refiere la Constituci�n y las leyes, ser� incompatible con cargos honor�ficos y los docentes.